El documento describe la importancia histórica del convento de San Francisco de Tzintzuntzan en Michoacán, México. Los franciscanos fundaron el convento en 1580 y desde entonces se convirtió en un centro importante para la evangelización de la región. El convento albergó a muchos misioneros notables y sirvió como sede de la doctrina local y otras instituciones religiosas. Aunque los franciscanos perdieron el control del convento en 1762, intentaron recuperarlo para continuar su labor religiosa.
La importancia histórica del Convento de San Francisco de Tzintzuntzan
1.
2. Introducción:
Un día los frailes tuvieron que salir del convento por
voluntad ajena. Movidos por la obediencia se replegaron
en unos cuantos conventos del centro del país, pero
nunca olvidaron el lugar donde nacieron y comenzaron a
crecer. La gente tampoco los olvidó y por eso aún los
espera…
3. Objetivo:
Conocer la importancia que tuvo para
la Provincia y la evangelización del
occidente de México el convento de
San Francisco de Tzintzuntzan, desde
su fundación hasta el día que paso a
manos del clero secular.
ESQUEMA:
A. La Ciudad de Tzitzuntzan
B. La primera doctrina de Michoacan
C. La Sede episcopal de Michoacán
D. El Convento de Tzintzuntzan
E. La importancia del Convento de
Tzintzuntzan
4. ¿Qué tan antigua es la ciudad de Tzintzuntzan?
La Antigua ciudad de Tzintzuntzan fue
fundada en el siglo XV:
Fue una de las tres capitales
del estado Tarasco, junto con
Ihuatzio y Pátzcuaro
En 1440 se convirtió en la una
capital política y religiosa del
reino Purépecha
A la llegada de los españoles, el rey de Michoacán tenía
allí sus centro de gobierno y los santuarios más
importantes del reino.
5. Por el año de 1525-26, llegaron a Tzintzuntzan los primeros misioneros
franciscanos, invitados expresamente por Caltzontzin.
La presencia de los misioneros
no dejo de impactar a los
habitantes de Michoacán:
“Cuando vieron a los religiosos
con sus coronas y así vestidos
pobremente y que no querían oro
ni plata, espantábanse y, como
no tenían mujeres, decían que
eran sacerdotes del Dios que
había venido a la tierra y
llamaban Curitiecha… (Relación
de Michoacán, XXVIII, 4)
6. La Encomienda de Tzintzuntzan
Tzintzuntzan
Como Encomienda, Tzintzuntzan quedó primero bajo cuidado del
Capitán Hernán Cortés y luego bajo la atención de Don Juan Infante
7. Bien se le puede considerar a Fr.
Martín de La Coruña como el
padre de la Iglesia en
Michoacán, ya que él fue el
primero que administro en estas
tierras los sacramentos y fue el
fundador de la primera Doctrina
(Parroquia) en Michoacán
Como doctrineros, los franciscanos se dedicaron sobretodo a la evangelización de
los indígenas, como las leyes de la Orden lo estipulaban:
“La actividad que el doctrinero o
misionero, desarrollaba dentro de la encomienda y
pueblo o núcleo de indígenas cedido a en encomienda
a un conquistador, que ha de velar por la
evangelización, encomendada al misionero
doctrinero” (Estatutos “Pro Indis”. Capítulo General de
Roma 1587)
8. Aunque pensáramos que la evangelización de México fue una obra
trascendente para la historia de la Iglesia en nuestro país, no debemos
olvidar que fue una tarea difícil , inclusive en Michoacán, donde los
misioneros contaban con el apoyo del que fuera rey de los purépechas
Las causas:
a. Resistencia de parte de
los antiguos sacerdotes
purépechas
b. El abuso de los
conquistadores y
encomenderos españoles
Tal situación, provocó que los indígenas huyeran a las montañas pus “no
creían nada de lo que les decían los religiosos, ni se osaban confiar en ellos”
(Relación de Michoacán XXVIII, 8)17
9. Con la venida del Oidor Licenciado D. Vasco de Quiroga y el
arribo de nuevos misioneros a la evangelización comenzó a
progresar notoriamente en Michoacán:
Pueblos atendidos desde la
Doctrina de Tzintzuntzan
(s. XVI):
- Pacandan
- S.Andrés Tziróndaro
- S. Bartolomé Atzimbo
- S. Miguel Cútzaro
- Cocupao
- Cucuchucho
- S. Fco. Sirandangacho
-S. Francisco Ihuatzio y
- Santiago Sanambo
10. Los franciscanos fueron responsables de la Doctrina de
Tzintzuntzan desde su fundación hasta el año de 1762 que
la entregaron al clero regular.
Según los informes enviados a las autoridades religiosas, la
población atendida era la siguiente
Año Pueblos Haciendas Rancherías Población
1574 Tzitzuntzan Tziranga S. Bartolo Atzimbo 685 Familias indígenas
S. Diego Cocupao Sanabria S: Nicolás Itziparamo 479 Españoles
S. Francisco Ihuatzio Chapultepéc 204 Mulatos
S. Pedro Cucuchucho TOTAL: 1,581 personas
1631 Tzintzutzan Sanabria ----------------- 340 familias
Ihuatzio de Juan Luébano
Cucuchucho Chapultepéc
Molino de Ruedas
de Nicolás Rueda
de Fernando Altamirano
de Amaro Martínez
1685 Tzintzuntzan -------------------------------- --------------------------- 1,903 personas
Ihuatzio
Cucuchucho
1761 Tzintzuntzan Atzimbo -------------------------- 144 Familias de Razón
Ihuatzio Sanabria 975 Familias indígenas
Cucuchucho San Nicolás TOTAL: 1,878 personas
Siranga
11. Posiblemente, nos Padrón de población (1680-1685)
parezca discreto el
número de feligreses de DOCTRINA NÚMERO DE
la Doctrina de FELIGRESES
Tzitzuntzan, pero si la
comparamos con los Valladolid 2,088
padrones de otras Tzintzuntzan 1,903
doctrinas de su tiempo, Pátzcuaro 1,860
caeríamos en la cuenta
Salvatierra 1,702
de que era una de las
mas grandes del León 1,536
obispado de Michoacán Colima 920
12. Por su antigüedad e importancia política , la Doctrina
de Michoacán fue designada como sede catedralicia del
obispado de Michoacán, nómbrándose como primer
obispo a Fr. Luis de Fuensalida en 1536
Fr. Luis no aceptó el episcopado, por lo que
fue elegido Dn. Vasco de Quiroga, pero él no
quiso construir su catedral en Tzintzuntzan:
“…por razón de la destemplanza del aire
que en ella y en el sitio de ella y en la parte
de dicha ciudad donde está al presente
corre, y mala situación que tiene en la
parte donde carece de agua y de otras cosas
y calidades convenientes y necesarias a la
iglesia catedral.” (Real Cédula de 1538)
13. Antes de la edificación del convento de San
Francisco, los frailes levantaron una ermita
dedicada a Señora Santa Ana donde comenzaron a
vivir.
Esta sencilla y pobre construcción, fue señalada
como primera sede del Obispado de Michoacán, la
misma que fue rechazada por el obispo Dn. Vasco
de Quiroga
Al haber renunciado a edificar su catedral en Tzintzuntzan, los franciscanos
pensaron entonces en edificar un convento y una Iglesia, para lo cual
escogieron un terreno amplio y adecuado para su construcción
14. La edificación del nuevo convento se debe a la
iniciativa de Fr. Pedro de Pila, quien inició los
trabajos de la cimentación el año de 1580 con el
apoyo de las autoridades reales:
“Mandamos a nuestros Virreyes, Presidentes y Governadores, que
guardando la forma que se les da por la ley primera de este
título, tengan mucho cuidado que en las cabeceras de todos los
pueblos de indios, assi los que están incorporados en nuestra Real
Corona, como los encomendados a otras cualquier personas, se
edifiquen iglesias donde sean doctrinados y se les administren los
santos sacramentos, y para esto se aparte de los tributos que los
indios hubieron de dar a Nos y á sus Encomenderos cada año lo que
fuere necesario, hasta que las iglesias estén acabadas…” (Leyes de
Indias, Libro I, Título II párrafo 8)
15. La obra del convento debió avanzar rápidamente, pues se
contaba con el apoyo de la mano de obra indígena y
material trasportado de los cues indígenas
A su paso por Michoacán, en 1584, el padre
Visitador de los Franciscanos, Fr. Antonio de
Ciudad Real daba el siguiente testimonio:
“ El convento es bueno y
esta acabado, hecho de
cal y canto, con
claustro, dormitorio e
Iglesia, la cual tiene un
retablo muy vistoso; hay
dentro en casa un aljibe
de agua llovediza y
buena huerta… (Cáp.
LXXII).
16. Sin embargo, a pesar de los avances, la obra se prolongó más de lo pensado, pues
el año de 1590, los franciscanos vuelven hacer una petición al Virrey Luis de
Velasco para que siga apoyándolos con la mano de obra de los indígenas:
“Don Luis de Velasco, dijo que prorrogaba y prorrogó
el término de reserva que se hizo por su señoría a los
indios de la ciudad de Zinzonza del servicio personal
para poder acudir a la obra de su Iglesia por un año
mas” (a.1595)
La construcción del convento debió
haberse terminado, probablemente, en
1596, atendiendo a la fecha que se
encuentra grabada en piedra, justo en
superior de la portería
17. Desde su fundación, y sobretodo en el siglo XVI, el convento de Tzintzuntzan
se convirtió en punto de referencia para la evangelización del occidente de
México
El cronista, Fr. Diego
de Muñoz, en su
descripción de la
Provincia de
Michoacán y Jalisco,
dice que “de allí
salieron a fundar los
conventos de
Pátzcuaro,
Tzintzuntzan
Valladolid, Zapotlán,
el primero de
Jalisco, Amaqueca y
Guadalajara”
Zacatula
18. Además, el convento de Tzintzuntzan fungió como
Taller de imágenes de
Pasta de caña
Casa Noviciado
Residencia del Padre Custodio y Casa Capitular
19. Pero sin lugar a dudas, la principal importancia que tuvo el convento de
Tzintzuntzan radica en la obra evangelizadora y humanística de los
religiosos que habitaron al interno de sus muros.
A. Fr. Martín de La Coruña o de Jesús
Fundador de la Iglesia en Michoacán, Colima y Jalisco.
Misionero incansable en el occidente de nuestro país.
Colaboró para apaciguar la rebelión de los indios cazcanes
en 1541. Fue custodio de Michoacán y Jalisco (1548-1551).
Murió en el convento franciscano de Pátzcuaro en 1558.
B. Fr. Jerónimo de Alcalá
Célebre autor-recopilador de la Relación de Michoacán,
obra histórica indispensable para el estudio y comprensión
de la cultura purépecha. Vino a Michoacán como Misionero
por 1530 y se aplicó al estudio de la lengua purépecha. Se
piensa que murió alrededor de 1545.
20. C. Fr. Jacobo Daciano
Danés de origen y michoacano por adopción. Se creé que fue
de los primeros que administraron la Sagrada Comunión en
Michoacán. Fue el primero de los misioneros en México que
luchó para que los indígenas fueran admitidos a las órdenes
sagradas. Fungió como Custodio entre los años 1551-1554.
Murió en Tarecuato, Mich. En 1566.
D. Fr. Pedro de Garrovillas
De nacionalidad española, vino a México como misionero
y fue destinado a Michoacán. Se dice que continuamente
salía en busca de los indígenas para evangelizarlos. Sus
correrías apostólicas lo llevaron hasta la Provincia de
Zacatula costa de Guerrero). Murió en el convento de
Tzintzuntzan en 1571
21. E. Fray Maturino Gilberti
Misionero y escritor francés, aunque de ascendencia
italiana. Vino a Michoacán y aprendió la lengua como
ninguno de los misioneros. Fue Custodio de Michoacán
de 1560-1563. Son famosas y muy valiosas las obras
que escribió en lengua tarasca. Murió en Tzintzuntzan
en 1575.
F. Fr. Diego de Muñoz
Fue el primer Provincial mexicano de la Provincia
de Michoacán (1597-1600; 1610-1613). Tomó el
hábito en el convento de Tzintzuntzan. Ocupó el
cargo de Comisario General de todas la Provincias
de la Nueva España y Filipinas. En 1583 escribió
una descripción de la Provincia de Michoacán.
Murió en Acahuato, Mich. a los 70 años de edad.
22. Después de haber sido privados del convento de
Tzintzuntzan, los frailes intentaron recuperar el convento, al
menos en dos ocasiones:
En 1854, el M.R.P. Provincial, Fr. José Vázquez, pidió al
Ilustrísimo Sr. Arzobispo, D. Clemente Munguía, le cediera el
convento para hacerlo un Colegio de Propaganda Fide
(Seminario de Misioneros)
En 1911, el M.R.P. Comisario Provincial, Fr. José Ma. Bottaro,
propuso al Sr. Arzobispo de Morelia, Mons. D. Leopoldo Ruiz
y Flores “que se entregue a la Provincia los conventos de
Erongarícuaro y Tzintzuntzan a cambio de la Iglesia de San
Diego, edificada en esta capital”.
Ambas peticiones no tuvieron ningún aceptación, pues los tiempos y
circunstancias que vivía el país eran muy difíciles.
23. Aún seguimos soñando con la
esperanza de volver a la cuna y
origen de nuestra Provincia. Por
ahora nos alegra estar presentes
aquí y que la gente aún nos
aprecie. No somos los mismos que
llegaron en medio de la pobreza,
con la esperanza de dar a conocer
la doctrina cristiana, pero si
somos el fruto de aquellos que
sembraron lo que ahora
cosechamos, el apreció y
reconocimiento de la obra
franciscana en Michoacán. Es
dicha y compromiso a la vez.
Quiera Dios y la historia que no
dejemos al menos de visitar este
lugar y elevar una plegaria en la
tumba de nuestros fundadores.