Antes de realizar una mudanza, debemos llevar a cabo una serie de pasos importantes para que nada quede en el tintero, os dejamos algunos de ellos más importantes.
2. En el momento en el que nos vemos envueltos en la ardua
tarea de preparar todo para realizar una mudanza, bien
sea porque nos cambiamos de domicilio, o por que
nuestra empresa cambia de ubicación, debemos tener
algunos consejos o pautas para que nada quede atrás y
todo este estipulado de una forma en la que no nos
veamos inmersos en un caos de cajas y muebles, y, por
supuesto, que no nos quedemos nada atrás.
3. Esta, como otras muchas tareas, comienzan en sí mismas
en el día en el que se pacta con la empresa encargada de
ofrecer este servicio, pero el éxito de esta depende del
tipo de planificación que la persona encargada de
organizar todo tenga.
Y es que conviene planificarla con bastante tiempo de
antelación para que nada quede en el tintero y evitar
errores comunes que más tarde no tengan subsanación.
4. Hay estudios que demuestran que el hecho de tener que
realizar una mudanza, y todo lo que ello conlleva, es uno
de los factores que más estrés provocan.
La mejor solución para ello es contar con la ayuda de una
buena empresa de mudanzas y del mismo modo planificar
todo con una anterioridad de entre 3 y 5 semanas, este
tiempo será dedicado sobre todo a seleccionar aquellos
artículos que se van a transportar y aquellos que no.
5. En un comienzo, y aunque a algunos de ellos les tengamos
cierto aprecio, debemos hacer una selección minuciosa de
los artículos de los cuales nos vamos a deshacer, ya que,
en muchas ocasiones acumulamos objetos como ropa,
peluches, mobiliario porque fueron importantes en
momentos determinados de nuestra vida, pero que en
esta ocasión serán ante todo un estorbo y un
impedimento. Por ello debemos reducir al máximo esta
carga.
6. Para continuar, todo aquello que sea
relevante, como lo pueden ser facturas,
contratos, documentos bancarios, en
definitiva, toda aquella documentación
importante, debe estar siempre en nuestra
posesión, por lo que debemos llevarlo encima
y de forma presencial allá dónde hayamos
decidido mudarnos, y de este modo evitar que
se traspapelen, se deterioren o estropeen.
7. Los pagos relacionados con el edificio en el que nos
encontramos en el momento previo a la mudanza deben
ser subsanados, debemos pagar todo aquello relacionado
con la comunidad, facturas de agua y luz, en definitiva,
ponernos al día.
Del mismo modo, días previos a la mudanza, debemos
comenzar a cambiar nuestro domicilio en todos los
organismos pertinentes para que en el momento en el que
nos cambiemos, la correspondencia nos llegue a este.
8. Llegó el momento de comenzar a vaciar armarios, cajones
y muebles, aproximadamente con una semana de
antelación, debemos guardar en cajas todo aquello que
vayamos a llevar con nosotros y empezar con la limpieza a
fondo de cada una de las estancias.
Se recomienda que esto se vaya haciendo gradualmente y
de manera constante, para así evitar pegarnos el atracón
que pueda conllevar el olvido de algo o que no nos de
tiempo a dejar todo en el estado que se merece.
9. En días previos a la mudanza, 24/48 horas antes, debemos
seleccionar aquello que va a venir con nosotros en dicho
transporte, ya sean llaves, documentos antes
mencionados, documentación personal, etc.
Del mismo modo que si contamos con algunos objetos
prestados o en régimen de alquiler, debemos proceder a
su devolución para que esta no caiga en el olvido y
terminemos siendo penalizados.
10. El mismo día, antes de que llegue la hora citada con el
servicio de mudanzas, debemos repasar cada una de las
estancias del antiguo hogar para proceder a la
desconexión de cualquier electrodoméstico que aún este
enchufado, así como vigilar que no olvidamos nada.
Como broche final, hablar con el vecindario y comunicarle
que vas a proceder a este acto con el fin de que dejen
espacio de aparcamiento así como es ascensor libre si es
necesario.