Debemos tomar real conciencia de la actual desastrosa situación social de muchos de los habitantes de este planeta. Los padecimientos son enormes, y no nos engañemos, los afectados en la mayoría de los casos no son gente indolente, desganada, vencida de antemano. El problema es que nuestra estructura social es terriblemente injusta con grandes sectores poblacionales, y no les otorga condiciones mínimas indispensables para su desarrollo. Pero el estado actual de cosas no podrá solucionarse con simple voluntarismo. Deberemos ordenar nuestra casa social para realmente poder implantar una sociedad más justa, más solidaria, más equitativa. Un otro mundo es posible. Un mundo mejor controlado y más justo será posible cuando nos decidamos a usar la "moneda telemática" propuesta hace ya varias décadas por el investigador social catalán "Agustí Chalaux de Subirà".