San Salvador Atenco, Estado de México a 5 de Octubre de 2014.
Ellos no son terroristas, ellos no son delincuentes, ellos no son asesinos,
son estudiantes consientes luchando por una educación popular.
El Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra condena enérgicamente los
hechos ocurridos en Iguala, Guerrero, sabiendo que la masacre perpetrada a
los normalistas de Ayotzinapa no es un hecho aislado, ni exclusivo. En el
2006 nuestras comunidades sufrieron un clima de terror por defender
nuestras tierras; se buscaba atemorizar a nuestras familias para que dejaran
de defender su futuro, nos queda claro que el mensaje de terror no era solo
para nosotros.
Pasamos por muchos dolores y levantar nuestros ánimos no ha
sido fácil pero la dignidad y la mano de nuestros hermanos nos ha mantenido de pie. Después de 13 años
seguimos luchando en defensa de nuestra tierra y la vida misma, con la herida abierta pero sin detener nuestros
pasos, luchando por el futuro de nuestros hijos por la razón y la justicia. Nuestros compañeros viven un
infierno; la búsqueda de sus hijos, el asesinato de 6 personas y la impunidad con la que están sucediendo los
hechos, nos deja claro que la solidaridad de todos nosotros es imperante.
Hoy sabemos y tenemos conciencia de lo que les están haciendo pasar a nuestros hermanos de Guerrero,
sabemos que desde la llegada a la presidencia de Enrique Peña Nieto se está generando un clima de terror en
los movimientos sociales. Nosotros lo vivimos el 3 y 4 de mayo de 2006 durante su gestión como gobernador y
tenemos la certeza de que desde la silla presidencial quiere acabar con los luchadores sociales que accionan
protestas ante la cerrazón, la indiferencia y la rapiña que están orquestando en toda nuestra patria. Nos queda
claro el clima de corrupción que fomentan en sus instituciones y que sirve para perpetrar desalojos, robos de
tierras y tráfico de personas, así como sucede con nuestros compañeros migrantes.
Reprimen a quienes no estamos dispuestos a negociar ni a claudicar ante ellos. Desde su llegada al poder
se han incrementado los presos políticos y de conciencia: Nestora Salgado (CRAC-PC), Enedina Rosas Juan y
Carlos Flores Solís (Puebla), Abraham Cordero (Arco Norte), Marco Antonio Suastegui (La Parota), Mario
Luna, Tomas Rojo y Fernando Jiménez (Yaquis) Mario González (2 de octubre 2013), Juan Antonio Gómez
Silvano, Marco Aguilar, Silvano Roberto Gómez (Bachajón, Chiapas) . Los presos del 1 de diciembre y el
asesinato impune de Kuy Kendall, la desaparición forzada de Teodulfo Torres, el asesinato del compañero
zapatista Galeano y del niño José Luis Alberto Tehuatlie Tamayo de Chalchihuapan, Puebla entre muchos más.
Nos falta el aliento para nombrar a todas y todos los asesinados, presos así como las desapariciones forzadas,
ahora mismo vemos con indignación la omisión del todos los niveles de gobierno para atender a nuestras
compañeras madres de desaparecidas en Ciudad Juárez, quienes llevan más de 10 días en huelga de hambre a
fuera de los Pinos.
Padrés en Sonora, Moreno Valle en Puebla y Aguirre en Guerrero, son algunos ejemplos claros de que la
política de Peña Nieto está marcada por la represión a cualquiera que se levante a exigir algún derecho. Aunque
en la memoria se mantiene el asesinato de 11 campesinos el 7 de junio de 1998, en la comunidad de El Charco,
municipio de Tecoanapa, cuando Ángel Aguirre era mandatario estatal interino - sustituyendo a Rubén
Figueroa Alcocer, por cierto, responsable de la matanza de Aguas Blancas- para nosotros, no sólo debe
renunciar Aguirre, sino que se le debe de enjuiciar a él y a Enrique Peña Nieto por el crimen de Estado que
están cometiendo contra nuestros compañeros y contra nuestra patria. Señalamos como responsable
directamente al gobierno de Enrique Peña Nieto y no dejaremos a nuestros hermanos solos, como ellos no nos
dejaron en los años en que necesitamos de sus manos por la represión que vivimos.
Esta política de terror que está imponiendo Peña Nieto no va a detener la lucha de todos nuestros
compatriotas, en Atenco no nos ha detenido, ni nos detendrán. Hoy día seguimos defendiendo nuestra tierra de
los intereses mezquinos que desde el 2001 mostraron. Han utilizado la estrategia del miedo, la corrupción que
ellos mismos fomentan, la manipulación de las autoridades locales; como es el comisariado ejidal que hoy día
fungen como uno de los operadores para la especulación de nuestras tierras, se han vuelto títeres de los
intereses externos y a través de la compra de voluntades, de la manipulación de la legalidad en sus acciones se
prestan a querer fomentar la venta de este pedacito de nuestra patria. En otros años hemos vivido la represión la
persecución, el encarcelamiento y la muerte pero nuestra memoria y nuestra dignidad no nos dejan olvidar,
perdonar o claudicar.
Nuestra resistencia no es por dinero, ni por que nos aumente el precio para la construcción del
Aeropuerto, nuestra resistencia es porque respeten nuestro territorio, nuestra forma de vida, nuestra historia,
nuestra dignidad y nuestra vida misma. Vamos a dar hasta el último aliento por el futuro de nuestros nietos y no
pararemos hasta encontrar la justicia para nuestros pueblos y para todos los pueblos de nuestra patria.
Por lo dicho, hacemos nuestro el dolor y la rabia de nuestros hermanos y hermanas de Guerrero. Los
estudiantes de Ayotzinapan desaparecidos y asesinados, son nuestros hijos y es por ello que nos sumamos al
llamado de sus familiares. Este 8 de Octubre, las comunidades de Atenco y Texcoco mostraremos al gobierno
nuestra solidaridad; cerrando de manera intermitente la carretera Texococo-Lechería para informar a la
población de la situación que están viviendo nuestros hermanos. Luego a las 12 del día estaremos en la Facultad
de Economía, Auditorio Ho Chi Min exponiendo la situación actual nuestros pueblos y buscando la solidaridad
que nuestros hermanos necesiten.
Todas las acciones propuestas por los familiares de los caídos y los desaparecidos las hacemos nuestras,
esperando que otros hermanos y hermanas se sumen a la exigencia de castigo a los asesinos de nuestros
hermanos de Ayotzinapa y la presentación con vida de los desaparecidos, de nuestros hijos.
Hoy como ayer, la Patria nos llama.
Ni perdón ni olvido, castigo a los asesinos.
La Tierra no se vende, se ama y se defiende.
La patria no se vende, se ama y se defiende.
Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra