1. Es la oportunidad más grande de mi vida al darme cuenta de que sin quererlo, ha cambiado todo en mí para arraigarme en Dios mi Salvador. Desde que estoy en el grupo nada es ya lo mismo, busco a Dios constantemente, esa es una de las razones de querer ir a la Jornada: vivir para mi Señor, servirle a Él, cambiar mi vida pues no deseo darle el 50% de mi sino todo lo que tengo porque El lo es Todo. Conocer personas que tal vez tengan las mismas inquietudes que yo, que quieran cambiar su forma de vivir y ver esta posibilidad me emociona. Voy a la Jornada buscando esa transformación para poder servir a los demás, enseñar lo que he aprendido y tengan también ellos ese cambio en su vida que no se puede explicar con palabras, solo se puede sentir. JOHANNA PERALTA (participante de R.D.)