El documento trata sobre la estética y define algunos de sus principales conceptos. Explica que la estética estudia la percepción de la belleza y la fealdad, y si estas cualidades existen objetivamente o solo subjetivamente. También analiza la diferencia entre lo bello y lo sublime, y cómo la estética se relaciona con el arte y la psicología. Por último, discute que la definición de arte y la determinación de qué es bello plantean grandes desafíos filosóficos.
2. Es la percepción de la belleza y la fealdad. La
estética se ocupa también de la cuestión de si
estas cualidades están de manera objetiva
presentes en las cosas, a las que pueden
calificar, o si existen sólo en la mente
del individuo; por lo tanto, su finalidad es
mostrar si los objetos son percibidos de un
modo particular (el modo estético) o si los
objetos tienen, en sí mismos, cualidades
específicas o estéticas. La estética también se
plantea si existe diferencia entre lo bello y lo
sublime.
3. la estética se encuadra mejor en la psicología que en el
arte, del que pretende ser la filosofía. Y esa es en efecto
la raíz de la estética, la percepción; porque al fin y al
cabo las cosas son para nosotros como las percibimos,
tanto si coincide nuestra percepción con la realidad,
como si no. Pero no se detiene ahí la estética, puesto
que se ve obligada a estudiar y definir qué formas han
de tener las cosas para que sean percibidas como bellas
por la mayoría. Y aquí tenemos un nuevo elemento
distorsionados: la percepción de la mayoría induce a
determinar que la sensación que percibe cada uno,
tiene tanto más altas garantías de objetividad, cuantos
más son los que coinciden en una misma forma de
percepción.
4. El arte es el uso de la habilidad y la imaginación, para crear
objetos, experiencias, melodías o entornos con el fin de
lograr el placer estético en el observador. Se dice
tradicionalmente que el arte alimenta el alma, y quienes
realizan esta afirmación no se equivocan. Al ver una obra de
arte, uno se siente conmovido por ella, y puede llegar a
sentir que se está transportando a otros lugares y tiempos,
reales o imaginarios; el arte provoca sobrecogimiento. Se
dice que la capacidad de distinguir lo hermoso de lo feo es
una habilidad humana innata, pero la verdad es que los
valores estéticos cambian de cultura en cultura, y algunos
pensadores se han referido a la definición del arte como uno
de los problemas más grandes de la filosofía; por lo mismo
el arte y su percepción siempre serán subjetivos.
5. La creación artística es una característica de
los seres humanos que nos define y
distingue. Somos creadores de formas (reales
o imaginarias) que expresan nuestros
sentimientos y cómo vemos el mundo,
nuestras vivencias más profundas. La
expresión de ideas y sentimientos se hace
patente desde la prehistoria con una gran
fuerza, una fuerza que revela todo lo que hay
en el interior de nuestros semejantes más
remotos.
6. Determinar qué es bello y que no lo es, es quizá
uno de los más interesantes desafíos intelectuales.
Para muchos, a causa de la subjetividad, se trate
simplemente de una quimera. ¿Cuándo y a qué
objetos es lícito aplicar la categoría de belleza? ¿Es
bella la naturaleza, su representación o la relación
entre ambas? ¿Qué parámetros rigen a una o a la
otra? ¿Existen códigos que trasciendan las normas
culturales y temporales? El debate se abre como un
abanico que al ramificarse ofrece nuevas
posibilidades. Algunas complementarias y otras,
llanamente contradictorias.
7. La belleza puede aplicarse en términos generales o
podemos optar por hablar de la representación
artística en particular, de la mano del talento
creativo. No es original señalar que ésta se ve
influida siempre por un marco filosófico ya sea de
manera implícita o explicita. Esta evidencia se
expresa en la historia del arte, en el florecer de
los movimientos artísticos y en sus respectivas
reacciones. Pero más allá de esta interacción
fascinante entre la razón y la creación, resolver qué
es lo bello y por qué, conforma uno de los
problemas centrales de la estética y ha sido
aborada por no pocos pensadores a lo largo del
tiempo.