El documento describe la evolución de la escuela desde la perspectiva de los abuelos de las autoras. Se entrevistó a 3 personas mayores de 75 años para obtener información sobre los maestros, las aulas, los materiales y otras actividades escolares en el pasado. Los maestros eran más autoritarios y los castigos físicos eran comunes. Las aulas tenían pupitres de madera y los niños usaban pizarrines de piedra. Los libros eran más pequeños y con menos imágenes a color. Los recreos incluían juegos como la
1. Nuestros
antepasados
Autoras: Miriam Alarcón López, Sara Martínez Ruso y María
Conesa Pascual
2. Introducción
P
ara realizar este trabajo hemos decidido entrevistar a tres personas para ver la
evolución que ha ido experimentando la escuela desde nuestros abuelos hasta el
día de hoy. Para ello, hemos seleccionado a tres personas de las edades
comprendidas entre 75 y 79 años, donde hemos sacado la información.
Después de realizar las entrevistas hemos organizado la información en cuatro
grandes temas relacionados con la escuela: la relación con los maestros, cómo eran las
aulas, los materiales que utilizaban y por último un apartado donde hemos incluido otras
cosas como las actividades extraescolares o los juegos.
3. Los maestros
U na de las
cosas que
la
mayoría de las
personas
recuerdan de su
niñez en la escuela
es cómo eran los
profesores. Hemos
descubierto que
también ellos han
cambiado mucho,
y que nuestros
maestros ya no son como los de nuestros abuelos.
Los profesores antes eran más autoritarios y en el pueblo eran las personas más
valoradas, se les hablaba siempre de usted y eran respetados. A los alumnos también se
les decía de usted y se les nombraba por el apellido, no por el nombre, lo que aumentaba
el distanciamiento entre profesores y alumnos.
Respecto a los castigos se les ataba la pierna a una pata de la mesa, se les ponía
cara a la pared, se les pegaba pellizcos en el cuerpo, golpes con la regla, así como los
castigos mirando a la pared de rodillas, con los brazos en cruz y unos libros encima,
incluso a veces sujetando una goma con la nariz.
Antiguamente los maestros estaban con los chicos y las maestras con las chicas,
a excepción de uno de los sujetos que la escuela era mixta. Antes no había exámenes y
les preguntaban la lección oralmente, normalmente el profesor tomaba la lección casi a
diario y también revisaba los cuadernos. Las calificaciones de antes eran parecidas a las
de ahora, se utilizaban los números del 1 al 10, aunque en primaria actualmente no se
pone calificación numérica. Además, enseñaban a leer más tarde, incluso algunos ni
prendían después de muchos años de escuela, esto se debía sobre todo a que durante el
curso era normal faltar un par de meses en los que ayudaban a sus padres en la labor del
campo: la vendimia, las olivas…
4. El colegio
Instalaciones:
L
as escuelas eran todas muy parecidas. Solían tener dos salas grandes, que tenían
al fondo una tarima para el maestro, a excepción de un sujeto donde la escuela
se albergaba en varias casas donde no había aseos. Detrás, en la pared, una
pizarra grande y un mapa de España que servía para sacar fotos. Al principio los
agrupaban por sexos, en una sala los chicos y en otra las chicas, a excepción de uno de
los sujetos que era una escuela mixta.
Más tarde por grupos de edades, y al
final mixto por cursos.
Las mesas eran pupitres de
madera con vasos de metal incrustados
para la tinta, para dos chicos o chicas.
Las mesas se levantaban y había un
cajón donde se podía dejar el pizarrín
que cada uno llevaba. Los niños
llevaban en la cartera una pizarra
pequeña de piedra en la que escribían
con el clarión que era una barrita de
yeso blanco. Cuando querían borrar
echaban el aliento y lo limpiaban con un
trapo.
Antiguamente el patio del
colegio era más parecido a un parque
con arena, árboles, incluso fuente. Esta
zona estaba dividida por una verja, a un
lado las niñas y al otro los niños que incluso jugaban a distintos juegos como
analizaremos en otra parte del trabajo. En algunos casos, también jugaban en la calle, en
alguna plaza cercana a la escuela.
5. Horario:
R
especto al horario, las clases eran de lunes a viernes, a excepción de uno de los
sujetos que los sábados también asistían. Por la mañana de 9 a 12:30 donde los
alumnos rezaban, corregían los deberes y más tarde el profesor les preguntaba
la lección del día anterior, y por la tarde de 15:00 a 17:00. La tarde del jueves la tenían
libre o iban a la sierra a aprender nombres de árboles. Tres tardes a la semana les
enseñaban a las chicas a bordar, a realizar labores del hogar: hacer punto de cruz,
aprender a coser… En
cambio, a los chicos les
enseñaban otro tipo de
labores como la
carpintería. También por
la tarde se daba clase de
catecismo.
Las asignaturas
que se impartían eran:
religión, geografía,
cálculo, historia,
ortografía y lectura, y
dibujo. Todas estas
asignaturas estaban en un
libro llamado “La
Enciclopedia”.
6. Los materiales
E
l aspecto en el que más nos vamos a centrar porque nos ha llamado mucho la
atención es el de los
libros y las
asignaturas. A primera vista
lo que más nos llama la
atención de los libros es el
formato y los títulos. Los
libros antiguos tienen un
formato más pequeño, en el
interior apenas encontramos
imágenes a color, aunque sí
muchos dibujos y la letra está
bastante junta. Como bien
hemos dicho anteriormente,
las asignaturas que se
impartían eran: religión,
geografía, cálculo, historia,
ortografía y lectura, y dibujo.
7. Otros descubrimientos
relacionados con la escuela
D
entro de este apartado hemos incluido las actividades extraescolares, juegos,
excursiones, uniformes…
Antes no había actividades extraescolares, en cambio, uno de los aspectos que
nuestros mayores recuerdan mejor y con más ilusión son los juegos a los que jugaban en
los recreos: la comba, al escondite, al corro de la patata, las canicas, al tranco, la peonza,
el pillao…
Por otro lado, se les daba para almorzar un vaso de leche y por las tardes, para
merendar, un trozo de pan y un trozo de queso.
En lo referente a las excursiones, antes había muy pocas y normalmente eran a
final de curso, el sitio al que solían ir era al campo, al río, actividades relacionas con la
naturaleza.
8. Conclusiones
L
a primera conclusión a la que hemos llegado es que a pesar del paso del tiempo
la escuela ha estado formada siempre por unos elementos comunes que se
mantienen en la actualidad: maestros, alumnos, libros, instalaciones y recreos.
Gracias a las entrevistas hemos visto que durante los años 30 y 40, durante la
guerra civil y la posguerra encontraríamos a las personas mayores de 70 años. Es una
escuela donde el profesor no está muy pendiente de los alumnos, estos faltan mucho y
apenas hay contacto entre la escuela y la familia, las instalaciones también son muy
inestables.
Este trabajo nos ha ayudado a darnos cuenta de que la escuela es una parte
esencial de nuestra vida, pero que cada época tiene aspectos positivos y negativos.