Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024
Mi mamá es bruja
1. Mi mamá es bruja.
Mi mamá es una bruja, una bruja sin arrugas, sin
narizota, con medias y con botas, pero bruja,
bruja, requetebruja.
Mi mamá tiene un enorme sombrero puntiagudo,
pero no lo usa nunca porque dice que es muy feo y
que para volar en escoba lo mejor es el casco,
por si los coscorrones y tal.
En la cocina, junto al microondas, guarda una
olla muy gorda donde prepara pociones con
ojos de escorpiones y alas de mosquito, y una
sopa muy rica cuando estoy malito.
Mi mamá es bruja rebruja, una bruja de las de
verdad verdadera, que lanza hechizos que son la
repera.
Eso les dije hoy a mis amigos… pero ninguno se
sorprendió.
-¡ He dicho que mi mamá es una bruja! -repetí por si no
me habí an escuchado.
Y Adriana dijo:
-Pfff…. ¡ Vaya cosa! Mi mamá también es bruja: todas
las noches asusta a los monstruos que se esconden
en mi armario.
Y Mario dijo:
-¡ Bah! Mi mamá también es bruja: me cura todas, pero
todas las heridas sólo con darme un beso.
Y Lucí a dijo:
-Mi mamá también hace magia: en un pispas convierte
trapos y papeles en unas muñecas preciosas.
Y Daniel dijo:
-Pues
la
mí a
sabe
cómo
encontrar
absolutamente todo lo que se pierde y
absolutamente todo lo que nadie encuentra.
todo,
todo,
Yo bufé y rebufé. Eso no podí a ser:
-¡ Que no, que mi mamá es bruja pituja y rebruja, con
varita y gato granuja!
2. Pero mis amigos seguí an dale que dale, que si mi
mamá también es bruja, que si mi mamá también
hace magia, que si mi mamá hace esto, que si mi
mamá hace lo otro, que si mi mamá hace aquello…
Yo entonces me callé y pensé, repensé y seguí
pensando. Y tras mucho pensar dije:
-Entonces, ¿todas las mamás son brujas?
-¡ Claro! -dijeron todos mis amigos.
Y yo volví a pensar otro rato. Un rato muy largo
porque a mí me gusta mucho pensar. Y cuando
pasó ese rato dije:
-Bueno, si vosotros lo decí s… ¡ Pero que quede bien
clarito que de todas las brujas mamás mi mamá es la
más bruja y la más especial!
Y seguí jugando con mis amigos hasta que mi
mamá vino a buscarme volando en su escoba.
La Bruja que no sabí a decir mentiras
Érase una vez, una bruja que no podí a parar de
decir lo que pensaba. Era la bruja con más
sinceridad de todos los tiempos.
Para
la
bruja
sincera,
esto
sólo
suponí a
problemas. Por ejemplo, un dí a cuando iba a
hechizar a un monstruo malo, le dijo:
-“Estate
quieto
monstruo,
que
para
hechizarte
encerrarte en una cueva necesito que no te muevas…”
y
3. Y claro, el monstruo al oí r esto, salió corriendo
y la bruja sincera no volvió a verle el pelo…
Y esto le pasaba muchas veces, …que cuando iba a
hacer un conjuro a alguien, antes de realizarlo
le contaba lo que iba a hacerle, y claro, todo el
mundo
salí a
corriendo,
y
así
no
se
puede
embrujar a nadie.
La bruja sincera estaba preocupada, porque no
podí a
realizar
su
trabajo
sin
que la
gente
saliera corriendo…
Un dí a, después de viajar con su escoba durante
toda la noche para reflexionar, llegó al castillo
de las brujas y les dijo a todas sus compañeras:
-“No puedo más, no valgo para ser bruja…”.
Y a continuación se echó a llorar…
La bruja superiora se acercó a ella y le dijo:
-“Tengo una idea: tú, la bruja sincera, a partir de
ahora serás nuestra entrenadora personal...”
4. La bruja sincera dejó de llorar, y se quedó
extrañada porque no sabí a a qué se referí a la
bruja
superiora,
así
que
esperó a
que
ésta
siguiera hablando…
La bruja superiora prosiguió:
-“Bruja sincera, ¿acaso no eres la mejor de nosotras
en decir la verdad sin tapujos? Pues eso es una gran
virtud, a partir de ahora, todos los dí as, todas las
brujas tendremos una reunión una a una contigo,
para que nos digas en qué cosas podemos mejorar. Y
como tú nos dirás la verdad, todas mejoraremos poco
a poco. Serás nuestra entrenadora personal”.
A partir de ese dí a, la bruja sincera tuvo un
nuevo trabajo, en el que ejercí a más, de sincera
que de bruja, y todas las brujas del castillo
mejoraron
mucho
gracias
sincera.
FIN
a la
súper
bruja