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Preparado por: Gilda T. Domínguez
Ministerio Cristiano La Semilla.org
Confiado hasta en la hora de la
muerte
por: Charles Spurgeon
Devocional
A los pies del Maestro
6 En cuanto a mí, mi vida ya fue derramada como una ofrenda
a Dios. Se acerca el tiempo de mi muerte.
7 He peleado la buena batalla, he terminado la carrera y he permanecido
fiel. 8 Ahora me espera el premio, la corona de justicia que el Señor, el
Juez justo, me dará el día de su regreso; y el premio no es sólo para mí,
sino para todos los que esperan con anhelo su venida.
2 Timoteo 4:6-8
¡Con cuanta confianza pablo contempla
la perspectiva de la muerte!
No se atemoriza ante ella. Con la calma
y la serenidad que otorgan no solo la
resignación y la sumisión sino la
seguridad y el valor, se muestra gozoso y
feliz e incluso encantado con la
esperanza de que su cuerpo mortal
se desintegre y sea revestido con el
nuevo cuerpo que Dios ha preparado
para sus santos.
2 Corintios 5:4 (NTV)
4 Mientras vivimos en este
cuerpo terrenal, gemimos y
suspiramos, pero no es que
queramos morir y
deshacernos de este cuerpo
que nos viste. Más bien,
queremos ponernos nuestro
cuerpo nuevo para que este
cuerpo que muere sea
consumido por la vida.
Aquel que puede hablar de la tumba y
de lo que viene después con tan sabia
anticipación, fe y ferviente deseo como
lo hizo Pablo es digno de admiración.
Los príncipes bien pueden
entregar su corona ante tan
certera y segura esperanza de
inmortalidad. Si son capaces
de decir con él “ Así que nos
mantenemos confiados , y
preferíamos ausentarnos de
este cuerpo y vivir junto al
Señor. Bien pudieran cambiar
sus rangos terrenales por tal
recompensa.
De este lado del cielo ¿ Qué puede ser más terrenal que
prepararnos bien para pasar el rio de la muerte.?
2 Corintios 5:8Nueva
Traducción Viviente (NTV)
8 Sí, estamos plenamente confiados,
y preferiríamos estar fuera de este
cuerpo terrenal porque entonces
estaríamos en el hogar celestial con
el Señor.
Por otra parte ¡Que estado mental tan temible y
espantoso el de las personas que con nada ante ellos
que no sea la muerte no tienen esperanza y no
encuentran salida, la mortaja es su último vestido, la
tumba y el cementerio su destino! Sin la esperanza de
volverse a levantar en un futuro mejor, sin la
perspectiva de ver a Dios cara a cara con gozo, con
razón cualquier referencia a la muerte disgusta a
estos hombres.
1 Corintios 15 Palabra de Dios para Todos (PDT)
15 Hermanos, ahora quiero que recuerden la
buena noticia de salvación que les anuncié. Han
aceptado ese mensaje y están firmes en él. 2 Es el
mensaje que los salva si siguen creyendo en lo
que les anuncié. Si no, habrán creído en vano.
3 Les he comunicado el mensaje que recibí, del
cual les he dicho lo más importante: que Cristo
murió por nuestros pecados, tal como dicen las
Escrituras. 4 Que fue enterrado y al tercer día
resucitó, como dicen las Escrituras. 5 Y que se
apareció a Pedro, y luego a los doce. 6 Después se
apareció a más de quinientos hermanos al mismo
tiempo.
42 Así será la resurrección de los muertos. El cuerpo que se pone en
la tierra se pudre. Pero el cuerpo que es resucitado nunca se pudre.
43 El cuerpo que se entierra no tiene honor, pero el que resucita es
glorioso. El cuerpo que se entierra es débil, pero el que resucita es
fuerte. 44 Lo que se entierra es el cuerpo físico, pero lo que resucita
es el cuerpo espiritual. Pues así como hay cuerpos físicos, también
hay cuerpos espirituales.
51 Pero escuchen este secreto: No todos
moriremos, pero todos seremos
transformados. 52 En un abrir y cerrar de
ojos seremos transformados. Esto
sucederá al toque final de la trompeta,
pues la trompeta va a sonar, y los muertos
serán resucitados con un cuerpo que
nunca se pudre y todos seremos
transformados. 53 Nuestro cuerpo que se
va a podrir, se vestirá con lo que nunca se
pudre; y este cuerpo que va a morir, se
vestirá con lo que nunca muere. 54 Cuando
lo que se pudre se vista con lo que nunca
se pudre, y cuando lo que muere se vista
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dice la Escritura se hará realidad:
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  • 2. 6 En cuanto a mí, mi vida ya fue derramada como una ofrenda a Dios. Se acerca el tiempo de mi muerte. 7 He peleado la buena batalla, he terminado la carrera y he permanecido fiel. 8 Ahora me espera el premio, la corona de justicia que el Señor, el Juez justo, me dará el día de su regreso; y el premio no es sólo para mí, sino para todos los que esperan con anhelo su venida. 2 Timoteo 4:6-8
  • 3. ¡Con cuanta confianza pablo contempla la perspectiva de la muerte! No se atemoriza ante ella. Con la calma y la serenidad que otorgan no solo la resignación y la sumisión sino la seguridad y el valor, se muestra gozoso y feliz e incluso encantado con la esperanza de que su cuerpo mortal se desintegre y sea revestido con el nuevo cuerpo que Dios ha preparado para sus santos.
  • 4. 2 Corintios 5:4 (NTV) 4 Mientras vivimos en este cuerpo terrenal, gemimos y suspiramos, pero no es que queramos morir y deshacernos de este cuerpo que nos viste. Más bien, queremos ponernos nuestro cuerpo nuevo para que este cuerpo que muere sea consumido por la vida. Aquel que puede hablar de la tumba y de lo que viene después con tan sabia anticipación, fe y ferviente deseo como lo hizo Pablo es digno de admiración.
  • 5. Los príncipes bien pueden entregar su corona ante tan certera y segura esperanza de inmortalidad. Si son capaces de decir con él “ Así que nos mantenemos confiados , y preferíamos ausentarnos de este cuerpo y vivir junto al Señor. Bien pudieran cambiar sus rangos terrenales por tal recompensa. De este lado del cielo ¿ Qué puede ser más terrenal que prepararnos bien para pasar el rio de la muerte.?
  • 6. 2 Corintios 5:8Nueva Traducción Viviente (NTV) 8 Sí, estamos plenamente confiados, y preferiríamos estar fuera de este cuerpo terrenal porque entonces estaríamos en el hogar celestial con el Señor.
  • 7. Por otra parte ¡Que estado mental tan temible y espantoso el de las personas que con nada ante ellos que no sea la muerte no tienen esperanza y no encuentran salida, la mortaja es su último vestido, la tumba y el cementerio su destino! Sin la esperanza de volverse a levantar en un futuro mejor, sin la perspectiva de ver a Dios cara a cara con gozo, con razón cualquier referencia a la muerte disgusta a estos hombres.
  • 8. 1 Corintios 15 Palabra de Dios para Todos (PDT) 15 Hermanos, ahora quiero que recuerden la buena noticia de salvación que les anuncié. Han aceptado ese mensaje y están firmes en él. 2 Es el mensaje que los salva si siguen creyendo en lo que les anuncié. Si no, habrán creído en vano. 3 Les he comunicado el mensaje que recibí, del cual les he dicho lo más importante: que Cristo murió por nuestros pecados, tal como dicen las Escrituras. 4 Que fue enterrado y al tercer día resucitó, como dicen las Escrituras. 5 Y que se apareció a Pedro, y luego a los doce. 6 Después se apareció a más de quinientos hermanos al mismo tiempo. 42 Así será la resurrección de los muertos. El cuerpo que se pone en la tierra se pudre. Pero el cuerpo que es resucitado nunca se pudre. 43 El cuerpo que se entierra no tiene honor, pero el que resucita es glorioso. El cuerpo que se entierra es débil, pero el que resucita es fuerte. 44 Lo que se entierra es el cuerpo físico, pero lo que resucita es el cuerpo espiritual. Pues así como hay cuerpos físicos, también hay cuerpos espirituales.
  • 9. 51 Pero escuchen este secreto: No todos moriremos, pero todos seremos transformados. 52 En un abrir y cerrar de ojos seremos transformados. Esto sucederá al toque final de la trompeta, pues la trompeta va a sonar, y los muertos serán resucitados con un cuerpo que nunca se pudre y todos seremos transformados. 53 Nuestro cuerpo que se va a podrir, se vestirá con lo que nunca se pudre; y este cuerpo que va a morir, se vestirá con lo que nunca muere. 54 Cuando lo que se pudre se vista con lo que nunca se pudre, y cuando lo que muere se vista con lo que nunca muere, entonces lo que dice la Escritura se hará realidad:
  • 10. «La muerte ha sido devorada por la victoria. 55 Muerte, ¿dónde está tu victoria? Muerte, ¿dónde está tu aguijón?» [ 56 El aguijón de la muerte es el pecado. El poder del pecado es la ley. 57 Pero demos gracias a Dios que nos ha dado la victoria a través de nuestro Señor Jesucristo. 58 Por lo tanto, hermanos, permanezcan firmes y no dejen que nada los haga cambiar. Dedíquense totalmente a trabajar para el Señor, bien saben que su trabajo no es en vano. 1 Corintios 15 En Jesucristo hay esperanza. Busca a Dios. El Te Ama.