El documento discute las ideas de Henry Giroux sobre los docentes como intelectuales transformativos. Giroux argumenta que los docentes deben convertirse en intelectuales críticos y reflexivos para educar a los estudiantes a ser ciudadanos activos. Esto implica que los docentes examinen críticamente su papel, renovándose constantemente para promover el cambio social. El documento también sugiere que las reformas educativas recientes han reducido la capacidad de los docentes para desempeñar este papel de liderazgo intelectual.
1. DOCENTES INTELECTUALES TRANSFORMATIVOS
Henry Giroux (1990): “[…] si los profesores han de educar a los estudiantes
para ser ciudadanos activos y críticos, deberían convertirse ellos mismos en
intelectuales transformativos.”
"La trasformación empieza en ti"
Giroux es un examinador de la escuela tradicional, el expone que el
docente debe asumir un papel más dinámico en su formación y su
tarea como
docente,
por
tanto
nos
solicita
para
que redimensionemos nuestro papel y seamos más examinadores con nosotros
mismos y con nuestra función como docentes; desde este punto de vista,
piensa en el docente como un sujeto innovador en constante renovación
que puede utilizar sus conocimientos para formar personas capaces de
participar activamente en la sociedad.
2. Cabe anotar que como Maestros no solo impartimos conocimiento sino
que nuestra labor va más allá, dejando en nuestra tarea parte de lo que
somos en esencia como docente, maestros, instructores, Profesores o
como nos quieran llamar la situación es que debemos darle la relevancia a
nuestro papel como maestros ya que somos un elemento importante en la
trasformación social.
La ideología de Giroux con relación a nuestro papel como docentes va
tomando importancia en la medida que entendemos y asumimos nuestro
papel protagónico para que se pueda darse la trasformación social que
buscamos.
Giroux dice que el docente debe ser crítico, reflexivo, innovador con el
propósito de tener una visión más amplia de la realidad ya que ello le
brinda herramientas y habilidades que le ayudan en su labor.
3. Desde este punto de vista, cuando Giroux nos propone convertirnos en
intelectuales transformadores, se refiere a docentes Investigadores,
académico y profesional activo y reflexivo, con tal de buscar una
trasformación social.
Profesionales que mediten sobre su propia función, que se incluyan en los
procesos educativos y los enriquezcan, un docente que es consciente de la
realidad social, económica y política que lo rodea y sobre todo que es capaz
de llevar a la práctica sus propios conocimientos para formar estudiantes
que se conviertan en “ciudadanos activos y críticos” Giroux (1990).La
invitación de Giroux es que como docentes nos trasformemos para
trasformar.
4. Ver a los profesores como intelectuales transformativos es ver la imagen de la
persona que queremos ser y la cual queremos seguir, teniendo en cuenta que esta
persona tiene valores, experiencias, conocimientos, anécdotas, etc. Que pueden
ayudar a una mejor formación individual y grupal del estudiante para que de esta
forma pueda integrarse mejor a la sociedad y aportarle cosas innovadoras a esta.
También la importancia de ver a los profesores como intelectuales transformativo
nos genera una visión hacia una fuerte crítica a las ideologías tecnocráticas
entendiéndose por tecnocracia el gobierno de los técnicos también a una crítica
subyacente a una teoría educativa que existe que separa la conceptualización, las
planificación y el diseño de los currículos del proceso de aplicación y ejecución.
Pero hoy en día hay que insistir en la idea que considera que el profesor debe
tener la responsabilidad de plantear cuestiones serias de lo que ellos mismos
enseñan, sobre la forma en que deben enseñarlo y sobre los objetivos generales
que ellos persiguen, aunque esta ideas sea prácticamente imposible debido a la
escasa influencia que tienen los docentes sobre las condiciones ideológicas y
económicas de su trabajo.
5. En la actualidad la función del docente como intelectual transformativo sea ha
venido perdiendo debido a una serie de reformas educativas que muestran escasa
confianza en la habilidad de los profesores para ejercer un liderazgo intelectual y
moral a favor de la juventud de las escuelas públicas de nuestra nación, todo esto
se da por ignorar el papel que desempeñan los profesores en la formación de los
estudiantes como ciudadanos críticos y activos, también hay reformas que dejan a
un lado la inteligencia, el punto de vista y la experiencia que puede aportar el
docente en la formación integral del estudiante, sin dejar a un lado que a los
profesores de nuestro futuro se les está enseñando metodologías que parecen
negar la necesidad misma del pensamiento crítico, lo importante de esta idea es
que la educación de los docentes en el presente están perdiendo de vista la
necesidad de educar a los estudiantes para que estos examinen la naturaleza
subyacente de los problemas escolares.
Para concluir los profesores como intelectuales transformativos han de
contemplarse en función de los interese ideológicos y políticos que estructuran la
naturaleza del discurso, las relaciones sociales del aula y los valores mismos que
ellos legitiman en su enseñanza, también que los profesores han de educar a los
estudiantes para ser ciudadanos activos y críticos, y así convertirse ellos mismo
en intelectuales transformativos.
6. Para finalizar dejo esta idea, para que reflexionemos:
“Si creemos que el papel de la enseñanza no puede reducirse al simple
adiestramiento en las habilidades prácticas sino que, por el contrario, implica la
educación de una clase de intelectuales vital para el desarrollo de una sociedad
libre, entonces la categoría de intelectual sirve para relacionar el objetivo de la
educación de los profesores, de la instrucción pública y del perfeccionamiento de
los docentes con los principios mismos necesarios para desarrollar una
ordenación y una sociedad democrática”.