Este documento define y analiza varios modelos pedagógicos que se han desarrollado a lo largo de la historia. Describe el modelo pedagógico tradicional, el conductista y el cognitivo/constructivista, incluyendo sus cuatro corrientes. Explica que el modelo constructivista ve al estudiante como constructor de conocimiento y enfatiza la experiencia y el descubrimiento. También presenta el modelo pedagógico social, el cual propone articular el conocimiento con el mundo productivo y estimular el trabajo cooperativo para resolver problemas comunales.
Una aproximación hacia a la comprensión de los modelos pedagógicos
1. UNA APROXIMACIÓN HACIA A LA COMPRENSIÓN DE LOS MODELOS
PEDAGÓGICOS
Por: Robert Melo Lora♣
Si partimos que la pedagogía es una disciplina social en construcción (Florez,
1994) y por ello, comprende un conjunto de proposiciones teóricas que se
articulan alrededor del concepto de formación; enfoques, métodos, estrategias y
técnicas que permiten explicar y diseñar procesos de enseñanza; y a su vez esta
se asume como una actividad educativa específica, intencional y planeada para
facilitar que determinados individuos se apropien y elaboren con creatividad♦ cierta
porción del saber o alternativas de solución a algún problema en aras a su
formación personal1; es claro entonces, que la educación como proceso social que
busca el desarrollo de talentos y capacidades innovadoras en las personas que
hacen parte de una sociedad, se articule con la didáctica y la pedagogía para el
estudio de los modelos pedagógicos.
Sin embargo, antes de abordar que modelos pedagógicos se han logrado construir
a través de la historia de la educación, es necesario abordar inicialmente la
concepción que se tiene de esta categoría de análisis. Florez Ochoa (2005) los
define, como la representación de las relaciones que predominan en una teoría
pedagógica; así mismo, es un paradigma que puede coexistir con otros y sirven
para organizar la búsqueda de nuevos conocimientos en el campo de la
pedagogía; por otro lado, en el ABC del educador (2003) son considerados como
los sistemas auxiliares abstractos o físicos del proceso educativo, que al ser
sometidos a estudios de investigación se convierten en medios para la obtención
de información sobre el sistema educativo.
Técnico profesional en Administración de planteles de Educación Básica Primaria (INFOTEP, 1990),
Licenciado en Administración Educativa (UNISANBUENVENTURA, 1994), Especialista en Docencia
Universitaria (UNIBOSQUE, 2000), Profesor catedrático del INFOTEP en las áreas de Planeación,
administración educativa, metodología del trabajo, metodología de la investigación, Investigación I, II, III,
Trabajo de Grado (1992-2005), Docente titular de la Institución Educativa San Juan del Córdoba en Ciénaga,
Magdalena (1997-2012) Asesor de la secretaria de Educación del municipio de Pueblo viejo, Magdalena
(1996), Secretario General del Comité de Investigaciones del Programa de Licenciatura en Educación con
Énfasis del INFOTEP (2002-2005), Miembro activo del Comité de Calidad del municipio de Ciénaga,
Magdalena (2005), asesor de proyectos educativos Institucionales de las I.E Carmen, La Alianza en Ciénaga,
Magdalena (2003-2005), Asesor de Proyectos de Investigación y pedagógicos transversales y de aula (1997-
2005). Coordinador Académico INCAPEMA (1996-2005). Gerente del Instituto para el desarrollo de la
educación, la investigación y la pedagogía en Colombia INDEIPCO (2006-2009), Asesor externo de la
Coordinación de Gestión de la Calidad del Municipio de Ciénaga en el Macroproceso a certificar Evaluación
(2008 – 2012). 11 Cursos de Educación Virtual y complementaria SENA en el área de Sistemas e Informática.
23 créditos en cursos de actualización y perfeccionamiento docente en Pedagogía, Valores, Creatividad y
Producción de textos válidos para ascenso en el escalafón docente.
entendida como la disposición para crear, que existe en estado potencial en cualquier individuo y a cualquier
edad.
1
ABC Del Educador. Modelos pedagógicos y didácticos. Ed. SEM. Bogotá, 2003. P. 63
2. Esto nos indica, que los modelos pedagógicos definen el actuar de los actores que
participan en la construcción de conocimientos, por cuanto describe todo un
conjunto de relaciones que le dan sentido a lo que cada uno de ellos hacen en el
contexto del aula y por consiguiente, son esas relaciones las que orientan la
búsqueda de nuevas teorías pedagógicas. Lo que evidencia, que cada perspectiva
o modelo pedagógico requiere confirmarse en los procesos reales de enseñanza.
En los llamados procesos reales de enseñanza se encuentran inherentes los
contenidos, las estrategias, técnicas y procedimientos, los recursos y la
evaluación; en pocas palabras, que debe saber, saber hacer y saber ser un
docente de ciencias; como elementos fundamentales para orientar la calidad de la
enseñanza. Los siguientes modelos ponen de manifiesto la reflexión, análisis,
interpretación y comprensión a los modelos pedagógicos que se han logrado
construir en el pasado hasta la actualidad.
En el presente ensayo se pretende definir y comprender que modelos
pedagógicos se han logrado construir a través de la historia, con la finalidad de
hacer una aproximación a aquellos principios epistemológicos, psicológicos,
sociológicos y antropológicos que están inherentes en cada uno de ellos, para que
a partir de sus estructuras conceptuales podamos avanzar en la construcción de
un modelo que se ajuste a las necesidades reales de nuestras instituciones
educativas.
En el recorrido histórico de la educación encontramos el modelo pedagógico
tradicional, el cual hace énfasis en la formación del carácter de los estudiantes
para moldear, a través de la voluntad, la virtud y el rigor de la disciplina, el ideal
humanístico y ético que recoge la tradición metafísico-religiosa medieval. Este
modelo conlleva a que el aprendizaje sea academicista, verbalista, en donde el
docente da sus clases bajo un régimen de disciplina que convierte a los
estudiantes en simples receptores y el docente en el transmisor de conocimiento.
Es decir, el maestro es el eje del proceso educativo, es el depositario del saber
que transmite el alumno; por lo tanto elige contenidos prescribe, disciplina y
educa2
En este modelo el currículo, es un plan general de contenidos, no
operacionalizados, ni objetivados que permiten márgenes tan grandes de
interpretación al profesor en su ejecución que mientras no se salga del marco
general, ni de su papel de organizados tradicionales dentro del aula, puede
generar brechas considerables entre el currículo oficial y el real, sin que las
instituciones sepan ni se preocupen, pues en ellas, muchos de sus supuestos
teóricos son implícitos o permanecen escritos como declaraciones formales,
abstractas y generales.
2
Ibíd. P. 97.
3. Entonces, el currículo tradicional es un conjunto agregado de contenido que
permite al docente dentro del marco general ejecutar abiertamente; lo que no lo
hace formalmente valido por no obedecer a criterios reales del contexto, creando
una división enorme entre lo que producen los expertos del MEN y la vigencia
cotidiana con la que interactúan los actores educativos.
Este modelo pedagógico enmarca en esencia, la fijación y control de los objetivos
instruccionales formulados con precisión y reforzados en forma minuciosa;
enfatiza la necesidad de atender las formas de adquisición y las condiciones del
aprendizaje de los estudiantes.
Lo que trata este modelo pedagógico es volver más eficiente y objetiva la
enseñanza transmisionista tradicional, en donde los educadores para ser
eficientes deberán traducir los contenidos en términos de lo que los estudiantes
sean capaces de hacer, de las conductas que tengan que exhibir como evidencia
de que efectivamente, el aprendizaje se produjo.
Este conjunto de objetivos terminales expresados en forma observable y medible,
a los que el estudiante tendrá que llegar desde cierto punto de partida o conducta
de entrada, mediante el impulso de ciertas actividades, medios, estímulos y
refuerzos secuenciados y meticulosamente programados, determina entonces que
la enseñanza conductista sea un proceso de evaluación y control permanente,
arraigado en la esencia de lo que es un objetivo instruccional.
En este orden de ideas, aparece el modelo pedagógico cognitivo o constructivista,
con la concepción de un estudiante constructor y reconstructor de conocimientos
a partir de la acción. Este conocimiento se enlaza a las estructuras previas del
estudiante. Este modelo tiene cuatro corrientes que deben ser analizadas para su
comprensión: la primera tiene que ver con acceso progresivo y secuencial a
niveles superiores de desarrollo intelectual, la segunda con la enseñanza basada
en el descubrimiento, la tercera con el desarrollo de ciertas habilidades cognitivas
y la cuarta, la social constructivista.
En la primera parte de este modelo el maestro debe propiciar un ambiente que
favorezca el afianzamiento y la capacidad de pensar y de reflexionar3 de los
estudiantes, con el fin de resolver los diferentes problemas que se le presenten.
En el mismo orden de ideas Miguel de Subiría, sobre esta corriente, el profesor
acompaña a sus estudiantes en la actividad sin imponerles sus ideas, sus
conocimientos, pues la enseñanza proviene de fuentes vivenciales que los
alumnos procesan, es decir, los alumnos llevan la voz cantante4. Este
3
FLOREZ OCHOA, Rafael. Pedagogía del Conocimiento. Segunda Edición. Ed. Mc Graw Hill. Santa fe de
Bogota, 2005.
4
DE ZUBIRIA SAMPER, Miguel. Enfoque Pedagógicos contemporáneas. Fundación Alberto Merani. Santa
fe de Bogotá, 1994. P. 14.
4. pensamiento denota la importancia de la experiencia vital para contribuir al
desarrollo y abrirse a experiencias superiores.
La segunda corriente basada con el descubrimiento está relacionada con el
contenido de la enseñanza y del aprendizaje, privilegia los conceptos y estructuras
básicas de las ciencias, por cuanto brinda mejores oportunidades de desafiar la
capacidad intelectual del estudiante al experimentar la bibliografía disponible,
analizan la información contenida en ella, para deducir sus propios conocimiento;
cualidad de un científico que necesita soluciones a los problemas que se le
presenten. De lo anterior se puede agregar que no es falso que cada niño y joven
descubre el conocimiento, sino que tal idea ingenua conlleva desconocer la cultura
y menospreciarla”5
Por otro lado, en esta corriente se entiende el aprendizaje como un proceso de
construcción de significados por parte del alumno con la ayuda ajustada del
docente. El grado de significativa de los aprendizajes se convierte, desde este
punto de vista, en el principal indicador de la evaluación.
Los requisitos que un aprendizaje debe reunir para resultar significativo permiten
identificar a su vez determinados rasgos que deben tenerse en cuenta en la
evaluación y que complementarios con los expuestos en el apartado anterior. Coll
y Martín (1993) proponen una serie de ideas básicas desde este punto de vista.
No se trata en absoluto de un análisis exhaustivo. Sólo pretende señalar algunas
orientaciones que, por la potencialidad que les otorga el responder al mismo
análisis que la concepción constructivista hace del proceso de enseñanza y
aprendizaje, pueden resultar útiles a la hora guiar las prácticas evaluativas en el
aula.
La tercera corriente que precisa la formación de ciertas habilidades cognitivas o de
pensamiento, las cuales pueden apropiarse a través de preguntas desafiantes
formuladas en el momento oportuno por el maestro en un proceso inductivo (Taba,
1967). Otras habilidades aplicadas a la enseñanza, están relacionadas con el
pensamiento lateral y creativo (De Bono, 1970) y el pensamiento artístico y
hermenéutico (Eisner, 1989). Para poder lograr la finalidad de esta corriente se
hacen necesario que el proceso pedagógico del aula pase por tres momentos
importantes: la formación de conceptos, la interpretación de los datos y la
aplicación de los principios. El primero de ellos, parte de la observación, definición
de las categorías de análisis propias de la observación y el nombramiento de los
conceptos elaborados. En el segundo momento identifican, relacionan y explican
estas relaciones para poder construir y/o producir inferencias que conlleven al
momento tres, la cual conduce a la formulación de hipótesis y predicciones que
más tarde deberán los estudiantes explicar para llegar finalmente a su verificación.
5
Ibíd. P. 31
5. La cuarta corriente llamada social – cognitiva, considera que los éxitos de la
enseñanza se basan en la interacción y comunicación de los alumnos, a partir del
debate argumentado de ideas en donde la reflexión, comprensión y construcción
de sentido conlleven al logro de los resultados cognitivos y éticos colectivos sobre
problemas reales de la comunidad mediante la integración de la teoría con la
práctica; para ello, se requiere que los estudiantes observen detenidamente,
reinterpreten lo exterior desde sus propios esquemas internos de conocimiento y
lleguen a construir sentido.
El modelo constructivista en sus cuatro corrientes comparten principios teóricos
fundamentales tales como: la clase es la forma organizada más generalizada
donde el maestro como facilitador busca la organización del proceso en torno a su
praxis, visitas a las bibliotecas, museos, trabajos de campo, experimentación y
contacto directo con la naturaleza. Otra semejanza sería en cuanto a la
evaluación en donde se valoran los resultados de la asimilación y acomodación de
información por parte delo estudiante, para definir si los conocimientos o los
conceptos que el alumno construye en un momento dado, son los socialmente
necesarios para conocer y manejar el mundo en que vive.
El último modelo en estudio es el pedagógico social, el cual no solo propone
socializar al hombre, sino articular el conocimiento que produce al mundo
productivo; es decir, traspasar el desarrollo colectivo de los seres humanos al
desarrollo científico y técnico que garantice a través de la práctica la formación
científica de nuevas generaciones. Este modelo traspasa las fronteras del
conductismo y constructivismo, al considerar las aulas escenarios sociales que
propician el trabajo cooperativo en aras de buscar soluciones a los problemas que
por si solos no pueden. Desde esta perspectiva sociológica, se estimula la crítica
mutua, ayuda a los estudiantes a redefinir su trabajo y se apoyan para dar
solución a los problemas comunitarios.
Desde luego, para este nuevo modelo pedagógico de resultado, en las
instituciones educativas, se necesita capacitar a los maestros y hacer profundos
cambios curriculares. Cambios que van desde desaparecer las estructuras
curriculares basadas en asignaturas, cambiándolas por modelos curriculares
basados en núcleos problemáticos, con un amplio espacio de flexibilidad didáctica
para la discusión libre, espontanea y crítica; que posibilite mejores ambientes de
aprendizaje donde la motivación y participación sean importantes, pero más aún,
el desarrollo científico y técnico que se logra a partir de su comprensión.
Finalmente manifestar la intención de dejar abierto el espacio a la reflexión y a la
crítica como medios para mejorar este ensayo, puesto que constituye una
aproximación a la comprensión de los modelos pedagógicos, pese a la lectura
profunda del material objeto del trabajo. A la espera que sea de gran utilidad a
6. otras personas que requieran de un material bibliográfico para próximos
encuentros de trabajo académico.