Japón propone medidas para proteger los recursos hídricos ante el cambio climático, como integrar medidas para proteger las fuentes de agua dulce, luchar contra inundaciones y sequías, y fomentar la cooperación internacional en investigación e implementación de políticas a largo plazo. Japón también abordará nuevos retos para cumplir con sus responsabilidades medioambientales de acuerdo a su constitución y merecer la confianza de la comunidad internacional.
Japón protege recursos hídricos y propone cooperación internacional
1. Órgano: Consejo Económico y Social
Tema: Protección de la calidad y suministros de recursos hídricos.
País: Japón.
Delegados: *Deisy Victoria Benítez.
*Ruth Anabella Cáceres.
Posición oficial de la Delegación de Japón
En las últimas décadas el ciclo hidrológico, que incluye las inundaciones y sequías, se ha vuelto en
algunas regiones un tanto extremas hasta catastróficas en cuanto a su comportamiento, esto sin
lugar a dudas se da a causa de un cambio climático global y a los diferentes tipos de
contaminantes que arrojamos diariamente en la atmosfera y en los causes de agua, poniendo en
riesgo especialmente los recursos de agua dulce, tanto su calidad como disponibilidad.
La Capital de Japón es Tokio, y está localizado en (Honshu), la más grande de 6852 islas, ubicada
en la tierra más fértil y donde se encuentra concentrada la mayor parte de la población.
La complejidad de la topografía de Japón proporciona a la tierra una gran belleza y es escenario de
dramáticos contrastes: lagos formados por aguas del deshielo en medio de las montañas,
gargantas rocosas, ríos turbulentos, picos y cascadas maravillosas. Todos estos accidentes
topográficos constituyen una fuente de inspiración y deleite tanto para nuestra nación como para
los visitantes extranjeros y nos obliga ante todo a protegerlas y conservarlas a través del ahorro
energético y las energías basadas en nuevas tecnologías.
Japón es el decimo país más poblado del mundo con sus más de 126 millones de habitantes, el
agua potable abastece al 97,4% de la población y cuenta con un sistema de alcantarillado que
cubre al 72, 7% de la población total.
El Gobierno de Japón, presenta posturas muy concretas sobre la conservación y protección de sus
suministros hídricos a largo plazo, en lugar de mecanismos temporales que intentan dar una
solución de emergencia ambiental, las primeras inversiones al sistema de agua potable se
manifestaron en diferentes periodos; desde 1950 a 1970 con la iniciación de una lucha para la
cobertura, infraestructura, alcantarillado y renovación de sus sistemas de suministros, pues; se
abastecían con instalaciones totalmente obsoletas de 30 – 40 años, los suministros requerían una
fuerte renovación presentando datas de vencimiento, el material de los sistemas eran de escaza
calidad por lo pocos recursos que había tras la derrota de la segunda guerra mundial. Por otro lado
desde 1980 al 2000 aparecen nuevos retos que no fueron atendidos y que no eran conocidos,( la
migración de las personas del campo a la ciudad, la concentración poblacional en zonas urbanas y
la subsecuente demanda de servicios e infraestructura sanitaria), impulsaron a un aumento en el
abasto de agua para uso domestico y con ello fue mayor el impacto de las descargas de aguas
residuales sobre los cuerpos de agua, a tal grado que la contaminación que generaban llego a
superar a la de las fuentes industriales. Otro grave problema al que nos enfrentamos es el mal
sabor de la llave de grifo con olor a cloro, el cual genera una preferencia por parte de la ciudadanía
al agua embotellada.
2. En el año 1999 Japón implementó un plan hacia el año 2015 en el cual busca mejorar la situación
del agua existente.
.Establecer sistemas de agua sustentables, aumentar la cantidad de agua que puedan ser
suministrados de manera constante. Esto se trabajaría con los gobiernos locales para conocer sus
requerimientos de agua.
.Conservar y mejorar el agua y su medio ambiente, para asegurar la cantidad y calidad de
abastecimiento de agua mediante la preservación y el desarrollo de fuentes de aguas
subterráneas.
.Promover la cultura del agua, es decir crear consciencia en el público sobre la importante relación
que existe entre el agua y los humanos, así como fomentar la participación pública en actividades
de preservación y mejora de los recursos del agua.
Con orgullo podemos decir que Japón es un país que ha logrado encontrar el balance entre su
gran población y sus recursos de agua.
Japón Propone:
.Integrar medidas de protección y conservación de posibles fuentes de abastecimiento de agua
dulce, especialmente las aguas subterráneas.
. Luchar contra las inundaciones y las sequías, entre otras cosas, el análisis de riesgos y la
evaluación de las consecuencias tanto sociales como ambientales y tratar se sentar bases de
cooperación regional.
. Fomentar la cooperación internacional en la investigación científica sobre los recursos de agua
dulce y salada y trazar políticas de proteccionismo internacional a largo plazo, teniendo en cuenta
las posibles repercusiones del cambio climático.
. Asentar las bases para un desarrollo urbano y rural sostenible en conjunto con las industrias
dedicadas a la producción de alimentos en cuanto a la utilización del agua y los productos
químicos utilizados.
El mundo se ha alterado significativamente debido al cambio climático que estamos afrontando al
igual que nuestros objetivos, Hoy en día existe la urgente necesidad para toda la comunidad
internacional, incluido Japón, de emprender nuevos retos en materia de desarrollo y protección de
los recursos hídricos. De cara a estos nuevos retos, numerosos países desarrollados han reforzado
sus políticas medioambientales para enfrentase a los serios problemas que afrontan los países en
vía de crecimiento.
De conformidad con el espíritu de la Constitución japonesa, Japón abordará firmemente estos
nuevos retos, para cumplir sus responsabilidades en consonancia con su potencial nacional;
tratará de ser merecedor de la confianza de la comunidad internacional y velará tanto en el
interior del país como en el extranjero para paliar cualquier atentado a la protección de la calidad
y suministro de recursos hídricos.