1. Juan Ramón Molina poemas<br />En Brasil <br />Fue mi niñez como un Jardín risueño,donde a los goces de mi edad esquivo, presa ya de la fiebre del ensueñovague dolientemente pensativo.Sentí en el alma un natural deseode cantar a la orilla del caminohalle una lira no cual la del Orfeoy obedezco el mandato del destino.Al mirarme al espejo, cuan cambiadoestoy! no me conozco ni yo mismotengo los ojos de mirar cansadoalgo del miedo del que ve un abismo.<br />Este poema narra la niñez del escritor como en su poema lo narra, tuvo una niñez muy alegre y divertida, dejo los estudios por seguir sus sueños de ser poeta y que a medida que creció se nota muy cambiado y que con el pasar de los años ya se siente envejecido y también añora las goces de la vida que eran mejor en su infancia. <br />Madre melancólica <br />«A tus exangües pechos, Madre Melancolía,<br />ha de vivir pegado, con secreta amargura,<br />porque absorbí los éteres de la amarga filosofía<br />y todos los venenos de la literatura.<br />En –fatigada de sed alma mía-<br />sueña con una Arcadia de sombra y de verdura,<br />y con ello el don sencillo de un odre de agua fría<br />y un racimo de dátiles y un pan sin lavadura.<br />Todo el dolor antiguo y todo el dolor nuevo<br />mezclado sutilmente en mi espíritu llevo<br />Con el extracto de una fatal sabiduría.<br />Conozco ya las almas, las cosas y los seres,<br />he recorrido mucho las playas y los Citeres...<br />¡Soy tu hijo predilecto, Madre Melancolía!»<br />En este poema se puede deducir que el poeta se encontraba en un estado de tristeza ya que al igual que las demás personas el poeta tenía una vida llena de problemas y al parecer al momento de escribir este se encontraba con mucho dolor y desdicha porque e inclusive le nombro madre melancolía al poema y si observamos sus rimas y frases notamos que se siente tan apegado a la melancolía.<br />Anhelo<br />¡Viviese yo en los tiempos esforzadosde amores, de conquistas y de guerras,en que frailes, bandidos y soldadosa través de los mares irritadosiban en busca de remotas tierras.No en esta triste edad en que desmayatodo anhelo –encumbrado como un monte–y en que poniendo mi ambición a rayaherido y solo me quedé en la playaviendo el límite azul del horizonte!<br />A causa de su vida que no fue nada fácil Juan Ramón Molina escribió anhelo donde expresa, aquellos sueños y metas que a veces nos proponemos pero que por cosas de la vida no se realizan y es aquí en este poema donde describe el deseo de tener una mejor vida.<br />Súrsum<br />Ya no nos separemos ni un momento,porque –cuando se extingan nuestras vidas–nuestras dos almas cruzarán unidasel éter, en continuo ascendimiento.Ajenas al humano sufrimiento,de las innobles carnes desprendidas,serán en una llama confundidasen la región azúl del firmamento.Sin dejar huellas ni visibles rastros,más allá de la gloria de los astros,entre auroras de eternos arreboles,a obedecer iremos la divinaley, fatal y suprema que dominalos espacios, las almas y los soles.<br />En este poema Juan Ramón Molina le escribe a una mujer a la cual dice que sus dos almas cruzaran unidas en el éter, es un poema muy bonita y al parecer él estaba enamorado cuando lo escribió.<br /> <br />Anhelo nocturno<br />La lluvia su monótona charla dice afuera.La puerta de mi cuarto por fin está cerrada.Quizás en esta noche no grite mi quimeray goce del olvido profundo de la almohada.¡Hace ya tanto tiempo que en reposar me empeño,como si me turbara la fiebre del delito,que mis ojos enclavo —de los que huyera el sueño—en la siniestra esfinge del lúgubre infinito!Mas hoy todos los seres me han parecido buenos,el cielo azul brindome su calma vespertina,y —libre de pecados y libre de venenos—purifiqué mi cuerpo en agua cristalina.Quiero la paz aquella de la primer mañanacuando, en el seno de Eva, tranquilo e inocente,Adán durmió, al arrullo de amor de la fontana,ajeno a las promesas de la sutil serpiente.Un nirvana sin término, letárgico y profundo,en el que olvide todas mis dichas y mis males,la secreta congoja de haber venido al mundoa resolver enigmas y problemas fatales.Ser del todo insensible como la dura piedra,y no tallado en una doliente carne vivade nervios y de músculos. O ser como la hiedraque extiende sus tentáculos de manera instintiva.No como el pobre bruto del llano y de la cumbresujeto a la ley ciega de inexorable sino,que en sus miradas tiene la enorme pesadumbrede todo aquel que encuentra muy bajo su destino.Así gozar quisiera de imperturbable sueñocuando la noche baja de los cielos lejanos.Estrellas: derramadme vuestro letal beleño.Arcángeles: mecedme con vuestras leves manos.Para que mi mañana florezca como rosade mayo, exuberante de vida y de fragancia,<br />y la tierra contemple, jocunda y luminosa,con los tranquilos ojos con que la vi en la infancia.<br />Juan Ramón Molina escribe este poema en una circunstancia o problema que estaba pasando y estaba tan decaído que solo pensaba en la muerte como único remedio a sus penas y a la falta de fe que tenía a causa de que todos sus sueños no fueron cumplidos.<br />