Cuál es la mejor manera de compartir nuestros archivos
1. ¿Cuál es la mejor manera de compartir nuestros archivos? ¿Hay alguna que destaque o
son complementarias? Estas y otras preguntas las intentaré dejar claras al final de esta
serie de artículos, en el que voy a comparar las tres vías más extendidas para compartir
archivos: el clásico eMule, la versátil red Bittorrent y las recientemente famosas webs
de descargas directas. Antes de meternos de lleno, empecemos por definir estas tres
redes:
Los contrincantes
La que más tiempo lleva entre nosotros es eMule (aMule en Mac/Linux), y su
funcionamiento es sencillo: nos bajamos este programa e instantáneamente tenemos
acceso a todos los ficheros que otros usuarios están compartiendo a través de ese mismo
programa, valiéndonos de un sistema de búsquedas integrado para encontrar los
archivos que necesitamos. Este programa es el más famoso con este sistema, aunque
existen decenas de redes diferentes y decenas de clientes, como por ejemplo Ares,
SoulSeek o LimeWire, y los ya desaparecidos Napster, Audiogalaxy o Kazaa (como si
lo estuviera), y casi cualquier cosa que diga sobre el eMule también se aplica a estos
programas/redes.
La siguiente generación de aplicaciones P2P (la siguiente de la siguiente, mejor dicho)
le corresponde a Bittorrent, que lleva un par de años viviendo su época dorada. Su
diferencia es que apenas se depende de un servidor central (solo para empezar las
conexiones), lo que ha provocado mayores velocidades en archivos muy demandados
a costa de prácticamente imposibilitar la descarga de archivos más antiguos o menos
famosos. Además, al contrario de las redes anteriores, la búsqueda es más difícil y
depende de páginas webs que indexen esos archivos; otra diferencia es que tenemos que
descargarnos un pequeño archivo .torrent que contiene la información sobre esos
archivos, algo un poco más incómodo.
Por último, el tercer gran servicio que está despuntando son los servidores de descarga
directa, que echan por tierra todas las ideas P2P y vuelven al clásico modelo de los
servidores. Con este método, pagamos un servicio por X días, y por ese tiempo
Marcos Gallo García Grupo B ADE
2. podemos descargar cualquier archivo subido por sus usuarios directamente de sus
servidores al máximo de nuestra conexión. Los archivos se encuentran de la misma
manera que los .torrent, en Google o en foros, y también suelen ofrecer servicios
gratuitos a costa de varias limitaciones. Los más conocidos son Rapidshare y
Megaupload, aunque hoy en día salen como setas; como clientes tenemos cualquier
gestor de descargas, también los hay a patadas.
Una vez hechas las presentaciones, vayamos al lío, en este caso dividido por categorías:
Catálogo
Según mi experiencia, la red que mayor catálogo tiene es la del eMule, con bastante
diferencia respecto a cualquier otra. Por un lado Bittorrent gestiona exitosamente los
archivos más demandados, como el último capítulo de tu serie preferida o la última
película de Batman; pero por el otro lado fracasa estrepitosamente con la larga cola:
¿cómo puedo bajarme ese capítulo de una serie rara de los años 60? Siendo menos
extremistas, ¿cómo puedo bajarle a mi hija/hermana La Sirenita sin morir en el intento?
Algo parecido le pasa a las webs de descarga directa, aunque por otros motivos. Ya sea
porque el archivo ha tenido demasiado éxito o porque ha tenido demasiado poco, tanto
por la criba continua que hacen en prácticamente todos los servicios o por las
limitaciones de borrado de los archivos (no descargado durante una semana, por
ejemplo), los archivos alojados en estas redes suelen durar pocos meses.
Frente a esto, los archivos en eMule duran tanto tiempo como los usuarios quieran,
porque la copia está en sus máquinas. Se tardará más o menos en transmitirse, pero los
archivos están ahí.
Búsqueda de archivos
Esto es discutible, pero creo que eMule también gana este apartado a bastante
distancia de Bittorrent o la descarga directa. Es el único que ofrece un buscador
integrado, y si no nos gusta pues podemos visitar una de las miles de webs/foros que
recolectan o suben esos archivos.
Sí, está claro que con un poco de maña puedes encontrar cualquier cosa en la red
Bittorrent, incluso usando un simple buscador como el de Mininova, The Pirate Bay o
Isohunt, pero sigue siendo más difícil que la búsqueda en eMule, aunque pueda ser más
lenta en algunas ocasiones. No, tampoco es lo mismo buscar en tu web de referencia de
descarga directa, aunque para ti sea lo más rápido hay que reconocer que la alternativa
sigue siendo mucho más versátil y sencilla.
Todo esto está pensado para un usuario no muy avanzado, así que aunque lo he medido
de manera bastante objetiva, está claro que al final te puedes acostumbrar a buscar los
archivos mediante Google, y puede que la mayoría de las veces lo hagas en menos
tiempo.
Marcos Gallo García Grupo B ADE
3. Velocidad
Aquí no hay discusión: la descarga directa gana. Punto. Quizás habría que matizar las
diferencias entre las redes y cómo afecta a la velocidad, así que allá vamos:
Para empezar, la red eMule, en general, es algo más lenta que Bittorrent, aunque en
archivos muy recientes la experiencia de los usuarios puede ser dispar, lo mejor es ver
qué tal te va cada una. Con Bittorrent los archivos muy recientes se descargan bastante
rápido, aprovechando bastante tu conexión. Y destaco lo de muy recientes, porque un
archivo con más de una semana puede que alcance velocidades paupérrimas
aunque 6 días antes fuera rapidísimo.
De cualquier forma, hay que tener en cuenta que en estas dos redes la velocidad de
descarga depende de los demás usuarios, es decir, que es muy variable y no asegura
nada. Frente a estas alternativas, la velocidad que ofrecen los servidores de descarga
directa es la máxima de tu conexión (hasta ciertas velocidades, evidentemente),
independientemente de la hora que sea o del tiempo que ese archivo fue subido: si está
disponible, la velocidad es la máxima.
Este es un aspecto que tienen muy en cuenta los usuarios, y es el principal motivo por el
que estos servicios está teniendo un éxito relativo.
Fin de la primera parte
Aquí concluye el primer capítulo de esta mini-serie diaria, que por fuerza he tenido que
recortar para no hacerlo demasiado pesado. Empezando mañana, en las sucesivas
entregas hablaré del control que nos ofrecen estas redes sobre nuestras descargas, del
impacto que tienen en el resto del sistema y también discutiremos aspectos como la
diferencia entre los servicios de pago y los gratuitos; para al final extraer unas
conclusiones que nos permitan decidir qué red usar en cada momento.
Marcos Gallo García Grupo B ADE
4. Control
Aquí tenemos un punto bastante importante: el control que nos dan las aplicaciones
sobre las descargas y qué efectos colaterales tiene tanto para las propias descargas
como para el resto del sistema. Para empezar, los tres sistemas nos dan control para
limitar la velocidad de descarga, de tal manera que podemos evitar que el uso de estos
programas afecte a otras tareas, como la navegación diaria por la web.
Una vez tenido esto en cuenta, las diferencias se acentúan enormemente, ya que tanto
eMule como Bittorrent utilizan una cantidad considerable de ancho de banda de
subida. En la realidad, si limitamos esa velocidad también limitaremos severamente la
de bajada, lo que puede eternizar esas descargas. Y como disponemos de un ancho de
banda mucho menor para el envío que para la bajada, si no la limitamos crearemos un
cuello de botella que hará imposible (o dolorosamente lenta) la navegación, por mucho
ancho de banda total que tengamos sin usar.
Las descargas directas apenas necesitan enviar datos para mantener viva la conexión,
así que el efecto colateral es mínimo, y respetará los límites impuestos sin recortar la
velocidad de bajada más de lo que le especifiquemos. Todo esto se traduce en que
podemos paralelizar esas tareas, que no se van a canibalizar entre ellas y que por tanto
no hay que elegir entre parar nuestras descargas o dejar de navegar por internet.
Velocidad predecible
Esta parte tiene que ver mucho con la velocidad pero no quería llenar ayer ese apartado,
porque tiene mucha miga. Por velocidad predecible me refiero a la certeza que tenemos
que una descarga acabe en X horas, es decir, la garantía que nos ofrece esa red y las
variaciones de velocidad que se pueden dar. Para que la velocidad de una red sea
predecible no tiene por qué ser rápida: puede ir a medio gas pero si nos garantiza
siempre la misma velocidad puede ser interesante.
Esto es algo que ni eMule ni Bittorrent ofrecen, salvo en casos puntuales. Si ahora
mismo una descarga va a 200 Ks, al siguiente minuto no tenemos ni idea de cómo a ir.
Lo que es peor, es muy probable que la velocidad vaya decreciendo para que el último
5% vaya desesperadamente lento, algo que nos ha pasado a todos.
De cualquier forma, no hay manera de predecir una hora más o menos precisa sobre
cuando acabará esa descarga. ¿Una hora o diez días? Imposible de saber con certeza, así
que, por ejemplo, no puedes dejar descargando Metropolis y esperar a que esta noche
esté lista justo para la cena.
Frente a esta incertidumbre, las descargas directas te ofrecen con relativa seguridad la
hora a la que van a acabar. Vayan a 300 KBs o vayan a 50 KBs, siempre sabes con
seguridad la hora a la que terminan. Así que puedes dejar descargando el capítulo de la
serie X que a los Y minutos o a las Z horas la tienes lista para ver. Sin duda, este es un
buen punto para la Descarga Directa, aunque puedo entender que mucha gente ya está
acostumbrada a bajar con antelación y usar la descarga cuando se baje.
Marcos Gallo García Grupo B ADE
5. Precio
Este punto sería impensable hace un par de años: ¿pagar por lo que puedo conseguir
gratis? La amplia mayoría de las redes P2P son gratuitas, esa es su gracia: no tienes
que pagar a nadie, si pagas una conexión a internet tienes acceso a todo eso. eMule y
Bittorrent lo son, así que claramente son las ganadoras en esta aspecto.
Es cierto que las webs de descarga directa permiten las descargas gratuitas, pero la
verdadera experiencia se consigue pagándoles una cuota. De lo contrario tendremos
varias limitaciones que simplemente son absurdas y aunque se puede vivir con ellas, no
dejan de ser muy incómodas.
No te voy a convencer de que es un timo o de que sí merece la pena pagar por un
servicio supuestamente mejor, ya que esto depende de cada usuario. Si están ganando
dinero será porque tienen clientes, digo yo. Así que al final del día, el que tiene que
decidir si a ti te compensa pagar por estos servicios y tienes dinero, adelante.
Fin de la segunda parte
Y hasta aquí puedo leer. Mañana más, con temas como la sencillez de los diferentes
métodos, los efectos de la reanudación en las descargas y los extras que podemos
encontrar (soporte RSS, streaming, etc…). Si crees que debo hablar de otros aspectos,
tus comentarios son bienvenidos y estaré encantado de añadirlo en próximos días.
Marcos Gallo García Grupo B ADE
6. Sencillez
Desde el punto de vista de un usuario novel, la oferta de eMule es más atractiva que
cualquier otra porque lo ofrece todo sin necesidad de acudir a ningún navegador,
requisito casi indispensable de las otras dos alternativas. Doble click y empieza a
descargarse, y cuando termina tenemos exactamente el archivo que queremos.
Con Bittorrent es necesario el uso de un navegador para encontrar los archivos, por
mucho buscador integrado que tengamos no funciona igual que el de eMule y es mucho
más limitado. Eso sí, al final casi siempre tenemos el archivo completo, aunque ya me
ha pasado varias veces lo de encontrarme con un archivo en varias partes (sobre todo si
viene de usenet).
Las descargas directas también necesitan de un navegador que le suministre los enlaces,
y casi siempre acabaremos con un archivo comprimido descompuesto en varias
partes, para bordear las limitaciones impuestas. Así que al tiempo de descarga habrá
que añadirle el de descompresión, normalmente no mucho, pero que añade de todas
formas una ligera barrera al requerir de un paso más.
Antes de proclamar un vencedor claro, hay que tener otro factor en cuenta del que
hablaremos mañana: la configuración. Es algo que afecta a eMule y a Bittorrent, ya que
pueden no funcionar a la primera, y puede que necesiten de la apertura de puertos, por
ejemplo. La descarga directa, como es una simple descarga HTTP desde un servidor, se
libra de esta parafernalia.
Igualmente, no existe un gestor para descargas directas que sea estándar de facto, así
que la experiencia varía muchísimo de uno a otro. Si no elegimos bien o si no usamos
ningún gestor, puede que tengamos que bajarnos enlace por enlace, lo que hará eterna la
descarga de un archivo partido en muchas partes. Si escogemos bien (y esto da para más
de un artículo posterior) es evidente que es mucho mejor copiar todos los enlaces y que
el gestor se pelee con cada uno de ellos automáticamente.
Por esto último, entre otras cosas, a un usuario totalmente novel le recomendaría
empezar por eMule, así que desde mi punto de vista quien acaba ganando este
apartado es eMule.
Reanudación
Siguiendo con el control que las aplicaciones nos ofrecen sobre nuestras descargas, es
muy importante tener en cuenta qué consecuencias tendrá no descargar un archivo de
una vez, sino reanudándolo posteriormente.
Si analizamos una descarga vía eMule o Bittorrent, veremos que la velocidad sigue una
forma de campana: al principio va bastante lento, luego va cogiendo velocidad hasta
alcanzar un máximo, y al final vuelve a bajar para completar la descarga a velocidades
bastante bajas. Es decir, cada vez que paremos y reanudemos una descarga perderemos
la inercia y tendremos que sufrir esa progresiva aceleración, hasta alcanzar una
velocidad aceptable minutos y hasta horas después.
Marcos Gallo García Grupo B ADE
7. Con la descarga directa la velocidad es siempre la misma: el impacto de una parada y
su posterior reanudación es mínimo. De la misma manera que podemos controlar con
mayor detalle la velocidad, tenemos la posibilidad de parar la descarga cuando lo
necesitemos sin hipotecar la velocidad posterior.
Lo que es más, si antes decía que a las Descargas Directas habría que añadirle al tiempo
de descarga el de descomprensión, las otras dos alternativas tampoco se libran del
tiempo extra. Dado que por la naturaleza de las aplicaciones P2P es más fácil corromper
un archivo que con la clásica descarga, es necesario añadir una comprobación de
integridad después de bajar cada uno de los segmentos, lo que puede añadir varios
minutos si la descarga es grande. Esto se aplica especialmente a Bittorrent, que al
iniciarse y reanudar una descarga vuelve a comprobar todo el archivo, y a veces se hace
dolorosamente lento.
En definitiva, este punto hay que dárselo a la descarga directa, no creo que haya mucha
discusión. Quizás lo único discutible es si es importante o no: yo lo tengo muy claro, ya
he tenido la sensación muchas veces de querer ver bien un vídeo de Youtube o alguna
otra cosa y no poderlo hacer porque necesitaba esa descarga de torrent ya y no quería
perder la buena velocidad que llevaba. Así que para mí es un punto a tener en cuenta.
Extras
Una genial ventaja de las redes Bittorrent (que se puede emular con las otras, pero es
mucho más difícil), es que una buena parte de los clientes han integrado soporte para
RSS, lo que se traduce que podemos empezar a descargar incluso sin que se lo digamos.
Es decir, que si dejamos nuestro ordenador encendido y le añadimos la fuente RSS de
House a nuestro cliente Bittorrent, nuestro ordenador se bajará cada semana el capítulo
correspondiente tan rápido como salga. Si seguimos las series al ritmo americano, es
algo que realmente merece la pena.
Otro extra que suelen incluir los clientes Bittorrent, así como eMule si lo configuramos
bien, es el control remoto, es decir, controlar desde otro ordenador las descargas de
casa. También existen alternativas para la descarga directa dependiendo de la aplicación
que usemos, e incluso podemos hacerlo directamente por SSH para los usuarios más
avanzados, pero la sencillez creo pertenece a Bittorrent/eMule en este aspecto.
Hay muchas más opciones que varían entre clientes, que van desde canales IRC
integrados a pseudo-buscadores en clientes Bittorrent. Por razones dispares no me
parecen tan útiles como los dos comentados anteriormente, al menos no para la mayoría
de usuarios.
Frente a esto, las descargas directas no podrían tener menos opciones: solo hacen una
cosa y ya está. Así que está claro que Bittorrent es el que, por su naturaleza, te ofrece
más valor añadido en forma de extras, y en el futuro parece que va seguir así.
Finalmente, eMule contiene algunos extras interesantes pero creo que no puede seguir el
ritmo de Bittorrent.
Marcos Gallo García Grupo B ADE
8. Configuración
Algunos de vosotros no estábais de acuerdo conmigo cuando afirmé que, a pesar de los
años, eMule era mi elección a la hora de recomendar una aplicación P2P a una persona
poco versada en estos temas. Que Bittorrent no tenía los problemas de ID Alta y demás
parafernalia del eMule, y que las descargas directas eran también más sencillas.
Mi opinión sigue siendo la misma, eMule (su modelo) es la única solución que ofrece
todo junto sin necesidad de ir al navegador, pero habría que hacer una pequeña
correción: si tienes problemas, es el más difícil de configurar.
Tampoco es que sea especialmente difícil, de hecho una vez sabes cómo hacerlo no
tiene mucho misterio, pero quizás peque de ser el menos intuitivo. Hay términos que
vienen genial para los usuarios avanzados (que pueden retocar bastante la
configuración), pero hay cosas que un usuario novel no debería ver, como la lista de
servidores, la distinción entre KAD y Edonkey o la de diferencia entre ID Alta/Baja.
Hay otras aplicaciones parecidas que no tienen este problema al esconder mejor todo
esto, pero se pasan y muchas no dejan retocar la configuración avanzada, así que si
tienes un problema, puede que no lo puedas resolver.
Aún así, las aplicaciones Bittorrent siguen teniendo el mismo problema con los
puertos abiertos, a veces requiriendo del usuario acciones adicionales, junto a un
mínimo conocimiento de qué son y cómo abrirlos. Igualmente hay clientes que dejan
retocar cualquier opción configurable imaginable y otros que no tienen tantas opciones
pero que no presentan muchos problemas.
Frente a esto, las Descargas Directas no necesitan configuración, en principio. Metes el
usuario/contraseña que te envían al correo y ya puedes descargar lo que quieras. Aunque
en realidad, esto puede no ser cierto, dependiendo del cliente que usemos. Si escogemos
un cliente preparado para esta tarea, con colocar esos datos ya puede valer, pero la
operación se complica ligeramente al usar un gestor de descargas normal, ya que hay
que buscar cómo se puede configurar ese cliente con el servidor concreto que usemos.
La conclusión a la que quiero llegar es que sí, es más fácil de configurar la Descarga
Directa que una aplicación P2P, pero al existir tantos clientes diferentes y al poder
surgir varios problemas, ninguna de las tres opciones es siempre un camino de rosas
y hay ocasiones que unas se comportan mejor que otras.
Agentes externos
Los agentes externos es otro tema del que queríais que hablara, porque bajo la misma
configuración un programa P2P puede dar más o menos problemas dependiendo de
factores que no podemos controlar.
El primero son los ISP, es decir, la empresa que te suministra acceso a Internet.
Dependiendo de su política de calidad de servicio (QoS), pueden dar preferencia a un
tipo de datos que a otros, lo que en la práctica implica que los datos enviados por un
rango de puertos (los que usan el P2P) o los paquetes que siguen un cierto patrón están
limitados en velocidad o directamente capados. En España el caso más famoso es el de
Marcos Gallo García Grupo B ADE
9. ONO, si vives en otro país lo mejor será que revises la lista de Bad ISPs que gestiona
Azureus.
Lo peor de este caso es que no podemos evitar este comportamiento sin perder
significativamente velocidad, ya que la única solución real es cifrar todas las
conexiones (quién diga encriptar le capo). Los efectos colaterales de la gran privacidad
que se consigue al cifrar esos datos son que la velocidad de transmisión se verá
ligeramente rebajada y que nuestra máquina deberá trabajar un poquito más, ya que
tiene que estar continuamente cifrando/descifrando.
Otros actores importantes en este campo son los creadores de contenidos. Obviando a
sus asociaciones, los creadores de contenidos pueden impulsar una red sobre otra,
aunque parezca que las aplicaciones P2P son caóticas y van en contra de sus intereses.
Por ejemplo, eMule ha sido y es repudiado por la industria, aunque más de una vez
habrán colgado contenido antes de su salida a la venta por aquello del marketing viral
(películas, episodios Pre-Air, discos…).
Sin embargo, aunque al principio la red Bittorrent provocó el mismo rechazo, todo eso
ha dado una vuelta y ahora es uno de los niños mimados de esa industria, porque les
ofrece una plataforma a coste muy bajo comparado con el modelo tradicional y con la
posibilidad de streaming. No me malinterpreteis, a muchos tampoco les gusta los
contenidos “alegales” que podemos encontrar, pero ahora parece que se están centrando
en potenciar más el lado comercial de Bittorrent que en subir el río a contracorriente e
intentar parar esos contenidos compartidos por sus clientes.
Por su parte, la Descarga Directa no les ofrece ninguna ventaja a los creadores, ya que
existen mil sitios iguales y más interesantes para colgar esos contenidos, como por
ejemplo Hulu. Sin embargo, los estragos de esta industria en el modelo de las descargas
directas es patente todos los días: borrando contenido día sí y día también, lo que
dificulta un poco el uso de estas páginas.
En definitiva, los agentes externos perjudican en muchos casos a estas aplicaciones,
aunque a veces las ayudan, como en la evolución de Azureus, Vuze, donde podemos
disfrutar igualmente de los torrents bajados de la red como de trailers, cortos y demás
vídeos subidos por sus autores. Por supuesto, estos contenidos patrocinados disfrutan de
una velocidad más o menos garantizada.
Seguridad
El principal problema de seguridad al realizar cualquier descarga, ignorando cualquiera
relacionado con el cliente, es que lo que nos descarguemos no sea lo que dice ser sino
algún programa malicioso. Antes de seguir analizando este aspecto, quiero distinguir
entre Sistemas Operativos: lo que diré a continuación solo es factible para Windows;
para Mac/Linux es dificilísimo que encontremos un programa que nos pueda afectar.
Aún así, no hay que bajar la guardia, ya que cualquier contenido descargado en otro SO
puede infectar a un Windows, simplemente al enviar ese malware a otro ordenador.
Desde mi punto de vista, la aplicación que más sufre este problema es eMule,
seguida de Bittorrent y luego la Descarga Directa. Y el motivo principal es que las
fuentes son más o menos desconocidas. En eMule, al realizar una búsqueda, no sabemos
Marcos Gallo García Grupo B ADE
10. qué vamos a encontrar incluso después de leernos los comentarios, porque como no
existe ningún filtro, es imposible saber con seguridad si la fuente es fiable o no.
Con Bittorrent la cosa cambia, ya que es posible encontrarse algún virus, pero es mucho
menos probable porque, si siempre descargas de foros o trackers famosos, los resultados
estarán mucho más filtrados. Aún así, si el tracker es grande, tardará un poco más en
borrar esos contenidos indeseados, pero seguro que no duran mucho tiempo.
Por último, las descargas directas me parecen lo más fiable, porque si hemos fichado
nuestros foros o blogs de confianza, será muy difícil que alguien logre colar algún
programa indeseado. Así, el filtro será más rápido que en los trackers de Bittorrent
porque las fuentes suelen estar moderadas por administradores, y el ratio de
administradores por descarga es más alto (es decir, que un solo moderador tiene menos
trabajo en un foro que en un tracker).
Pero no solo hay que tener en cuenta virus y programas maliciosos, sino que también
habría que tener en cuenta los archivos mal etiquetados. Molesta bastante creer que
estás bajando Spiderman 3 y toparse con la recopilación de mejores momentos de
Nacho Vidal. De la misma manera que con los archivos maliciosos y por las mismas
razones, eMule es la que más sufre de esta lacra, siguiéndoles a lo lejos Bittorrent y la
Descarga Directa.
Por último, otro problema de seguridad con eMule es que muchos servidores (o usuarios
con intenciones malsanas) generan millones de archivos con las palabras más buscadas
combinadas de todas las maneras posibles, y además supuestamente compartido por
miles de usuarios. Esto, además de dificultar la búsqueda, puede llevar a la confusión y
hacer que descarguemos estos archivos, evidentemente copias al por mayor de virus.
Catálogo (bis)
El primer día hablé del catálogo de las tres ofertas, pero solo me centré en el tamaño de
los catálogos, obviando que los tipos de archivos que abundan en estas redes son muy
diferentes.
Por ejemplo, en cuestiones de música eMule (y similares) es el más completo, aunque
no el mejor. En esta aplicación podemos encontrar igualmente canciones sueltas como
discos completos, cosa que en ni en Bittorrent ni en las Descargas Directas sucede. En
estos dos servicios, solamente podremos disponer de discos completos, si bien no es
nada raro bajarse un disco antes de esta manera que una canción por eMule. También
habría que tener en cuenta la aparición de bastantes servicios que buscan en diferentes
servidores y nos ofrecen un catálogo bastante grande de canciones para bajar de forma
gratuita, como Skreemr.
Respecto a las series de televisión, Bittorrent puede que gane por lo que comentamos
ayer, la genial integración de RSS que ofrece descarga automatizada. Aunque con los
otros dos sistemas también encontraremos cualquier serie, tanto en inglés subtitulado
como doblado al español (si hay RSS en español yo no los conozco), y que van bastante
bien. También habría que tener en cuenta las versiones en alta definición, que se van
popularizando. En este caso tanto eMule como Bittorrent tienen un catálogo más
Marcos Gallo García Grupo B ADE
11. amplio, pero se disfruta mejor con la opción que más velocidad ofrece, es decir, la
descarga directa.
El resto de archivos, incluyendo películas en definición estándar y en alta definición,
copias de seguridad de juegos y aplicaciones, están bastante extendidos en cualquier
opción. Pero aquí entra otra cuestión fundamental: al ser archivos que suelen pasar del
giga y llegar hasta los diez en algunos casos, se torna pesado bajar estos contenidos con
aplicaciones P2P, al menos hasta que nuestras conexiones dejen de ser tan
vergonzosamente asimétricas. Mientras tanto, la espera con las Descargas Directas es
óptima al ir siempre al máximo de nuestra conexión.
Para los archivos relativamente raros, ya lo dijimos: eMule es el rey. Algunos lo
comparan con la bilblioteca de Alejandría, y no es más que el reflejo de tener a millones
de usuarios compartiendo sus carpetas libremente.
Otro aspecto del catálogo que no hemos tratado es la rapidez con que esos contenidos se
cuelgan y por tanto pasan a estar disponibles. Desde mi punto de vista, tanto eMule con
Bittorrent están a la par, y quizás la descarga directa sea un poco más lenta en este
aspecto. De cualquier manera, las distancias se acortan día a día, y hay veces que esa
diferencia son un par de horas.
Marcos Gallo García Grupo B ADE
12. eMule
• Cuando busques archivos pequeños que, normalmente, son difíciles de
encontrar por otros medios.
• Cuando necesites archivos relativamente antiguos.
• Cuando no te quieras complicar la vida buscando archivos.
• Cuando no te importe esperar un tiempo indeterminado para disponer de la
descarga.
• Si no te importa demasiado encontrarte de vez en cuando con sorpresas.
Bittorrent
• Cuando quieras bajarte un archivo muy reciente.
• Cuando quieras bajarte un archivo relativamente grande.
• Cuando no te importe esperar pero quieras una velocidad mayor que la que te
puede dar eMule.
• Si eres tan afortunado de tener una conexión simétrica o muy poco asimétrica.
• Si sigues las series al ritmo americano, porque puedes disfrutar de descargas
automáticas.
• Si el eMule te da problemas (o no estás satisfecho con su rendimiento) y lo has
probado todo para solucionarlos.
Descargas Directas
• Cuando prefieras usar el máximo ancho de banda disponible.
• Cuando quieras bajarte cualquier archivo grande (HD, juegos, etc…), aunque
va igual de bien con los pequeños.
• Si tienes contratado banda ancha de muchos megas (pocos también, pero lo vas
a aprovechar mejor cuanta más velocidad tengas).
• Si no te importa pagar por el servicio.
• Si te es más cómo buscar directamente tu descarga en Google o si te sientes
cómodo con los foros/blogs.
• Si quieres descargar al mismo tiempo que navegas, pero sin dificultar ninguna
de las dos tareas.
• Si tienes limitación de puertos o tu ISP te los capa y por tanto te es difícil usar
P2P, y no quieres cifrar tus conexiones.
Marcos Gallo García Grupo B ADE