2. “ ¡Qué bien le viene al corazón su primer nido!”, dice el poeta, saboreando el reencuentro de la casa de la infancia
3. Los primeros balones, los “hijo mío, no llegues tarde” al salir de paseo, las vueltas del cole con el peso de los libros y las lágrimas del cate, el sabor a hogaza crujiente y a madre y a hermanos tras el frío del invierno, y los desengaños, las noches de sobremesa y los cuentos del abuelo a la luz de la lumbre…
4. La casa dela infancia. ¡Qué alegría del regreso desde el lejano país, la mili o el viaje! ¡Y que tristeza la del adiós!”De aquella ventana del adiós no te has ido, madre, todavía”, canta Bertrán; o Juan Ramón: “Parece que, en un trueque de pasión, el corazón se trae roto el nido, que se queda en el nido, roto el corazón”!
5. Parece que la cal, el tejadillo, la puerta, la ventana, habitan nuestra alma en vez de habitar nosotros la casa aquella enjalbegada de la infancia…