Nuevos bloques regionales, algo más que un tratado de libre comercio
1. Nuevos bloques regionales, algo más que un tratado de libre
comercio
Por: Florencia Bunge
Hace casi dos años, México, Chile, Perú y Colombia crearon un bloque comercial de
ámbito subregional: Alianza del Pacífico.
La propuesta se dio a conocer en Lima (Perú), el 28 de abril del 2011, a través de la
Declaración de Lima, con el fin de «alentar la integración regional, así como un mayor
crecimiento, desarrollo y competitividad» de las economías de sus países, a la vez que
se comprometieron a «avanzar progresivamente hacia el objetivo de alcanzar la libre
circulación de bienes, servicios, capitales y personas».
Muchos presidentes y primeros ministros, a nivel mundial, no le dieron mucha
importancia, simplemente era una propuesta más parecida a Mercosur, ALBA, y otros
bloques regionales. La sorpresa llegó hace una semana, cuando el grupo que
representa más de un tercio del Producto Interno Bruto de América Latina dio a
conocer sus líneas estratégicas, sellando un protocolo a través del cual eliminaron los
aranceles para el 92% de los productos que comercializan Chile, Colombia, México y
Perú, entre sí.
Es importante destacar que la firma de este acuerdo implica un mercado de más de
210 millones de consumidores, el cual se amplía en el momento que cada bien de cada
país aproveche las ventajas de la integración y logre alianzas que le permitan llegar a
mercados del Asia.
Pero la unión de estos países va más allá de construir un área de integración hacia la
libre circulación de bienes, servicios, capitales y personas. Además, buscan impulsar un
mayor bienestar, superación de desigualdades socioeconómicas y la inclusión social de
sus habitantes, para así poder trabajar conjuntamente en temas políticos, comerciales
y económicos con repercusión mundial.
Un ejemplo de ello, es que Chile y Colombia han anunciado que compartirán
embajadas en Azerbaiyán y sede diplomática ante la OCDE, en Francia, siendo uno de
los objetivos de la Alianza lograr un espacio de integración profunda.
A través del análisis vemos que en menos de tres años, la Alianza, que concentra el
50% del comercio total y atrae el 41% de los flujos de inversión extranjera directa que
llegan a la región, se ha convertido en interés de todos, sobretodo de mandatarios del
continente que ya han mostrado su interés en ser parte de este grupo exitoso. La
Presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, estuvo en Cartagena con Sebastián Piñera,
Ollanta Humala, Juan Manuel Santos y Enrique Peña Nieto en la reciente cumbre de la
Alianza, y firmó una declaración de intenciones para convertirse en miembro del
bloque, lo que se podría concretar en 2015. Panamá y Guatemala también han
manifestado su interés de ser parte de este club.
www.florenciabunge.com
2. Ahora, y después de un inicio lleno de elogios, anuncios, acciones, y buenas
intenciones, llega el momento más esperado: ver si es realmente la llave a una
apertura comercial e integración latinoamericana o simplemente un tratado de libre
comercio. El tiempo nos dirá.
Este artículo ha sido basado en la opinión personal de Florencia Bunge.
www.florenciabunge.com