Las huellas de mordida son lesiones producidas por la presión de los dientes en el cuerpo, ya sea de origen animal u humano. Pueden dejar un registro de las impresiones dentales que constituye evidencia forense. Al analizar una huella de mordida, es importante determinar si es humana o animal, descartar simulaciones, y observar su ubicación, presencia de arco dental, continuidad, tipo de dentadura y profundidad para establecer si fue de ataque o defensa.