Algunas personas se lastiman cuando no están en buena condición física. En ciertos casos, las lesiones se deben a la falta o escasez de ejercicios de calentamiento o estiramiento antes de jugar o hacer ejercicio.
Un músculo y tendón saludable es algo elástico. Si estos no lo estuvieran, nosotros no seriamos capaces de lanzar, correr, patear, girar y otros movimientos del deporte. Cuando hay una contracción repentina o sobre-estiramiento, el dolor resultante es lo que llamamos torcedura.
La articulación de la rodilla se compone de hueso, cartílago, ligamentos y líquidos. Los músculos y los tendones ayudan a que la rodilla se mueva en su articulación. Cuando alguna de estas estructuras se lastima o se enferma, surgen los problemas con la rodilla. Los problemas con la rodilla pueden provocar dolor y dificultades para caminar.
Las lesiones en las rodillas son las frecuentes en los deportistas, afectando a futbolistas, ciclistas, esquiadores alpinos, practicantes de lucha o artes marciales.
Son comunes y pueden comprometer a más de un músculo al mismo tiempo. El dolor muscular también puede involucrar ligamentos, tendones y fascia, los tejidos blandos que conectan los músculos, huesos y órganos.
Las lesiones del tendón de Aquiles forman parte de las más frecuentes entre los deportistas en general, y de los que practican la carrera de fondo en particular. Pueden llegar a constituir la quinta parte de todas las lesiones que presentan estos deportistas.
El término es extensivo para todo tipo de roturas de los huesos, desde aquellas en que el hueso se destruye amplia y evidentemente, hasta aquellas lesiones muy pequeñas e incluso microscópicas.
Las dislocaciones generalmente son causadas por un impacto súbito a la articulación y con frecuencia se presentan después de un golpe, una caída u otro trauma.
Se ocasiona cuando se fuerza el movimiento normal de una articulación los huesos que se encuentran en ella pueden desconectarse o dislocarse. Para salir de la articulación se produce una rotura de la cápsula de la articulación y desgarro de los ligamentos y, con frecuencia, lesiones en los nervios circundantes.
Todas las lesiones necesitan tiempo para sanar; el descanso apropiado ayuda este proceso. Su médico puede guiarlo para encontrar el equilibrio apropiado entre el descanso y la rehabilitación.