1. EL ÁRBOL SIN HOJAS
Había una vez un árbol que cuando llegó el otoño, se quedó, sin
hojas. Los niños no querían jugar con él porque le decían feo.
El árbol cada vez estaba más triste. Un día pasó una nube cerca y le
dijo “Yo te ayudaré”. Llamó al viento y entre los dos intentaron que se
pusiera contento, pero no lo consiguieron.
Una niña que lo observaba pensó que si entre todos cortaban
papelitos de colores y se lo pegaban al árbol, este se pondría contento.
Eso hicieron y al final estaba tan contento y tan bonito que solo
querían jugar con él .
(Cortamos papel de colores y se lo pegamos al árbol).