Mantenga siempre la presión correcta en sus neumáticos, ni muy inflados ni desinflados. Verifique regularmente el desgaste y alineación. Descarte los neumáticos muy usados o deformados. Cuide la calidad de las válvulas y evite los reencauchados. Esté atento a riesgos de explosión. Confíe el mantenimiento de sus neumáticos solo a manos expertas y reemplace los viejos.