El nominalismo es una doctrina filosófica según la cual todo lo que existe son particulares ademas es una fuente filosófica
1. El nominalismo es una doctrina filosófica según la cual todo lo que existe son
particulares.1 Esto generalmente se afirma en oposición a quienes sostienen que existen los
universales o las entidades abstractas.2 El nominalismo niega la existencia de universales
tanto de manera inmanente (en los particulares) como trascendente (fuera de los
particulares).
En rigor, la doctrina opuesta al nominalismo no es el realismo, que acepta la existencia
tanto de particulares como de universales, sino el universalismo, que sostiene que todo lo
que existe son universales.1
El término «nominalismo» proviene del latín, nomen (nombre). Por ejemplo, John Stuart
Mill escribió una vez, que "no hay nada general, excepto nombres". Otra palabra usada para
designar al nominalismo es particularismo.3
El nominalismo, en cambio, niega la existencia de los universales. La motivación de éste,
se deriva de varios lados. En primer lugar, la cuestión sobre dónde se encuentran esos
universales (si es que existen). Platón sostuvo que hay un reino de las formas abstractas o
universales separado del mundo físico (véase la teoría de las Formas). Los particulares
mundanos participan o imitan a esa Forma universal. Pero esto plantea la pregunta: ¿dónde
está este reino de lo universal? Una posibilidad es que se encuentra fuera de espacio y
tiempo. Sin embargo, los naturalistas sostiene que no hay nada fuera del espacio y del
tiempo. Algunos neoplatónicos, como Plotino y Agustín de Hipona, sostuvieron
(anticipándose al conceptualismo) que los universales están contenidos dentro de la mente
de Dios.
Los realistas moderados sostienen que no hay ámbito en el que los universales existan, sino
que más bien los universales se encuentran en el espacio y el tiempo en los que se
manifiestan. Recordemos que un universal, como lo verde, se supone que es una única
entidad. Los nominalistas consideran inusual que pudiese haber una única cosa que
existiese en varios lugares al mismo tiempo. El realista mantiene que todas las instancias de
verde se mantienen unidas por la relación de participación o imitación, pero esta relación
no puede ser explicada.
Daniel Dennett es un filósofo que intenta ubicar el comienzo del conocimiento en el
funcionamiento del cerebro humano, y rechaza la idea de que hay algo de verde en el
mundo real. La única circunstancia que lo causa es que el cerebro reaccione a la palabra
«verde».
El problema de los universales es una cuestión tratada durante toda la historia de la
filosofía, pero su debate se acentuó en la Edad Media, con autores como Guillermo de
Ockham o Roscelino de Compiègne.