Los principales obstáculos que enfrentaron los primeros cristianos al evangelizar incluyeron: la resistencia de los judíos que no podían aceptar a un Mesías crucificado, las acusaciones de los griegos y romanos que veían al cristianismo como una superstición débil e ineficaz, y la dificultad de los cristianos para participar plenamente en la sociedad pagana sin comprometer sus creencias.
2. Cuesta mucho imaginar cuán monumentales son Los obstáculos
que la religión, el vicio, las costumbres y el laissez-jaire abierto.
Las condiciones y circunstancias del siglo 1 aquella fue una tarea
sumamente difícil.
Adondequiera que los cristianos iban los cristianos eran resistidos
como disolutos, ateos y depravados.
Su mensaje proclamaba a un criminal crucificado y nadie podría
haber imaginado algo peor para ganar conversos.
los griegos - la estupidez de la nueva fe;
los romanos - debilidad e ineficacia de la misma,
los judíos no podían admitirla de manera alguna.
los cristianos resultaban ofensivos tanto en razón de sus
doctrinas como a causa de la conducta que se les atribuía.
UNIDAD II
Los obstáculos del evangelio
3. LOS OBSTÁCULOS JUDÍOS
Cristo piedra de tropiezo:
Anonimato: ellos no eran nadie. Un puñado de
hombres sin preparación rabínica formal estaba
intentando corregir la teología y la creencia.
Los puntos de este mensaje eran una afrenta para los
Israelitas. En primer lugar, los cristianos pretendían que
Jesús era el Mesías, cumbre y culminación de todas las
esperanzas de Israel. Hc. 2:36
Resultaba ridículo pensar en él como Mesías. Por
definición el Mesías era un liberador, un vencedor.
La adoración a un Mesías crucificado era
específicamente blasfema. El Antiguo Testamento dejaba
establecido perfectamente que cualquiera que hubiese
colgado de un madero permanecía bajo la maldición
divina (Dt. 21.22s.).
4. LOS OBSTÁCULOS JUDÍOS
Cristo piedra de tropiezo:
Justino tuvo que dedicarle mucho tiempo a esto
en su diálogo con el judío Trifón:
Puedes tener la seguridad -subraya Trifón- que toda
nuestra nación aguarda al Cristo. Y admitimos que
todas las Escrituras que tú has citado se refieren a él.
Pero que Cristo tuviera que ser tan vergonzosamente
crucificado, eso es lo que dudamos. Porque cualquiera
que es crucificado, dice la Ley que será maldito; por
eso que yo soy sumamente incrédulo en este punto.
Es muy claro, por cierto, que las Escrituras anuncian
que el Cristo tenía que sufrir, pero nosotros queremos
saber si tú puedes probarnos que tal sufrimiento tenía
que ser mediante la maldición de la Ley.
5. LOS OBSTÁCULOS JUDÍOS
Cristo piedra de tropiezo:
La más antigua confesión bautismal que
podemos identificar es la breve afirmación que
expresa: «Jesucristo es Señor» (Fil. 2.11). Es
preciso recordar que «Señor» era el nombre
especial dado a Dios en el Antiguo Testamento.
Salmo 110.1, en el que David se dirige a «mi
Señor». Esto se interpretaba como una referencia a
Jesús, quien resultaba, así, el Señor de David.
¿Es de admirarse, entonces, que los judíos pensaran
que los cristianos estaban predicando
a un segundo Dios?
¿Cómo podían ellos, con su monoteísmo estricto,
tener parte alguna en semejante blasfemia?
6. LOS OBSTÁCULOS JUDÍOS
La piedra de tropiezo de la iglesia
En cuanto al nacimiento virginal, lo consideraba un
menosprecio repugnante hacia Dios, una historia
parecida a la que los griegos relataban acerca de Zeus
y Dánae.
El templo. (Hch. 7.46ss)
la ley era demasiado dura para que la gente pudiera
cumplirla (Hch. 15.10)
El rito sagrado de la circuncisión.
El sábado.
La fe judía nunca fue monolítica.
La nueva fe era por completo incompatible con la religión de
Israel y que por eso mismo debía ser eliminada
definitivamente.
7. Relígío: significaba la religión del estado romano, vínculo formal
entre los seres humanos y los dioses.
- No era necesario que las personas creyeran en los
dioses antiguos. La creencia era un asunto privado. Pero lo que
se esperaba era la participación en el culto oficial. El culto era un
asunto público y la seguridad del estado dependía de él.
- A las religiones de otros pueblos, los romanos mostraban
gran respeto. No estaban dispuestos a declarar la guerra a
ningún dios ajeno.
- Más bien tendían a identificar a la deidad extranjera con
alguno de sus propios dioses que cumpliese la misma función o,
en caso de no haber ningún candidato a la vista, simplemente
añadían al panteón romano el dios en cuestión.
Los cultos privados y la religión estatal
Obstáculos grecorromanos
8. Los judíos, se negaron a permitir que Jehová fuese
añadido al panteón o identificado con Júpiter.
Jehová era Dios de toda la tierra y a él únicamente
adorarían. Tal actitud les pareció muy ridícula y
obtusa a los romanos, pues ellos eran gente
práctica, versátil y tolerante. Permitieron pues que
los judíos fuesen una anomalía y adorasen a Dios a
su propia manera, siempre que estuviesen
dispuestos a ofrecer oraciones en favor del estado
romano.
Los cultos privados y la religión estatal
Obstáculos grecorromanos
9. El cristianismo era una nueva fe que abarcaba a personas
de todas las razas y trasfondos, tanto bárbaras como
civilizadas. Era una superstitio, una creencia privada.
- La actitud romana hacia las creencias religiosas privadas
o superstitiones, era por completo tolerante a condición de
que la decencia y el orden público no resultasen
menoscabados por el culto en cuestión
- El senado eliminó los bacanales ya en época tan
temprana como 186 a.c., y esto no sólo por los excesos de
sus orgías, sino también por el perjuicio que este culto
extranjero ocasionaba a la religión romana.
Los cultos privados y la religión estatal
Obstáculos grecorromanos
10. - Tiberio hizo de la magia –el conocimiento de la
magia negra tanto como su ejercicio- una actividad
pasible de castigo.
los druidas. Estos eran abiertamente antirromanos
y se les atribuía la práctica de sacrificios humanos.
- El culto de Baco creció bastante durante los
primeros siglos de la era cristiana. En los muros de
Pompeya se han descubierto frescos que
representan una orgía báquica.
- La magia continuó practicándose profusamente.
El asno de oro, de Apuleyo, obra que data del siglo
2, hay reiteradas alusiones a las prácticas mágicas.
Los cultos privados y la religión estatal
Obstáculos grecorromanos
11. En el año 64 d.C. los cristianos cayeron bajo sospecha
de haber provocado un incendio premeditadamente y,
en consecuencia, se los sometió a crueles torturas en los
jardines de Nerón.
En lo sucesivo el ser miembro de una sociedad con
reputación criminal y antisocial podría ser, en cualquier
momento, causa suficiente para una acción punitiva por
parte del estado.
Los cultos privados y la religión estatal
Obstáculos grecorromanos
12. Tres factores que ayudaron a los cristianos
En 1er. lugar, los romanos no Un segundo factor protegía a
contaban con reglas legales los cristianos. En las provincias
estrictas de rápida aplicación del Imperio la atribución de
para gobernar las provincias atender. Los casos y pronunciar
administración de justicia en sentencia capital pertenecía
ultramar era asumida por el únicamente al procónsul.
procónsul o procurador que Tal facultad no podía delegarse,
gobernaba la provincia y a éste aunque el procónsul tenía la
no se le requería elevar los opción de seleccionar un
asuntos a Roma para su cuerpo o junta de provinciales
decisión ni tampoco se lo para que colaborasen con él en
obligaba a seguir las la administración de justicia.
costumbres romanas.
13. Tres factores que ayudaron a los cristianos
los procedimientos procesales 70 d.C. Tito podía opinar
de la ley romana favorecían a los que la destrucción de
cristianos. Como no había fiscal Jerusalén «sería un medio
público, los cargos tenían que invalorable para
ser formulados y fundamentados deshacerse tanto de la
por un acusador privado. religión cristiana como de
la judía porque, aunque
Durante los mandatos de Tiberio eran hostiles entre sí,
y Domiciano, se admitieron las ambas habían surgido de
denuncias anónimas, pero la misma raíz -los
resultaron tan impopulares y tan cristianos del judaísmo- y
ajenas a las costumbres romanas, una vez que la raíz
que Trajano debió suprimirlas hubiese sido extraída, el
tallo pronto perecería.»
enseguida.
14. Tres factores que perjudicaron a los cristianos
primer orden de los cristianos eran
importancia, podemos considerados inadaptados
mencionar los crímenes - sociales, «incapaces por
reales o imaginarios- que el temperamento o reacios
pueblo común relacionaba por convicción para
con la causa cristiana. participar en las actividades
comunes del grupo o la
Los seguidores de Cristo comunidad».
eran acusados de ateísmo,
los rumores corrientes
atribuían a los seguidores Platón había escrito: «A todo
de Cristo los delitos de hombre incapaz de
participar en la ley y en el
incesto y de canibalismo respeto mutuos se le debe
dar muerte como plaga
social».
15. Tres factores que perjudicaron a los cristianos
El cristiano no asistía a exhibiciones de gladiadores ni a
juegos ni a representaciones teatrales.
No leía literatura pagana.
No se alistaba como soldado.
Tampoco podía ser pintor ni escultor para no incurrir en la
idolatría,
Ni maestro de escuela.
Era mejor que el cristiano se abstuviera de hacer
contratos comerciales puesto que dichos contratos
requerían juramentos de los cuales los cristianos debían
abstenerse.
Mejor era mantenerse alejado de los cargos
administrativos a causa de la idolatría que ellos
implicaban.
16. Tres factores que perjudicaron a los
cristianos
Como si fuera a propósito para confirmar las peores
sospechas que el mundo romano abrigaba respecto a las
inclinaciones antisociales de los cristianos, a poco resultó más
y más evidente que éstos no deseaban tomar parte alguna en
el culto imperial.
17. Tres factores que perjudicaron a los cristianos
Al César se le debían honores, pero no adoración
(1P. 2.17; Ro. 13.7).
Por eso, no doblarían sus rodillas ni quemarían
incienso ante el emperador. ¿Cómo iban a poder
hacerlo? Pertenecían a otro divi filius; debían lealtad
a otro imperator; estaban firmemente relacionados
con Dios mediante otro pontifex maximus.
Tanto Cristo como César pretendían un dominio
mundial. Un cristiano no podía, coherentemente,
afirmar «César es Señor» si profesaba «Jesús es
Señor».
18. Objeciones intelectuales y culturales
al cristianismo
En el plano intelectual, el cristianismo sufrió la mayor
parte de las objeciones que el mundo antiguo había
esgrimido en contra del judaísmo, y todavía era posible
hacerle tres cargos adicionales.
1. En primer lugar, el cristianismo era nuevo y, casi por
definición, nada nuevo podía ser verdadero.
2. EL cristianismo era ridículo, puesto que proclamaba
que la sabiduría de Dios se había manifestado en la
cruz. 1 Cor. 1 y 2 Y Col. 1) encontramos a Pablo
afirmando que Jesús no es simplemente un individuo
sino la corporización, revelada en el tiempo, de la
eterna Sabiduría Cósmica.
19. Objeciones intelectuales y culturales al
cristianismo
3. La clase de muerte era una demostración de
servilismo, de debilidad, de inferioridad y de culpa.
Para el griego era todo eso y, además, locura.
No es de admirarse entonces que circulase la
patraña de que los cristianos adoraban una cabeza
de asno, o su propio miembro viril. Ninguno de estos
tipos de culto habría podido ser más obsceno y
repulsivo que la adoración de un delincuente convicto
y ejecutado recientemente en el más despreciable de
los cadalsos: la cruz.
Los cristianos eran despreciados por su inferioridad
cultural. Su apelación encontraba eco mayormente
en las clases incultas, iletradas.
20. Obstáculos éticos y sociales al cristianismo
Tácito, Suetonio, Marcial, Juvenal, Petronio y otros
escritores de aquel período muestran cuán bajo había caído
Roma desde los días en que había sido un pueblo de gente
virtuosa y rústica.
Abundan referencias, tanto a la alta sociedad como a la
comunidad de esclavos, en informes sobre prostitución,
adulterio, horno-sexualidad, infanticidio, preocupación
exclusiva por pan y circo», por combates de gladiadores y
luchas entre bestias feroces, por dinero y por dominio sobre
los demás, sin ningún reparo ni escrúpulos..
21. Obstáculos éticos y sociales al cristianismo
Los gremios eran sumamente populares en las clases
artesanales del mundo romano de la época. Había círculos
deportivos, sociales, funerarios y clubes compuestos por
hombres que pertenecían a un mismo oficio. Estos se
reunían generalmente en el templo del dios de su profesión y
allí disfrutaban de la camaradería, los festejos y los
entretenimientos. Sin embargo, esos lugares se convertían
con facilidad en centros de agitación política dado que no
estaban supervisados rigurosamente en lo que hacía a sus
asuntos internos. Los primeros cristianos tuvieron que correr
constantemente el riesgo de arresto por reunión ilícita.