Un paciente de 56 años sufrió una fractura trimaleolar del tobillo al caerse por una escalera. Fue diagnosticado con una fractura que afectaba a la tibia, el peroné y el maléolo lateral. Se sometió a un tratamiento con placa en el peroné y tornillos en la tibia. Tras un mes con bota de yeso y descarga, recuperó la movilidad completa e indolora a los cinco meses.