2. La antigua basílica, o basílica Constantiniana (erigida
sobre una necrópolis), contaba con una planta de cruz
latina, cinco naves. Para entrar a la basílica había que
subir por una escalera de 35 escalones, en cuya base
estaban las estatuas de Pedro y Pablo. En lo alto de la
escalera, atravesando un patio descubierto se
encontraba la fachada de cinco puertas: una para los
peregrinos, otra exclusiva de los ciudadanos romanos,
otra cubierta de laminas de plata, una por donde debían
ingresar los habitantes que vivían más allá del Tiber y la
puerta por donde transitaban los cortejos fúnebres.
Al lado derecho se erigía la torre campanario con un
gallo en coronándolo, haciendo referencia a la vida de
San Pedro
4. Algunos registros de esta basílica son
las escenas realizadas por Rafael
Sanzio en las estancias vaticanas. El
interior puede observarse en “La
donación de Constantino”
5.
6. Mientras que el exterior
puede verse en parte en “El
incendio del Borgo”
10. Durante el papado de Nicolás V, a mediados del S. XV
(1451), se le encarga a Bernardo Rossellino la tarea de
restaurar y agrandar la antigua basílica. En su
proyecto, Rossellino mantuvo la planta de cruz latina ( cuerpo
longitudinal de cinco naves cubiertas con techos
abovedados) y renovó el transepto con la construcción de un
ábside más amplio al que añadió un coro. Las obras se
interrumpieron tres años después, a la muerte del
papa, cuando los muros tan sólo alcanzaban a levantarse un
metro del suelo. El papa había ordenado la demolición del
Coliseo de Roma y las carretadas de piedra habían sido
transportadas para su uso en el nuevo edificio.
12. Quien retoma seriamente la empresa de construir la
iglesia madre es el papa Julio II, quien contrata para
esto a Donato Bramante. La construcción del edificio
nuevo se inició en 1506, el proyecto consistía en un
edificio con planta de cruz griega inscrita en un
cuadrado y cubierta por cinco cúpulas, la central de
mayor tamaño y apoyada en cuatro grandes
pilares, inspirándose en la Basílica de San Marcos.
14. La cúpula central, podría estar inspirada en la del Panteon de
Agripa, se situaba sobre el crucero. Esta idea quedó plasmada en
una medalla acuñada por Caradosso para conmemorar la
colocación de la piedra fundamental.
Los trabajos se iniciaron con la demolición de la basílica
paleocristiana, lo que fue muy criticado por personalidades como
Erasmo de Rotterdam e incluso Miguel Angel(Bramante fue
apodado «maestro ruinoso»)
A estos escándalos hubo que sumarle el de la venta de
indulgencias para la construcción de la Basílica, lo que tuvo un
papel importante en el nacimiento de la Reforma Protestante de
Martin Lutero, que vio los trabajos en su viaje a Roma a finales de
1510, y en base al que escribiría las 95 tesis.
Bramante no pudo ver avanzar demasiado la obra, pues murió en
1514, cuando sólo se habían edificado poco más que los cuatro
grandes pilares que debían sostener la gran cúpula central.
15.
16. Tras la muerte de Bramante, queda a
cargo de la obra quien había sido su
ayudante desde 1505: Antonio
Sangallo, quien no tuvo muchos avances
durante el mandato de León
X, continuando en su labor durante el
período de Paulo III, realizó una maqueta
en madera que plasmaba su idea para la
basílica.
18. Tanto Sangallo como Rafael y fray
Giovanni Giocondo, trabajaron en
conjunto y realizaron diversos trazados
de la planta de San Pedro, cambiando
el plan de Bramante, optando por
diseños que se inspiraban en la
tradicional planta basilical de cruz
latina con un cuerpo longitudinal de
tres naves.
20. A la muerte de Sangallo (1546), Paulo III nombra
como arquitecto del proyecto a Miguel Ángel, quien
se deshace del trabajo de su predecesor y vuelve a
la idea de Bramante, pero no adopta tal cual
era, sino que la reformula, rompiendo la impoluta
simetría bramantesca.
Miguel Ángel se imaginaba construir la cúpula más
grande de hasta el momento, cuando fallece, en
1564, sólo se había llegado al tambor,
permaneciendo inalterado hasta que más de veinte
años después, Sixto V encargó a Della Porta y
Fontana su conclusión. (Alteraron solo detalles
constructivos mal resueltos)
22. A principios del 1600, Paulo V se encarga de llamar a
concurso para modificar una vez más la basílica, ya que la
estructura planteada por Miguel Ángel no satisfacía las
exigencias litúrgicas y en función de la contrarreforma, se
decide cambiar la plata de cruz griega por cruz latina. Maderno
agrega tres crujías nuevas para extender longitudinalmente la
planta y se encargo también de proyectar la fachada.
La citada fachada de San Pedro del Vaticano presenta unas
gigantescas columnas de fuste liso, decoradas con capiteles
corintios que sostienen un frontón triangular con un relieve del
escudo del Vaticano. Sobre el “ático” se extiende una
balaustrada sobre la que se sitúan esfinges de los 12
apóstoles.
26. La plaza se divide en dos grandes espacios: uno enmarcado
entre dos hemiciclos formados por hileras cuádruples de
columnas de capitel toscano y por otro lado la extensión
trapezoidal de estos hemiciclos, la cual conduce a la
fachada. Las columnas gigantes de travertino, unidas por un
cornisamento sencillo están coronadas por una serie de 140
esculturas de santos de 3 metros. El diámetro mayor de la
elipse (240mtrs.)Supera el del Coliseo. Este conjunto
arquitectónico simboliza los brazos de la Iglesia que acogen
a todos los católicos y a su vez magnífica la figura del Papa
como representante de Dios en la Tierra.
El conjunto, con el alargamiento del eje axial, que supera la
dimensión de la propia Basílica, va a ser un modelo a imitar
en todas las construcciones barrocas de la época. El sentido
de lo colosal y el tratamiento escultórico de la decoración,
propias de Bernini, van a seguirse en toda Europa.
27.
28. Es importante destacar dos elementos de la decoración interna
realizados por Bernini: el baldaquino y la cátedra petri.
El baldaquino del altar mayor esta realizado en bronce macizo y
conformado por cuatro columnas salomónicas con aristas que
convergen hacia arriba coronadas por un orbe sobre el que se
erige la santa cruz (universo regido por la religión), posee
decoración fitomorfa, ángeles sobre las columnas y abejas entre
otras cosas, símbolo heráldico de la familia Barberini (Urbano
VIII). El bronce utilizado para su construcción fue extraído de los
casetones del Panteón de Agripa, dando origen a la frase: «Quod
non fecerunt barbari, fecerunt Barberini»
Para la Cátedra Petri, lo que hizo Bernini fue idear una segunda
cátedra sobre la cual montar la supuestamente utilizada por el
Apóstol. Esta sostenida por cuatro padres de la iglesia: Agustín y
Ambrosio (occidente), Atanasio y Crisóstomo (oriente);
simbolizando la unión entre ambas iglesias.