4. GENERALIDADES
• La religión oficial Olímpica no satisfacía
plenamente las inquietudes religiosas griegas. O,
al menos, las que nosotros relacionamos hoy con
la religión, tales como la vida más allá de la
muerte. Respuesta a esta inquietud la dan
algunos cultos de entre los llamados “Mistéricos”.
• La palabra “misterio” parece estar relacionada con
“μύω”, cerrarse. De ahí, tal vez μύθoς, mito. Un
derivado es μυστήριov, secreto, cerrado.
5. GENERALIDADES
• Alrededor del misterio surgieron, desde épocas
tempranas, manifestaciones religiosas de índole
más emocional que la oficial. No eran, estos
misterios, cultos abiertos como la religión
olímpica, a la que podían acceder todos
libremente, sino que, como su nombre indica,
eran cerrados, secretos, para poder entrar en los
cuales uno tenía que ser un iniciado, un “μύστης”.
• Había varios cultos mistéricos. Los principales son
los de Eleusis, el Orfismo o los ritos de Dioniso.
6. GENERALIDADES
• Características comunes a estos cultos no
oficiales son:
– Admiten a todo tipo de personas, ricos,
pobres, hombres, mujeres o esclavos.
– El secretismo. Sus adeptos no pueden revelar
lo que ocurre en los misterios.
8. ELEUSIS
(1) Vía
Sacra.
(2) Templo
de Ártemis.
(3) Stoa.
(4) Fuente
Kallíkhoro.
(5) Granes
Propileos.
(6)
Pequeños
Propileos.
(7)
Plutoneion.
Ratto, Stefania. Grecia (los dicccionarios de las Civilizaciones). Electa. 2007.
9. ELEUSIS
(8) Exedra.
(9) Templo
de época
romana.
(10) Templo
F.
(11)
Telesterion.
(12) Pórtico
de Filón.
(13)
Bouleuterion.
(14) Troje.
(15) Murallas
Ratto, Stefania. Grecia (los dicccionarios de las Civilizaciones). Electa. 2007.
11. MISTERIOS DE ELEUSIS
• Los más famosos misterios son Los Misterios de
Eleusis: Se articulan en torno al mito de Deméter
y su hija Perséfone. Un día en que Perséfone
estaba recogiendo flores con las ninfas hijas de
Océano, Hades, rey del mundo de los muertos, la
raptó y se la llevó con él a las profundidades. De
nada le valieron a ella sus lamentos. Sólo hubo un
testigo: el Sol (Helios). Deméter buscó
desesperadamente a su hija por tierra y mar sin
encontrarla. Finalmente, Helios, compadecido, le
dijo quién había sido su captor. Ella, enfurecida,
se fue del Olimpo y se instaló en Eleusis.
12. MISTERIOS DE ELEUSIS
• Adoptando la apariencia de una madre
abatida, la diosa se presentó en la casa de
los reyes Celeo y Metanira, donde las
mujeres de palacio intentan consolarla y
hacerla sonreír con sus bromas. Aquí
permanece al cuidado del príncipe
Demofonte, al que secretamente somete por
las noches al fuego para despojarlo de sus
carnes mortales. Sorprendida un día en el
transcurso de este sortilegio, la diosa se ve
obligada a revelar su verdadera identidad su
verdadera identidad.
13. MISTERIOS DE ELEUSIS
• Otra versión nos cuenta que Deméter,
acompañada por Iaco, hijo de Perséfone,
llegó a Eleusis y fue acogida por Disaules y
Baubo. Ésta, para reconfortarla, le ofreció
una sopa, que la diosa, dolorida, no quiso
aceptar. Entonces la mujer, para mostrar su
descontento o tal vez para alegrar a la diosa,
se levantó las faldas y le mostró el trasero.
Iaco, al verlo, se puso a aplaudir, y la diosa,
echó a reír y tomó la sopa.
14. MISTERIOS DE ELEUSIS
• Puesto que Zeus no hacía nada para que su hija volviera del
Hades, ordenó que la tierra dejara de ser fértil. Y la tierra se
secó. Los dioses le enviaban mensajeros para que cediera,
pero no lo hizo hasta que el propio Zeus ordenó a Hades que
devolviera a la chica. Hades obedeció, pero antes le dio a
comer a Perséfone un grano de granada. Así volvería. Madre
e hija estaban felices de volver a estar juntas. Pero Deméter
preguntó si le había dado algún alimento. Y al responder que
sí, su madre le dijo que entonces debería pasar parte del año
con su marido en las profundidades de la tierra. Por eso,
Perséfone, todos los años, pasa bajo tierra tres meses, en
que el campo está triste y, cuando regresa, la tierra se viste
de flores ante la admiración de dioses y hombres.
15. Regreso de Perséfone del Hades
Crátera (mezclar agua y vino) Ática con figuras rojas 440 a.C.
16. MISTERIOS DE ELEUSIS
• Como agradecimiento por acogerla, Deméter
enseña en Eleusis los misterios que llevan el
nombre de la ciudad. Eleusis es un lugar
cercano a Atenas y dependiente
políticamente de ella Tenemos muy poca
información sobre lo que se hacía en estos
misterios, en su cara oculta, queremos decir,
pues había una parte del culto que era
abierta y otra secreta. No se podía revelar a
los no iniciados bajo pena de muerte nada de
lo que se consideraba secreto en estos
cultos.
17. MISTERIOS DE ELEUSIS
• Ya en el siglo V a.C. los atenienses
animaban a todos los griegos a enviar las
primicias de las cosechas a Eleusis en la
época de los misterios, lo cual puede
interpretarse como una reminiscencia del
primitivo carácter agrario del rito y, al
mismo tiempo, como un testimonio de la
fama del mismo, cuyo crecimiento fue
paralelo al de la supremacía cultural de
Atenas.
18. MISTERIOS DE ELEUSIS
• Muchos autores consideran que el elemento
esencial de los misterios es el secreto
impuesto a los que en ellos participan. Otros,
en cambio, creen que el misterio no es
necesariamente secreto. El término
μυστ ριον (mystérion)ή comprende un
conjunto de ritos mágicos, conducentes a
purificarse de una mancha o al levantamiento
de un veto y, por extensión, a conseguir la
fertilidad del suelo, aunque es muy posible
que este último fin fuera inicialmente el
único.
19. MISTERIOS DE ELEUSIS
• Los misterios de Eleusis suelen ser
considerados como una práctica religiosa,
cuyo objeto era garantizar a sus iniciados
una eterna y feliz vida de ultratumba.
• La noción de la justicia lleva consigo la idea
de que, después de la muerte, no a todas las
almas les está reservado un mismo destino,
sino que han de recibir los premios o
castigos a que se hayan hecho acreedoras
por sus acciones en la vida terrena.
20. MISTERIOS DE ELEUSIS
• Frente a la indiferencia de la religión
oficial por el destino del alma después de
la muerte, los misterios de Eleusis
proponen a sus iniciados el medio de
asegurarse esa eternidad luminosa y feliz.
Las gentes humildes afluían en masa a
las ceremonias de Eleusis.
21. PEQUEÑOS Y GRANDES
MISTERIOS
• Los Pequeños Misterios se celebraban en el
mes de νθεστηρι ν, febrero-marzo,Ἀ ώ
(Anthesterión), a orillas del río Ilissós. Se
trataba probablemente de la supervivencia
de una fiesta local, incorporada al conjunto
de las ceremonias eleusinas. Durante la
fiesta se llevaban a cabo purificaciones con
el agua del río y se iniciaba la instrucción del
futuro μ στης (mýstes)ύ . Los aspirantes a la
iniciación tomaban, tras los Pequeños
Misterios, el nombre de μ στης (mýstes).ύ
23. PEQUEÑOS Y GRANDES
MISTERIOS
• Seis meses después de la celebración de
los Pequeños Misterios aproximadamente
hacia finales de agosto, el día 13 del mes
Βοηδρομι ν, septiembre-octubre,ώ
(Boedromión), daban comienzo los
Grandes Misterios.
24. GRANDES MISTERIOS
• El día 13, un cortejo procesional partía de
Atenas, llevando a Eleusis a los efebos que
debían buscar en el santuario los objetos
sagrados, que probablemente consistían en
verdaderas imágenes de culto. Si se supone
que una de las partes esenciales de la
iniciación consistía en “revelar” a los μ στηςύ
(mýstes) los objetos sagrados y en
permitirles manipularlos, se debe ver en los
mismos una especie de talismanes,
reminiscencia de algún rito arcaico.
25. GRANDES MISTERIOS
• El día 14, los objetos sagrados, velados, eran
llevados de Eleusis a Atenas y depositados en un
santuario especial, el Eleusinión. A lo largo de la
marcha procesional, se hacían varias paradas, en
las que tenían lugar ciertas ceremonias.
Especialmente en el puente sobre el río Cefiso, se
celebraban las “farsas del puente”, un tanto
escabrosas, en las que las mujeres colmaban de
improperios a los peregrinos y se burlaban de
ellos. Una tradición contaba que en este lugar la
anciana Baubó había conseguido hacer reír por
vez primera a Deméter con sus bromas.
26. GRANDES MISTERIOS
• El día 15 se convocaba en Atenas a los
μ στης (mýstes)ύ de toda ciudad. Un
heraldo invitaba a retirarse a los que no
reunieran los requisitos exigidos; entre los
no admitidos figuraban los convictos de
homicidio y no purificados aún y aquellos
cuya voz no fuera inteligible, porque no
hablasen griego o por ser incapaces de
pronunciar correctamente las fórmulas
consagradas.
27. GRANDES MISTERIOS
• El día 16 de Βοηδρομι ν (Boedromión)ώ ,
los μ στης (mýstes)ύ iban a Falero a
purificarse. Cuando los sacerdotes
gritaban “μ στηςύ , al mar”, cada uno corría
a zambullirse en él, llevando consigo un
cochinillo, con el que se bañaba. Los días
17 y 18 se celebraban en Atenas fiestas
en honor de Asclepio, añadidas
probablemente en fecha tardía. Los
μ στης (mýstes)ύ se purificaban de nuevo.
28. GRANDES MISTERIOS
• Un nuevo cortejo procesional, celebrado el
día 19, volvía a llevar a Eleusis los objetos
sagrados. Un elemento del sacro cortejo era
la imagen de Iaco, que dejaba su templo de
Atenas para pasar una corta estancia en
Eleusis. Tras realizar varias paradas en
diversos santuarios, se llegaba a Eleusis de
noche. Allí se formaban coros que danzaban
y cantaban alrededor del pozo Καλλ χορονί
(Kallíkhoron), en el lugar en que se había
sentado Deméter llorando la pérdida de Core
(Perséfone).
30. GRANDES MISTERIOS
• El día 20 comenzaba la parte secreta de los
misterios, que se desarrollaba en el τελεστ ριονή
(telestérion), verdadero corazón del santuario.
Antes de penetrar en el τελεστ ριον (telestérion)ή ,
los candidatos a la iniciación tomaban un brebaje
sagrado, el κικε ν (kikeón)ῶ , el mismo que había
confortado a Deméter tras su ayuno. Después de
llevar a cabo otras ceremonias, pronunciaban la
siguiente fórmula: “He ayunado, he bebido el
κικε ν (kikeón)ῶ , he tomado en la cesta y, tras
haber comido, he puesto de nuevo en el canasto;
he tomado de nuevo en el canasto y he vuelto a
poner en la cesta”.
33. GRANDES MISTERIOS
• La fórmula que repetía el iniciado antes de
entrar al templo ha sido interpretada de la
sigueinte manera. Ante todo, es un rito
relacionado con la fertilidad. De la cesta
tomaa el inicaido un objeto querepresentaba
el órgano femenino, que los μ σται (mýstai)ύ
debían tocar para nacer a una nueva vida.
En el canasto quizá era colocada la
reproducción de un falo, que se relacionaría
con una unión sexual en los misterios.
34. GRANDES MISTERIOS
• Llegada la noche, se entraba en el
τελεστ ριον (telestérion)ή y comenzaba la
gran iniciación, que, según P. Foucart, se
cumplía bajo la forma de representación de
dramas sagrados ante los neófitos. En la
noche del 21, el primer drama litúrgico
reflejaba la historia de Deméter y Core, con
el episodio de Baubó. En la noche del 22, se
representaba probablemente el segundo
drama, que trataba del matrimonio sagrado
entre Zeus y Deméter y del nacimiento del
niño divino.
35. GRANDES MISTERIOS
• La noche del 23 tenía lugar un tercer
drama que mostraba, probablemente, la
muerte y resurrección de Dioniso.
36. GRANDES MISTERIOS
• Los textos antiguos aluden a cosas
“mostradas”, “dichas” y “hechas”. De las
cosas “dichas”, de las fórmulas
pronunciadas, nada se sabe. De las cosas
“hechas” sabemos algo más por Plutarco,
el cual, para definir el estado en que se
halla el alma en el momento de la muerte,
lo compara con el estado de ánimo de los
iniciados.
37. GRANDES MISTERIOS
• Se debía también desvelar y hacer tocar
los objetos sagrados. Tras la iniciación, el
μ στηςύ (mýstes) se convertía en επ πτηςό
(epóptes), “persona que ha visto”, aunque
no se sabe qué había visto. Las fuentes
literarias hablan de una nueva vida.
39. ORÁCULO DE DELFOS
• Existían también algunos lugares
especialmente venerados por todos los
griegos, como los santuarios de
adivinación. Entre estos tenía especial
relevancia el de Zeus en Dodona y, por
encima de todos, el oráculo de Delfos.
40. ORÁCULO DE DELFOS
• Delfos es un lugar impresionante. El
monte Parnaso lo preside con su
imponente alzado. Sus alrededores
estaban agradablemente sombreados por
numerosos olivos que descendían por la
misma ladera en que estaba el santuario.
43. ORÁCULO DE DELFOS
• El dios Apolo había arrebatado el lugar a
un dragón llamado Pitón tras una dura
lucha en que las flechas del dios se
mostraron superiores a los poderes de
aquél. La piel del dragón estaba bajo un
trípode en una pequeña habitación del
templo que, en honor a Apolo, se erigió en
la parte alta del santuario.
44. ORÁCULO DE DELFOS
• Al viajero que llegaba a Delfos debía de
maravillarlo la vía sagrada que, subiendo en
zigzag pasaba ante las ofrendas que las
ciudades habían ofrecido al dios. Estas
ofrendas o tesoros se hallaban depositadas
en pequeños cubículos con forma de templos
en miniatura. Inscripciones, esculturas,
fuentes, vendedores de chucherías, posadas,
todo estaba esparcido por el relativamente
pequeño recinto. Un estadio e incluso un
teatro se habían construido más arriba del
templo.
45. ORÁCULO DE DELFOS
• Cuando llegaba ante el templo de Apolo,
lo recibían los sacerdotes. Le vestían una
túnica blanca, símbolo de pureza, y
preguntaban al dios si iba a responder a
las preguntas del viajero. Entonces
echaban un cuenco de agua fría sobre
una cabrita. Si el animal temblaba, es que
Apolo sí deseaba contestar al
demandante.
46. ORÁCULO DE DELFOS
• Los sacerdotes llevaban la pregunta a la Pitia o
Pitonisa. Ésta se sentaba en una habitación del
templo, a solas, sobre el trípode sagrado. Allí
masticaba hojas de laurel, que es la planta de Apolo,
e inhalaba gases que salían por una grieta del suelo.
Al cabo de un rato, Apolo hablaba por su boca,
usando a la Pitia como a una médium. Los sacerdotes
tomaban nota de lo que decía, lo ponían en verso y se
lo daban al cliente.
• Si bien son conocidas algunas famosas respuestas
ambiguas, la fama es que daba muchas acertadas, lo
que le valió un amplio prestigio en el mundo helénico.
47. ORÁCULO DE DELFOS
• Los intérpretes de Apolo se encontraban
esparcidos por todo el territorio griego y
con ellos este dios se convirtió en el
verdadero guía de la nación helena en
sus realizaciones más importantes. La
colonización y la fundación de nuevas
ciudades se realizaban según los
preceptos délficos.
48. ORÁCULO DE DELFOS
• En su templo, arrasado y reconstruido fastuosamente
por los anfictiones, Alcmeónidas y dinero enviado por
el rey Amasis de Egipto, entre otros, estaban escritas
sentencias tan famosas como: γν θι σεαυτ νῶ ό
(conócete a ti mismo) y μηδ ν γαν (nada enὲ ἄ
demasia), con las que Delfos se relaciona con las
leyes morales más que con prescripciones sociales.
En general, esta especie de συνθ και (convenios),ῆ
que llenaban las paredes y columnas del templo,
tenían que ver con la amistad, el respeto a los
mayores, la educación de los hijos, el propio dominio,
la gratitud, el odio a la soberbia, la justicia, etc.
Procedentes de los siete sabios, Delfos las acogió y
protegió.