2. Primera historia
Al autor y orador Leo Buscaglia se le solicitó una vez
que fuera parte del jurado en un concurso.
El propósito del mismo era encontrar
al niño mas cariñoso.
3. El ganador fue un niño de 4 años, vecino de un anciano
cuya esposa había fallecido recientemente.
El niño, al ver al anciano llorando en el patio de su casa, se
acercó a él y se sentó en su regazo.
4. Cuando su mamá le preguntó qué había hecho,
el niño contestó...
"Nada, sólo le ayudé a llorar".
5. Segunda historia
La maestra Debbie
Moon estaba estudiando
con su grupo de primer
grado una pintura
familiar.
En el cuadro había un
niño que tenía el cabello
de color diferente al del
resto de los miembros
de la familia.
6. Uno de los alumnos
sugirió que
el niño de la pintura
era adoptado.
Entonces, una niña del
grupo dijo:
"Yo sé todo sobre las
adopciones porque soy
adoptada".
“¿Qué significa ser
adoptado?"
preguntó otro niño.
7. "Significa“ - dijo la niña –
"que tú creces en el corazón de tu mamá en
lugar de crecer en su vientre".
8. Tercera historia
Jamie estaba intentando conseguir un papel
en una obra en la escuela.
Su mamá contaba que el niño había puesto el
corazón en ello, y temía que no fuera elegido.
9. El día en que los papeles de
la obra fueron repartidas, yo
estaba en la escuela.
Jamie corrió hacia mí con los
ojos brillantes de orgullo y
emoción.
"Adivina qué mamá" gritó y
luego dijo aquellas palabras
que permanecerán para
siempre como una lección:
“He sido elegido para
aplaudir y animar".
10. Cuarta historia
Descalzo y temblando de frío,
un niño estaba delante de una
tienda de zapatos, cuando una
señora se le acercó y le dijo:
“¡Pequeño, ¿qué estás mirando
con tanto interés en ese
escaparate?".
"Le estaba pidiendo a Dios un
par de zapatos", contestó.
11. La señora lo tomó de la
mano, y entrando en la
tienda, solicitó al
dependiente media docena
de calcetines para niño.
Luego le preguntó si podía
dejarle un recipiente con
agua y una toalla.
El empleado trajo lo que le
pidió, y ella le lavó los pies
al chico y se los secó con
delicadeza.
12. La señora, tomando un par de calcetines se le puso y
luego le compró unos zapatos. A continuación le entregó el
resto de los calcetines y acariciándole la cabeza le dijo:
“¡A que te sientes mas cómodo ahora!".
13. Entonces el niño agarrándole la mano y mirándola a
los ojos, le preguntó:
“¿Es usted la esposa de Dios?".