La Rioja tiene tres sectores económicos principales: el sector primario basado en la agricultura y ganadería, especialmente la vid y horticultura; el sector secundario con industrias alimentarias como bodegas y conservas, además de pequeñas fábricas; y el sector terciario donde el turismo, especialmente el relacionado con el vino, tiene gran importancia. La cultura y economía de La Rioja gira en gran medida en torno a la vid y el vino.