La ciencia ha realizado múltiples estudios sobre el manto de la Virgen de Guadalupe que han revelado detalles milagrosos, incluyendo ojos que reaccionan a la luz como los humanos, una temperatura constante de 36.6°C aunque la tela no es viviente, y latidos escuchados debajo de la cinta que indica un embarazo. Además, las estrellas en el manto reflejan la constelación del cielo de México el día del milagro, y la tela ha permanecido intacta por casi 500