1. MUSEO DE SITIO DE LA ZONA
ARQUEOLÓGICA DE CUICUILCO
Recorrido visual de una opción cultural
en la ciudad de México
Tema: Museos, exposiciones y galerías.
Diplomado en gestión cultural
Textos y fotografía: Claudia Leyva, 2013.
2. Enclavada al sur de la ciudad de México (en contra esquina del
centro comercial Perisur) se encuentra esta zona arqueológica, de
gran importancia por la antigüedad de sus construcciones y
hallazgos, de los cuales se da cuenta en el museo de sitio construido
dentro de sus instalaciones.
3. Cuicuilco recibe, aproximadamente, 2 mil visitantes por semana; sin
embargo no hay un registro preciso de cuántos de esos turistas ingresan al
museo de sitio.
4. Existe hoy en día un gran
cuidado sobre el mantenimiento
de la zona arqueológica, sin
embargo no hay una señalización
adecuada para el visitante, que
le indique -desde el inicio de su
recorrido- que al interior
encontrará un museo.
5. La dirección que el visitante debe seguir para
el recorrido de la zona es muy evidente a
partir del camino que conduce directo al
basamento principal. En dicho trayecto es
posible disfrutar del entorno ecológico del
lugar. Caminando entre oyameles, pinos y
cactáceas, el recorrido se convierte por
momentos en una práctica de senderismo en
plena selva urbana.
6. El camino conduce directamente al Gran Basamento Circular, al que el
visitante –si así lo decide- puede acceder y recorrerlo por completo,
bajar por el mismo lugar e irse de la zona arqueológica sin haberse
percatado que un poco más delante de ese basamento principal se
encuentra un museo de sitio.
7. Afortunadamente, la gran mayoría que visita este parque ecoarqueológico
trae consigo el suficiente espíritu explorador que le permite, una vez visitado
el basamento, tener la curiosidad de continuar sobre el sendero de piedra
para averiguar qué hay más allá. Incluso si fueron hábiles observadores,
desde la cima de la pirámide pudieron notar el edificio que alberga a dicho
museo, y por ello decidir conocerlo.
8. Por el mismo sendero que circunda al basamento, al fin aparece la primera y
única señalización que indica la dirección hacia donde se encuentra el
museo de sitio. Es muy notorio que el letrero carece de mantenimiento, sin
embargo es visible aún la leyenda. A pesar de esta señal, si el visitante no
llega a verla, si pregunta a los vigilantes por los servicios sanitarios, la
referencia será que está a un costado del museo, y de esta manera enterarse
de su existencia.
9. El museo de sitio de la Zona Arqueológica de Cuicuilco abre 363 días al año;
sólo el 25 de diciembre y el 1 de enero permanece cerrado, junto con la
zona. En la ciudad de México, es el único museo a cargo del Instituto
Nacional de Antropología e Historia, cuyo acceso es libre, al igual que los
servicios educativos que ofrece, como visitas guiadas, tan solo con el
requisito de hacer previa cita al correo cuicuilcoeducativos@gmail.com o al
56 06 97 58 de 9 a 17 horas.
10. Un buzón de quejas y sugerencias
antecede la entrada de la puerta
principal al museo.
Buena medida para generar una
comunicación con el público
visitante, sólo que no hay -junto con
el buzón-, pluma o papel que facilite
este servicio.
A pesar de contar con los muebles
necesarios para tener una carpeta donde
se registre el ingreso de los visitantes,
solo un vigilante permanece ahí para dar
una mínima orientación sobre por dónde
iniciar el recorrido del museo. Incluso,
quizá alguna vez, en esas vitrinas
tuvieron la función de expendio de las
reproducciones y libros del INAH, pero
hoy permanecen vacías.
11. La visita inicia con un buen número
de cédulas explicativas sobre los
orígenes de este asentamiento en la
cuenca de México: antecedentes
geográficos, geológicos, botánicos,
entre otros, que contextualizan el
surgimiento y desarrollo de este
sitio.
Incluso se exponen referencias
gráficas comparativas con el actual
urbanismo citadino.
12. A pesar de la riqueza de información
que aparece en las cédulas
explicativas, es necesaria una
actualización de los elementos
museográficos, ya que los que
actualmente se exhiben datan de un
par de décadas atrás.
13. El Museo de Sitio del la Zona Arqueológica de Cuicuilco cuenta con 15
vitrinas donde se exponen los bienes arqueológicos hallados en los trabajos
de excavación de este sitio, los cuales datan de 1924.
De diferentes dimensiones y cada una con cédula explicativa del contenido
que alberga, las vitrinas muestran piezas representativas de la cultura que se
desarrolló a lo largo de esta área identificada para el periodo conocido como
Preclásico (1250 aC -300 dC), cuya trascendencia para el conocimiento de
Mesoamérica se funda en el hecho de ser la más antigua en términos
urbanísticos en la cuenca de México.
14. Objetos suntuarios, como
collares de concha que
revelan la actividad
comercial o de
intercambio de la época
con las culturas del Golfo
o del Pacífico.
El uso de la
jadeíta
manifiesta la
estratificación
social de
quienes
habitaron este
sitio.
15. Gran cantidad de artefactos que
permiten conocer las actividades
domésticas, de guerra, de caza,
industriales, como metates, vasijas,
cuchillos, puntas de proyectil,
percutores, agujas de hueso para el
trabajo textil, entre muchas otras
herramientas, que dan cuenta de la
organización social de los habitantes
de este antiguo lugar, en un tiempo
donde los romanos aún no formaban
sociedades.
16. El culto a la fertilidad y al maíz,
sustento básico de esta sociedad,
es evidente por la gran cantidad
de figurillas femeninas
relacionadas con herramientas
para el trabajo culinario, como
esta pieza impresionante:
una especie de metate, sin
soportes, conocida como
hualanche, donde se molían los
preciados granos.
17. Una sociedad que se representó a
sí misma mediante figuras de
piedra y barro. Hombres y
mujeres que después de 3 mil
años muestran al visitante de
Cuicuilco, sus prácticas y
costumbres.
18. Las piezas que hoy en día podemos
admirar en el Museo de Sitio de
Cuicuilco, estuvieron expuestas en el
antiguo museo de la zona, cuya
ubicación era en sí misma toda una
experiencia para el visitante, ya que
las instalaciones se encontraban
debajo de la lava petrificada del
volcán Xitle, cuya erupción en el 300
dC exterminó a la sociedad que
Entre las décadas de los cuarenta y los ocupaba este sitio.
setenta, este pequeño, pero interesante
recorrido subterráneo, a través de un
túnel de cerca de 50 metros de largo por
7 de ancho, tenía vitrinas incrustadas en
los muros pétreos las cuales contenían
algunas de las piezas que hemos
mostrado. La humedad que dañaba las
piezas generó la decisión de cambio.
19. Dato curioso: este antiguo museo de sitio, subterráneo, cuyo túnel de
exploración abrió el arqueólogo Eduardo Noguera en 1939, ubicado en el
costado oriente del basamento principal de Cuicuilco, sirvió también como
escenografía -junto con la propia zona arqueológica-, en 1952, para dar
marco a la película El bello durmiente, con Tintán, quien interpretaba a un
cavernícola que fue encontrado en los trabajos arqueológicos del lugar.
20. Cuicuilco y su extinción fueron motivo de inspiración para el gran pintor
mexicano Jorge González Camarena. En el museo de sitio podemos admirar
La Erupción del Xitle, pintura al óleo y cera que acerca a la imaginación del
visitante a lo que sucedió en este antiguo lugar mesoamericano. Cerca de
cumplir 90 años de exploración arqueológica en este sitio, en 2014, sería un
gran homenaje inaugurar un nuevo museo de sitio para el siglo XXI.
Agradezco su atención, al igual que la Las fotografías fueron tomadas con una
pronta visita que hagan a este interesante cámara Lumix 8x de 14 mega pixeles.
lugar, patrimonio cultural de los mexicanos. El fondo musical es Maid with the Flaxen Hair,
Realización, textos y fotografías de Richard Stoltzman, Fine Music, vol. 1.
Mtra. Claudia Leyva, comunicóloga y Las imágenes de El bello durmiente se tomaron
etnohistoriadora. de http://youtu.be/vB_6e1Gki1k
@LeyvaClaudia Agradezco al Arqlogo. Víctor Arribalzaga, las
México DF, 26 de febrero de 2013 facilidades para los accesos a la zona.