El documento resume la vida y carrera política de Julio María López Orozco, un médico e intelectual de Elche que fue elegido diputado por la provincia de Alicante en las elecciones generales de 1931 para la Segunda República Española. Obtuvo más votos que ningún otro candidato y representó al Partido Republicano Radical Socialista. El documento describe a López Orozco como un humanista filántropo que ayudó a los pobres sin importar su condición y ganó su simpatía, lo que le llev
1. Veintiocho de junio. Fecha de las elecciones generales a Cortes Constituyentes de la II República
en 1931 en las que resultó elegido diputado por la provincia de Alicante el insigne médico
ilicitano D. Julio María López Orozco. Un dato casi desapercibido para la mayoría de la opinión
pública, incluso para los republicanos, que solemos recordar otras fechas como el 14 de abril,
por ejemplo, proclamación de la II República a consecuencia de las elecciones municipales del 12
de abril, dos días antes.
El hecho reviste su importancia socio-histórica, porque todo un personaje de Elche muy popular y querido como fue
D. Julio, obtuvo su acta de diputado no sólo en representación de su ciudad natal sino de toda la provincia, lo que
demuestra el conocimiento que el pueblo alicantino tenía sobre su persona y su actividad pública además de probar
el arraigo y la aceptación de las que el médico ilicitano gozó entre el electorado en ámbito provincial.
Frente al resto de adversarios políticos, López Orozco consiguió 67.013 votos, siendo uno de los más votados,
presentándose por el Partido Republicano Radical Socialista y logrando la credencial número 361 del acta de
diputado para la primera legislatura republicana que abarcó los años 1931 y 1933. Tomo posesión de su escaño el 12
de julio de 1931 pero juró o prometió el cargo quince días después, el 27 del mismo mes y del mismo año y causó
baja como diputado en la disolución de las Cortes del 9 de octubre de 1933.
Nacido en Elche en el seno de una familia acomodada y burguesa, bien joven manifestó hondamente los
sentimientos y las ideas republicanas. Humanista, filántropo e intelectual, aburguesado pero sumamente
respetuoso con el prójimo sin menospreciar a nadie por cualquier ideal o condición (lo que motivó envidias de
ciertos elementos de la misma burguesía ilicitana a la que él, pertenecía), su lema fue "hacer el bien sin mirar a
quién" hasta ser reconocido como el "médico de los pobres de Elche" a quienes incluso daba dinero para medicinas.
Ello le granjeó la simpatía y la admiración popular. Era frecuente verle con pajarita y traje, desplazándose en un
carruaje tirado por mula o caballo (tartana o cabriolé).
Su familia poseyó una casona y un bello huerto de palmeras, granados, naranjos y limoneros que él luego heredó y
mantuvo hasta su muerte (el de Manchón, rebautizado posteriormente con su nombre); convertido hoy en plaza
pública y jardín frente al Museo de la Palma (antes huerto de San Plácido) y cercano al Hotel Hort del Cura.
Los ideales políticos republicanos le llevaron a evolucionar hacia la masonería, por su relación intrínseca y fue
iniciado en 1920 en la Logia Constante Alona de Alicante, tomando el nombre simbólico de "Dieulafoy". Durante ese
mismo año pasó a formar parte del Triángulo Masón "Illice Constante" de Elche del que fue presidente hasta el año
1924, fecha de la fundación de la Logia Illice Constante nº7 de Elche, de la que fue su Venerable Maestro hasta
1935, reuniéndose en la sala egipcia de la logia, sita en los bajos del palacio de la Calahorra. Participó también en
los Altos Grados, siendo miembro del Capítulo Lucentino donde alcanzó el grado 18º y dentro de las estructuras
orgánicas de la masonería española, fue Consejero Regional de la Gran Logia Simbólica Regional de Levante. Asistió
a la VI asamblea nacional de la Masonería Española, celebrada en Madrid, en 1924, como delegado de la regional de
Levante, y a la VII asamblea nacional, en Gijón, en 1928, en la que ocupó la vicepresidencia de la Mesa. Al destacar
por todos estos méritos, el franquista Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y del Comunismo, le
condenó según sentencia "a veinticinco años de reclusión mayor".
También sufrió un destierro en Galicia y Asturias y al parecer su corazón se debatió entre el amor a dos mujeres,
siendo una de ellas más joven que él, situación por la que el poeta ilicitano Tonico Sansano le dedicó un poema.
López Orozco tiene a su nombre un colegio, un instituto y una plaza con jardín (zona verde) y huerto de palmeras,
en Elche, su ciudad natal. En mayo pasado, el Grup Cultural Ilicità donó al Museo de Pusol el cuadro al óleo con el
busto de López Orozco pintado por el artista local apellidado Campello que le regaló María Galiano (hija de los ex
caseros de aquel y dueña del restaurante San Plácido y del huerto del mismo nombre hoy Museo de la Palma) para
su restauración y exposición.
La biografía de este personaje ilicitano, menudo pero grande de corazón, mente y espíritu; no está acabada.
Lagunas y escasez de datos escritos (salvo los registrados en el Tribunal contra la Masonería y en el Archivo de
Salamanca), lamentablemente sólo se auxilian con la aportación insuficiente aunque elogiable, de datos vox pópuli
por aquellos que le conocieron en vida. Quizá algún día se logre enhebrar e hilvanar todos esos retazos con la
publicación de una completa biografía.
De momento, el recuerdo a las elecciones constituyentes republicanas a las que tanto le debió López Orozco por
permitirle representar al pueblo no sólo ilicitano sino también alicantino, sirva como adelanto de esa posible futura
biografía completa y cual homenaje a uno de los más importantes personajes de Elche y provincia del siglo XX digno
de ser estudiado e investigado puesto que posee aún aspectos inéditos por descubrir.
Gracias, 28 de Junio de 1931. In memoriam López Orozco.