El conocimiento y la posibilidad de compartir información son valores esenciales de la cultura de Internet. Pero la noción de compartir no es inherente y exclusiva de la Red: es la nueva moneda de las industrias culturales y creativas, inherente al ser humano. Un nuevo modelo en una época de crisis en la que la confianza en el consumo y el consumo en sí mismo se reducen a niveles críticos. Un nuevo modelo en el que la tecnología ha roto las barreras geográficas aportando al mercado un potencial de crecimiento inmenso. Compartamos…