La explicación de la disautonomía a través de la historia de la medicina ha variado desde concepciones divinas o demoníacas hasta explicaciones más biológicas y ambientales. En la antigüedad se consideraba un castigo divino, en la Edad Media un castigo del demonio, y en la actualidad se entiende como el resultado de factores biológicos, psicológicos y ambientales que alteran el sistema nervioso autónomo.