El documento clasifica las artes tradicionales, colocando la arquitectura en primer lugar, seguida de la danza, la escultura, la música, la pintura y la poesía. También menciona nuevas artes como la gastronomía, la perfumería, la televisión, el teatro, la moda, la publicidad, la animación y los videojuegos, pero no especifica cuál podría ser considerada el décimo arte.