Este documento describe cuatro tipos de organizadores previos que pueden usarse para facilitar el aprendizaje significativo: 1) Organizadores previos que establecen un contexto entre lo que el estudiante ya sabe y lo que necesita aprender, 2) Analogías que ayudan a relacionar nueva información con experiencias previas, 3) Mapas conceptuales que representan gráficamente los conceptos y sus relaciones, y 4) Estructuras textuales que proveen organización y sentido a los textos.