Se presenta la asombrosa innovación de los últimos 100 años de los plaguicidas, que de kilos por hectárea pasaron a gramos por hectárea, a plaguicidas muy específicos para el control de las plagas, muy selectivos a los insectos beneficios, que respetan al medio ambiente y a la salud humana y que permiten incrementar la productividad en la agricultura, defender la soberania alimentaria y permitir el comercio de alimentos inocuos en el mercado mundial. Ademas de constituirse una herramienta importante en el Manejo Integrado de Plagas