PIAR v 015. 2024 Plan Individual de ajustes razonables
Trabajo definitivo diversidad (1)
1. INTRODUCCIÓN
¿QUÉ ES LA DIVERSIDAD?
Diversidad es un término que hace alusión a las características que encontramos en el aula
con nuestro alumnado. Una dificultad en el aprendizaje, la nacionalidad, la personalidad,
superdotación… indica una diversidad. Todos somos diferentes, no hay homogeneidad y por
lo tanto hay que valorar esta diferencia y conseguir que no sea una dificultad ni en la vida ni
en el aprendizaje.
¿QUÉ ES ATENCIÓN A LA DIVERSIDAD?
Es atender a la situación particular de nuestro centro en la que los alumnos/as forman parte
de él, tienen unas características y necesidades individuales a las que debemos dar su propia
respuesta significativa. Eso implica una mayor sensibilidad por parte del profesorado, una
adaptación del maestro/a al alumno/a.
La atención a la diversidad del alumnado ha sido uno de los propósitos que más claramente se
han reflejado en los planteamientos por los que se ha regido la política educativa de nuestro
país en los últimos años. Sin embargo, hoy en día, cuando hemos superado con creces una
década desde la entrada en vigor de la LOGSE, hemos caminado de puntillas por la aplicación
de la LOCE y estamos en pleno debate para la creación de un nuevo marco normativo global
para nuestro Sistema Educativo, lo cierto es que este asunto sigue teniendo lagunas
importantes.
TIPOS DE ATENCIÓN A LA DIVERSIDAD
- DIRECTA: Los que necesitan un apoyo individual a cargo del especialista.
- INDIRECTA: Reforzar algunos aspectos o conceptos concretos dentro del mismo grupo
o aula, adoptando una metodología que favorezca el aprendizaje. Este apoyo a nuestro
juicio puede ser a cargo del resto de docentes.
2. LA ESCUELA INCLUSIVA. UN PROYECTO GLOBAL PARA LA ATENCIÓN A LA
DIVERSIDAD DEL ALUMNADO
No todos los alumnos tienen las mismas características, capacidades y necesidades, por tanto
los sistemas educativos deben ser planificados y los programas aplicados de manera que
tengan en cuenta todos los intereses de cada uno de los alumnos.
Las personas que presentan una mayor dificultad también deben tener acceso a las escuelas
ordinarias y deben ser integrados en una pedagogía centrada en cada uno de ellos, capaz de
satisfacer sus necesidades.
2. Uno de los medios mas eficaces para combatir la actitud discriminatoria son las escuelas
inclusivas, donde se crea una comunidad de acogida y con las que se pretende construir una
sociedad integradora y proporcionar una educación efectiva para todos.
Para esto es necesario una transformación profunda del sistema educativo que plantee la
educación desde la perspectiva de la escuela inclusiva, para llegar a este cambio es
fundamental el compromiso del conjunto de instituciones políticas educativas.
La integración de los niños “diferentes” no es beneficioso solo para ellos, sino que mejora la
calidad educativa. Ya que estos alumnos integrados en el ámbito de la escuela común,
ocuparan un espacio social, establecerán vínculos basados en la satisfacción de sus
necesidades, crearan espacios de aprendizajes mutuos y podrán preparase mas eficazmente
para interactuar luego en el ámbito laboral.
Los niños a los que van dirigidas estos apoyos no tienen que ser discapacitados, esto se enfoca
a un grupo mas grande, a niños que por diversas razones tienen dificultades para aprender en
la escuela y frecuentemente la abandonan para dedicarse al mundo laboral.
Una de las variables claves a considerar para avanzar hacia ese objetivo es el currículo escolar,
que debe estar diseñado de manera que se pueda considerar adecuado para todos los niños
de una manera muy flexible.
Aunque no todos los niños presentan las mismas cualidades, la educación tiene el mismo fin
para todos ellos y lo que se necesita es apoyo para la atención a la diversidad, que va desde la
incorporación de profesionales, auxiliares, padres, capacitación, provisión de materiales, etc.
En la actualidad existen suficientes evidencias que muestran que las escuelas que asumen el
principio de la diversidad y por tanto, organizan los procesos de enseñanza aprendizaje
teniendo en cuenta la heterogeneidad del grupo reúnen una serie de condiciones hacia las
cuales es necesario avanzar progresivamente entre las que se destacan:
• La valoración de la diversidad como un elemento que enriquece el desarrollo personal
y social
• La existencia de un proyecto educativo de toda la escuela que contemple la atención a
la diversidad
• La implementación de un currículum susceptible de ser adaptado a las diferentes
capacidades, motivaciones, ritmos y estilos de aprendizaje de los alumnos
• La utilización de metodologías y estrategias de respuestas a la diversidad en el aula.
• La utilización de criterios y procedimientos flexibles de evaluación y promoción.
• La disponibilidad de servicios continuos de apoyo y asesoramiento orientados a la
globalidad de la escuela.
3. ROL DEL DOCENTE
El docente ya no se ve a si mismo como un guarida o transmisor del conocimientos, sino como
un organizador de oportunidades de aprendizaje. Los docentes se concentran menos en saber
todas las respuestas y más en “leer a sus alumnos”. Así se pueden crear modos de aprender
que captan la atención de los estudiantes y promueven su comprensivo. Organizar las clases
en función de una actividad y de una investigación es lo prioritario.
Los docentes son guías o tutores y confieren a los alumnos la responsabilidad pueden manejar
y les enseñar como utilizarla mejor.
Los docentes:
• Incrementa su capacidad de diagnosticar la aptitud del estudiante a través de una
variedad de medios.
• Leer e interpretar los indicios que da el aluno acerca de sus intereses y
preferencias en materia de aprendizaje.
• Crean una diversidad de formas en que los estudiantes puedan explorar e
internalizar ideas
• Presenta distintos canales a través de los cuales los alumnos expresen y amplíen
sus conocimientos.
La mejor practica toma en cuenta diversos tipos de estudiantes. Ningún procedimiento es el
mejor a menos que le sirva a cada uno de los estudiantes.
Los docentes para conducir una clase diferenciada casi siempre desarrollan las capacidades de:
• Organizar un currículo centrado en información, conocimientos y destrezas
esenciales.
• Observar y reflexionar sobre los alumnos y sobre el grupo
• Buscar muchas maneras de lograr un objetivo común
• Diagnosticar las necesidades del alumno y diseñar experiencias de aprendizaje
4. • Compartir la responsabilidad de la enseñanza y el aprendizaje con los alumnos.
• Mantenerse al tanto de la proximidad y el avance de los alumnos
• Crear una sensación de comunidad en el aula.
3. ALGUNAS ESTRATEGIAS ÚTILES PARA ATENDER A LA DIVERSIDAD DEL
ALUMNADO
ESTRATEGIAS A NIVEL DE CENTRO
1. Organización de un proyecto común de atención a la diversidad del alumnado.
La mejor estrategia que se puede tomar a nivel de centro es la elaboración de un proyecto
común en el que se clarifiquen objetivos y se determinen actuaciones concretas.
Para la organización de estos proyectos, se puede optar por varias posibilidades. La primera de
ellas sería la elaboración de un proyecto desde la propia escuela existen otras opciones que
permitirían a la escuela contar con apoyos y asesoramiento que ayuden al colectivo en el
diseño e implementación del plan el centro, puede constituir grupos de trabajo o, a un nivel
más amplio, podría decantarse por un Plan de Autoevaluación y Mejora.
2. Establecimiento de criterios claros dentro de la organización interna del centro.
Por este motivo, dentro de este establecimiento de criterios, hay algunas sugerencias que,
llevadas a la práctica, mejorarían la calidad de la atención a la diversidad del alumnado:
• Asignación de tutorías por criterios pedagógicos.
• Reducción de la ratio.
• Decisión razonada en relación a las áreas en las que el alumnado recibirá el apoyo.
3. Búsqueda del asesoramiento oportuno
Resulta obvio pensar que los docentes no tenemos conocimientos acerca de toda la casuística
que puede rodear a la diversidad del alumnado y, por ello, debemos acostumbrarnos a solicitar
5. asesoramiento a todos aquellos agentes que tengamos a nuestro alrededor. Podemos pedir
información acerca de un determinado tipo de alumnado al Equipo de Orientación Educativa,
al Centro del Profesorado, a Asociaciones, a profesorado universitario, a otros centros que
escolaricen a alumnos o alumnas de características similares... Las posibilidades son múltiples
y, en definitiva, todos estamos trabajando para la consecución de finalidades comunes, por lo
que, la colaboración, la cooperación y el intercambio supondrán un enriquecimiento mutuo
que repercutirá en una mejora.
4. Programas de diversificación curricular.
Esta estrategia argumenta que en la definición de las enseñanzas mínimas se fijaran las
condiciones en que puedan establecerse diversificaciones del currículo en los centros
ordinarios.
Así, los objetivos de la etapa se alcanzaran con una metodología específica, a través de
contenidos e incluso de áreas diferentes a las establecidas con carácter general.
Debe ser usada como último recurso, para que determinados alumnos que no encuentran
respuesta a sus necesidades educativas por la vía ordinaria completen el nivel.
Los programas de diversificación pueden realizarse gracias a que el currículo es definido como
abierto y flexible. Sin embargo, estos programas deben tener un carácter voluntario, porque
los alumnos deben sentirse libres aunque invitados a estas medidas singulares. Así, cuando un
alumno lo admite, la interpretación más clara es que desea y mantiene expectativas de
alcanzar el título correspondiente de la educación obligatoria o los objetivos finales del nivel
en el que se encuentra.
En la mayoría de los casos, lo que manifiestan estos alumnos son dificultades de aprendizaje
que afectan a la mayor parte de las áreas y, en algunos casos, presentan problemas de
desmotivación e inadaptación escolar, circunstancias estas que les apartan del ritmo normal
de clase.
Finalmente, algunas de las características generales que rigen el desarrollo de programas de
diversificación curricular podrían ser:
• Los programas estarán adaptados a las necesidades y características de cada alumno,
lo que implica una individualización del currículo.
• Los programas guardarán un equilibrio entre los contenidos, las capacidades y los
campos de conocimiento definidos para toda la etapa, con el criterio de
mantenimiento dentro del mismo marco de referencia que el currículo ordinario.
• Los aprendizajes que el alumno alcanza han de tener utilidad para la vida real o en la
construcción de nuevos conocimientos, es decir, se debe garantizar la funcionalidad
6. de los aprendizajes en el proceso de enseñanza, lo que implica un elevado grado de
significatividad de los mismos.
• El programa aporta un intenso seguimiento y apoyo tutorial.
Estos programas de diversificación pueden tener una duración de uno o dos años y son una
medida final en lo que de aplicación práctica tiene un adecuado proyecto de atención a la
diversidad.
ESTRATEGIAS A NIVEL DE AULA
1. Controlar la ubicación del alumno o la alumna en el aula.
Si tenemos en el aula a un alumno o alumna con n.e.e., debemos determinar su ubicación
siguiendo un criterio razonable que nos permita proporcionarle la mayor y mejor atención
posible. Un alumno o alumna con estas características no se beneficiaría de una ubicación al
final del aula, alejado del maestro o maestra. Por el contrario, lo que proponemos es que el
alumno o alumna con n.e.e. esté ubicado cerca de la mesa del docente, de manera que éste
pueda controlar el trabajo que está desarrollando el alumno y le resulte más fácil
proporcionarle ayuda, atraer su atención o, incluso, controlar su conducta.
Por otro lado, el uso de sistemas de tutoría entre iguales o de alumnos-puente permite, por un
lado, el desarrollo de actitudes de colaboración entre iguales y, por otra parte, hace que el
docente pueda ocuparse de manera más relajada del conjunto de la clase.
Estos sistemas 6 consisten, simplemente en colocar al alumno o alumna con n.e.e. al lado de
un compañero o compañera con el que empatice, de manera que este compañero pueda
resolverle dudas, asesorarle en el propósito de las tareas que se le mandan en clase...
2. Trabajo por grupos.
De manera ocasional, pero planificada, se pueden utilizar grupos cooperativos en las aulas. En
estos grupos el alumno o la alumna con n.e.e. se puede integrar llevando a cabo alguna tarea
que resulte adecuada a sus capacidades. Por ejemplo, si el grupo tiene que elaborar un mural,
este alumno puede encargarse de actividades tales como recortar imágenes o pegarlas... Su
contribución al desarrollo del trabajo sería vital para la finalización del producto. Por supuesto
no hay que subestimar la capacidad del alumno con n.e.e. y asignarle funciones adecuadas a su
nivel y su potencial.
3. Diversificación metodológica
7. El libro de texto es homogeneizador. Este tipo de metodología, habitual en la mayoría de los
centros, no se adapta a la diversidad de motivaciones, capacidades e intereses del alumnado
de un grupo, por lo que es necesario diversificar las propuestas metodológicas. No queremos
decir
con esto que haya que utilizar una metodología concreta para cada uno de los alumnos y
alumnas de una clase, sino que hay que aprovechar las situaciones de aula para plantear
propuestas de trabajo diversas: grupos cooperativos, aprendizaje por proyectos, trabajo
individual, búsquedas de información, actividades dinámicas, etc...
Cuando a los alumnos y alumnas se les plantea un trabajo de recopilación de información de
diversas fuentes y la ejecución de un producto final de presentación de resultados, el
aprendizaje mejora notablemente, ya que se producen aprendizajes verdaderamente
significativos. Pero, en el caso del alumnado con n.e.e., esta estrategia puede ser de gran
utilidad para fomentar su integración en el grupo clase, ya que, con las debidas orientaciones,
el alumno llegará a adquirir los aprendizajes que le permitan sus propios conocimientos
previos y sus capacidades personales, pero seguro que estará disfrutando de la realización del
mismo trabajo que sus compañeros y compañeras y se beneficiará de interacciones que no
tendría en otro tipo de situaciones de aprendizaje.
4. La colaboración entre el maestro/a de pedagogía terapéutica y el tutor/a.
Hablar de colaboración entre estos dos profesionales no viene más que a reforzar la idea que
venimos manteniendo a lo largo de todo el texto: la cultura colaborativa es un requisito
imprescindible para lograr una adecuada atención a la diversidad del alumnado en las aulas. Es
necesario que el maestro o maestra de PT y el tutor o tutora se reúnan periódicamente para
intercambiar ideas, dudas, preparar y adaptar materiales, etc... Por el contrario, no diremos
que resulta perjudicial, pero sí que no resulta demasiado beneficioso que ambos profesionales
desarrollen su labor de manera aislada sin que ninguno de ellos sepa qué hace el otro ni con
qué propósito lo hace.
5. Adaptaciones curriculares individualizadas
Éstas son entendidas como una estrategia para alcanzar la individualización.
Se trata de un proceso de toma de decisiones sobre la adaptación del currículo común, que
busca respuestas educativas para las necesidades del aprendizaje manifestadas por un alumno
concreto.
Se empleara esta estrategia cuando no se puedan atender debidamente las necesidades
educativas especiales de un alumno determinado.
Las adaptaciones pueden suponer la modificación de la temporalización o la priorización de
algún elemento del currículo.
Dependiendo de los elementos del currículo que se adapten, la adaptación curricular
individualizada (ACI) tendrá una escala de significatividad: ACI significativa y ACI no
significativa.
8. Las ACI no significativas serían las acciones esperables de todo el profesorado en el ejercicio
responsable de su acción tutorial y orientadora que se dirigen a la prevención y recuperación
de las dificultades “menores” del aprendizaje que puedan presentar ciertos alumnos.
Por otra parte, las ACI significativas pueden consistir en la eliminación de contenidos
esenciales o nucleares y/u objetivos que se consideran básicos en las diferentes áreas
curriculares, y la consiguiente modificación de los respectivos criterios de evaluación.
Por ello, se las considera medidas de carácter absolutamente excepcional.
Esta medida debe ser suficientemente justificada en atención a cada caso concreto, a partir de
análisis rigurosos, holísticos y ponderados del propio alumno, de su contexto educativo y de la
interacción entre ambos.
Para elaborar una ACI significativa, es necesario tener en cuenta los siguientes criterios:
• El referente a tener en cuenta debe ser el nivel curricular inmediatamente anterior, es
decir, la Programación de Aula, que pretende como fin último alcanzar los objetivos
generales del nivel común a todos los alumnos.
• Debe reflejarse en un documento escrito.
• La responsabilidad de su utilización responde al tutor del alumno en concreto, con el
debido asesoramiento de un Equipo de Orientación de la institución escolar,
indagados, por otro lado, los ámbitos de referencia del alumno: familia
principalmente.
• Hay que partir de una evaluación psicopedagógica del alumno y de su contexto escolar
y familiar.
• Cuando un alumno esta bajo la denominación de “alumno con necesidades educativas
especiales”, la evaluación del progreso del mismo se hará siempre en función de su
ACI, y así ha de reflejarse en su Expediente y en los oportunos Informes de Evaluación.
• Como el trabajo coordinado es fundamental en la aplicación a un alumno de una ACI,
esta intervención coordinada de los servicios educativos internos y externos al centro
se debe especificar en cada ACI.
CONCLUSIÓN
La atención a la diversidad del alumnado ha sido uno de los propósitos que más claramente se
han reflejado en los planteamientos por los que se ha regido la política educativa de nuestro
país en los últimos años. Como consecuencia de todos estos cambios y transformaciones,
surge el reto de atender a toda esta diversidad para prevenir, evitar o reducir en su caso el
fracaso escolar y todas las formas de exclusión social por marginación, inadaptación y
discriminación. Es aquí donde se hace explícita la conceptualización de la atención a la
9. diversidad como un reto que engloba a todo el alumnado y en el que resulta necesario e
imprescindible la puesta en marcha de un amplio conjunto de medidas que den respuesta a
esta realidad.
REFERENCIAS
• “La atención a la diversidad del alumnado en las aulas de educación infantil y primaria.
Principios de la escuela inclusiva y estrategias útiles para su puesta en práctica”
Manuel Vázquez Uceda. Centro del Profesorado de Alcalá de Guadaíra (Sevilla).
• “Estrategias para trabajar con la diversidad en el aula” por Carol Ann Tomlinson.
Editorial Paidós SAICF.
• “Educación inclusiva: enseñar y aprender entre la diversidad” Agustín Fernández.
Revista Digital Umbral 2000 – No. 13 – Septiembre 2003.
• “Pautas y estrategias para entender y atender la diversidad en el aula” José Manuel
Gómez Montes.
• “Cómo atender a la diversidad educativa” Amalia Moreno Guerrero.