El documento describe el descubrimiento de la vacuna contra la viruela por el médico inglés Edward Jenner en 1796. Jenner observó que las personas expuestas a la viruela bovina parecían estar protegidas contra la viruela humana. Realizó un experimento inoculando a un niño con viruela bovina y luego con viruela humana, demostrando que el niño no enfermó. Esto estableció el principio de las vacunas e inmunización. Las vacunas se extendieron rápidamente por Europa, reduciendo las muertes por viruela a