Este documento proporciona 10 pasos irónicos para lograr un infarto debido al estrés laboral excesivo, como trabajar los fines de semana sin descanso, llevarse el trabajo a casa, no tomar vacaciones, competir constantemente y no delegar responsabilidades. El mensaje subyacente es que vivir obsesionado con el trabajo a expensas de la salud y la vida personal solo lleva al agotamiento y la muerte prematura.