1. ACTIVIDAD FISICA EN EL POSTPARTO
Tras el parto, el cuerpo de la mujer debe volver a transformarse para volver a
su estado anterior, a este proceso le llamamos puerperio.
El ejercicio físico después del parto puede ayudar a una mejor y más rápida
recuperación de todos estos sistemas, aportando estabilidad a nuestra espalda,
favoreciendo el tránsito intestinal, activando el retorno venoso de los miembros
inferiores, fortaleciendo la musculatura debilitada por el embarazo y parto y
mejorando la autoestima.
Y ¿cuándo se puede empezar a hacer ejercicio físico después de un parto?
Depende de muchos factores, como el tipo de parto (vaginal o cesárea), si ha
precisado puntos de sutura, si hay alguna complicación... pero yo recomiendo
escuchar al cuerpo e iniciar la actividad progresivamente conforme a la
capacidad y necesidad de cada mujer, siendo siempre valorada y supervisada
por profesionales cualificados. Durante las primeras 6-8 semanas el ejercicio
debería ser muy suave, caminar es la actividad ideal. Es a partir de entonces
cuando se plantea iniciar los ejercicios de recuperación del suelo pélvico;
fortalecer y reforzar este paquete muscular es prioritario antes de reanudar o
iniciar cualquier actividad física, para evitar efectos indeseables como
incontinencias urinarias o prolapsos genitales.
La segunda prioridad sería fortalecer y restaurar los músculos abdominales,
debilitados por la distensión que han sufrido durante el embarazo. Para ello se
desaconsejan los ejercicios clásicos, sobretodo en caso de cesárea, que
aumentan excesivamente la presión abdominal y torácica, dañando el suelo
pélvico. Se recomiendan los ejercicios hipopresivos, contrayendo la
musculatura abdominal a la vez que se hace una presión negativa elevando el
diafragma y controlando la respiración.
La lactancia materna no supone ningún problema a la hora de realizar ejercicio
físico; basta con utilizar sujeción adecuada para evitar molestias en las mamas.
2. La progresión de la intensidad del entrenamiento debe ajustarse a la capacidad
y preferencias de la mujer, siempre y cuando no haya ninguna contraindicación
médica, procurando evitar deportes o actividades de alto impacto durante los 6
primeros meses.
La matronatación es ideal para iniciar la actividad física suave y pasar buenos
momentos junto a tu bebé en el medio acuático. La inmersión en el agua en el
postparto debe evitarse durante las 6-8 primeras semanas por el riesgo de
infección que supone, a partir de entonces no hay ningún problema para iniciar
cualquier actividad acuática.
3. Estreñimiento durante el postparto
Después del parto, la primera defecación se suele hacer esperar unos días, y
conforme avanza el tiempo este estreñimiento suele general tensión emocional.
El estreñimiento durante el postparto se produce debido a varios factores
fisiológicos y psicológicos que impiden el normal funcionamiento del tránsito
intestinal. Vamos a ver las razones de este estreñimiento postparto y los
consejos para superarlo.
Factores que provocan el estreñimiento postparto
Los músculos abdominales que ayudan a la eliminación se han visto
distendidos durante el parto, quedando fácidos y transitoriamente
ineficaces.
Es posible que, además, el propio intestino se haya visto traumatizado
por el parto y haya quedado perezoso.
4. También influye en el estreñimiento el hecho de que el embarazo y el
parto incrementan la presión en la región anal y esto incrementa la
posibilidad de que aparezcan o se intensifiquen las hemorroides. El dolor
que provocan durante el postparto puede hacer que, involuntariamente,
retengamos debido al miedo a ir al baño.
Y es que probablemente los inhibidores más potentes de la actividad
intestinal después del parto son de carácter psicológico: el miedo al
dolor, la poca intimidad en el hospital, el temor a que se abran los puntos
si nos han practicado una episiotomía, o la propia presión sobre la
madre para que evacue (“hasta que no vayas al baño no sales del
hospital” y lindezas de ese tipo)...
Alrededor del 50% de las mujeres embarazadas sufre estreñimiento en
algún momento durante el embarazo. Esa propensión hace probable que
en algún momento del postparto también haya dificultades para evacuar
a un ritmo normal.
Además, se debe tener en cuenta que durante la primera evacuación
tras el parto también puede demorarse debido a que, por lo general, el
intestino está vacío en el momento del parto si le realizaron una lavativa
o lavado con enema a la madre, o si se evacuó durante la fase
expulsiva.
El sedentarismo habitual en los primeros días tras el parto no favorece el
tránsito intestinal, así que, aunque nos cueste un gran esfuerzo, se
recomienda iniciar los paseos cuanto antes. Un cuerpo inactivo favorece
un intestino inactivo.
Consejos para aliviar el estreñimiento postparto
Acabamos de dar la primera clave para la recuperación del normal
funcionamiento intestinal: la actividad física. No nos referimos, claro
está, a correr por los pasillos. Pero sí hay que intentar levantarse de la
cama cuanto antes, pasear con el bebé, mover las piernas…
Los ejercicios de Kegel, que se pueden realizar prácticamente tras el
parto y desde la misma cama, ayudarán a tonificar, no solo el perineo,
sino también el recto.
Pero si hay algo que nos puede ayudar a ir al baño, aparte del
movimiento, de levantarnos de la cama y caminar, es una alimentación
variada y rica en fibra. En general hablamos de cereales integrales,
verduras, hortalizas, frutas (ciruelas, kiwis, albaricoques…) y legumbres,
que deberemos seleccionar en abundancia del menú del hospital.
Y por supuesto, una buena hidratación es fundamental: beber muchos
líquidos. Además de ayudar a ablandar las heces en caso de
estreñimiento, compensaremos la pérdida de líquidos tras el parto.
5. La regularidad del sistema no se consigue sin esfuerzo, pero tampoco se
puede prolongar indefinidamente. Así que, si ninguna de las medidas anteriores
ha funcionado, hemos de pedir ayuda médica para solventar el estreñimiento.
Los especialistas nos aconsejarán, y si lo consideran necesario podrían
recomendarnos ablandadores de heces o laxantes naturales, aunque si
estamos dando pecho se nos advertirá que el efecto laxante podría pasar al
bebé a través de la leche.
No nos hemos de preocupar si la primera evacuación se retrasa, pues esa
preocupación podría agravar el problema. El estreñimiento postparto es una
situación normal y que siempre acaba desapareciendo, tarde o temprano. No
hemos de preocuparnos tampoco si, una vez logradas las primeras
deposiciones, volvemos a sufrir estreñimiento en algún otro momento durante
las primeras semanas tras el parto.
Finalmente, las primeras evacuaciones resultarán dolorosas, aunque poco a
poco, a medida que las heces se ablanden y recuperemos la función intestinal
regular las molestias irán despareciendo y el estreñimiento postparto quedará
en el recuerdo
Estreñimiento
El estreñimiento es frecuente después de un parto porque al intestino le cuesta
recuperar la motilidad. Este problema se agrava con la presencia de
hemorroides y, sobre todo, por la aprensión de la madre a que se reabre la
cicatriz de la episiotomía, cosa que es rarísimo que ocurra.
6. No hay que esperar para ir al lavabo porque esto intensifica el estreñimiento.
Una dieta rica en fibra y tomar mucho líquido favorece el tránsito intestinal, así
como algo de ejercicio muy suave.
Los laxantes tomados no están aconsejados durante el período de lactancia,
pero si el estreñimiento es muy severo, el médico puede aconsejar un
tratamiento a seguir.