2. «¡Álzate y brilla, que llega tu luz; la gloria
de Yahvé amanece sobre ti! Mira: la
oscuridad cubre la tierra y nube espesa a
los pueblos, mas sobre ti amanece Yahvé y
su gloria aparece sobre ti. Caminarán las
naciones a tu luz, los reyes al resplandor de
tu aurora.»
Isaías 60, 1-3.
7. Un imperio tolerante
Tras la caída de Babilonia bajo el imperio
persa, el gran rey Ciro se muestra tolerante
con los pueblos dominados. Sólo exige
impuestos y leva de hombres si hay guerra.
8. Ciro y su decreto a favor de los judíos deportados
En este cilindro se grabó el
decreto de Ciro a favor de los
judíos.
9. El retorno a Jerusalén
El decreto de Ciro permite a los judíos
retornar a su tierra, reconstruir su templo y
vivir según su religión y costumbres.
12. Hostilidad de los pueblos vecinos
Los reinos vecinos ven con suspicacia los
trabajos de reconstrucción de los judíos y
los acusan ante el rey persa de alentar la
rebelión. Los atacan e intentan asesinar al
gobernador Nehemías (Ne 2 – 4).
13. Judá y los reinos de
Edom, Moab, Amón,
Aram y otros vecinos.
14. Los samaritanos
Se ofrecen a colaborar en la reconstrucción del
templo, pero son rechazados y conspiran
contra los judíos y su obra de reconstrucción.
De ahí surge la larga enemistad…
17. Las obras, a mano armada
Los judíos tienen que trabajar con las armas a
punto, dispuestos a defenderse. Pero
perseveran alentados por los profetas,
sacerdotes y gobernantes.
18. Aposté al pueblo en los puntos más bajos, tras la muralla y
en los lugares descubiertos, y coloqué a la gente por
familias, cada uno con sus espadas, sus lanzas y sus arcos.
Al ver su miedo, me levanté y dije a los notables, a los
consejeros y al resto del pueblo: ¡No les temáis! ¡Acordaos
del Señor, grande y terrible, y combatid por vuestros
hermanos, hijos e hijas, vuestras mujeres y vuestras casas!
Desde aquel día, sólo la mitad de mis hombres trabajaban;
la otra mitad, provistos de lanzas, escudos, arcos y
corazas, vigilaba tras la gente que construía la muralla…
Nehemías 4, 7-12
20. Injusticias internas
Los pobres vivían asfixiados por las deudas y
llegaban a caer en la esclavitud. Nehemías
exigió a los judíos ricos una condonación total
de las deudas, y así se hizo.
21. Yo me indigné al oír su queja y sus palabras [de los
endeudados]. Tomé la firme determinación de reprender a
los notables y a los consejeros, y les dije: ¡Menuda carga
impone cada uno de vosotros a su hermano! … No está
bien lo que estáis haciendo. ¿No queréis respetar a
nuestro Dios, para evitar los insultos de las naciones
enemigas? Pues bien, condonemos estas deudas.
Restituidles inmediatamente sus campos, sus viñas, sus
olivares y sus casas, y perdonadles la deuda del dinero, del
trigo, del vino y del aceite que les habéis prestado.
Nehemías 5, 6-13
23. Esdras, padre del judaísmo
Organizó el culto en el templo y se
preocupó por recopilar las sagradas
escrituras: la Torá, los profetas y la historia
de Israel.
24.
25. …todo el pueblo se congregó como un solo hombre en la
plaza… Dijeron al escriba Esdras que trajera el libro de la
Ley de Moisés que Yahvé había prescrito a Israel. Trajo el
sacerdote la Ley ante la asamblea, integrada por hombres,
mujeres y todos los que tenían uso de razón. Leyó una
parte en la plaza… Los oídos del pueblo estaban atentos al
libro de la Ley. Esdras bendijo a Yahvé el Dios grande, y
todo el pueblo, alzando las manos, respondió: ¡Amén!
¡Amén!
Nehemías 8, 1-8
28. No mezclarse
Tanto Esdras como Nehemías insistieron
con fuerza en no mezclarse con los otros
pueblos: una actitud defensiva para
conservar la identidad y la estirpe.
30. Habéis sido rebeldes al casaros con mujeres extranjeras,
aumentando así el delito de Israel. Ahora, pues, dad
gracias a Yahvé, Dios de nuestros padres, cumplid su
voluntad y separaos de la gente del país y de las mujeres
extranjeras. Toda la asamblea contestó: ¡Sí! Haremos
como tú dices.
Esdras 10, 10-12.
31. Una posición discutida
Esta actitud de rechazo al extranjero es
contestada en otros libros de la Biblia,
como el de Rut, donde se acepta la
integración de los extranjeros en la
comunidad.
34. El Templo y la conversión
Ageo, Zacarías, Joel y Malaquías animaron al
pueblo a reconstruir el templo y a cultivar una
religión auténtica y sincera, acompañada de
justicia social y atención a los pobres.
35.
36. Ageo
La restauración del templo es crucial para atraer
la bendición y la presencia de Dios. Vendrá una
nueva era de salvación, cuando Yahvé habite en
medio de su pueblo.
38. Zacarías
El linaje de David será restaurado. Dios siente
pasión por su pueblo y enviará un rey justo,
humilde y pacífico que restablecerá la paz y
gobernará toda la tierra. El gran peligro: ¡los
malos pastores que pierden a las ovejas!
40. Malaquías
No se puede rendir culto a Dios y luego cometer
abusos e injusticias: llama a la conversión y a una
religión interior y auténtica. Orden moral, culto
perfecto a Dios para preparar su venida.
42. Joel
Llama a la penitencia y anuncia un día en que el
espíritu de Dios será derramado sobre todos.
Dios se compadece y bendecirá a su pueblo.
Visiones del «Día de Yahvé».
44. El segundo y tercer Isaías
Los capítulos 40 al 65 de Isaías nos hablan del
siervo de Yahvé, y de un mundo nuevo que Dios
está creando. Tras el duro exilio hay esperanza.
45. Pues voy a crear unos cielos nuevos junto con una tierra
nueva; ya no se hablará de lo antiguo, nada volverá a ser
recordado; antes bien, habrá gozo y regocijo por siempre,
por lo que voy a crear. Voy a crear una Jerusalén
“Regocijo” y un pueblo “Alegría”.
Isaías 65, 17-18.