El documento describe varias dificultades que las personas enfrentan como enfermedades, falta de recursos, crisis familiares y desinterés espiritual. Sin embargo, enfatiza que Dios no abandonará a sus seguidores y que deben dejar sus asuntos en sus manos a través de la oración y la fe, para que sus tormentas fortalezcan en lugar de debilitar su fe mientras esperan su venida.
1. Y vinieron sus discípulos y le
despertaron, diciendo: ¡Señor,
sálvanos, que perecemos!
Él les dijo: ¿Por qué teméis,
hombres de poca fe? Entonces,
levantándose, reprendió a los
vientos y al mar; y se hizo grande
bonanza. Mateo 8:25-26
3. Una enfermedad:
Una dolencia es motivo de
mucha preocupación ¿Verdad?
Pero usted está en las manos de
Dios y él no lo abandonará.
¿Lo cree?
4. Falta de recursos:
¡Ah, los recursos!
Esto afecta a todos o casi a todos los
cristianos en todas partes.
Pero no olvide que Dios es nuestro
proveedor.
5. Crisis familiar:
Esto es un tema generalizado;
muchos hogares están siendo
afectados.
Pero Dios es Padre de misericordias y
Dios de toda consolación.
6. Desinterés Espiritual:
Este estado es muy peligroso, ya que no
solo ataca a lo físico, sino a lo
espiritual, su efecto es devastador, lo
aleja de la de la comunión con Dios.
¡Cuidado usted caiga en ese estado!
7. ¿Qué hacer en medio de una crisis?
¿Qué hacer cuando todo salga mal?
Solo hay una opción:
9. Que las tormentas en este nuevo año
no debiliten nuestra fe.
Antes por el contrario, sean
fortaleciéndola, sabiendo que su
venida está cerca.
Daniel Zambrano V.