1. NO TE OLVIDES QUE JESUS TE AMA COMO ERES Y POR LO QUE ERES!
Al llegar la casa de retiros en Machachi, lo primero que nos dejaron claro fue que los ejercicios
espirituales no son un paseo, una convivencia a un cursillo de teología, pero hicieron falta
significados cuando nos explicaron lo que eran éstos, ya que no creo que hayan palabras en el
diccionario aún, para describir lo que mi grupo de compañeros y yo pudimos vivir.
Es una oportunidad incomparable y hoy me parece mentira que
ya hayan transcurrido esos 3 días los cuales jamás volverán, pero
así mismo como está claro que no se repetirá esta experiencia
está claro también que dejaron una huella imborrable en
nuestros corazones y en nuestras vidas. Ésta vivencia no solo se
trata de orar y hacer silencio como muchos lo creíamos, ya que
no se base en un silencio de un sepulcro, sino que el silencio uno
mismo lo hace llegar como herramienta fundamental para hacer
un alto en su vida y encontrar a DIOS, echar un vistazo al pasado y
solo desde ahí poder proyectarse a un futuro que nos espera.
La Madre Dolorosa, San Ignacio de Loyola y Nuestro Padre DIOS por supuesto, irán de tu mano y te
apoyaran en ese camino por recorrer siempre y cuando tengas fe, muestres entrega y sacrificio y te
desconectes del mundo cotidiano que no te deje escuchar día a día su llamado para entrar en tu
corazón.
Hablo por todos cuando hoy doy infinitas gracias al COLEGIO por esta gran oportunidad brindada, a
nuestros padres por permitirnos vivirla, al Profesor León Pincay por acompañarnos y ayudarnos, al
Padre Servio Mocha por guiarnos de manera excelente, pero de manera muy especial a nosotros
mismos, a:
Kevin, Álvaro, Juan Carlos, Nawer, Johan, Winter, Renan, Ebert, Manolo, Francois, Neno, Pancho,
Lituma, Ponce, Emilio, Vega, Zavala, Jorge, Víctor, Gorozabel, Xavi, Peña y Oscar porque fueron
tantas cosas inolvidables, como los lentos discursos, una campana que nunca estaba donde debía
estar, la leche y sus consecuencias, una novia muy nombrada, alguien que hablaba muy pero muy
poco aún siendo sociales, un cortinero ineficiente, un gordito y sus comentarios, en fin muchachos,
sin Ustedes los ejercicios espirituales no fueran tal, es que una cosa es contarlo ahora y otra cosa
haberlo vivido antes, compartimos una misma casa en la cual así como abundaba comida y frio,
abundaba amistad y amor.
Solo espero que los sepamos valorar no como lo que fueron los Ejercicios Espirituales, sino como lo
que van a ser en nuestras vidas y lo que nos van a servir en ellas, siempre con DIOS, para no cometer
tantos errores ni pecados, para solo así ser mejores cristianos y mejores personas en esta sociedad
que nos está pidiendo a gritos.
Sin alargarles mas este discurso, con mucha alegría les digo que los ejercicios espirituales valen
mucho más de lo que cuestan.
Muchas Gracias..!!
Por: Montesdeoca Ormaza Oscar
ero
3 Bachillerato Químico ‐ Biológicas