Este documento explora temas como la individualidad, la soledad y la imaginación. Describe la vida en Nueva York y las personas que viven en la ciudad de forma apresurada y enfocada en el éxito. También habla sobre las relaciones imaginarias y la "Mujer Imaginaria" que reconforta a uno en su soledad.

1. 1
El Hombre Blanco
(prosa poética)
carabajo

2. 2
carabajo vive fuera del sistema
UNO
No quiero que se metan. No me digan nada. Lo que yo hago es cosa mía. No hace falta
que alguien opine sobre lo que hice. No tengo referentes que tengan la autoridad ni la
competencia para hacerlo. No sé si se dan cuenta de que estoy acá porque solamente
dependo de mí y de mi opinión sobre lo que soy y sobre lo que hago. La verdad es que
estoy tentado de ver qué será lo que otros harían si hicieran lo que yo hago. Cómo se
vería otro en mi lugar si fuera como yo. Me gustaría mirarles de fuera para no tener que
mirarme a mí. Lo que está hecho es lo que me gusta disfrutar pero solamente si está
hecho por mí. No quiero que nada ni nadie tenga que ver algo con lo que a mí me
importa. No se trata de independizarme sino de sacarme de encima la persignación de
que alguien me observe y tome una postura que es tan subjetiva pero que hace que uno
se sienta mas por algo que no tiene sentido porque es irrelevante para lo que uno es o lo
que va a hacer
No es que alguien nos obligue y nos mande. Es que nosotros abrimos el paraguas y nos
refugiamos en el éxodo de estar atentos para que no nos pase nada de algo que está
fuera y nos insita a sentir que está pasando algo y que nosotros estemos protegidos y
resguardados. Una intriga que se sube a nuestro techo y nos ve descubiertos o cubiertos
nos hace bajar la cabeza y hacernos fugitivos de la adversidad y todos están ahí
esperando por nosotros o contra nosotros metiéndose en ese momento en la
responsabilidad de que haya algo inexplicable que hay en la calle y en las noches que
como todos los días los lugares nocturnos fueran de día o de lluvia. En Buenos Aires de
noche siempre llueve entrando al auto y subiendo al colectivo con la alegría del poder
hacer una película en los oscuros momentos salvándonos o tomándonos lo que hay para
sin identificar a quiénes o qué es lo que hace que todo siga andando y se pueda encender
cada cosa que nos vea seguros de que se puede eso que quizá deje de andar y pueda
romperse. Nadie sabe de inconciencia si lo que nos salva de tener que encender una vela
o de tener que esperar a que al día siguiente y luego de dormir confiados a esa aventura
del sueño hasta mañana en la diferente manera de prepararse para que al empezar el día
lo que ayer era la noche y era indecisión hoy sea una rutina que nos ve actuar con una
seguridad inteligentes experimentados en lo que hacemos en la luz del sol.
Es lindo llegar a una ciudad tan grande como Nueva York de la que todo el mundo
habla. La fascinante relación con el mundo de los negocios y de la cultura no tiene
miedo ni remedios. En Nueva York hay mucho dinero. Y mucha vida nocturna, muchos
bares. Mucha gente que no duerme en la ciudad que no duerme...., pero los ejecutivos sí
duermen y Wall Street está atenta a la bola y a lo que hace que el mercado de valores
esté latente. Hablar inglés con todo el mundo en la cuidad a la que le cantó Sinatra es
muy fuerte. Se puede escuchar a la melodía de New York, New York en cada esquina.
Está en el corazón de la ciudad. Nueva York tiene corazón. Ninguna otra ciudad de
estados unidos tiene algo así. Es una candente fórmula de productos de la vibración que
hay al caminar por sus calles y entrar en los cafés de día y en los pubs de noche es un
ligar lo que hace que el mundo se mantenga erguido. Cuando se trata de matar a
Estados Unidos como país siempre hay alguien en un país anarquista que como si se lo
pidiese dios le canta a Nueva York . La mujer imaginaria. Ella estaba allí alentándome a
seguir. Ella creía que lo que yo le podía hacer era placentero. Se dejaba coger. Ponía
una ambientación en la que no había ningún tipo de demanda de amor o de sumisión.

3. 3
Quizá el amor está ahí. Eso era amor. El estar enamorado. Las entrega que no es la que
agobia. Nos enamorábamos en la cama. Una secuencia de lo cerca que es tener sexo del
amar. Que lo que nos une nos reivindica cuando al estar en esa situación en la que no
hay una maldad sino una complicidad el hombre y la mujer se notan el uno al otro y se
toman y se tienen. Es cuestión de que lo que nos agobia de tener que dar explicaciones
al preludio a la cama de un fauno. Una dedicatoria al amor que tiene mas que ver con la
focalización de que los dos están sujetos de tener que ver que su energía que los atrae.
Que algo se lleva al uno hacia el otro y que no se puede componer una relación que no
sea mas que eso. Una relación en la que nos formamos una opinión de que los que nos
dicen no nos interesa porque es el silencio lo que lleva todo hacia la causa de ese amor.
Una reversión que repercute en admitir que lo que hay en la energía es una adecuada
manera de estar tranquilos lo que se denota en el largo comienzo que nos ve entender
que hay amor en una cama que está acostada antes de que vemos a la persona. Un
defecto físico que no se ve porque lo que ocurre es que nos sentimos atrapados por algo
que nos dijo o por autenticidad que es una ausencia de no mirarnos en lo que hay
detalles que no son. No importa la belleza. O mejor dicho: la belleza está. Hay un
misterio que nos hace atraídos por el imán que tiene el poder en que se está metida en la
cabeza que nos puede pulir y llevar por lo que la sangre tiene de adosarse al caudal de lo
que lleva de corazón le furioso modo en que la calma nos va absorbiendo. Ella estaba
allí. Aquello que no ves. Una decencia con la que yo poder comunicarme en el místico
encanto de la noche que nos invita a ser parte de ello. Una recepción que nos hace
agasajar a la nube misma de ver y crearnos en la casualidad de tener que estar
capturados por el amor del sexo puro puesto sin la violencia del preámbulo. Sexo por
anticipado. Seco anexado. Sexo adosado. Sexo que está en la calentura de una cápsula
de la mente que nos llega en una bocanada de aire nocturno sin sensaciones físicas. Un
hecho que nos lleva y nos lo contiene la concentración de que estamos ahí sujetos y
atados para hacer el amor.
Estoy casado por el presente y el pasado. Hay cosas que remontan a lo que sucedió hoy
a partir de un breve tiempo y otras que me retraen a sujetarme a mi historicidad que
tiene la huella de lo que he hecho toda mi vida. El dejar quisiese arrastrar lo que hay que
trasladar desde el ayer en una faceta que nos hace esclavos de uno mismo. El llevarnos
por delante lo que hay de qué enigma es el futuro que se hace a partir de prescindir de
que llevamos como lastre y no lo tiramos a tiempo. El modo en que acusa uno a su
mujer de sangre es el que hace que lo que hay que uno no sabe ni recuerda nunca puede
saber mas que por que se lo contaron es ser que existió y que tuvo forma de cuerpo y
rezo en un ser que no era uno. Lo es que inventaba la naturalaza en eso llamado
crecimiento que se asocia con la evolución que no es para siendo nosotros sino que a lo
mejor sea mas que el animal que tenia instintos de dependencia que se arrojaba sobre el
deseo de ser atendido en abstracción de porqué lo que hay de demanda en un ser
indefenso y muy protegido. Una visión del mundo que escapa lo que saben lo que
sucede cuando somos producto de lo que hacemos por nuestra voluntad y decisión

4. 4
DOS
Estoy separando lo que hay entre vos y yo. Vos estás ahí y yo estoy aquí. Si vos te
metés con lo mío es una invasión porque nadie te invitó. No se trata de qué está en
donde lo que supo que hago bien por sentido de la suficiencia de que no haya nada que
intervenga ni se interponga entre la naturalidad con que lo disfruto y vos que venís a ser
uno impostor que se adjudica la debilidad de hacer un lugar en ese sistema en el que lo
que hay para echar es lo que yo no sé que se puede hacer si hay otro, como sería tu caso
si estuvieses. Esto que espía lo que esta blindado el que está mal, es la verdad que se
hace mas auténtica porque lo que vemos aligerar es que nadie pueda opinar sobre otro
con la intención de que lo que dice le favorezca en su manera de desplazar lo que a uno
le importa poco pero que en boca de otro tiene el peso de la interferencia que pone un
detenimiento a lo que tendría que ser natural y continuo para que no se haga algo
insuficiente pero el tener que esperar a ver que es lo que dice el otro.
No se puede hacer nada. No hay nada que hacer. Ya está todo hecho o desecho. La
impotencia nos ve solamente hacer lo que sabemos y lo que nos toca o nos tocó. Un
tener que arreglarnos con lo que tenemos y como podemos. Un dejar que lo que nos es
ajeno o no conocemos y que otros saben tenga que estar atendido por otros. No hay
nada que se pueda cambiar. Todo es como es. Los que quieren hacer algo distinto se dan
cuenta de que lo que se conoce es lo que hay. Que lo que no se puede entender es así.
Que los que están atentos solo lo están para que lo que está disponible y al alcance de
todos sea consumido. Sea usado. El gastar y aprovechar lo que hay antes que se acabe.
Cuando uno tiene una mujer la tiene y la consiguió. Parece difícil intentar empezar de
nuevo o conseguir que lo que ha costado esfuerzo tenga la facilidad de modificarse y
dejarse avanzar hacia otro lado. Las sólido de que es nuestra realidad como si una
prohibición o sino la conciencia de que ya estamos ahí. De que ya llegamos a un lugar a
partir de lo cual lo que hagamos nos ve llevarnos gente con nosotros. Esposa. Familia.
Hijos. Un error o lo que sea. Pero lo que se ha ido tomando es parte de lo que somos. Y
querer romper lo que hay es dejarlo sin vida. Es disolver lo que vincula que tenemos
algo con lo que podemos hacer. Es un no dejar que nos quiten lo que nos sirve. Lo que
es útil. Lo que se intenta interpretar porque hay un paso del tiempo y lo que antes
comenzaba y se lo consiguió hoy está yendo hacia un lugar que no sabemos cuál es. Es
que vamos hacia lo que no tenemos modo de conocer. Nos dejamos llevar con que las
valijas que son lo que hemos tomado en la pobreza de no poder juntar mas que eso y
nos son imprescindibles para que en el camino alguien nos ayude o nos diga por dónde
se puede ir. Hay una tolerancia que nos ve soportar lo infeliz de haber hecho tantas
cosas y no saber si se puede empezar algo nuevo. Y la vida termina o si hay suerte o una
nueva oportunidad de ser jóvenes en la energía que florece cuando nos interesamos en
lo que nos ocurre. Pero algo tiene que ocurrir. Y esperamos que eso ocurra.
En Nueva York uno se mueve en el subway. La gente hace todas las conexiones
necesarias bajo tierra y llega a los lugares mas escondidos de la ciudad. Hay una tierra
que se traga a la gente y la devuelve como si la indigestión de tener la inteligencia
necesitase que vuelva todo a la superficie. Me decía mi profesor de composición Phill,
egresado de Julliard School of Music, estadounidense que nació junto a la estatua de la
libertad, que la gente que llega a esta ciudad para hacer algo es la mas inteligente del
mundo. Los taxistas que son tan populares en Buenos Aires cuando se hable de lo que
los hace hablar con los que hacen viajes cortos y largos, acá en Nueva York son algo
religiosos. Hay un vidrio que divide a la cabina de delante de la del pasajero y un

5. 5
hombre que muchas veces lleva un turbante en la cabeza y solo pregunta adónde vas y
al llegar te cobra. Las chicas no son lo que hay en Buenos Aires,.... en Nueva York hay
mujeres. No hay chicas. No ves juventud en la ciudad de las luces. En la ciudad de los
musicales de la calle Broadway. Hay una especie de abandono de lo que es la
ingenuidad del adolescente. La gente está muy mentalizada a que es neoyorquina y
hasta los jóvenes nacen en esta ciudad pensando en llegar a algo, y como si su vida
estuviese programada por una escalera mecánica que los lleva a todos lados sin que
haya nada humano.
Lo que imaginamos, lo que nos va a tocar, es lo que hace falta que ocurra. Una soledad
en la que nos dejamos llevar por la astuta idea que nos abruma en la designación de una
persona que podemos imaginar o trasladar. Una adopción que consigue rebelar que hay
algo legítimo en una pesada dependencia que nos interroga y nos hace propuestas de las
que no sabemos nada pero que se van adelantando al momento de que hay algo o
alguien a quien le ofrecemos el corazón. Un suspiro que nos hace exhalar en la situación
que imaginamos porque no es una condena sino una cara del alivio que poder
anticiparnos a que nos confiemos de ser lo que somos. Nos observamos en la silueta de
una historia que contada y hay poco por decir en la improvisación de lo mágico que no
está tan precedido y simplemente ocurre. Una grata sensación. Una relación que calienta
el modo en que nítidamente se dibuja frecuente la percepción de que no estamos solos.
De que hay alguien a quien llevamos dentro. LA MUJER IMAGINARIA. Esa que se
puede adorar en una confianza que compensa la verdad de que estimula en lo que ocurre
y lo que le agregamos. Una tormenta suave con punto de partida y conocer la misma
esencia del aroma de lo que hay de atractivo en la presencia de una relación que
interpreta sin porqué. No hace falta tener que inventar nada. Nada que no haya sido
usado en la indolente necesidad de estar bien. La mujer imaginaria es la que nos
encontramos todos los días en la calle o en boliches. Es una proyección de una situación
que nos ve interesados en tomar lo que sabe ser y es convertido en lo lindo que eso tiene
de ser así y que nos envuelve en la transparencia del fin. Adaptación de lo que hay de
feliz en el hecho que nos toma por sorpresa pero que se ha definido en lo aspectos que
continúan en una inmejorable relatividad que hace que lo cierto sea veraz y que la
vertiginosa necesidad de esa mujer la haga menos imaginaria y mas probable. Hay una
conversación, un ping pong. Un te doy y me das. Un me decís y respondo. Un caricia
que sea lo que el otro de ella necesita y que va sucediendo en el momento en el que la
escasés de hechos reducen todo a esa fórmula del tiempo real y presente. Una
declinación que lo olvida que no se conoce a alguien que no hace falta conocer. Una
vorágine que se alimenta del poder dar ella lo que hay en la seducción de trepar la
integridad que se deja tomar y que abandona su defensa para que la noche haga el resto.
La inseguridad que está bien protegida por la vigilia de un esclavo que se puede quedar
al cuidado de una ocasión que ocurre y es el curso de la totalidad del hecho que se hace
así posible. No hay imposibles y todo es probable. La fuerza se deja arrastrar hasta la
fija forma de ceder ante lo que la dependencia del tener que dejar todo lo que nos indica
que puede tomarse de esa verdad que hace que nos envíen el ocaso al grabamos en la
memoria al ver el cambio hacia una apasionada escena en la que la mujer imaginaria
está frente a nosotros. Luego la recordaremos o la tendremos de la manera que sea.
Hay una educación que está escondida en el armario del cerebro que olvida lo que se
llama información. Libros de texto que he tenido que memorizar y dar lecciones
interminables para por fin que me digan que cumplí con una etapa. El adoctrinamiento
que mas que desarrollar una habilidad lleva a juntar un monto de proezas inteligentes
que se consumen una vez que se tiene la nota que testimonia que se ha estado al tanto de
lo que se decía y a lo que se leía. Una repercusión que nos pone en una jerarquía de ser

6. 6
seres educados. Una verdadera relación de conocimiento que se resuma en un montón
de datos que aunque sean pocos son los que se apoyan en que hubo mucho que dejaron
solo eso y es lo que nos ve sabiendo que la capital del mundo somos nosotros. En una
interrogada realidad que cree que hay que elegir lo que se está votando como proyecto
que parte de que estudiamos tantos años para entender que el aclimatamiento cómodo y
exagerado de hacer patria en una bodega de libros o los que se puede esta seguro de
verse intervenidos en lo que se sigue de la formación personal elaborándose a sí misma
y que es la misma de ese sujeto que se especializó en conducir una forma estudiada que
se llama democracia.
TRES
Acá me sumerjo en una necesidad de tenerme en lo que se fabrica puertas adentro sin
que haya nada que registrar el momento en que algo de lo que hago sale por voluntad
propia o por el restos de tener que sacarme de encima lo que me pesa del no poder
comunicarlo ni compartirlo. Lo que hace que el cansancio de estar ocupado en algo que
te hace usar la cabeza en la creatividad pero que te da paz y armonía es que hay alguien
a quien vos admitís porque no tiene nada que ver con lo que hacés y entonces estás ahí
como un agazapado y no como una determinación que juzga lo que podes hacer a partir
de que no se agrega ni quita de parte de lo otro. Esto hace la misma razón por la que
todos tienen para encerrarse y tener algo hermético que cuida que posiblemente lo que
tiene la intimidad de un trabajo que está cuidado en lo que se asume como propio y que
será visto por uno mismo cuando se de cuenta del esfuerzo y del trabajo que le costo
aquello que posiblemente nadie vea ni sepa jamás lo que pasó y para qué sirve
El de arriba. Sentimos que hemos perdido. Que todo se acabó. Que no se puede
conseguir otra cosa. Que lo que está es lo que siempre quisimos y que ahora no tiene
sentido. Que el egoísmo nos hace dividirnos en las personas. Que EL HOGAR es una
acumulación de objetos y de refugio de una cueva que hemos cerrado y que nos ve
semejantes a lo que nos ata y nos impide conseguir que podamos desatarnos o hacer
algo. Hemos aprendido porque lo que tenemos da presencia y nos quita la posibilidad de
salir a buscar algo. Que nos metemos ahí y el hombre y la mujer se tienen pero se están
sujetos a ese tenerse. Eso los captura y los inquieta pero porque no saben cómo tratarse
y en que poder tener que desarrollar lo que está encerrado. Una forma de concentración
que incluye lo que se hace en el hogar Eso aviva lo que sería diferente. Si no
estuviésemos a salvo saldríamos a buscarlo. Pero ese tener como estar en vez de no
tener nada seguro. Porque lo seguro lo tenemos que llevar con nosotros. Lo que nos

7. 7
hace usar la vida y desplegarla con alguien depende de dos personas que intentan
conseguir cosas juntas pero por separados se piensan como ajenas y comparan de la
asociación que los interroga al mirarse y decir ¿qué hacemos? Y no hay derechos ni
deberes que puedan contra el aburrimiento que el mundo tiene de monótono y que lo
que ocurre ya no interesa y que lo que entretiene es una especie de domesticarnos y
acostumbrarnos a que la vida va a ser siempre así sin nada que le de sentido o que
ponga un efecto que distraiga la atención a lo que no sea convencerse quietos. Porque lo
que está olvidado es de hacer eso del amor en lo que hay una relación de ficción que
hace detener lo que el ruido que a nos hace príncipes de la verdad que nos cansa y nos
ve sin poder hacer lo que queremos. Hemos perdido. No podemos ganar. Cómo hacer
para ganar. Para sentir poder, seguridad y un estimulo que tiene una meta y que nos
lanza hacia la posibilidad de decir hacia delante en busca de lo que todavía no tenemos.
Se apaga la luz. Hay silencio. No hay nada que decir ni que pensar. Todo está así. Como
está. Sin que se puede dejar de hacer lo que se hace todos los días. Con el tener que
conseguir lo que nos hace falta para vivir. Trabajar y ganar dinero. Usarlo pero sin que
el uso no vea mas que dándole eso alguien a cambio del algo que nos gustó o que no
produce un deseo uno olvida en deseo de irnos por un tiempo a otros lados. De cambiar
la rutina y de abdicar al trono que nos veía como reyes de una solidaridad en la que nos
hemos adosado a otra gente. Estamos pegados a los demás y conocemos lo que no
rinden en eso que es la familia que nos indica reposar en el amor. Y el amor es una
costumbre que nos ve abrazados en lo que tiende nuestro. Lo que otro que nos informa
que estamos a salvo y que nos incita a ser felices. El resultado de lo que buscamos y el
obtener una constante de que ya está y que nos hace rogar y encender el pertenecer.
En las veces que he estado en Nueva York llegué a darme cuenta que en esta ciudad las
mujeres prescinden de los hombres. Esto hace que haya mucho ser pensante. En cambio
en Buenos Aires la mujer es un aderezo que se le da a cada idea para que pueda tener
mejor sabor. Es un dulce que enternece con cuerpos sensuales que en verano tienen una
minifalda y una blusa sin mangas. Es una verdadera rareza que en Nueva York uno no
busca pareja. Lo que hay es un MEET MARKET que viene a ser una venta sexual que
exhibe a la gente un en Central Park con el perfil de nuestro Palermo que en espacios
verdes junta muchas personas que hacen deportes y que en verano se sienten desnudas y
están en una subasta con deseo pero sin piel. Porque la mujer no busca ser seducida.
Solamente hay una atracción que tiene que ver con afinidades....., no está la hembra. No
hay una feminidad. Lo que sí hay es una soledad inmensa porque todos se juntan a las
noches para lo que el ritual de ir a tomar tragos. Nueva York es invisible si uno no va
solo a la noche a tomar un trago. Si ellos y ellas no están tan espantados de ser tan
independientes los unos de los otros que se resignan a emborracharse o a dejarse decir
pavadas a partir de las cinco de la tarde que empieza una happy hour. En ese mismo
instante las mujeres se convierten en actrices de Hollywood y representan el trofeo que
hay en la noche que rescata a tantos seres que se confían de ser los que representen una
película en la que el ser abnegado o el ser marginal es visto como un faceta distintiva de
que se valora como lo que lo bohemio o el hombre se San Telmo de otra madera que se
junta a charlar con amigos en Buenos Aires café de por medio. Quizá lo que hay de
diferente es que en Nueva York no existen lo problemas. Lo que hay es un motel de
rosas para hacer esa inmensa modalidad que hace que todos vayan en procurarse de su
función de poetas y que la luz no se apague.
Tengo dos cosas siempre al lado mío que me hacen optar por una o la otra. Dos colores
o dos sabores o dos ideas o dos prendas de vestir. Dos vocaciones o dos religiones o dos
padres o dos herederos o dos amigos o dos con reposo o dos trabajos. Porqué DOS.
Porque en verdad lo que hay de elección en lo que nos ve divididos es la dualidad. Se

8. 8
está permanentemente estando con la necesidad de que los múltiplos se reduzcan a DOS
y que lo que nos abarca y no impregna de la verdadera decisión es una manera de
jugarse por una u otra cosa como el conocimiento que se tiende de mas y con el factor y
la presión que genera el vernos en la gran oportunidad de nuestra vida de carácter o
equivocarnos pero hacemos pasar por los elegidos para elegir. Bígamo. BÍGAMO. Dos
mujeres, dos, DOS todo es dos. Hombre y mujer DOS se es una especie de permanente
conmemoración que nos acerca y nos aleja para que lo que tomemos con lo mas
apropiado tenga un antes y un después, una procreación y una antesala de hechos que
van a redondearse en una confusa elección que a veces es tan difuso que no es mas que
portar por lados cosas al mismo tiempo simulando que queremos o tenemos una sola.
LAS DOS eso es la bigamia. Entonces hay en todas las elecciones una verdadera
indicación de que somos afortunados o desafortunados porque estamos siempre con un
pie en cada lado de lo que es el bien y el mal y que lo que hay de bueno en algo lo hay
de malo en lo otro y que nos estamos interpretando a través de dos puntos de vista
distintos, nos referimos como dos personas diferentes. No somos una sola persona,
somos ambos. SOMOS BIGAMOS
CUATRO
No hay una salida o una entrada para la isla. La isla está en tu cabeza y ni hay una
prohibición en que ves al otro para que no entre. Simplemente te cerrás y no dejas que
nada de lo que percibiría sea normalmente captado porque está totalmente hipnotizado y
atrapado por lo que hace que nadie puede entender que está allí sin verte ni entender lo
que hay fuera de vos porque no importa pareo porque honesta conectado con lo que
pasa. Hay alguien que quiere saber lo que está hecho pero no sabe que lo que él hace
tampoco él deja que otro se entere de qué es y cómo es o para qué lo hace. Entiende
todo deseo del respeto de no enterarnos de nada de lo que no haría ser usadores de lo
legítimo de poder valorar lo que tiene un valor que no depende de tu inhibición porque
cualquier cosa que digas puede ser usado en mi contra
En Nueva York creo que el feminismo de Estados Unidos se apoya en que las mujeres
desafían al hombre al demostrar que son alguien. No es como en Buenos Aires que
hasta los perdedores tienen sus chances. En esta ciudad lo que ocurre es que el que no
llega a lo alto, a the top of the hill, es visto desde arriba como un ser que no puede hacer
lo que todos quisieran y solo algunos consiguen. Hay mucha gente que trabaja en Nueva
York haciendo cosas simples y básicas para que los idolatrados que podrían ser
cualquiera que pasa caminado y que no hace falta estar peleándose contra ello tengan la
ciudad en orden, limpia y con todos los servicios al día para que los cerebros actúen con
el ideal del que debe ser la verdad al que todos al final disfrutan. Es como decía un
pensador inglés, Russell de que en Inglaterra los obreros no se quejaban porque los
intelectuales y los ricos tenían la voluntad y la capacidad para ponerlos a ellos por
encima de los que en un país que no era el suyo. Así es Nueva York. Los ideales y las
estrellas o la gente admirada es lo que tiene a una mentalidad de gente que pone su
granito de arena para que esta perfección se pueda dejar en marcha y los que quieren ser
parte del existir en ella se vean como el rezo para que la ciudad siga siendo lo que es.

9. 9
Oí decir que cuando estamos en pareja siempre vamos a llevar a nuestros ex para toda la
vida con nosotros. Eso es parte de la bigamia. Porque la ex no tiene nombre. Sí nos
acordamos cómo se llamaban y lo que tenían en particular, por la palabra ex forman la
bigamia con la otra realidad que es la actual. El ente son las ex. Lo actual es nuestra
pareja. Entonces estamos viendo si el pasado que juntamos en la colección de parejas,
de relaciones con las que fuimos creciendo y nos ven mirando hacia atrás, tiene o no
que ver con el iniciar lo que hay de fuerza propulsora independizada que se ha advertido
por ente abandonando lo que se tuvo que hacer para que en lo que sos o no hoy viera en
la teoría de la evolución un rasgo que no sabemos de que manera nos ha dejada la rosca
que se llama experiencia pero que en la notable realidad y entender que si seguimos
partiendo parece de que elegimos entre la ex y la actual. Ellas forman un núcleo un
todo. Una sola cosa SON EX. Lo actual es lo que se regresa al presente y ve que el usar
lo que ya ha sucedido como una excusa para explicar lo que mas no sea lo que nos
explica a través de nuestra pareja. Ella, la actual es lo que inventa una nueva realidad y
la hace sobrevivir porque el pasado es la muerte. Es regresar al verse en una misión que
vuelve los problemas y los fracasos y los triunfos que hoy ya no significan nada. Vuelve
al milagro de que salimos de sustituciones imposibles que ni siquiera queremos evocar o
recordar y mucho menos volver a vivir.
CINCO
Tengo todo lo que quiero y no quiero lo que no entraba. Estoy adentro todo el tiempo
pero no hay forma de que alguien rompa lo que protege a esta armazón que enjaula lo
que he capturada la esencia de lo que hago para que le formato que me hace entender
que estoy acá para algo puede significar lo que no se puede describir en los parámetros
de lo que no entre nunca porque no puedo y porque no lo dejo. Esto es un arbitrario
modo en que nadie puede ver lo que está pasando, nadie puede adivinar si lo que está
haciendo ese lastre que es un invento que espasmó el uso del que lo hace que tenga un
lado social. La blindada idea de que los pensamientos también tienen que ser protegidos
para que los que tienen el poder de la palabra y de la violencia a través de llamar lo que
dé nada al lujo de atravesar lo que le está cubierto de la misma manera que cubre lo que
se trata de preservar para que no ocurra nada malo
Hay mucho respeto en Nueva York. La gente se mira y se trata como si la dignidad de
vivir y hacer cosas en esta ciudad les vale lo que es un escenario de todos los cartones
que pueden poner los unos sobre los otros sin romper la coraza de un episodio de amor
entre la gente. Un amor irónico que levanta lo que hay de malo y le ensalzan los
musicales. La lucha con el imposible y con lo que se hace parte una posibilidad de la
misma calidad que la que ocurre en una oficina adonde todos están con el tarje que mas
que un disfraz es un elemento que conecta y lleva a que los que organizan y se hacen
que todo esté bien pueden verse en su diestra de funciones como elementos de lo juicio
y de la proclividad a que lo que hay entre todos sea el verse en un proyecto lo que los
lleva circular con la certeza de que cada unos hace su parte. Y de que lo que hace el que
esta debajo es tan respetado como que en Nueva York es un humillar a una persona el

10. 10
tenerle lástima. La palabra lástima pasa a ser un atentado contra los derechos humanos.
Nadie tiene lástima de nadie porque todos tienen el orgullo de poder poseerse como que
se entiende de que por algo están ahí y que vale la pena hacer tos con la mayor de la
conciencias y recalcando que lo que hay en el funcionamiento es una válvula que los
incluye a todos como le eje de una rueda que gira y gira para que el mundo se vea desde
arriba y desde abajo.
La palabra GAMA de BI GAMA es una posibilidad que se presenta solo en el presente.
El presente tiene GAMAS por eso que los hace importantes de que hay un traslado de lo
monótono hacia lo que se desarrolla en el amplio espectro de soluciones que se van
abarcando con la amplitud que nos da del presente. Eso se debe a que estamos
generando futuro y así si hay una diversidad que nos es BIGAMA. Es una relación que
rota y que nos ve como si todo fuese una ordenada reversión que rota alrededor de lo
que ya sabemos que esta ahí para que lo tomamos como la fuente de la sabia idea que
nos hace fingir que estamos atrapados por el pasado cuando en realidad somos una
propulsión de duda y de hechos posibles que algún día ocurrirán y que se están
generando a cada paso. El uso del verse en LA GAMA es una manera de entender que
los que están entre dos aspectos tienen una relación terrible con el pasaporte lindo o feo
no se desprenden de él por el temor a no verse representados por el futuro. Se escapan
de lo que hay en el hoy porque asegura lo que ya está hecho. Hay una perdida que se va
generando para ellos cundo nos miran lo que era DUALIDAD ven a la GAMA como
una recurrente irresponsabilidad de no dejarse llevar por lo aprendido que se está
depositado en un hecho que ya ni siquiera se detiene en el acto de hacer. Una verdadera
forma en que se regresa al caos para que lo que hay de posibilidad de no ser concientes
de lo que hay debajo de lo que somos o mejor dichos bajos el ser que alguna vez fuimos
,es lo que emerge comuna vibración que se mantiene a la expectativa de ser y serse de
en lo que clausura al que es una claustrofóbica verdad que encierra para que el techo no
se caiga si es que el techo tiene una familia y un formación que inventa e tener que ser
el lugar al que se cuida por miedo o locura o por sacarse de encima el tener que seguir
haciendo cuando ya se hizo tanto

11. 11
SEIS
Hay una capacidad que habla de lo que no se necesita que le vengan a decir lo que ha
hecho. Cada uno sabe si lo que hace es bueno o malo. Quizá en el avance hasta el
desarrollo del porqué tenga que hubo muchos choques y golpes que enseñaron para que
en este momento ya después de todo que ya nadie siquiera va a salir mal parado ni
lastimado por la maldad. El que se pierde entre de que hay cosas que están bien hechas
trate usar su odio porque tiene una fuerza que está apoyada en que desprecia al que se
luce o lo que es admirado. Entonces lo que hace de balance en el peso de lo que importa
hace que cada uno pueda sostener que se quiera a sí mismo que sabe que alguna vez
hubo hechos que justificaran que lo que está ya terminado tiene el aval de lo que pueda
adelantarse a lo que está mejor como una finalidad que acerca lo que asegura que sin
que los que se quieren aprovechar de que no tuvieron nada importante que hacer ni decir
puedan aferrarse al desprecio para que eso que trabajaron en lo que hacen con todo lo
que hace al desarrollo de la habilidad y de la inteligencia también pueda con la misma
Inteligencia evadir y esquivar los golpes del que está de controlado y no sabe como
hacer para penetrar lo que hábilmente esquiva con la definición de lo que se dice en
pocas palabra para que le otro quede mudo
Yo me ha dado cuenta de que el existencialismo en Nueva York les priva de la
debilidad del hombre (y de la mujer) lo que hace que la gente se pregunte si en el
sentido de lo que ocurre es lo que los pone como testigos y víctimas de ese flagelo que
es que el verdadero modo de disimular que no se necesitan los hace exacerbar la
búsqueda del imposible para que nadie llegue a tener una verdadera pareja. Hay
multitud de personas que están viendo el sueño americano en una ciudad que lo congela
entre la beneficio del espectáculo que pone estar de cartón que no tiene mas que la
imaginación de elevarse por encima de lo posible pero solo en las apariencias. Es como
una tercer persona en donde dice todo lo que es o sabe hacer pero después de entregar
uno no se instala ya que es parte de un trámite de ostentación. Lo que hace que la gente
neoyorquina tenga que ser existencial es lo que los pone en el combate por el que luego
se pierde un temor sin sentido. Si al que hay que ensalzar es lo que hay de misterio en lo
sencillo o si por el contrario seguir como ellos metiendo en los complejos de
inferioridad de gente que trata de preguntarse cosas tan tontas solo para autoflagelarse y
conocerse al ser mirados como interesante y nada mas Un momento de seres que
quieren enajenarse y ser parte de una probeta de almas que en cautiverio de olvidan de
sus cuerpos
Borrar. Borrar es sacar lo que hay y quedarse con lo último. O borrar lo actual y meterse
en el ayer. Borrar es verse como la autoridad que se interviene a sí misma y no se hace
cargo de hacer desaparecer lo que hay en uno que no es lo que va a usar. Lo que se
borra es lo que se saca para que no haya que tenerlo a la vista. Tirar algo es borrar.
Cambiar es borrar. Sacarse problemas es borrar. Eliminar todo lo que materialmente o
humanamente se puede dejar de tener cerca es lo que nos hace decidir que tal o cual
persona ya no tiene que estar más. Eso es un procedimiento. Es lento. Las separaciones
humanas que incluyen parejas, amigos y familiares son cada vez más lentas. El verse en
la cercanía frente a tanto tiempo hace que funcione una amortiguada forma de evitar que
la ruptura sea violenta y que lo que se va perdiendo de vista sea lo que ya apenas si
servía y a cada vez se alejaba más. Que lo que nos incluye y no se define de no ser más
que lo que está todos los días cerca nutre. Lo que nos incluye como una relación que se
inserta en lo que hay del arte no tener que volver a recuperar lo que no se recupera. Lo

12. 12
que se ve como el espejo de lo que fuimos. Esos hecho y personas y que nos ven y no
nos dicen mas que el recodar como éramos cuando los tenemos cerca. El repertorio de
la realidades que se fueran marcando al lado de grupos y lugares que vivimos y
tomamos y nos vieron obligadamente incorporados a ellos.
Hay una cosa que habla bien de Nueva York y no muy bien de Buenos Aires: en Nueva
York a pesar de la enorme diferencia de razas creencias y procedencias hay una unidad
en lo que se refiere a la identidad. El que es neoyorkino juega por el mismo lado y están
todos en procura de amar y defender esa cualidad de vivir en ese modo y para ese
objetivo. En cambio el porteño se hace mala sangre porque no se puede poner de
acuerdo y todo es un debate. Hay una higiene del que se haga algo pero un terrible
modo de agresividad que se levanta cuando los contenidos del día se dan a la nulidad
de establecer una lucha de clases y de fuerza apoyada en el poder que en Nueva York no
se da. El milagro que hace que la gente se siente parte en Nueva York está en que hay
mucha amabilidad y no es fingida. Hay un portador por lo que parece ser algo más que
el centro del mundo. Y es que se deberá dar al centro del mundo lo que necesita de un
enorme modo de estar de acuerdo en cómo ser los que lideran. Y para liderar se tiene
que ser pacifico y armando una genuina versión de gente con ambición Tal el caso de
Buenos Aires.
SIETE
Oro:
Estabas ahí indefensa y te diste cuenta de todo lo vulnerable que era ser mujer. Querías
que alguien te diere fe y solo conseguías angustia. Te permitías ser feliz y al final solo
disponías de una vagina. Un dolor profundo, inmenso, está en lo que te hicieron. Una
herida que seguirá ahí porque el terrible momento en el que la vida significa poco te
llegó una vez y no supiste qué hacer porque no lo podías creer. Quedaste paralizada y
no hay nada que evite que el recuerdo que llega bajo la forma de desdicha y pesimismo
que se adentra en todo lo que se parece a lo lindo de la vida esté empañado por la
desazón de que nada es cierto y todo es solo una sensación en la que termina rápido y lo
que te gustaría que siguiese eternamente. Esta casi tirada porque nada de lo que importa
y tiene ya significado. La impaciencia de otras épocas pasó a ser solo el paso del tiempo
y el ver que todo transcurre sin que la verdad en la que siempre te sumergiste tenga
ahora un sentido. Hay una locura que te hace creer de vez en cuando y que borra lo que
te ve caer en los momentos en que nada significa futuro. La peligrosidad del mañana es
una tempestad que arroja la lava de un elevado número de muertos en tu vida que nunca
cumplieron con lo prometido antes de irse. Un pálido adiós a las cosas cotidianas te

13. 13
hace sumergirte en los sueños que arrojan una esperanza en la que se eleva cada nuevo
día que nace a la posibilidad de que esto cambie. El pánico que a veces te ve destrozada
al borde de la desesperación puede abrir la puerta de la salida de emergencia de una vida
que se pone al servicio de lo que hace sonar la alarma de que en todo haya algo nuevo
que pide mejorar de a poco si se pone la voluntad en la realización que tiene el deseo de
algo. Ser una mente marginal que eleva lo que le importa puede ser la causa de lo que
ata un cuerpo que necesita ser cuidado para que algo de la energía de lo que nos hace
importantes en el mundo nos incluya. Una mirada que no se anima a levantar su orgullo
pide entre las miles de preguntas que se convierten en decepción si no se recibe la
ayuda de lo que está por sobre todos y que no da dioses en personas sino símbolos de lo
que es necesario.

14. 14
La mujer y la catástrofe. Es realmente notable el vínculo que existe entre la femenina
versión de la vida y la masculina. Entre tantas cosas se ve que la mujer ha desarrollado
el desafío por ser la que emula el instinto de la catástrofe y llevar la letra y la sangre
de lo terrible y lo fatal. No es preciso andar visualizando los porques porque serán
siempre un verdadero misterio de la naturaleza de la mujer que se pasa la vida en lo
terrible de la existencia de un ser mortal que lucha sin resultados por combatir su
mortalidad. Sería acaso segregar a la mujer el darle fatalismos que son mera
especulación de cientos de casos y experiencias en que la advertencia femenina frente a
lo fatal es permanente y que en general lo fatal no ocurre salvo cuando entre las miles
de antesalas de los hechos, le embocan a uno y aducen o dicen que ellas ya lo sabían.
El juego existencial de la idea fatal es el predilecto de la mujer y lo juega con prolija
malicia para romper con les esquemas cautivantes de hombres que se dedican a lo que
abarca a terrenos mas sensibles a la verdad de lo probable tanto científicamente como
en aras de lógica de caracteres de sentido común. Este sentido es un vacío de la mujer
que solo tiene la idea de que el mundo se va a desintegrar quizás por la picadura de
una araña o el desvarío de una cucaracha. Todo lo trágico es fértil en el instinto de una
cosa natural de la que no pueden escapar y a la que son prisioneras. Sería jugar con
fuego el ver que no es así porque ese es el rol que cumplen en la vida y si es que acaso
ven el lado bueno de muchas cosas se resisten a no ser las que anuncian el desastre.
No será casualidad que el fin del mundo cuando ocurra sea una predicción de alguna
mujer que lejos de estar iluminada se esconda en su cascaron de vigilancia de que
ningún orden establecido por el hombre resista de su cuestionamiento aunque la cosa
no se derrame en sangre necesariamente. Sería poco prudente estar pendientes de cada
atisbo de cosa terminal que anuncie una mujer pero tampoco sería un acierto el decir
que el lado trágico de la existencia no le debe la mortalidad y la inmortalidad siendo
que el lado femenino es el que se resiste a lo inmortal por cautela frente a lo que es
escrupulosamente elaborado por el hombre de ciencia y por el aventurero de las ideas.
Sigamos el pie de la letra con los hechos demostrables pero no nos asustemos de si
alguna vez hay algunas de la millones de cosas que anuncian las mujeres que terminan
por cumplirse. Quizás sea la efímera justicia que le pone la naturaleza a un duelo polar
que trata de ser equivalente a una lucha de esperma y óvulos desparramados por el uso
y sin fecundarse del todo. La gravedad es la personalidad detrás de los hechos y lo que
les da atributos femeninos y certezas masculinas. No divaguemos con que se derramen
al costado de la intención de ver que no todo lo que se anuncia en el fin del mundo es
apocalíptico y que el resumen de la historia de la humanidad como las guerras y los
imperios han sido estúpidas predicciones de mujeres que en el anonimato juntaban
yuyos y arañas para que el hecho finalmente les diera la razón. Degustemos al cosmos
en tanto que la masculinidad de un hemisferio cerebral que funciona y un hemisferio
cerebral que contradice por el simple animo de contradecir. El juego del gato y el
ratón es la integración de la fauna que se concentra en la estupefacta mirada del
hombre frente a una idiocia en la mujer stándart y frente al grado celoso de las
palabras del recuerdo demasiado preanunciadas para que ocurra lo que dicen. La
disfunción de la maternidad es la que pone fin a la aterradora manera de querer
destruir todo que se arrincona en el vientre materno y que da a luz para aniquilar el
ego del hombre. No hay verdades masculinas y femeninas: la verdad es algo que se
hace y se deshace, pero la mujer no quiere verdades: mas bien trata de hacerlas
papilla. El puré que le preparan a sus crías tiene que ver con su instinto de desintegrar
la materia y de atentar contra las formas originales. El sentido de orientación es el
norte de la irrealidad de un resentimiento por un protagonismo demasiado paralelo
para conformarlas. El planeta de los simios es un precedente para asegurar que si

15. 15
fuéramos monos y no pensáramos tanto, las mujeres llevarían las de ganar. Sigamos la
senda de el cadalso de ser los que tienen en sus manos el destino mas optimista de la
humanidad. El labrador que se esfuerza en el campo deja que la mujer se embarace
para que no le cause problemas en las cosechas. La religión es una manera de la mujer
de ser partícipe de la sensación de que lo trágico y el misticismo son cosas
equivalentes. Hay algo que llama al atención y es que cuando se habla de alcohólicos y
de drogadictos pocas veces se hace alusión a mujeres. Quizás no las haya en ese
terreno, lo que no me extrañaría porque el alcohol y la droga son los estimulantes
inteligentes que hacen de paragolpes para que la mujer no avance en su afán de
terminátor. Pensar es una ocasión que de la lucidez pasa al acto y no es frecuente que
el acto sea la infraestructura de un relato femenino de vanguardia. Hay algo que habla
quizás en favor de ellas: ellas matan insectos y nosotros seres humanos. Corrección:
ellas matan seres humanos a través nuestro cuando actúan en la naturaleza de su
comando de ese ejercito que es el genero femenino en su esencia de obrar con una
misión que hacen cumplir en los objetivos de la mujer obligando la hombre directa o
indirectamente en procura de los ideales de la reproducción y del tener alimento cueste
lo que cueste y si es posible holgados bienes materiales y riquezas que hacen creer al
hombre que son su propia búsqueda. Pero aun así el insecto puede tener una fisonomía
humana y el humano alguna raíz de exégesis de insecto, siempre atendiendo a ambas
formas desequilibradas de ver la misma cosa en distintos seres vivientes y con
diferentes microscopios. Algo es cierto e inexplicable: el hombre en su deseo de
conquistar dará poemas a la mujer y la mujer en su deseo de anarquía denigrará al
hombre en tanto que tenga alguna cucaracha que pisar. O una creación de la cual
aducir que no funciona, más allá de que la que seguramente la dejó sin funcionar fue
ella. El hombre busca en el universo: la mujer pone insecticida.

16. 16
Capítulo II
caabajo es el hombre
blanco
¨El hombre blanco ¨ existe ¨ le decía carabajo a Bonifacio....... ¡y tiene su
Ninfa¨!
Luz era morocha. Era humilde. Pobre. Tenía el pelo teñido de rubio. Eso la hacía
atractiva. Un semáforo verde para los hombres. O rojo para las pasiones. O amarillo
para las precauciones. El hombre blanco la cautivaba. Seguramente era culto. Educado.
Fino. Elegante. Caballero. El hombre blanco era el hombre de ciudad de clase media
que se aventuraba a buscar chicas que tuvieran esa ingenuidad. Esa ilusión. Esa

17. 17
búsqueda de una virtud de él que para las mujeres blancas pasaba hasta desapercibida.
Ella era luz. Una lucecita. Un cúmulo de ternura lleno de sueños. Un deseo de ver al
hombre de las películas en sus brazos. Besarlo. Dejarse tener por él. Verse admirada en
su belleza de chica joven y algo tímida pero llena de desenfado forzado por las ganas de
ir mas allá de lo que le había tocado. Luz no era morocha: era más rubia que la más
rubia. Era la atracción que no disimulaba tener y experimentar por el hombre blanco.
Era el poder salir de sus ciudades oscuras y ver la luz. El poder traspasar el límite de la
pobreza y dejarse amar por lo lindo. Por el hombre en serio. Por ese tango hecho
virilidad y paciencia. Por la madurez y las buenas maneras. Por la caballerosidad y el
buen trato. Por la ausencia de brutalidad a la que estaba acostumbrada. El hombre
blanco. Ella era mucho mas de lo que había sido enseñada cuando su semáforo se
encendía para él.
Luz trataba de disimular su torpeza y su falta de educación. Su feminidad salía entera
cuando se encendía ante él. Lo dejaba hablar. Lo dejaba hacer cada detalle del
preámbulo al acercamiento. Lo dejaba ser hombre. Hombre blanco. Luz sabía que el
objetivo de él era ella. Y eso la halagaba. Esperaba la poesía de él en sus oídos. Quería
los posibles motivos por los cuales ella era mucho para él. Escucharlo y alentarlo a que
no. Que no era imposible. A que se podía soñar. Y que la primera esperada noche de
amor podía ser un cuento de hadas. Ella era la luz de la historia. Ella era el porqué del
argumento. Ella entregada a los brazos fuertes de un mundo que estaba más
desarrollado que lo que le obligaban a aceptar. Luz llena de carencias pero con la
inteligencia que espera lo que sabe que existe. El hombre blanco. Blanca la ciudad.
Blanca la imagen de sí misma. Blanca la alfombra de la tierra al cielo. Blanca la
oportunidad de ser feliz.
Bernardo sabía que él era el hombre blanco. Lo era para Luz. Era muy difícil pararse en
su lugar. Algunas mujeres blancas lo verían deslizarse ¨ con una negra ¨. Algunas
mujeres blancas no evitarían despreciar la situación. Para la gravedad solemne que se da
a las verdaderas conquistas pasaría como un perdedor. Pero muchos hombres querrían
estar en su lugar. Se preguntarían si ser un hombre blanco no era mejor que ser
simplemente hombre. Uno de tantos conformes o no con su realidad. Conformes.
Civilizados entre civilizadas. Todos del mismo color. Ellos y ellas. Posiblemente el
hombre blanco también los envidiaría en algún aspecto. Envidias de ambos lados.
Suposiciones. Ponerse uno en el lugar del otro. ¿Cómo sería ser hombre blanco?, por un
lado la pregunta. ¿Cómo sería no tener color?, la pregunta del otro lado.
Hay situaciones intermedias en apariencia de morochos él y ella que se acercan para
servir y atender a los blancos con cierta complicidad que se manifiesta en la confianza
forzada o forzosa en el romper la distancia gracias a ello. Una forma solapada de evitar
que quede un aire de racismo o de desprecio por el tipo y la mujer que no tienen la
misma educación y procedencia. Hablar de fútbol o de cosas vinculadas al trabajo que a
ambos interesa pero que sirve a los blancos, y a los morochos les da un sueldo y una
mejor casta por la cercanía. Porteros, hombres de seguridad, servicios para gente de
vacaciones en lugares de cierto nivel, etc.

18. 18
Luz no quiere morochos. Ella quiere al hombre blanco.
Candela. Candela es como una vela. Como un candelabro. No es una luz firme. No es
Luz. Candela está a mitad de camino. No se tiene fe para dejar al morocho y coquetea
con el hombre blanco.
Luz desprecia a los hombres que no la notan porque son asexuados. Hombres que no
miran mucho a las mujeres y tratan de pasarla bien por su situación de privilegio social.
Económico. Clase alta. No son hombres blancos. Son hombres que no notan ni siquiera
a las mujeres blancas. Las ven como parte de el orden establecido y que tiene que ser
así. No hay mayores atractivos en ellas sino responder a ello. Son gente gris. Ninguna
mujer se destaca al lado de ellos. Luz jamás podría verse blanca sin la mirada del
hombre blanco que ellos no tienen.
Bernardo tiene un cargo en la municipalidad de San Isidro y más de cuarenta años. Luz
es de La Cava y tiene más de 17. Hay algo en común en el cabello de ambos. El de ella
es teñido y el de él también......por la canas....por la vida vivida. Por lo que ella no sabe
que él sabe. Por la experiencia de haber votado varias veces y haber vivido la
frustración y la alegría de lo que al proceder de distintos matices políticos y sociales y
también culturales. Por varias parejas fracasadas o exitosas. Por el conocimiento del
mundo y el porqué lo que hay en él. Por haber transitado la inseguridad del hombre que
evoluciona. Por viajes y cambios de planes permanentes a lo largo de espacios de cinco
años dividido así él en partes iguales durante más de veinte de decisiones. Dividido.
Muy dividido él. Como si lo tuvieran que tomar de un par de esos cuatro o cinco
pedazos de lustros que lo hicieron descartar otros tantos lustros en los que sintió que no
vivió y que lo hizo permanecer joven. Un hombre blanco. Una persona equivocada por
equivocación. Un error común y convencional que de tan esperable es perdonable. Un
pedido de devolución al pasado y el presente. Luz es el presente. Lo único concreto en
su paquete de niña envuelta en fragancias de mujer incipiente. Luz lo hace más blanco
con su luz. Los que los ven por la calle enceguecen de tanto brillo. Un spot de
quinientos voltios exalta y rescata la escena en medio de lo normal. Todo lo que hay que
ver y hacer sucede alrededor de ellos como si ellos no tuvieran que ver con ello. Los
ventanales de los pisos altos de la lujosa municipalidad dan a La Cava. Muchos
hombres de pelo teñido como Bernardo están mirando hacia las cabezas rubias de
mujeres teñidas como Luz. Las cabezas tienen que ver con el tiempo y con la rebeldía.
Con lo inevitable y lo posible. Con la sombra y la luz. Con la madurez y la ingenuidad
genuinamente atemporal. La luz es virgen para el techo de una historia. El deseo de
empezar de nuevo siempre golpea la inexperiencia que nunca pudo empezar a ser. Una
eternidad incipiente que se dispara al infinito choca con los hechos de muchas cosas

19. 19
vividas. Lo problemas de ambos se fusionan en una realidad sociocultural políticamente
sectaria. El hombre blanco conquista la selva impenetrable de La Cava.
Candela limpia en lo de el Sr. Bonifacio. El es poeta. ¨ ¡Haayyy!, le dice, ¡a mí me
encanta acomodar los libros!. Se baja la pollera y no tiene bombacha. ¿Qué le parece
señor Boni?! ¿No tiene fantasías conmigo? El aprieta fuertemente sus labios carnosos y
baja hasta la concha para empezar a chupársela con la desesperación del caso. ¿No
quiere que le haga un petito?, dice ella con dulzura premeditada. Un hermoso y dulce
estado de caos los lleva a la cama.
Candela le había dicho que tiene marido. Pero al rato ya lo llamaba su ¨ concubino ¨. Un
morocho.
Bonifacio conoce al hombre blanco. El lo ha sido.
En ese momento en otro lugar de San Isidro Luz se pone ¨ en 4 ¨: ¡Bernardo!......
¡¡hágame lo que quiera!!
Abrazados en la noche de la plaza, Bernardo encendía la luz.
Bernardooooo!
¿Qué Luz?
¿Porqué hay guerras?
Porque la gente se pelea por cosas. Así como vos te peleas a veces con alguien por algo
los países se pelean por otras cosas.
¡Pero los países no soooon personas!
Igual. Algunos quieren lo que otros tienen.
El romanticismo es parte de la vida el hombre blanco. El a veces siente que la novedad
de ser feliz lo nockéa. Que está enamorado. Que no es conciente de que el amor lo lleva
por el cauce de una oportunidad diferente. Luz es esa oportunidad. Candela en cambio
juega pero no sabe lo que quiere. Porque no sabe lo que puede. Bonifacio sí.
Bernardo no habla de fútbol, de mujeres o de política con amigos. Está enceguecido. Ve
demasiado. Ya todo en su vida es verdad. Candela con el señor Bonifacio es maternal.
Y si bien lo trata de usted le dice lo que hay que hacer en la casa. Lo lleva a la locura. A
la linda locura.
La imagen del hombre en el espejo es la realidad. Es la conciencia de que todo lo que ve
es y existe. De que las fantasías son solo eso. Quizá la mujer es un estado de
inconciencia. Una ruptura con lo que se conoce. Un juego inexplicable y erótico. Un
permiso extraño. La cárcel de las pasiones. Un punteo de guitarra muy estirado y
placentero. Acordes en un piano que se desarma en la expresión de lo incontrolable.
En la plaza Bernardo escucha otra pregunta sobre la que arroja luz.
¿Qué, Luz?.

20. 20
¿Porqué la gente no sabe qué hacer con su vida?
Porque la vida no es una cosa que vos llevas o traes. Es una tarea que a veces no tiene
respuesta.
Los fuegos artificiales de un año nuevo parecen disparar del centro de San Isidro al
barrio más pobre y viceversa para luego besarse.
Una mirada violenta le quita la niñez a Luz cuando vuelve mas tarde a su casa en La
Cava. Ahí las preguntas que se formulan solo tienen una respuesta. Una única realidad.
El hombre blanco está del otro lado y ella puede permanecer pensando en él para salir
de eso. Bernardo como respuesta es un puente de salida. Un ver el mismo cielo. Las
mismas estrellas. El silencio y la soledad pero con la espera puesta en el próximo
encuentro.
...................................................................o................................................................
Un día estaban haciendo planes.
Bernardo no se dio cuenta y empezó a hablarle a Luz como si fuera una mujer blanca.
Todo su idealismo salió de golpe. Le hablaba pero se hablaba a sí mimo. Dudaba si
seguir o no. La revolución era una cosa de blancos y Luz lo que tenía era a él.
Mirá, Luz, empezó, yo siempre digo que no quiero acostumbrarme.
No quiero acostumbrarme a mirar cosas imposibles a las que llaman grandes cosas. A
mirar hacia las alturas. A dejar que mi sentido del éxito esté lleno de bienes que me
permiten hablar de tener mas bienes. A creer que lo que es una changa que mide unos
pesos no es una carrera liberal que tiene oficinas de despotismo contra la vida común tal
cual es. No quiero creer que estoy destinado a adversidades que comienzan por el modo
de poder hablar de ello porque soy adverso por mi realidad y mis costumbres. Porque
me han enseñado a acostumbrarme a que el cielo es una cosa especial que elige a los
que quieren más cielo y que provoca tormentas para uno y para los otros. No quiero
acostumbrarme el peso de tener que mantener a un hogar desmesurado con gastos
desmesurados de un mundo desmesurado que se construye desmesuradamente. A no
tener amigos sino enemigos que quieren morderme y a los que yo también mordería. A
hacer una cantidad de monumentos que exalten el valor de ser un cobarde y no ver las
cosas con simplicidad. A cantarle a los grandes acontecimientos que hacen que el dinero
sea un bien que genera guerras entre países y personas. A mirar a la gente desde arriba o
desde abajo. A exaltar lo que hay en el otro que yo no tengo porque alguien me dijo que
no lo tenía. No quiero acostumbrarme a mirarme con desprecio o con lástima. A entrar
en esos castillos llamados casas que están llenos de lugares para hacer nada llamado
ambientes y que necesiten un guía propietario de turismo de expertos que tardan un día
entero en recorrer tanta desmesura para después no poder siquiera tomar una humilde
café y charlar de algo que sea mas humano. No quiero acostumbrarme a creer que soy
especial cuando la gente especial porque la quiero querer tiene cosas tan lindas que me

21. 21
hacen feliz. Acostumbrarme es una forma de forzar a que lo que ya fue hecho o dicho
está bien hecho o bien dicho. No quiero acostumbrarme a comer como un rey cuando
los que están a mi lado me convidan de sus amores caseros. A vivir en la soledad del
que todo lo tiene y nada necesita excepto matar o suicidarse. A responder las preguntas
desde lo alto como un ser que sabe hacia los que somete. No quiero acostumbrarme a
que me quieran por lo que tengo y no por lo que doy. A que valoren mi capacidad de
mandar y no la de dar consejo. A que se sientan obnubilados por mi presencia en un
lugar privilegiado y no por mi cariño en un lugar sincero. A que conozcan mi capacidad
de odiar porque no supe comprender a los que había que amar. No quiero
acostumbrarme a que me digan lo que tengo que hacer para después tratarme mal. A que
minimicen alguna virtud que en ellos es motivo de vergüenza porque no la pueden
pagar. A que los que me tienen odio digan que me tienen lástima. A que los que
celebren un triunfo de su egoísmo no sientan que a su alrededor está lleno de otros mas
lindos y pequeños. A que la falta de confianza sea el que me hayan hecho sentir que no
había nada en que confiar. A que poder darle una lección a la gente no sea enseñar o
acercarle una verdad sino obligarle a obedecer con la violencia del que se pone ese
disfraz. No quiero acostumbrarme a que la vida acumule años mientras la persona
acumula engaños. A que lo que nos hace crecer sea el estar en un lugar más caro. A que
el armar una explicación sea el justificar la oportunidad de hacer el mal. A que en lugar
de saludar a la gente se tenga que estar cuidando de que no le roben la dignidad. No
quiero acostumbrarme a olvidar las dos o tres cosas que me hacen feliz. A escuchar una
melodía y no sonreír. A acostarme creyendo que todo terminó o levantarme sabiendo
que nada va a comenzar. A creer que nadie es capaz de nada cuando todos pueden usar
alguna cualidad. No quiero que la costumbre de hablar me ponga un micrófono en el
orgullo de asombrar. O que el ponerle una letra a una canción haga que la gente la use
para matar. No quiero que la esperanza sea el esperar que todo suceda sino que lo que
todos los días pasa sea tan lindo como lo fue lo es y lo será.
Dándose cuenta de su posible equivocación la miró como si ella no lo hubiera estado
escuchando. Como si una mujer blanca tuviera que comprenderlo y decirle que tenía
razón y después darse vuelta y nada más. Y un poco por compromiso para no parecer un
loco le preguntó:
¿Y vos qué pensás, Luz?
De qué, se rió ella.
De lo que te estoy diciendo.
Te quieeeero! Bernaaaardo!,.......... pero a mí sí me gustaría acostumbrarme a alguna de
las cosas lindas que mencionaste.
Bernardo estalló en una carcajada y ambos rieron a coro
.............................................
¿Qué es una villa?
Una villa no es el fin del mundo. Una ausencia de seres hambrientos o sin trabajo. Es un
apartheid cultural. Una segregación que pone en un agujero a una especie de gente que
no sabe. Que no puede o no quiere estudiar. Es el escepticismo. Una cumbia que pone
rigidez a la vergüenza y la convierte en orgullo. Una casa elemental pero que tiene techo
y que a través de la televisión o de la circulación por otros lugares y otros barrios hacen

22. 22
que Luz vea que no quiere quedarse ahí. El hombre blanco la invita a salir. Algunos le
echan la culpa al mundo y la exoneran como lo mejor del infierno. Otros no hacen tanto
alarde y pasan de largo sin siquiera planteárselo como un problema.
..................................................................
Bernardo, desde la municipalidad, de San Isidro se ve en un país de neuróticos.
Alcanza con ver la cara y escuchar a los gritos de seres humanos transformados por el
odio. En la izquierda y en la derecha la neurosis está fundando el nuevo virus de los
argentinos. El neurothink. Una especie de sensación de que se convence a los gritos
como una neurosis de delirio pensante que los ataques de histeria de la derecha frente a
esos gritos que son la maldición para detener esa ola de gente descontrolada de ambos
lados. Una escena de teatro negro o dark que nos ve atribuyéndole poderes a los
monstruos y venerándolos como si fueran seres mitológicos. Vemos que el odio es
ahora una forma en que la venganza tiene dos platos en la justicia sin términos medios
como medio de equilibrio. Que lo que nos alienta a ver a los hombres en la arena con
los leones es una especia de fantástico hecho de furia haevy metal o rockera pesada en
manos de un cumbia de insultos y agresiones de morochos y seres cultos que hablan lo
mas parecido a ellos que exacerba nuestro impulso de ver sangre y un espectáculo lo
mas primitivo posible al que se ha llamado históricamente populismo y que el ser
popular o de gente bruta lo avala para que pueda tener una atractivo romántico mas allá
de los puños y los deseos de muerte que están silenciados en un país donde ya no se
mata. Hay una fundación de dos tipos de violencia: el de el que rompe un vidrio ante la
impotencia de no poder hacer nada o el que usa fondos bancarios para curarse de lo que
hay de pobreza en el mundo bajo de esta lucha. Como no hay guerrilleros sino EX que
tuvieron alguna vez un arma en la mano y que saben que de esa manera no se puede y
que resulta antiguo y anacrónico con la civilización y el siglo que comenzó a pesar de la
reminiscencia de la edad antigua de hace cincuenta años en que con un garrote y a los
gritos seducía a los que estaban en la misma aldea lo que ocurre es que todo muere en la
pesada idea mediática que los ve con caras desfigurada y feos y con sonidos que
parecen propios de animales en lo mas salvaje de su aullido de jungla asfáltica
queriendo denotar que con un taparrabos y una figura de desprendimiento simbolizan la
abnegación a la riqueza o a la mediocridad en el medio del consumo de los
desgraciados que pagan y que son defendidos brutalmente de manera categórica por las
figuras siniestras. Será acaso que en el fondo de la apariencia y los buenos modales
seguimos siendo tan elementales como los que están disfrazados o bien aconsejados en
esta escenario con el corazón moderno ya muy pornográfico de ser parte de lo precario
de que el hombre mas allá de que la educación exige modelos es un animal que tiene
que sacar la rabia no sin antes vacunarse. Los fanáticos abundan de todos los bandos y
los que están aun tranquilos lo lleven por dentro en el hipnotismo de hacer cosas para
que no sea la única opción el ridículo que todos aplaudimos y nos hace parte de lo
maléfico como molde de una recorrida por el infierno placentero de hacer una
revolución con parches que incluyan estás formas de expresivas en lo mediático. La ley
callejera parece ser la que hace que los gigantes de cuatro cabezas compartidas por una
misma idea se poder entrar en el imaginario popular de querer estar rotosos por fuera y
por dentro entre cartones, basura y sentimientos de uñas y dientes en contra del poder y
a favor de una nueva justicia del orden que genere lo que no se puede detener pero que

23. 23
ya no tiene ruedas. Todos náufragos de que nada se puede aplicar y nada funciona
porque lo que hay en pie es la roca que hay que destruir para armar algo completamente
distinto que no se sabe si va a funcionar y cómo bajo la consigna de que lo que está hoy
en la amortización del modo que se hicieron las cosas tiene que ser reemplazado.
Las elegantes instituciones que siempre tuvieron una carácter cívico-religioso y
facultativo de lo que se legisla desde el orden y sus abogados que pusieron aspectos
teóricos la realidad conceptual se ven brutalmente tratados en su delicadeza de seres
que convivieron con el porque de la institución de pasillos majestuosos de reflexión y
que son lo mas cercano a lo pulcro de una sociedad en guerra. Hasta hace poco
disfrutábamos solo del ¨ arte callejero ¨ pero se ha reflotado la política callejera que
hace que nos riamos cruelmente de lo que hay de grotesco de estar en la calle y no en
nuestras casas. Una borrachera general de gente que largar así demonios al cielo en pos
de la paz y la armonía de un futuro extrañamente creíble y que se dibuja en un cómic
que nos hace ser víctimas de reírnos de nosotros mismos y de lo que defendemos y
avalamos y nos escuchamos participes del entretenimiento que hay en este circo cruel
que tiene un carnaval de vale todo porque nada vale.
Bonifacio, poeta, se ve con ellos en un contexto de la miseria del ser humano. Hay una
tendencia a tratar de mostrar méritos y merecimientos en cuanto a una pareja que se fije
en nosotros. Tratar de impresionar bien pero no tanto por el ideal de formar una familia
sino por el ser alguien especial. Alguien que merece ser amado, tenido y querido y que
tiene por ello la posibilidad de también exigir algo de una pareja. Dentro de la
regularidad del esfuerzo cotidiano hay momentos en nuestra vida en que tenemos un
destello de brillantez fuera de lo común o más notado por otros que otros destellos
anteriores o posteriores. Seguramente una mujer quiere más bien que seamos buenos
padres y alimentemos a la prole. Que los méritos sean un trámite ya que vivimos en la
miseria del ser humano. La virtud de cualquier persona es la de ser correctora de lo que
está mal pero sin hacerse notar demasiado. Es casi un impulso reflejo que pasa
desapercibido salvo para el que recibe un leve aviso de lo que está o estaba haciendo.
Quizá llegar a la situación de ser notado o notable no hace mas que corroborar que la
persona en cuestión insiste en este aspecto mas allá de haberlo comprobado en cuanto a
estar allá arriba para poder decir que no era tanto ni tan afín con apartarse de lo que
sucede bajo ello. Se insiste en que las obras son superiores a los hombres. No sin falsa
modestia algunos aseguran definirse como parte de un ¨ accidente ¨ el haber sido
artífices de ellas. Parece que en la velocidad a la que suceden las cosas nadie es
realmente dueño de lo que hace ni es ajeno a lo que hacen los otros. Quizá la miseria sea
mas notable no tanto en las cosas comunes sino en la irrelevancia de estar en contacto
con elementos que son trascendentes de una manera intrascendente llamada trabajo y
esfuerzo que pasa desapercibida por años o por toda la vida. Es como estar con una
mujer extremadamente bella y no poder dejar de ver al ser humano que hay en ella o la
forma en que se deteriora lo que es la esencia de una forma en que lo bello tiene un
significado temporal. Invito a todo el que en un día de su vida sienta que ha tocado el
cielo con las manos (o en varios de ellos) a que tenga un estado de alerta de que algo
anda mal. Los estímulos para la creación o el trabajo en pos de ella pueden ser solo
sensaciones de placer que anteceden al trabajo que requiere de ese estado para ser
fructífero. Pero fuera del mundo de los creativos hay abundancia de gente que en lo

24. 24
casual de un estimulante físico llega a percibir casas de agrado del mismo placer y
seguridad que están al alcance de todos incluyendo la frustración de la merma del
estimulante. Acá es donde las comparaciones son odiosas. Cuando el efecto se ha ido y
la experiencia de haberlo sentido no se concrete en hechos que sean verificables la
desazón para algunos es total. Sin embargo hay ahí ciertas experiencias repetibles por
la misma vía que se asocia con la posibilidad del ser humano aun en su miseria. La
miseria del trabajo y el esfuerzo que es tan honda en el que trabaja profundamente en
pos de lo que redime al hombre en la creación: la belleza. La comprensión pero no tanto
del que entiende sino del que ha estado frente a lo que tiene la información del trabajo
humano sobre la tierra. La totalidad de estar ante lo efímero del ser y darle un
significado o poder llevarlo. El acarreo de lo que significa el porqué del estar aquí: la
antesala de un pensamiento religioso en el que se diluye todo el esfuerzo y en el que se
cae sobre la tierra. Ningún descubridor o creador de nada gozó de tanta popularidad en
el género humano como después de muerto. Quizá lo que hacía falta es que llegara al fin
y que el correr de los siglos le dieran alcance al nombre y al porqué de su existencia sin
que él lo tuviese como un triunfo tan magnífico. El accidente del trabajo concreto en un
bien para la relatividad frente a otros que nunca lo tuvieron como lo que hoy parece ser.
La funcionalidad de alguien que pasó para hacer lo que alguien tenía que hacer. Lo
inverosímil de los superlativos que califiquen a tal persona como un elegido. La
casualidad puesta al servicio del movimiento de la especie. La simplicidad de relacionar
las cosas simples en manos de un ser que tuvo esa rara y extraña cualidad. El niño del
hombre manipulando los medios a su alcance con la informalidad de la curiosidad y el
menor grado del que hace al hacer uso de elementos sustanciales para el devenir. El
juego que sigue las reglas de lo que se sabe y pone comparaciones con lo que se puede.
La miseria del ser humano que en verdad no sabe lo que hace o el alcance de lo que
quiere. Y esa particular miseria del que hizo algo que llamó tanto la atención y que se
murió sin creer en lo que hacía. El silencio del que es necesario en este mundo por ser
un eslabón en pos de ello. La conformidad de la especie que se complementa en las
tareas. Lo que está bien hecho para que otra cosa funcione. El simple pertenecer a todo
esto. La vida. Los seres en acción. Los que se elevan y los que se caen. Como siguiendo
con una tendencia: la continuidad. La miseria de un hombre que muere para que crezca
otro. Para que el que le sucede en lo que él hizo. Como el modo de procesar la cantidad
de actos a lo largo de la historia de la vida y el tiempo. Lo que modifica el valor de lo
entendido.
El mecanismo de la agresión empieza por decir ¨ yo tengo algo que el otro quiere ¨ dice
en una reunión Bernardo (el hombre blanco para Luz) a puertas cerradas entre
peronistas (¿los eternos representantes de morochos?¿de ¨ trabajadores ¨ ? ¿de ¨
humildes ¨?). Las clases sociales altas dominantes en lo económico ven como algo que ¨
el otro quiere ¨ su dinero aunque no sea cierto y empiezan a pensar partir de ello. Es
decir que el modo para advertir que hay violencia tiene como punto de partida que se
está defendiendo de una ilusión de que el otro quiere tener dinero cuando el otro tiene
otras cosas que valora más. Esto equivale a mostrar a través de todos los medios que el
dinero es un bien codiciable y hacer una gran propaganda de ello. Es proponer al dinero
que es lo que esta clase tiene como el objetivo de la sociedad. Los medios de
comunicación exaltan en gente con poder económico que ser famoso y tener éxito tiene
que ser disfrutado desde afuera por el que no puede tener eso que presentan como un

25. 25
valor y los someten. Gente que puede comprar cosas permanentemente y hacer uso del
dinero trata de propagar esa idea por tener un complejo de inferioridad. Dicho en otras
palabras esa gente necesita que se hable de inseguridad y de violencia porque generan la
necesidad en sí mismos de ser atacados por ello y para ello. Es una forma de atraer la
atención hacia ellos cuando en la sociedad se va creciendo en otros aspectos mas
importantes que ese mensaje. El discurso político que ataca a ellos y defiende al que e
se siente orgulloso de hacer lo que hace y tener lo que tiene no se presta a conversar
sobre la base de el poner conflicto que busca exagerar como condición de la
conversación la difusión masiva de esa idea.
Pero para no poner como acusados solo a los que tiene dinero pongamos también
ejemplo a la ¨ libertad ¨ donde la gente conservadora se siente minimizada porque el que
dice ¨ yo tengo lo que el otro quiere ¨ puede ser por ejemplo un tipo que tiene éxito con
las mujeres o que dice hacer ¨ lo que le gusta ¨ a diferencia del que ¨ acumula bienes ¨.
Esto hace que la competencia salga de un terreno económico y exalte la virilidad o la
felicidad del que puede darse esos ¨ lujos ¨ que también se difunden como el ideal de
vida para sobrepasar al otro y agredirlo desde ese punto. La agresión es en suma no ¨ el
hecho ¨( tener dinero o mujeres o hacer lo que se gusta) sino la DIFUSIÓN. Por eso una
ley de medios que permite que todos se sientan defendidos por lo que los hace sentirse
orgullosos puede atemperar lo que falta de diversidad de mensajes para que no haya una
agresión tan explicita en uno u otro sentido. Pero la pregunta es ¨ si ello sucediese:
¿Podría la sociedad subsistir como tal sin sentirse ganadora o perdedora en una
contienda cualquiera que esta fuese? ¨. ¿Acaso no hace falta tener un contrincante que
quede claramente como vencido o que esté siempre amenazado? Amenazado de tener
que defender todos los días lo que le hace sentirse ganadora por momentos y en
problemas en otros. En los 90, en que se hacía en el país una panacea de la ¨ riqueza ¨
había muchos mujeriegos que convivían con su propio éxito y esto era cierto. Pero la
desigualdad económica ¨ dentro de la clase media ¨ era un desencadenante de aspectos
muy oscuros de gente que quería ver que lo valores eran también culturales, que es una
costumbre de esa clase social. Entonces se generó la clase media alta que era la que
doblegaba a la cultura como fin o sanación e identidad. Había una humillación en
manos de esta nueva clase.
Cuando se invita a no pensar como en esa década y a ¨ disfrutar ¨ de un país unido en la
abundancia los que lo hacen son los que disfrutan del mensaje. A otros la realidad se les
escapaba de las manos y hacían lo imposible por tener un trabajo que les diera
presencia. La palabra que estaba en la mente de todos ya no era el dinero o a las mujeres
sino el ÉXITO y muchos sentían que se les había tendido una trampa y esperaban
agazapados una oportunidad. El EXITO era ahora EL PRESTIGIO. Y este prestigio
estaba totalmente absorbido por el mundo del dinero y los que lo obtenían con
reconocimientos de MERITO. Eran LOS ELEGIDOS. Con sus trajes y corbatas y en
empresas privadas de renombre se ponían a desfilar ante los demás. Todavía no se
estaba atentos a quién era el que recibía un Premio Nóbel en literatura como ocurriría
una década después. El mensaje era claro: ¨ ¡que lindo que haces lo que te gusta!, decían
con hipocresía al resto de la sociedad que no tenía mecanismos de defensa. Ëramos
ESPECTADORES que veían el TRIUNFO AJENO y todos tratábamos de ser mas o
menos piolas pero la mayoría mirando absortos que esto no se detenía para ningún
beneficio propio. Cuando este barco se empezó a hundir los que habían estado sin
esperanzas desesperadamente sacamos del olvido todas las condiciones desarrolladas en
el silencio que teníamos para poder hacer que el desarrollo de lo que prometía ser
distinto tuviera éxito. Faltaba poco para que se empezara a hablar de ¨ la década de los

26. 26
90¨ como aquello a lo que ¨ nadie quería volver ¨ y de la crisis del 2001 como el intento
fallido de salvarlo.
Entonces me vuelvo a preguntar si puede una sociedad vivir de situaciones límite que
ven a muchos hundirse frente a otros o a todos tratando de salvarse. Si lo que hace que
haya siempre una herida abierta no es el mejor método de evolucionar ya sin que se
agreda con el ¨ yo tengo lo que vos querés ¨.
Luz era pobre!. Pero él a su manera también. Aunque fuera para ella el hombre blanco.
Los desgraciados son los que nunca tuvieron un mango. Con o sin trabajo tenían
chirolas en los bolsillos. Son de educación de clase media y no representan a los pobres
pero sin embargo sí. Los que tienen siempre los quieren seducir para que se sientan con
ellos y piensen como ellos. Para que vean las cosas de la misma manera y se pongan los
mismos vestidos. Para que se sientan iguales a ellos y los hagan cómplices de lo que
hacen al hablar de inversiones, el precio del dólar o el viaje a el caribe. Se sientan en la
misma mesa. Pero durante el almuerzo o la cena los desgraciados permanecen en
silencio escuchando todo lo que tienen para decir los que tienen al lado. Los
desgraciados son escépticos y cuando hablan del congreso o de la corte suprema
imaginan que el primero los defiende de ellos y en la segunda aplican las leyes que
nunca les dieron más que lo que tienen. Los desgraciados son muy políticos, leen
mucho el diario y suelen ser muy porteños. Los hay también que se marean en medio de
lo que pasa y ni siquiera se pueden diferenciar de los que les hacen creer que lo que hay
fue hecho para todos. Se dejen avasallar por no poder hacer nada ya que los que ¨
entienden ¨ siempre son los más beneficiados y por eso entienden todo. Los
desgraciados son románticos y citan a los personajes de la historia que han hecho los
grandes cambios. Cuando los que tienen los citan a estos mismos es porque ellos los ven
como un símbolo de poder que ellos quieren tener y mantener. Los desgraciados tratan
de ver en las cosas sencillas algo que les de felicidad pero siempre tropiezan con lo s
comentarios de los que tienen en dónde ponen las cifras descomunales y el triunfo del
bien sobre el mal tan categóricos como la ruptura de récords. Los desgraciados ven
siempre el lado positivo cuando les falta algo y lo tratan dc compensar con la
originalidad de un punto de vista que les haga bien. Los que tienen se quejan cuando no
pueden conseguir todo lo que se proponen y se echan la culpa a sí mismos de no haber
previsto que alguien podría haber sido el causante de lo que no es cuestión de dejar sin
ver para conseguir el objetivo cueste lo que cueste. Los que tienen están siempre
ayudados por el dinero que les sirve para conseguir y pagar todo lo se interpone en ello,
lo que para el desgraciado sería imposible de sortear como obstáculo. Para los que
tienen el fin justifica los medios. Son capaces de creer tanto que lo que hacen es lo que
está bien y los ¨ salva ¨ que en medio de lo que se plantea como posible hacen lo
imposible para llegar a destino. En cambio el desgraciado en general no se salva de nada
pero ve a eso como la aventura de la vida y lo imprevisible de buscar nuevos caminos.
El desgraciado es una ser nuevo en esta época que vivimos y su VOTO puede decidir lo
que el que tiene ya no puede controlar con dinero. Muchos desgraciados son
intelectuales que han hecho de su vida el afán de verse envuelto en lo que ha hecho
grande a los hombres grandes. Esto deriva en que el que tiene puede estudiar lo que han
hecho los hombres grandes pero no puede aspirar a ser uno de ellos mientras que el
desgraciado que se ha abocado al estudio desprendiéndose de cosas innecesarias para
ello puede llegar serlo. La originalidad de interesarse por las cosas que erigieron al

27. 27
mundo desde un aspecto no económico hace la desgraciado es poseedor de grandes
capacidades para entender y hacer lo que para el que tiene es imposible. Por la misma
razón la lucidez que tiene el que así se ha quitado de encima la forma tradicional de ver
las cosas al querer hacer un cambio desde la lucidez, es una materia en la que el
desgraciado puede ser el causante y el hacedor de esos cambios y no así el que tiene ya
que están sujetos a que los ejes de movimiento se apoyados en la inteligencia y no en el
tener. Será que las instituciones siempre lo que han hecho es la defensa de la propiedad
y los derechos sobre ella lo que le quitó al que fue desgraciado la posibilidad de no ver
en el tener si la mirada no es otra. Es que el que fue desgraciado está ya en la
costumbre de una manera en que se puede hacer sin que el que tiene se de cuenta de que
ser inteligente no era solo un entretenimiento.
El desgraciado sigue sin tener un mango pero la educación y el desarrollo de ella en sus
inquietudes le han hecho una diferente persona. Ahora cuando se sientan a la mesa los
demás se molestan en que los que hablan y tienen algo para decir son siempre ellos. Los
que tienen no entienden porqué usando las tarjetas y gastando mucho dinero como antes
no obtienen los mismos beneficios. El desgraciado sabe qué hacer con lo poco que tiene
para hacer que esto sea así.
¿Todo tiene un final?, pensaba Bernardo. No es lo mismo estar protegido que estar
sujeto a que te pasen cosas. La ley de punto final se parece a lo que sucede a una
persona que hace 10 años de terapia o psicoanálisis y después larga la protección de ello
y se dedica a analizar por su cuenta lo que tiene por delante con los medios de su
capacidad de aprendizaje y resolviendo cosas que se ejercen y desarrollan al ir probando
y equivocándose. Esto no significa que se den a olvidar el pasado y tener amnesia como
si ello nunca se hubiera vivido. Y así como una persona sigue repensando lo que
también la justicia tiene que ir repensando lo que sucedió y resolviendo la evolución de
las cosas en que hubo una demora lógica de toma de posición sobre ciertos temas
légales y de índole humana y derechos de la persona no solo para el pasado sino para
que al ser revindicados le sirvan para el futuro. Esto significa que el desplazamiento de
los hechos y lo que ve surgiendo y emergiendo de a poco cuando se aprende y se sabe y
resuelve y la interactuación social es mas desarrollada y evolucionada. Los problemas
del ser humano no son para ser pensados literalmente en situación pensante que llegue a
una conclusión lógica sino que tienen la plasticidad del verse involucrados los actores
de la vida social en temas que resuelven y e repercuten en el ayer cuando menos se
piensa o se lo espera o justamente porque había cosas que no terminaban de ser claras.
Cerrar las exclusas y el puente del recuerdo para que el futura evolución con la ilusión
del nuevo siglo parecía verdadero pero era utópico con la forma real de la persona en su
vivir de plantearse en los momentos de su vida cosas que ya sucedieron y no tener
impedimentos para ello. Fabricar una condena al haber existido parece ser una vía poco
probable para los que dejaban en la rebelión de lo despreciable todo lo que era feo,
negro, oscuro y repulsivo para entonces deshacerse de ello y tirarlo al mar. Un querer
ser ciegos y no observar nunca mas lo que estaba en la historia de su propia vida.
Imposible para cualquiera. Una renuncia a poder algún día tener la oportunidad de
volver a plantearse los problemas irresueltos y que dejaron la herida de no haber podido
crecer en medio de ellos y como que se tuviese que seguir a pesar de todo y sin saber
cómo hasta que la pared que detuvo la futuro necesitó del pasado. La vitalidad que hace
del superhombre un ser vulnerable ante la realidad de que quiere ir solo hacia adelante

28. 28
sine poder darle significado a lo que estaba adelante por la ausencia de lo de atrás.
Como un largo viaje del cual se partió de algún sitio y que no se recuerda ni cómo se
llamaba ni cómo era ni dónde quedaba ni qué sucedía allí. Llegar o ir avanzando rumbo
al final y ver que el final se desplaza permanentemente hacia adelante sin saber porqué
ni para qué en el infinito y no se lo distingue ni en sus razones ni en sus porqués.
Llamarlo Dios o el paraíso a esa cosa que nos lleva como si comenzase siempre un
vuelo de nave espacial rumbo al espacio de nuestro interior pero teniendo una realidad
exterior que movemos y hacemos modificar con nuestro andar. El movimiento perpetuo
que no registra ningún indicio de detenerse ni de demorar o de sufrir la avería o el
desperfecto de la vida que se hace carne en nuestra piel llena del tener en la vejez el
traslado de años de haber estado ¨ volando ¨ como si nada afectase y se estuviese
siempre adelantándose a lo que va a suceder por la intuición de que lo que está delante
es indescriptible e innecesario de saber. Un ser alienado que solo está inerte en el hacer
de la inercia que en lo humano es solo lo animal que llena la necesidad de vida y de
transformar en riqueza y alimentos lo que lo rodea. Un ser que tiene la única ubicación
en el espacio en que convive como una verdad que se desencadena solo con la
proximidad a lo que viene. El devenir que no experimenta ningún maltrato y en el que
nadie se perturba y mucho menos se mata. La ausencia de la sumisión o del poder de
unos sobre otros o de existir que sea el consenso de que lo que importa es la vida. El
quitar importancia a todo lo que no tenga como único objeto el vivir. La atemporalidad
del mañana y la inquietud de ser solícitos en el ir hacia delante cada vez mas
satisfechos en lo que al alcance se puede. Lo predecible de que no hay nada que haga de
pasado y que lo que se lleve es lo que tiene la acumulación de una encadenación de
hechos reales que cuentan como lo que no tiene relación con lo que ya pasó. El vértigo
no tener más que estar en compañía de los que están cerca y de llevarse eso al otro
mundo. La tranquilidad de estar sujetos a lo que sucede y de no poder hacer nada para
modificar lo que ya está planeado para bien de todos o mal de algunos. La consecuencia
natural del hecho que sobrepasa lo místico y se hace cierto. Los diez años de terapia y la
natural búsqueda de caminos condicionados que se saben usar, componer, resolver y
trasladar. La forma en que se puede decidir qué hacer con cada cosa y en qué usar lo
que se dispone sin recordar lo que se dejó cuando se inicio el viaje en ese lugar que no
se recuerda dónde queda ni cómo era ni en qué momento se lo dejó.
Bernardo en las conferencias que dictaba en la municipalidad planteaba el fututo desde
la inserción del capital. No había tiempo que perder. No se podía vivir románticamente
aislados del modo en que la inversión generaba una sociedad prolífica y enriquecida en
países del como sur que creían en la integración pero eran vivos e iban por mas.
Hay una relación en los modelos políticos que quieren hacerse oír en América latina que
no coinciden con lo que dicen que le dan de beneficio a la gente que se lleva a través del
engaño. Algunos de los países de esta América saben de qué estoy hablando porque si
bien integran los movimientos de conveniencia económica y regional hacen negocios
con las inversiones de los países que llevan capital y todo lo que este agrega a la calidad
de vida y el desarrollo. No se trata de tener que hacer una apología romántica de Fidel y
de Cuba para que este país tenga algo de dignidad frente a los más poderosos. El capital
no fue inventado para la igualdad de clases pero surgió espontáneamente y no de
manera planificada para perjudicar a nadie en la espera de un mejor estímulo para toda

29. 29
la población mundial. Estimulo. Es el que fue hecho en la evolución científica,
tecnológica y humanística y alienta a la gente a ser parte de esa evolución del desarrollo
que incluye e introduce todo lo que el aliciente de ver que siempre haya algo que no sea
solo dinero y sí que está flotando como una ilusión de creer y ver mas cerca lo que
puede ser un núcleo de gente social que se mueve con ese modo en que los estímulos
hacen que todo sea mas grato y que no haya una consigna de justicia mas allá de lo que
hace al proteger la población de los hecho jurídicos que organizan y protegen de los
que no entienden y caen en el delito y otras violencias. El deseo llega cuando el capital
trata de darse a conocer en la iniciativa de poder emplear toda la espontánea manera de
proponer de dar la novedad y lo que se amplía del aspecto de lo que era de una forma y
ahora se ve de otra. La capacidad de darle una fuerza a la voluntad creadora del hombre
que y la que conoce del crecer y buscar siempre con el instrumento de el valor que
cuesta y repercute en el resultado de todo lo que a todos le importa mas allá de que se
tenga por referencia el poder adquiera la totalidad de lo que hay. La fantasía del mundo
tal cual es no es tenerlo todo sino convivir en el y disfrutar del verlo desde la vidriera de
lo que es algo mas que la materialidad y se convierte en el porqué del describir en que
mundo se vive en compañía de los sueños y de lo que se ha hecho. No es lo mismo
hacerse notar como la justicia que aplasta todo en la forma terrible del desinterés hacia
lo que sea bajo el signo de la igualdad que el verse envueltos entre sus consecuencias en
la justificación de que no hay un motivo para vivir y que el uso del capital para los fines
del sociedad en movimiento indirectamente se comparta entre todos y se pueda
responder a sí mismo a través de todos los modos en que la sociedad se ve participando
según la diferencias que aparecen pero que no los alienan ni reducen a la posibilidad a la
que trata de imponer esa justicia que vela por el deterioro de la capacidad humana y la
felicidad y alegría de la gente. No es lo mismo armar una pelea entre todos los que
quieren tener y los que tienen mas que hacerlos participar de la misma fiesta y que la
recompensa se vea en la forma de vivir cada uno a su manera pero incluidos no por ser
mas ricos sino por pertenecer. Cuando la solidaridad es empalagosa y lamentable
porque lastima la dignidad del que ve que un infeliz lo hace parecer inadaptado porque
no le da posibilidad ser parte de todo eso ya no es justicia. Si se ve a la sociedad con su
capital como a unos estúpidos que no saben que hacer con la plata y se ríen del sistema
es ya una forma de querer creer que no tiene nada que ver con la realidad en que la
misma funciona bien. El que apoya la indigencia hace que el indigente se sienta
agradecido de serlo. El que rompe la manera en que el capital tiene que funcionar
entrando y surgiendo está boicoteando el ingreso que hace del mundo un lugar de todos.
El que combate al capital como si fuera el enemigo lo único que hace es suicidarse en
medio de una masa de indiferentes a los que nada les importa. Pero los que tienen que
convencer de que la verdad es otra son los que lleven la propuesta para que les crean
que cada vez que algo se intenta y se hace con fundamentos parecidos pero de diferente
manera y mejor puede funcionar para bien de todos. No hay ninguna distancia entre lo
que se impone y lo que se propone que no se pueda curar con la bondad y el verdadero
modo en que el hombre busca su destino en el deseo y lo transmita y lo deje desarrollar
antes que nada se caiga porque alguien dijo que la justicia era otra cosa. Quizá no sea
esto algo relacionado con el modo en que el capital o la economía funcionen sino lo que
conforman la voluntad de hacerse notar como una sociedad con ganas. La forma de ver
las cosas con esa composición diversifica la función de cada uno que se ve interpretando
en el concepto de una relación que se facilita con la comprensión de lo que se quiere.
Los gladiadores de juguete que creen en la intermitente aparición de los gnomos del
totalitarismos de izquierda disfrazados de identidad y de unión que los mas vivos
aplauden pero evitan cuando hablan con la inversión que buscan y gestionan para sus

30. 30
países se ve siempre a sí misma en la insuficiencia de no saber qué hacer con la
esperanza de la gente que se muere en el ausente modo de estar siempre sin nada que los
vea aunque sea en la imaginación en una mundo mejor y no en las ruinas de este
cuidadosamente planeadas para el ego de un puñado.
La gente hizo silencio cuando entró Luz y lo saludo tirándole besos. El, conciente de lo
que pensaban y de lo difícil de la situación con las miradas incrédulas puestas en ella la
enlazó con su charla. ¨ Ella es una mas de las que en lugares pobres del país no creen en
que latinoamérica es la única razón para que nos vaya bien a todos ¨ explicó
señalándola y se dio vuelta sin saludar enojado con la certeza de lo que a él le afectaba
lo que era la canción del establishment que era pura guitarra en la realidad de su LUZ.
Luz se colgó se sus hombros con alegría y la espontaneidad que no se fija a lo que dirán
sin saber de qué había estado hablando pero notando la mirada de respeto y admiración
y el silencio de esos hombres de traje.
¡Te dije que te pusieras el azul!, se enojó regañándolo con una sonrisa.
Al salir de volvió a preguntar por su relación con luz y se dijo ¨ Que dure lo que dure ¨
Así es esta locura. Así es vida de lo efímero: ¡que dure lo que dure! Hasta que se
acabe. Hasta que se vaya. Hasta que se consuma. Y como todo lo que llega algún día se
va a ir. Y uno se quedará preguntando si acaso sucedió. Si fue real. O si fue solo
tiempo de vida. Un soplo de luz sobre la esperanza. Un enorme modo de poder
entender que vale la pena vivirlo. Que lo que transcurre es parte de esta aventura. Que
la memoria y el olvido nos hacen parte del reto de tener que hacerlo. De intentar una
vez mas lo que parece difícil y hermoso. De jugar a hacer una nueva relación entre lo
que se puede entender de lo que nos sucede como si el azar fuera todo. Como si fuera
también inducido por nuestra voluntad. Que dure lo que dure. Parece violento y
determinante del final no esperado. Una silenciosa manera de avanzar sin dejar que lo
que ocurre se deje al descuido. Y cuando llega le final y no se puede creer todo lo que
se hizo saber que todo fue hecho cerca del límite. Desde el primer momento hasta el
final. Y que la creación se va dejando hacer cuando se hace de esa manera. Volver.
Volver sin saber lo que se hace. Pero con la conciencia de que lo que está por delante
siempre es mucho más que lo que se dejó. Al menos eso es el deseo. Perder le
conocimiento y no entender nada. Ser sujetos de la arbitrariedad de lo que se va
haciendo a sí mismo. Como una sucesión de espacios concatenados que se producen
casi simultáneamente. Como el acorde de mil elementos. Como lo que se escapa de lo
que uno controla y se sigue con la mirada del amor. Como el desenlace permanente de
una vida dinámica. Y pensar que lo que continua se despende de lo que ya pasó
dándole sentido a lo irresoluto o a lo que va hacia algo. Vértigo deliberadamente
pensado como tal. Construir sobre lo ya hecho. Establecer relaciones entre el hoy y el
ayer. Catarsis que renuncia a aceptar de nuevo lo que se perdió. Relevancia
inesperada del devenir. A punto de irnos y dejar todo para que los demás se olviden de
que se existe. Caída que pone en evidencia que lo que se hizo fue hermoso pero ya no
mas. Abandono que se entrega a lo superior que puede ser parte de lo que
inevitablemente se ocupe de la suerte de lo que ya fue un trayecto vital. Duró lo que
duró pero la locura puede más. Y la mano de dios levanta del piso al caído para
entregarle un nuevo amor. Absorto y sin saber qué hacer con lo que está pero no está.
Lo que fue pero no fue. Lo que mira al pasado y lo ve como futuro. Lo que recoge la
triste verdad de que las fuerzas son parte del mito del eje del nuevo modo de ser. Algo
sacude lo que nos hacía ser ciertos. Y se confirmaba que lo que nos lleva es una causa