La Organización Internacional del Trabajo instituyó el Día Mundial contra el Trabajo Infantil el 12 de junio para resaltar la grave situación de los niños explotados. Los convenios de la OIT buscan proteger a los niños del trabajo infantil, del cual 215 millones son víctimas a nivel mundial, más de la mitad en sus peores formas. El trabajo infantil priva a los niños de educación y capacitación para salir de la pobreza.