Para protegerse de malware y amenazas cibernéticas, es importante mantener actualizados los antivirus, antispyware y firewalls. También se deben realizar copias de seguridad periódicas por si se borran archivos del sistema. Aunque los programas de seguridad detectan y eliminan amenazas, los creadores de malware generalmente están un paso adelante, por lo que es clave contar con las últimas actualizaciones.