Dentro de las posibles comorbilidades del Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), destaca en la adolescencia el Trastorno por Uso de Sustancias (TUS), como un problema grave para el individuo y para su entorno.
2. Introducción.
Dentro de las posibles comorbilidades del Trastorno por déficit de
atención e hiperactividad (TDAH), destaca en la adolescencia el
Trastorno por Uso de Sustancias (TUS), como un problema grave
para el individuo y para su entorno. Estudios sobre la comorbilidad
TDAH-TUS elevan tasas de abuso y dependencia de sustancias
más elevadas en sujetos con TDAH que en población general
(Wilens et al., 1994; Levin et al.,1998), debido las características
sintomatológicas de estos afectados. En la etapa adolescente donde
además de la impulsividad, la hiperactividad, las dificultades
académicas y sociales, aparecen los problemas de conducta, el
riesgo es mayor como respuesta a sus problemas, posibles vía de
escape, por presión grupal o búsqueda de sensaciones nuevas.
Para evitar que estas situaciones puedan desarrollarse
debemos anticiparnos al problema y atender cuidadosamente a los
elementos que puedan estar influyendo o propiciando este desajuste
personal.
3. Niveles de intervención en TUS
El término prevenir deriva de la palabra latina
`praevenire` que significa evitar la presencia de un
daño, y se utiliza para referirse a las medidas que se
deben tomar para evitar que se presenten
enfermedades o problemas.
La prevención de las adicciones puede realizarse en
niveles de prevención diferentes según sea el grado
del riesgo de las personas para consumir drogas o
el daño cuando ya las consumieron:
4. Prevención primaria
Tiene como finalidad ejercer influencia de modo
global, es decir, sobre todos los elementos y
factores determinantes del problema.
Toda esta prevención se hace sin aludir a las
adicciones, sino que su objetivo es influenciar los
elementos o factores que pueden propiciar un
trastorno adictivo. Podríamos mencionar programas
de vida saludable, actividades de ocio saludable que
fomenten las relaciones entre
iguales, psicoeducación, etc., todos ellas
encaminadas a evitar un futuro contacto con las
sustancias.
5. Prevención terciaria
Demorar o frenar el desarrollo de la adicción y de sus
consecuencias aún en los casos en que la manifestación
central continúe presente. En casos en los que la
adicción ya se ha desarrollado, tenemos que estabilizar
la misma, para poder empezar a trabajar sobre la
reversión de esta, si se consume hachís o marihuana, no
podemos revertir el consumo de estas y el tabaco a la
vez, deberemos conseguir que el consumo no vaya a
más, para ir trabajando en la desaparición del consumo
de estas sustancias.
Se utiliza cuando no es posible la abstención total de la
droga.
El propósito es disminuir las cantidades consumida.
6. Tanto en la prevención como en el abordaje del
problema es importante no considerar a los
adolescentes de forma aislada del contexto social en
el que se desenvuelven, actuando desde todos los
ámbitos de influencia:
La familia.
La escuela.
Las instituciones.
La sociedad.
7. Herramientas para prevenir los TUS
Los programas preventivos pueden prevenir y reducir
significativamente el uso temprano de sustancias.
Programas de prevención:
En el ámbito escolar
En el ámbito familiar
En el ámbito comunitario
En el ámbito laboral
Servicios de Prevención:
Selectiva e indicada
En el ámbito del ocio y tiempo libre
Guías de Información Preventiva
Teléfonos de información sobre drogas