El padre de Pablo Ibar, condenado a muerte en Florida (EEUU) en 2000 por un triple asesinato en 1994, se muestra esperanzado después de la audiencia probatoria que revisó el caso. Las nuevas pruebas presentadas, como el testimonio de un experto en reconocimiento facial y de un nuevo testigo, parecen favorecer a Pablo Ibar. Sin embargo, el juez tomará de dos a tres meses en emitir su sentencia. Cándido Ibar y su familia esperan que estas nuevas evidencias conduzcan a anular la condena a muerte, a
MAPA DEL TALENTO 2023 de Cotec e Instituto Valenciano de Investigaciones Econ...
Pruebas a favor de Pablo Ibar condenado a muerte en EEUU
1. Noticias de Gipuzkoa Miércoles, 25 de marzo de 2009 GIPUZKOA SOCIEDAD 7
C Á N D I D O I B A R
PADRE DE PABLO IBAR, CONDENADO A MUERTE EN FLORIDA (EEUU)
“NoencontrémuybienaPablo,peroélmedijo:‘Yo
estoyfuerte,hastaahoraheaguantadoyyaaguantaré”
Cándido Ibar se muestra espe-
ranzado al otro lado del teléfo-
no, en su casa de Florida
(EEUU). Sólo han pasado unos
días de la audiencia probatoria
que revisa el caso de su hijo
Pablo, y aún habrá que espe-
rar varios meses para saber si
el juez anula la sentencia de
muerte dictada en 2000
Cándido Ibar junto a su hijo, Pablo, en una visita reciente. FOTO: ASOCIACIÓN CONTRA LA PENA DE MUERTE PABLO IBAR
A. ZABALETA
DONOSTIA. Un experto testificó que
la imagen del vídeo de seguridad no
es concluyente y no se tuvieron en
cuenta pruebas que exculpaban al
joven de origen vasco.Un testigo ase-
guró que otra persona le confesó que
mató en 1994 a las tres víctimas por
cuyo asesinato se condenó a Ibar.
Además, el abogado de oficio que lo
defendió hace diez años reconoció
que por motivos personales su tra-
bajo fue deficiente. Todo ello en los
cuatro días que duró la audiencia
probatoria que revisa el caso.
¿Con qué sensación salieron del tri-
bunal?
Fuemejordeloqueesperábamos.De
todas maneras, sabemos que el juez
es el que tiene que dar el sí o el no, ya
no depende de nosotros. Kayo Mor-
gan (abogado de oficio que lo defen-
dió en el primer juicio) estuvo muy
bien, el experto inglés en reconoci-
miento facial (Raymond Evans) tam-
bién. Por ejemplo, él dijo que en
Inglaterra la imagen del vídeo por la
que se utilizó para condenar a Pablo
no hubiese servido en un juicio. Lo
que se podía analizar, algunas medi-
das, no encajaban con Pablo. La Fis-
calía intentó que no se admitiera su
testimonio pero no le salió bien.
También hubo un nuevo testigo.
Nuestro abogado vio en un progra-
ma de televisión a un hombre que
dijo que creía que un tal Willy esta-
ba en la cárcel por ese caso, dijo que
lo conocía. Nuestro abogado y la Fis-
calía estuvieron discutiendo media
hora para determinar si se incluía
esto en el juicio.
¿Como prueba?
No como prueba, pero el tribunal lo
va a revisar. Eso no tiene nada que
ver con el resultado de esta audien-
cia, pero el 20 de abril van a juntar-
se los abogados para ver qué se pue-
de hacer. Igual el juez espera ese
resultado para dar su respuesta a la
audiencia probatoria.
¿Cuándo sabrán la sentencia?
Dijo que tardaría de dos a tres meses
enresponder.Primerohayqueponer
en limpio las transcripciones de
estos días y luego las tiene que estu-
diar. El juez dijo claramente que se
grabara todo porque sabía que des-
pués acabará en el Supremo.
Dependiendo del resultado, lo recu-
rrirán ustedes o la Fiscalía.
Sí. Por lo tanto, habrá que esperar.
No sabemos qué va a pasar con esta
nuevaevidencia,peroélaseguraque
ese otro hombre le dijo que había
sido él. Además, también declaró
Anthony Falsetti, de la Universidad
de Florida, profesor de antropología
forense. Estaba en la lista que apro-
bó el tribunal anterior para que fue-
ra llamado a declarar. Tenían que
haberle llamado pero nunca recibió
ni una llamada ni un e-mail, absolu-
tamente nada. Era la evidencia prin-
cipal, iba a hacer el examen de la
cara, lo que ha hecho ahora el exper-
to inglés. Por alguna razón la Fisca-
lía no lo trajo entonces, me imagino
que no sería bueno para ellos. Al
final, todo se ha quedado a nuestro
favor, estos cuatro días no podían
haber salido mejor.
Pero son conscientes de que es difí-
cil que el mismo tribunal que dictó la
condena de muerte recule.
Según la documentación que hay de
estos años, el porcentaje de los tri-
bunales que suelen echar para atrás
su condena es muy bajo. Pero a ver
si ahora sí pasa. Si no, también ire-
mosalSupremo.Yhabráqueverqué
pasa con el otro caso (el del otro posi-
bleautorsegúneltestimoniodelpro-
gramadetelevisión),sisuADNcoin-
cide con el encontrado en el lugar.
¿Entonces se declararía nulo el jui-
cio contra su hijo?
No lo sé, ojalá que sea así. Pero no
vamos a echar las campanas al vue-
lo. De momento, tenemos que ir con
lo que tenemos, y lo que tenemos son
unas pruebas muy a nuestro favor
que esperemos que funcionen tanto
ahora como en el Supremo. Luego, si
lo otro sale, sería como un regalo.
¿Han podido hablar con Pablo?
No hemos podido estar con él, sólo
un rato en los descansos bajito y por
señas. La verdad es que no le he
encontrado demasiado bien. Hacía
frío y sólo tenía ese buzo rojo, pre-
guntamos si le podíamos llevar un
jersey y el juez lo aprobó pero no se
lo llevaron. El viento es muy fuerte
y estaba en una celda pequeña sepa-
rado de los demás, sin televisión ni
nada. Pero él me dijo: “Yo estoy fuer-
te, hasta ahora he aguantado y ya
aguantaré”. Por lo menos con esto se
recupera bastante la esperanza y los
ánimos son un poco mejores. Así
que, a ver lo que pasa.
“De momento, lo que
tenemos son pruebas
muy a nuestro favor que
esperamos funcionen
ahora y en el Supremo”
L A F R A S E
VA S C O S E N P R I S I O N E S D E L E X T R A N J E R O
NueveañosenelcorredordelamuertedeFloridaapartirdeunafotografíaborrosa
DONOSTIA. Pablo Ibar, sobrino del conocido
Urtain,fuecondenadoamuerteenelaño2000
por el mismo tribunal de Florida que ahora
revisaelcaso.Seleacusódelasesinatodetres
personas en el año 1994, y la prueba princi-
pal fue una imagen borrosa de las cámaras
de seguridad (la primera imagen) con la que
Ibar guarda parecido. Desde entonces, su
padre Cándido, su hermano Michael y su
mujer Tanya (la tercera foto) llevan años
reclamando que se reabra el caso y han visi-
tado Euskadi en bastantes ocasiones para
recabar apoyos institucionales y económicos
que garantizaran una buena defensa. La
semana pasada lograron que Pablo volviera
al tribunal (foto central). FOTOS: ASOC. P. IBAR/EFE