El documento habla sobre la importancia de predicar con el buen ejemplo en la educación. Señala que educar es mostrar la verdad o el camino hacia ella, y que los educadores deben acercarse a los estudiantes para enseñarles a vivir, como lo hizo Jesús a través del ejemplo de san José.

1. “El principio de la educación,
es predicar con el buen ejemplo”
Oración de la Mañana
I n d i v i s a M a n e n t
Canto: Sólo el eco (Adrián Romero)
Sólo queda el eco, sólo que- Pero no me alcanza, no me
dan sombras nada más, de lo sacia no, no me conformo
que fue, de lo que vi. nada más con añorar.
Sólo queda el aire, sólo los Vuelve a mi, vuelve a mi
recuerdos nada más y el sen- casa mi jardín, vuelve a lle-
timiento que volverás. nar mi corazón, con tu fra-
gancia con tu amor.
Pero no me alcanza, no me
sacia no, no me conformo Vuelve a gritar en mi interior
nada más con añorar. rompe el silencio con tu voz
y no te apartes mi Señor.
Vuelve a mi, vuelve a mi Sólo quedan huellas, sólo
casa mi jardín, vuelve a lle- aquel perfume nada más de No me alcanza el aire, no me
nar mi corazón, con tu fra- lo que fue de lo que vi. sacia el eco nada más, a mi
gancia con tu amor. jardín vuelve a mi.
Sólo quedan sueños, sólo
Vuelve a gritar en mi interior aquel murmullo nada más y
rompe el silencio con tu voz el sentimiento que volverás
El arte de y no te apartes mi Señor.
instruir y
educar inicia
cuando La educación de la carpintería
Educar es extraer lo mejor de los demás. Es mostrarle la necesidad del conocimiento
comprende- cierto, es mostrar la verdad o, al menos, el para evangelizar a la cultura y, por tanto, la
camino que lleva hacia ella. La educación es urgencia de ser una persona instruida.
mos a los jó- la actividad humana para iluminar. El educa-
dor es llamado a ser cada día más humano. En ¿Son nuestros métodos
un contexto en el que la información y el co- los más adecuados?
venes nocimiento son cada vez más cercanos, el
Es posible que la aplicación adecuada de
educador debe asumir el reto de acercarse al
prójimo para enseñarle a vivir y, de paso, ciertas reglas puede facilitarnos obtener
mejores resultados en nuestra tarea educa-

2. tiva, por ejemplo, si nosotros como maestros mostró a Jesús, aprendiz de carpintería,
cristianos volvemos la mirada a nuestro señor cada uno de los pasos para trabajar con
Jesucristo, a su pedagogía y distinguimos co- madera, entrenándolo e indicándole la for-
mo adecuaba sus enseñanzas al particular ma de hacer las cosas. Con toda seguridad
contexto y cultura de la comunidad de perso- San José disminuyó progresivamente su ayu-
nas que le seguían, sin duda alguna lograre- da hasta lograr que Jesús haga por sí mismo
mos acercarnos a nuestros alumnos. Segura- los muebles que desee. Al final de la labor,
mente la idea de “Escuela” que tenía Jesús San José proporcionó una ayuda cada vez
fue la de su propia familia; así como su idea menor permitiendo el desarrollo de un
de “Maestro” fue la de su padre terreno san “Estilo personal” en los trabajos de Jesús.
José quien como carpintero experto modeló y
Salmo de la comunidad educativa
Te damos gracias, Señor, Gracias, Señor,
porque nos has llamado porque como educadores cristianos,
para vivir nuestra vocación de educadores, creemos que juntos y en comunidad te hacemos
dedicados a alimentar la fe y la esperanza visible,
de nuestros educandos y educandas. y compartimos con nuestros alumnos
la experiencia hermosa de vivir.
Gracias, Señor,
porque nos atrevemos a creer y a confesar Gracias, Señor,
nuestra esperanza en Ti, porque nos invitas a compartir cada día
a través de nuestra cotidianidad docente, tu amor de PADRE con los niños y jóvenes
y así interpretar el hoy y el mañana de nuestra mi- que nos confías.
sión educativa,
desde tu proyecto de salvación. Por tantas cosas bellas
¡GRACIAS, SEÑOR!
Gracias, Señor,
porque nos invitas a que nuestras aulas
sean la antesala de una sociedad renovada,
para la convivencia en el amor y la esperanza.
El maestro que intenta enseñar sin inspirar en el alumno el deseo de
aprender está tratando de forjar un hierro frío