El documento describe la Economía del Bien Común, un modelo económico propuesto como alternativa al capitalismo salvaje. Busca que las empresas tengan como objetivo el bienestar común en lugar del lucro, midiendo su éxito por valores como la dignidad humana, la solidaridad y la sostenibilidad ecológica en lugar de sólo indicadores monetarios. El movimiento se expande por Europa e Iberoamérica promoviendo la adopción de este enfoque a nivel individual, empresarial y de gobierno.
Perspectivas de la Economía del Bien Común en Colombia
1. PERSPECTIVAS DE LA ECONOMIA DEL BIEN COMUN EN
COLOMBIA
Santiago de Cali, Sep. 2015
La lucha por salir del subdesarrollo y la pobreza es un tema que da vueltas en la cabeza de los
empresarios, los economistas pensantes y no pocos analistas. Afortunadamente, luces de
esperanza siguen asomando para iluminarnos por todos lados.
Como economista, a veces me ocupo de examinar y analizar lo que acontece en el devenir
económico global, observando diversos hechos, análisis y noticias sobre nuevas perspectivas no sólo
económicas sino provenientes de otros enfoques. En el agregado, observamos el fracaso rampante
del socialismo de estado, sistema que no pudo desarrollarse a la par con el capitalismo, y tras la
caída del Muro de Berlín, cesó en su pugna por predominar y abrazó finalmente el modelo otrora
antagonista; posteriormente, asistió a una desordenada y traumática transición en la orientación de
los sistemas de producción y los esquemas de propiedad de tierras y viviendas de los ciudadanos
tanto en Rusia como las ex-Repúblicas Soviéticas. Mientras tanto, China, donde el socialismo de
estado prosigue en su "luna de miel" con el modelo capitalista occidental, exhibe un curioso proceso
en el que el Estado exige ser socio partícipe y activo en la constitución y las operaciones económicas,
haciéndose lenta pero eficazmente a tecnología, forma de hacer las cosas (“know how”), derechos,
patentes y capacidad comercial. Entretanto el país no evidencia reformas sustanciales de fondo en
sus esquemas de propiedad privada y conducción de la sociedad, con su particular entendimiento
de los derechos humanos de la población. Allá, por ejemplo, los medios de producción comparten
su propiedad con el Estado mientras que los medios de comunicación y expresión ciudadana siguen
sojuzgados a la rígida normativa estatal y el disentimiento y los delitos de Estado aún se pagan con
duras condenas y aún, con la muerte.
En buena parte de Occidente, hemos transitado dentro de un sistema ambivalente, donde el
florecimiento de un modelo económico de comercio abierto conducido por leyes de mercado y libre
empresa, nos ha llevado a experimentar niveles de desarrollo tecnológico y bienestar nunca antes
conocidos por la humanidad. Sin embargo, este admirable modelo creó paralelamente un sistema
alterno, conocido en buen romance como "Capitalismo Salvaje", que remeda un sistema de drenaje
causante de no pocas distorsiones y desarreglos nefastos para considerable parte de la sociedad. En
2. algunos países, los mayores frutos del éxito económico han sido gradualmente acaparados por
grupos de poder que han ido creando poderosas redes y conglomerados en contubernio
escalofriante con círculos de gobierno, bancos, medios de información, sistemas judiciales y otros
núcleos de poder, que han ido creando una enorme y asfixiante tenaza cuyos resultados están a la
vista. En paralelo a estos círculos de poder, prosperan gigantescos negocios centrados en antivalores
tales como como el tráfico de personas, armas y narcóticos, la pornografía y el contrabando, la
minería ilegal, el comercio de especies amenazadas, la usura, el traslado secreto de enormes cifras
de dinero, el periodismo amañado y el “amarillismo”, el robo y tráfico indebido de información, etc.
De igual manera, la corrupción permea nuestro sistema y lo corroe gradualmente aprovechando la
laxitud de muchos de nuestros mal llamados líderes, de forma que muchos de los trámites y
decisiones que tienen que ver con proyectos sociales o productivos en lo tocante a prioridades,
asignaciones de recursos o nombramientos de directivos, equipos de trabajo y otros incumbentes,
son asignados a los grupos que pagan “coimas” y tranzan todo tipo de influencias y favores de forma
totalmente inescrupulosa y viciada. Como consecuencia de esto, se aprecian importantes niveles de
acumulación de recursos y enormes desajustes causados por las astronómicas ganancias que logran
las organizaciones corruptas más influyentes, así como varios grupos económicos que han
conseguido adueñarse de las riendas del poder de esta forma. Los desbalances favorecen la
acumulación desproporcionada de riquezas a costa del desmedro del ciudadano de a pie, el
pensionado, el trabajador de salario mínimo y el pequeño empresario o el emprendedor, quienes
se ven forzados a pagar precios altos por muchos bienes y servicios, así como tasas de crédito
exorbitantes para financiar y sostener sus negocios. Me pregunto, ¿traduce eso respeto, justicia o
equidad social? Y ya no me río mientras me pregunto por qué los gobiernos no intervienen…
La prueba reina de la magnitud de este fenómeno es que los dos bloques económicos más
importantes del mundo han evidenciado crisis económicas de enormes repercusiones, mientras que
buena parte del mundo en desarrollo, léase América Latina, Africa y varias naciones asiáticas
principalmente, siguen sin poder satisfacer decentemente las expectativas económicas y sociales de
sus pueblos.
Curiosamente, los fenómenos económicos asociativos y cooperativos más democráticos y
equitativos, continúan lanzando y trabajando en sus propuestas como rayo de esperanza dentro de
esta paradójica situación. La cooperación abierta, la Innovación social de fuente abierta,
caracterizada por la ausencia de patentes y derechos excluyentes sobre "lo inventado", surgen como
sistemas que permiten que los individuos desarrollen sus iniciativas de una forma verdaderamente
libre y productiva, así sea en pequeña y mediana escala. Igualmente en las empresas capitalistas
viene surgiendo con cada vez más fuerza un enfoque que las obliga a publicar cada vez más visibles
balances de sus resultados con las comunidades y públicos que atienden.
Un modelo extraordinario para examinar estos nuevos contextos es la Economia del Bien Comun,
(en el original alemán, Gemeinwohl-Ökonomie) planteada por un grupo de economistas y
empresarios europeos liderados por el austríaco Christian Felber. Este movimiento llama a instaurar
un nuevo modelo económico donde las empresas sean cada vez más democráticas y tengan reglas
de juego limpias, saliendo de este ciclo pernicioso de los juegos poder, acumulación, fragmentación
y competencia despiadada que han desajustado los marcos económicos de legislación, asignación
de recursos y manejos de información que han desvirtuado la economía occidental. Lo que se
3. persigue en realidad es contundente y simple: la actividad económica debe servir a los intereses
generales, denominados bien común o bienestar público (‘’common good’’ en inglés y ‘’gemeinwohl’’
en alemán).
Es cada vez más evidente que lo que el mundo requiere a gritos es la implantación de una economía
que si bien, continúe rigiéndose por parámetros de mercado y libre empresa e iniciativa de los
individuos, tenga el Bienestar Común como objetivo muy visible. Esto requiere modificar el modelo
capitalista de forma importante, sobre todo modificando el énfasis excesivo en el afán de lucro, el
crecimiento y la competencia despiadada, asignando creciente importancia a la observación de una
serie de principios básicos como la Confianza, la Transparencia, la Solidaridad, la Generosidad, la
Compasión y el Cuidado de la Naturaleza y los recursos, entre otros. Cada uno de estos valores que
refuerza la aspiración del ser humano de “ser digno de toda consideración y respeto”, debe
traducirse en comportamientos, hechos y rituales organizacionales e indicadores muy precisos,
observables y medibles.
Para los defensores de la Economía del Bien Común, a aquellas empresas que se transformen y rijan
por estos valores, deben otorgarse ventajas legales y comerciales que les permitan sobrevivir y
tomar distancia frente a los defensores del lucro y la competencia despiadada.
En la economía real actual se mide el éxito económico con valores o indicadores monetarios como
el producto interno bruto, los niveles de crecimiento en ventas, los índices de utilidad y participación
de mercado. Estos indicadores no consideran para nada las necesidades reales de los seres humanos
y el medio ambiente en el que vivimos y no dicen nada sobre si la gente es feliz, si hay guerra, si se
vive en una dictadura o una democracia, si se sobreexplota o contamina el medio ambiente, si se
respetan los derechos humanos o no, etc. De la misma manera, que una empresa obtenga un alto
nivel de beneficios no indica nada sobre las formas como las obtuvo, las condiciones de sus
trabajadores ni sobre lo que produce, ni cómo lo produce.
En yuxtaposición, un balance social orientado al Bien Común debe mostrar claramente cómo como
las empresas propenden por la dignidad humana, la solidaridad, la justicia social, la sostenibilidad
ecológica, la participación democrática y transparente con todos sus públicos, empleados,
proveedores, financiadores y clientes y a dónde van a parar las ganancias generadas. Igualmente,
debe ilustrar si las empresas cumplen con las normas de salud y seguridad, si prohiben la esclavitud
o el maltrato infantil, la contaminación del medio ambiente, el despilfarro, si hay desigualdad en el
trato o la remuneración entre hombres y mujeres, y qué tanto se discrimina entre los ingresos de
los trabajadores de alto, medio y bajo nivel, en qué se invierten las ganancias, entre otros factores.
Si existe transparencia en este tipo de información, la evaluación de la existencia o no de esos
valores debe ser visible y debe permitir al consumidor de la calle escoger y preferir los productos y
servicios que desee adquirir, provenientes de empresas con cuyos valores simpatice o esté alineado.
Una de las iniciativas de este Modelo que se expande rápidamente por Europa e Iberoamérica, es
ganar visibilidad y que las personas podamos acceder a modelos prácticos y accesibles para practicar
los principios y valores del modelo tanto a nivel individual, empresarial como de gestión pública. Por
ello, los “Campos de Energía” de la EBC se encuentran enfrascados en una campaña educativa del
4. Modelo que incluya formas de establecer los comportamientos deseados, observarlos, practicarlos,
sistematizarlos y medirlos a nivel del individuo, las empresas y las entidades de gobierno
Christian Felber y Diego Isabel, prestigiosos adalides del Movimiento LA ECONOMIA DEL BIEN
COMUN visitaron Colombia a mediados del 2014 y realizaron la Constitución del Movimiento EBC
Colombia.
Recomendamos revisar el libro básico que defiende este modelo, “La Economía del Bien Común”
(publicado por Editorial Deusto, del Grupo Planeta, Madrid) y examinar el sitio virtual de Christian
Felber y La Economía del Bien Común en español en el link http://economia-del-bien-
comun.org/es/content/la-idea
Otro libro maravilloso para consultar es “Yo Soy Tú” escrito por Diego Isabel La Moneda, editado
por Editorial Octaedro de Barcelona, que se consigue también ya en nuestro país. El sitio virtual de
Diego es otro lugar maravilloso para inspirarse y tomar ideas. Link http://yosoytu.com/
Existen muchas otras redes virtuales creadas en Twitter ( #Economia Bien Comun), Facebook y
LinkedIn, donde se encuentran artículos y videos donde se explaya este modelo.
Oscar Ayala Arana
Economista – Consultor - Coach
Movimiento EBC Colombia
P. web. https://www.facebook.com/EBCCOLOMBIA?fref=ts
e-mail oscaruro@gmail.com Twitter @oscaruro
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Referencias e Información Complementaria
Videos y links de Christian Felber:
http://espanol.video.search.yahoo.com/yhs/search;_ylt=A0LEVvc8kyxTOFIASiUvEwx.;_ylu=X3oDMTBsa3ZzMnBvBHNlYw
NzYwRjb2xvA2JmMQR2dGlkAw--?p=economia+del+bien+comun&hspart=btbar&hsimp=yhs-002
Videos y links de Diego Isabel de la Moneda:
http://yosoytu.com/
http://yosoytu.com/economia-del-bien-comun-la-utopia-realizable/
Otros:
https://www.facebook.com/EBCCOLOMBIA?fref=ts (p.web EBC Colombia)
http://www.slideshare.net/oscaruro/econ-del-bien-comun-cali-abril-2014
http://www.transicionsostenible.com/la-economia-del-bien-comun-de-christian-felber.htm
http://www.youtube.com/watch?v=U4tL4eS--XM www.gemeinwohl-oekonomie.org
http://www.gemeinwohl-oekonomie.org/feedback-medien/christian-felber_video_caratula/
http://www.youtube.com/watch?v=KjmU5lqo3xY&feature=share
http://www.youtube.com/watch?v=rsT7ain14_4&feature=related
http://www.youtube.com/watch?v=95d48wLSalA&feature=relmfu