1. 1 €
IE
S ISAB L DE VILLENA
E
NUMERO 3
KE MALVA ESO
2009-2010
UN
JARDÍ D E LES DELÍCIES
2. 2 KE MALVA ESO
SUMARI
EDITORIAL........................... 3
PER A LORENZO................. 4
OPINIONS........................... 13
INSTITUT............................ 27
CREACIÓ LITERÀRIA............ 47
RESSENYES LITERÀRIES......56
PROGRAMES EUROPEUS.....58
3. KE MALVA ESO 3
EDITORIAL
A
QUÈ SERÀ DE LA NOSTRA
REVISTA?
quest número apareix amb una miqueta
de retard ja que l’havíem d’haver pre-
sentat a finals del curs passat. Si re-
cordeu al número anterior tinguérem l’ocasió d’homenatjar el Lorenzo, cosa
que ens va trastocar els plans. A la pèrdua irreparable del nostre company,
cal afegir la partida de dos dels alumnes (han acabat 2n de Batxiller) que
més temps li han dedicat i que més implicació hi han tingut. Per tant, hau-
rem de plantejar-nos seriosament què és el que va a passar a partir d’ara i
fer-ne una reflexió sobre el seu futur.
Des d’ací fem una crida a la comunitat escolar i convidem a col·laborar
a tothom perquè la revista tinga continuïtat. Cal recordar que si la revista
EDITORIAL
s’ha mantingut fins ara ha estat, en gran mesura, per la tenacitat, dedica-
ció i la immensa voluntat de Lorenzo i per la participació d’alguns alumnes
que s’han implicat de manera més que notable. I tal com manifestàvem a
l’anterior editorial, és indispensable implicar l’alumnat. La revista nasqué
perquè els alumnes pogueren expressar-se, i la revista es fa per i per a ells,
així que vosaltres hauríeu de ser l’autèntic motor, que és al cap i a la fi el
llegat que ens han deixat i només per això ha de sobreviure. Necessitem
gent amb inquietuds de tot tipus, des de les literàries a qualsevol altra des-
tresa (per exemple no tenim il·lustradors). La revista necessita sang nova,
no podem permetre que el testimoni que ens ha deixat Lorenzo es perda.
Finalment assenyalar que ens ronda pel cap una idea que s’hauria de de-
batre: utilitzar el format digital per a la nostra revista. Això significaria que
la revista estaria no sols molt més prompte a l’abast de tothom, sinó so-
bretot que podria haver-hi més col·laboracions i seria més dinàmica. En de-
finitiva ens adaptaríem als temps que corren. Això no implica que el format
actual desapareguera, poden ser perfectament compatibles. Entenc que el
plaer de tenir-la entre les mans i gaudir de la seua lectura tranquil·lament
en el sofà de casa no té preu. La qüestió és que necessitem no sols perso-
nes que vulguen incorporar-se al nostre carro, sinó idees.
US HI ESPEREM!!!
4. 4 KE MALVA ESO
Al número anterior cometérem un error imperdonable: se’ns va esca-
polir un article. Des d’ací demanem les nostres més sinceres disculpes a la
seua autora i a continuació el publiquem.
U
PARA LORENZO
n día conocí a alguien increíble. Un día cualquiera, y por casuali-
dad, tuve la ocasión de conocer a una persona que jamás olvidaré.
No quiero pensar que ya no volveré a oír su voz grave pero suave
al mismo tiempo, ni que tampoco volveré a ver su sonrisa, ni que no volveré
a estar en la misma clase con él, pero siempre lo recordaré como un espejo
donde mirarme como la clase de persona que me gustaría ser algún día. Al-
guien inteligente, comprensivo, alguien capaz de ayudar a los demás sin que
se lo pidan, alguien como tú.
Solo pensaré en las cosas buenas que he aprendido de ti y en tus sabios
consejos, recuerdo cuando me decías “por alumnas como tú, mi profesión
tiene sentido”. Eso me hacía sentir bien y me daba ánimos para seguir es-
para LORENZO
forzándome. Ahora más que nunca, seguiré adelante, haré la carrera, lo con-
seguiré pensando en la admiración que sentía por ti, en todo lo que me
enseñaste.
Definitivamente me alegro de haberte conocido, aunque solo hayan sido
cuatros años, y me temo que te voy a echar de menos terriblemente y, que
al menos en un tiempo, no podré evitar sentir este dolor por algo que no
podré recuperar. Estas palabras que me salen del alma son tan ciertas como
que existo, tanto que creo que personas así se te cruzan pocas veces en la
vida, y que todos los que te queremos jamás te olvidaremos porque eres
único. Lorenzo, you will always be in our minds.
Joana Fossati,
1º Bach. H.
5. L
KE MALVA ESO 5
a redacción de kemalvaeso ha creído conveniente introducir en
este número algunas de las exposiciones que se hicieron para la
mesa redonda del homenaje a Lorenzo, sus autores las han cedido
amablemente para que todos podamos disfrutar con su lectura.
Y
UN LUJO PARA EL VILLENA
llegó el día 3 de abril y un grupo de amigos nos reunimos para re-
cordar a Lorenzo. El Villena le organizó un homenaje en el que se
implicó todo el mundo y en el que se puso de manifiesto el cariño
inmenso que le tenían quienes compartían el día a día con él.
El homenaje tuvo dos partes, la primera se inició con una mesa redonda
integrada por los profesores Paco Vera y Carmen Sanchis. También esta-
ban Ángel Soler, Amadeu Sanchis, Juan Carlos Gallart, Augusto Sampedro
y Adelina Fernández que han sido alumnos de Lorenzo. Cada uno de ellos nos
acercó una faceta de su personalidad: la literaria, su inteligencia emocional,
su compromiso político, su buen vivir… Estas exposiciones completaron y en-
grandecieron su figura, todos los presentes aprendimos algo nuevo, lo co-
nocimos mejor.
En la segunda parte oímos y vimos a Lorenzo; lo oímos a través de una
muestra de su poesía que fue leída por compañeros del instituto. Lo vimos
en una selección de fotografías que recorría su vida (desde su infancia hasta
esa eterna madurez de sus últimos meses) y a la que acompañaba como fondo
algunas de las canciones que le gustaban a Lorenzo, este trabajo lo hizo su
amigo Augusto, fue impresionante, y mucho se debe conocer y querer a una
persona para hacer algo tan entrañable. Creo que será difícil oír a la Voz
cantando My Way y no asociarlo con Lorenzo.
El homenaje consiguió mezclar varios sentimientos: tristeza porque no
tenemos a Lorenzo, alegría porque había gente a la que no habíamos visto
hacía tiempo y también orgullo por haber conocido a una persona tan válida
y porque, además, esa persona haya sido tan cercana a nuestras vidas. El
viernes 3 de abril tuvimos más motivos (si cabe) para recordar siempre a
Lorenzo.
6. 6 KE MALVA ESO
C
LORENZO, INTELIGENCIA Y EMOCIONES
uando mi querida Antonia me propuso que viniera a hablar de nues-
tro amigo Lorenzo, a este foro de compañeros y amigos, tuve sen-
timientos contradictorios. Por un lado, me halagó que confiara en
mí para transmitiros lo que sé de Lorenzo; algunos de los que habían sido mis
profesores iban a escucharme hablar de un compañero y amigo suyo. Por
otro lado, sentí bastante miedo de no estar a la altura para hablar en público
y decir todo lo bueno que se merece Lorenzo. Finalmente tomé la decisión
de venir y contaros lo que sé de él, porque sé que si no lo hago todo lo bien
que debería hacerlo él sabría perdonármelo y estaría contento de verme
aquí, recordándole delante de todos vosotros.
Para comenzar os diré que me considero una persona muy afortunada
porque estudié BUP y COU aquí y pude conocer a personas que me enseña-
ron mucho de lo que hoy soy; entre otros citaré a Emilia Ayora que me en-
señó Geografía e Historia, y a no rendirme ante las dificultades de la vida.
Antonia Blázquez me enseñó a escribir y me infundió alegría y optimismo
con su eterna sonrisa, con Rosa Jerez aprendí ciencias naturales y disci-
plina, y con Lorenzo, con Lorenzo Peraile aprendí Inglés, aprendí a saber es-
cuchar y el verdadero significado de la palabra amigo. Disfrutar de su
amistad y de los momentos que hemos compartido ha sido para mí una fuente
de conocimiento inmenso, no sólo por lo académico que era, sino por su hu-
manidad y riqueza de sentimientos y emociones.
Lorenzo poseía múltiples cualidades, era educado, simpático, amable, y
muchas otras cosas que aparecen en el pequeño artículo que he escrito para
la revista del Instituto; pero ante todo, Lorenzo era una persona inteligente
emocionalmente. Ésta es una característica muy complicada de poseer en
un grado elevado pues requiere de la conjunción de múltiples facetas. Los
más jóvenes os preguntaréis qué es eso de la inteligencia emocional. Os lo
voy a explicar tomando a una persona como ejemplo, Lorenzo. A través de
las características que vamos a observar en él todos comprenderemos este
concepto.
Quizá os preguntéis qué hace un economista hablando de inteligencia
emocional. Hacéis bien, mi conocimiento de estas áreas es meramente tan-
gencial, no soy ni mucho menos un experto. He aprendido de estas materias
a través de la lectura y de algún curso y ciertamente me ha apasionado. Re-
7. KE MALVA ESO 7
flexionando sobre los conceptos básicos de esta materia me he dado cuenta
de que Lorenzo era realmente inteligente emocionalmente, y por ello quiero
hablar conjuntamente de ambos.
Por poco que conozcamos de su vida, sabemos que Lorenzo poseía a nivel
emocional una gran inteligencia intrapersonal, es decir, sabía contactar con
sus propios sentimientos, discernir sobre éstos y orientar su conducta; así
como también un gran inteligencia interpersonal que se manifestaba por su
capacidad de liderazgo, aptitud para relacionarse, mantener amistades y
solucionar problemas sociales.
Pensemos en la cantidad de amigos que tenía. Sólo con observar el
aforo de esta sala podemos hacernos una idea. Sus amigos no eran todos de
un mismo corte ideológico, ni tenían la misma edad, ni tenían el mismo poder
adquisitivo,… eran heterogéneos, y es que Lorenzo poseía una gran cantidad
de habilidades sociales como para conectar con un gran número de personas.
En otras palabras, tenía talento en el manejo de las relaciones con los demás
y en saber persuadir e influenciar. Era un excelente negociador y tenía una
gran capacidad para liderar grupos, tanto de amistades como profesionales.
Lorenzo tenía, pues, la capacidad suficiente como para inducir res-
puestas deseables en los demás, puesto que poseía influencia, utilizaba tác-
ticas de persuasión eficaces, o como diría Antonia era “todo un seductor”.
Era un gran comunicador, no sólo por su capacidad argumental y su excelente
dominio del lenguaje, sino porque era capaz de emitir mensajes claros y con-
vincentes. Capaz de inspirar y dirigir a grupos y personas, es decir, un líder.
Hábil en la resolución de conflictos, consecuencia de su capacidad para ne-
gociar. Buen colaborador y cooperador de las causas en las que creía, con ha-
bilidad para crear sinergias grupales en la consecución de metas colectivas.
En cuanto al autoconocimiento cabe decir que él se conocía muy bien a
sí mismo, pues sin ese conocimiento es muy difícil poseer el resto de cuali-
dades necesarias para ser inteligente emocionalmente. Como dice uno de los
expertos en Inteligencia Emocional “conocerse bien a uno mismo representa
un primer e importante paso para lograr ser artífice de la propia vida”, y
“advertir cómo estamos emocionalmente es el primer paso hacia el gobierno
de nuestros propios sentimientos”.
8. 8 KE MALVA ESO
Personalmente, incluso en sus momentos difíciles, creo que Lorenzo
siempre fue capaz de controlar sus actitudes y sus emociones. Él era dueño
de su vida y sabía cómo quería vivirla, o por lo menos, sabía qué era lo que
no quería que fuese su vida, rutina. Él quería que su vida fuese apasionada;
no quería “comerse una manzana, dos veces por semana, sin ganas de comer”
como dice su querido Sabina.
Este autoconocimiento que él tenia le llevaba a un importante nivel de
confianza en sí mismo, puesto que tenía una valoración propia, de él mismo,
adecuada así como una apropiada conciencia emocional.
En otras palabras, Lorenzo se conocía bien, sabía lo que buscaba de la
vida, qué le hacía feliz y qué era lo que no quería que fuese su vida. Ese co-
nocimiento de sí mismo, unido a su coherencia a la hora de vivir la vida hacía
que tuviera confianza en sí mismo, y nosotros le veíamos con esa confianza
que nos trasmitía, con esa serenidad que nos hacía sentir tan seguros. Era
una persona que proyectaba una imagen de él tan segura que te hacía sen-
tir seguro.
Además del autoconocimiento (el cual presumimos, porque sólo él lo
sabía), una competencia emocional en la que Lorenzo sobresalía, y era per-
ceptible por todos los que estaban a su lado era la empatía. Lorenzo era em-
pático, cuando se le contaba algo sabía meterse en los zapatos de quien le
estaba hablando para sentir lo que se le quería transmitir. Sabía compren-
der a los demás, tenía capacidad para captar los sentimientos y los puntos
de vista de otras personas y se interesaba activamente por las cosas que
preocupaban a los demás.
Lorenzo aceptaba y respetaba las ideas y emociones de los demás, mos-
traba comprensión e interés por los problemas de sus amigos. Nunca te eva-
luaba o juzgaba, siempre intentaba comprenderte aunque no estuviera de
acuerdo contigo. Escuchaba con mente abierta y sin prejuicios, como era él.
Mantenía la cordialidad en la conversación y mostraba una disposición
física y mental para prestar atención a los mensajes que se le enviaban. Y,
hasta que no tenía información suficiente y había entendido bien tus argu-
mentos no expresaba su opinión. Esta opinión a veces no era la que espera-
bas, pero sabía explicártela sin que te sintieras molesto. Esto enlaza con la
siguiente y última característica que voy a analizar, su asertividad.
9. KE MALVA ESO 9
Lorenzo tenía capacidad para transmitir hábilmente sus opiniones, in-
tenciones, posturas, creencias y sentimientos. Era eficaz, puesto que con-
seguía aquello que se proponía, no se sentía incómodo al hacerlo (quizá fuera
consecuencia del elevado grado de confianza que poseía en sí mimo), en si-
tuaciones de conflicto de intereses intentaba que se produjeran las mínimas
consecuencias negativas para sí mismo y para el otro.
Al conversar con él sentías que mantenía el contacto visual, no se dis-
traía; su tono de voz era firme y convincente, hablaba de forma clara y sin
titubeos, su ritmo de voz era tranquilo y captaba tu atención, dominaba el
arte de la poesía, sabía recitarla y eso se notaba cuando hablabas con él. Sus
gestos eran naturales. Recuerdo especialmente su forma de sentarse, siem-
pre parecía estar cómodo, y eso te hacía sentir cómodo a ti.
Si tuviera que resumir en una sola palabra a Lorenzo diría que era ca-
rismático. Poseía una habilidad natural para seducir, fascinar y atraer a las
personas, tenía un auténtico magnetismo personal que le hacía ser una per-
sona realmente especial.
Para finalizar sólo os puedo decir que describir a Lorenzo es práctica-
mente imposible, era una persona completa, coherente, honesta e inteli-
gente en todas sus acepciones.
He intentado mostraros que emocionalmente era inteligente en un
grado elevado, y eso no es nada fácil.
Espero haber sido claro en mi modesta exposición y no haber resultado
demasiado distante, pero cuando una persona tan importante en tu vida des-
aparece tan de repente y quieres hablar de ella con algo de sentido o tomas
cierta distancia o simplemente dirías que le echas mucho de menos y de-
rramarías unas lágrimas bien merecidas.
Quiero poner una nota distinta citando a Antonio Gala cuando dice que
“las muertes que más le han tocado han sido las muertes de amistad. Su
falta es como perder una referencia, la carencia de alguien a quien referirse
con su nombre, de alguien a quien llamas por teléfono y sólo tienes que decir:
¿Qué tal?, porque conoce tu voz. Las muertes de amistad son muertes muy
dolorosas, porque se convierten en un dolor sordo, pero siempre presente,
por mucho tiempo que pase”.
Ángel Soler
10. 10 KE MALVA ESO
A LORENZO EN EL RECUERDO
Sigo evocándote y te recuerdo rodeado de gente
En la sobremesa, cierro los ojos y puedo verte
Recostado en tu silla, con las piernas cruzadas y
Fumando al estilo Bogart. Te veo sonreír.
Todos escuchan atentos tus historias de bucaneros,
De poetas con vicios, de sabinas, de Serrat de Lolitas
Que se niegan a ser Dolores, historias de don Juanes, de
Personajes insólitos pintorescos, de hermanos gemelos que
Sisaban a su abuela, que recitaban poemas a la virgen,
Historias que he oído miles de veces, y que en esta noche
Cual Serezade, deberían mantenerte a mi lado.
Cruzo valencia para verte, de noche,
envuelta en lagrimas
no me creo lo que dicen,
en el metro todos me miran,
yo no veo nada, me limito a esperar mi parada
a esperar lo inevitable
En el trayecto, que se me antoja eterno,
Macabro juego del tiempo,
Recuerdo la primera vez que tu encantadores ojos triste
Se fijaron en mí. Lo recuerdas?
Me asuste en el talía y me ofreciste tu hombro para esconderme
Esa noche yo me lleve tu perfume,paco rabanne por aquel entoces,
Y tu un reproche de tu acompañante. “si es un nena, le dejiste”
Recuerdo tu manía de inventar rimas absurdas con mi nombre,
Los versos de las ocho de la mañana en el bar,
Mientras sorbías tu café con leche.
La próxima parada es la mía.
Tengo tanto miedo.
Me topo con uno de los tuyos y lo abrazo
Y le pregunto si es verdad, aprieto fuerte los puños,
Su contestación hace que recuerde que la vida es injusta
Y que somos asquerosamente mortales,
Y que no importa si no nos hemos cansado de ser hombre.
Que la insolente mujer de negro no olvida
Que le concedimos nuestro último baile,
Y como al enamorado nos dice
11. KE MALVA ESO 11
Vamos que la hora ya es cumplida.
En la habitación me hago la valiente,
como siempre,
mantengo la compostura a pesar
De que me tiembla todo el cuerpo.
Hablo con tus incondicionales,
Intento estar serena.
Te miro, me inhibo
Busco en mis entresijos
Hallo a un hombre enfundado en un traje de Meliano
Con una corbata rescatada en Londres;
Encuentro unos labios con sabor a Jack Daniels
Una voz que dice “ leche, para la nena”
Encuentro a un hombre en el casino
Que adora las tertulias de segorbe,
A sunyjim con melenas
A un cascarrabias que grita
¡abajo los progres a la violeta!
Vuelvo en sí
Te miro de nuevo, sonrío
Al recordar tus proezas,
Tus chistes malos, tus carcajadas,
Porque te oigo decirle a la vida
“ he vivido como me dio la gana”
En esta habitación, Lorenzo,
Te admiro más que nunca,
Si cabe.
Mi imaginación hace que note como
Me surras al oído, otra vez, como premio de consolación
“Adeli, soy el único que fumando corre la maratón
y borracho recita poemas de amor”
Un risa casi muda quiebra el silencio
Al instante
supe que los héroes
son de carne y hueso
y que yo tuve la suerte
de besar en la boca a uno de ellos.
Adelina
13. KE MALVA ESO 13
L
ALUMNOS QUE DEJAN UNA HUELLA ESPECIAL
a Secundaria y el Bachillerato es una etapa más en la formación de
una persona, hay alumnos que logran compaginar el estudio con la
implicación en la vida del instituto y dedican su tiempo para con-
seguir un centro donde todos nos encontremos más a gusto. Son muchos los
alumnos que permanecen en mi memoria y las razones son diversas: por te-
nerlos varios años en clase, por compartir con ellos el teatro o porque de-
rrochan una actividad tal que es imposible quedarse al margen y esto es lo
que me ha pasado con Arnau y con Miquel.
Más de una vez me ha sorprendido la generosidad con la que os habéis
enfrentado a cualquier proyecto, os habéis quedado sin recreos, habéis in-
vertido las horas que haya hecho falta para que vuestra implicación en la
vida escolar llegara a buen puerto. Pese a vuestra juventud tenéis inquietu-
des sociales y culturales y sabéis optimizar el tiempo para desarrollarlas:
trobades, mediación, convivencia,…habéis resucitado la participación de los
estudiantes en la vida del centro y tenemos revista porque nuestro Lorenzo
sucumbió ante vuestra insistencia.
Conocí primero a Miquel, en los primeros cursos de la ESO, y recuerdo
cuando me abordaba por los pasillos para plantearme actividades variadas
y sobre todo para cuándo iba a tener un estreno. Sus pocos años y su tena-
OPINIONS
cidad me maravillaban, y, aunque yo pensaba de dónde ha salido un alumno
así, he de reconocer que su actitud era/es un estímulo. Durante estos años
lo he visto madurar, ha aprendido sobre todo a escuchar y a convencer con
argumentos sin perder su espíritu crítico.
A Arnau lo he tenido como alumno en 1º de bachiller, sus antiguos pro-
fes me habían comentado que era un buen alumno y en seguida lo comprobé:
académicamente respondía al perfil del alumno que se implica en su apren-
dizaje. Pero ha sido fuera del aula donde me ha sorprendido su paciencia, su
perfeccionismo y su entrega para que un trabajo salga bien. He compartido
con él la grabación de dos vídeos y he de reconocer que pese a la carencia
de medios ha obtenido unos resultados geniales, dignos de un buen profe-
sional. Además lo vi hacer un enorme esfuerzo para que la revista de Lo-
renzo estuviera el día 3 de abril, solucionó todos los problemas de
maquetación, que no son pocos, dedicándole muchas horas de su tiempo libre.
14. 14 KE MALVA ESO
Pues bien, con vuestra implicación en la vida del centro habéis demos-
trado que la formación no solo se obtiene en el aula también se logra cola-
borando en un proyecto común. Ahora debemos continuar potenciando la
participación, la convivencia y la responsabilidad; de momento yo confío en
los alumnos que se quedan porque los hay también muy válidos, ellos se ha-
brán de implicar para conseguir un presente y un futuro mejor.
A los dos os deseo que disfrutéis con vuestra carrera, sé que seréis
buenos profesionales, que no aceptaréis sin más la realidad, que la intenta-
réis hacer mejor y que continuaréis siendo un aliciente para quienes com-
partan la vida con vosotros.
Ha sido un lujo contar con vosotros (aunque he de recordaros que parte
de vuestro éxito, también, lo comparten vuestras familias por la educación
recibida), como lo ha sido contar con todos los que forman vuestra promo-
ción y que ahora empiezan una nueva vida. Dentro de poco todos vosotros se-
réis ex villeneros y esa es otra categoría que, al menos a mí, me llena de
orgullo.
Antonia
DU LLU ESPINQUIGLIS?
É sta es la carta que escribió una señora al programa de Luis del
Olmo para que la leyeran en directo:
“Desde que las insignias se llaman pins, los maricones gays, las comidas
frías lunchs, y los repartos de cine castings, este país no es el mismo: ahora
es mucho, muchísimo más moderno. Antaño los niños leían tebeos en vez de
cómics, los estudiantes pegaban posters creyendo que eran carteles, los
empresarios hacían negocios en vez de business, y los obreros, tan ordinar-
ios ellos, sacaban la fiambrera al mediodía en vez del tupper-ware. Yo, en el
colegio, hice aeróbic muchas veces, pero, tonta de mí, creía que hacía gim-
nasia.
Nadie es realmente moderno si no dice cada día cien palabras en inglés.
Las cosas, en otro idioma, nos suenan mucho mejor. Evidentemente, no es lo
15. KE MALVA ESO 15
mismo decir bacon que panceta, aunque tengan la misma grasa, ni vestíbulo
que hall, ni inconveniente que handicap... Desde ese punto de vista, los es-
pañoles somos modernísimos. Ya no decimos bizcocho, sino plum-cake, ni
tenemos sentimientos, sino fellings. Sacamos tickets, compramos compacs,
comemos sandwiches, vamos al pub, practicamos el rappel y el raffting, en
lugar de acampar hacemos camping y, cuando vienen los fríos, nos limpiamos
los mocos con kleenex.
Esos cambios de lenguaje han influido en nuestras costumbres y han
mejorado mucho nuestro aspecto. Las mujeres no usan medias, sino panties
y los hombres no utilizan calzoncillos, sino slips, y después de afeitarse se
echan after shave, que deja la cara mucho más fresca que el tónico. El es-
pañol moderno ya no corre, porque correr es de cobardes, pero hace foot-
ing; no estudia, pero hace masters y nunca consigue aparcar pero siempre
encuentra un parking. El mercado ahora es el marketing; el autoservicio, el
self-service; el escalafón, el ranking y el representante, el manager. Los im-
portantes son vips, los auriculares walkman, los puestos de venta stands,
los ejecutivos yuppies; las niñeras baby-sitters, y hasta nannies, cuando el
hablante moderno es, además, un pijo irredento.
En la oficina, el jefe esta siempre en meetings o brain storms, casi
siempre con la public-relations, mientras la assistant envía mailings y orga-
niza trainings; luego se irá al gimnasio a hacer gim-jazz, y se encontrará con
todas las de la jet, que vienen de hacerse liftings, y con alguna top-model
amante del yoghurt light y el body-fitness.
El arcaico aperitivo ha dado paso a los cocktails, donde se jartan a bit-
ter y a roast-beef que, aunque parezca lo mismo, engorda mucho menos que
la carne.
Ustedes, sin ir más lejos trabajan en un magazine, no en un programa.
En la tele, cuando el presentador dice varias veces la palabra O.K. y baila
como un trompo por el escenario la cosa se llama show, bien distinto, como
saben ustedes, del anticuado espectáculo; si el show es heavy es que con-
tiene carnaza y si es reality parece el difunto diario El Caso, pero en mod-
erno. Entre medias, por supuesto, ya no ponen anuncios, sino spots que,
aparte de ser mejores, te permiten hacer zapping.
Estas cosas enriquecen mucho. Para ser ricos del todo, y quitarnos el
16. 16 KE MALVA ESO
complejo tercermundista que tuvimos en otros tiempos, sólo nos queda decir
con acento americano la única palabra que el español ha exportado al mundo:
la palabra “SIESTA“.
Sinceramente... yo antes de leerlo no sabía si tenía stress o es que es-
taba hasta los cojones.
L
LA CORRUPCIÓN.
a corrupción tiene que ver con fraude y con destrucción. La crisis
en la que nos hundimos actualmente tiene como una de sus causas
a este flagelo universal. Va desde la cúpula de los gobiernos e ins-
tituciones hasta los recovecos más íntimos del corazón individual. A mayor
democracia menos corrupción, a mayor verdad menos autoengaños. En lo pú-
blico y en lo privado, la corrupción destruye la confianza y nos vuelve te-
merosos.
La corrupción se manifiesta en los fraudes financieros que persiguen un
enriquecimiento inmediato e ilegítimo, pasando por encima de toda conside-
ración ética y sin respetar a los demás miembros de la comunidad humana.
Puede haber violación de derechos humanos fundamentales y lo único que
guía al corrupto es la ambición personal. El ser humano es degradado a mero
medio para el provecho propio. El engaño y la ilegalidad están en el corazón
de este cáncer social.
Las sociedades se destruyen por la corrupción, pues el derecho es sus-
tituido por la picardía y por la fuerza. La corrupción es el origen de las ma-
fias y de sus comportamientos delictivos. El ser humano se vuelve no fiable
y peor aún, un lobo para el otro. Es la barbarie de todos contra todos y
donde triunfa el más fuerte y cruel.
Hemos definido lo que es la corrupción y hemos diagnosticado este mal
en el mundo actual. Ahora intentaremos proponer algunas medidas para lu-
char contra esta enfermedad mortal de la civilización. Sólo la auténtica edu-
cación podrá contrarrestar los efectos destructivos de la corrupción.
Educar es formar al ser humano de acuerdo a un elevado ideal, con valores
superiores y con una moralidad universalmente consensuada. Tanto en el
hogar como en las escuelas habrá que insistir en la formación integral de la
17. KE MALVA ESO 17
persona. También lo medios de comunicación y las instituciones democráti-
cas tendrán parte en este proceso. Por último, el trabajo personal sobre
uno mismo, la autoformación, culminará la ardua tarea de humanización.
Tanto en el espacio público y político, como en el íntimo y psicológico,
se libra la batalla entre los impulsos destructivos y agresivos (tanáticos) y
los vitales y amorosos (eróticos). La corrupción lucha contra la transparen-
cia, el totalitarismo contra la democracia, el abuso contra el respeto, la
crueldad contra la amistad; el egoísmo mezquino contra la compasión bené-
vola, el afán de dominio contra la solidaridad, el caos contra la belleza se-
rena de la moralidad. Somos el escenario de esa contienda inmemorial. Lo
bajo tiene más fuerza que lo superior y por eso suele ganar. Pero la lucha
prosigue y nosotros somos las víctimas y los protagonistas de la misma. Se
requiere nuestra acción decidida para el triunfo de lo superior y eso es lo
que debe conseguir la educación: que participemos con lucidez en el mejo-
ramiento de nosotros mismos.
Concluyamos con optimismo: eduquemos en valores y con valor, sin dejar
de creer en que el ser humano está llamado a lo mejor, a derrotar la co-
rrupción que lo lleva a lo peor.
Domingo Araya
VEURE PER A CREURE!
El diari Levante recollia el passat dia 22 de maig de 09 una notícia sor-
prenent:
El IES 2 de Requena retira una encuesta sobre sexo realizada por los
alumnos de 4º Los padres critican que el cuestionario se repartiera a niños
de 12 años de 1º de ESO
El periodista explicava que la direcció va retirar l’enquesta elaborada
per alumnat de 4t d’ESO en l’optativa Treball Monogràfic d’Investigació ja
que, segons el diari Levante, “un grup de pares havia protestat” perquè l’en-
questa s’havia passat a alumnat de 1r d’ESO. El periodista explicava també
que la direcció havia enviat una carta de disculpa a les famílies i que la pro-
fessora de la matèria havia rebut “una reprimenda”; però malgrat tot, un
18. 18 KE MALVA ESO
pare havia enviat una carta al Levante demanant la dimissió de l’equip di-
rectiu i que es prengueren mesures contra la professora de l’assignatura.
Tant la notícia com les queixes dels pares donen a entendre que la cen-
sura i les disculpes vénen perquè l’enquesta ha arribat a criatures de 12
anys. I jo em pregunte: A quina edat se suposa que podem començar a par-
lar de sexualitat amb la gent jove? Amb la primera regla? Amb la primera
ejaculació? Quan ja tenen capacitat reproductiva? Jo diria que sempre, des
de ben menuts, de la mateixa manera que els ensenyem a tirar petardets en
Falles quan encara ni caminen. Així s’ha de començar a parlar de la sexuali-
tat i dels afectes, amb naturalitat, traient el tema a la taula i al parc, per-
metent que la integren en els jocs i que no la visquen d’amagat quan els ho
censurem. O és que pensem que si no els en parlem, no estem fent educació
sexual? Eduquem sempre, quan parlem i quan callem, quan canviem de canal
perquè hi ha alguna escena que considerem inconvenient o quan retirem una
enquesta perquè a les tendres criatures de 12 anys no se’ls pot preguntar
on es masturben. I si no eduquem de manera formal, els estem abandonant
a la seua sort, deixant-los en les mans de les pel·lícules, dels anuncis, dels
contes, del masclisme que supuren els cossos de moltes persones que trans-
meten la seua ignorància als fills, als alumnes o als del voltant.
O és que encara pensem que l’educació incita a practicar?
Dit això, anem a pams, i valorem si l’enquesta és educativa. Doncs bé, el
diari ens ofereix una selecció de 20 preguntes, de les 77 que té l’enquesta.
D’aquestes, 8 s’adrecen als barons sobre qüestions que fan referència al
penis: a la grandària, a la durada de l’erecció i a la quantitat de semen. Un
tast: ¿Por qué los negros la tienen más grande?, ¿Cuál es la media de tiempo
que aguanta un hombre español en la cama?, ¿Existen métodos para una
mayor erección?... Per als xics, el mateix de sempre: grandària i resistèn-
cia. Per a les xiques, algunes de les preguntes són: ¿Crees que la vagina cede
si lo haces muchas veces? ¿A las mujeres les cambia el humor con la regla?
¿Todas las mujeres se corren? ¿Las posturas sexuales influyen para que
una mujer se quede embarazada? I per a tots, se suposa: ¿Dónde te has
masturbado más veces?, ¿Qué te excita más, masturbarte o que te mas-
turben?, ¿Dónde has hecho el amor más veces?...
És possible que el periodista haja seleccionat les 20 preguntes més pe-
tardes i que la resta siguen serioses. Però vist el to de l’enquesta, és fàcil
dubtar-ho. És educativa l’enquesta? Hi ha persones en aquesta enquesta?
19. KE MALVA ESO 19
Xics i xiques que fan l’amor? Emocions, sentiments o plaer?
En absolut. Hi ha androcentrisme, genitalitat, penecentrisme, coito-
centrisme... és a dir, sexisme en estat pur i una concepció de la sexualitat
reduccionista que posa al centre de les relacions una pràctica, el coit, i la
grandària i resistència dels xics. I aquest sexisme i aquest reduccionisme
es producte de la falta d’educació afectivosexual de les persones que van
elaborar l’enquesta. Però, algú s’ha fixat en això? No té sentit crític el pe-
riodista? No té sentit crític la professora que no va supervisar l’enquesta?
I els pares que protesten perquè les criatures són massa tendres per a par-
lar de sexualitat? A ningú se li ha passat pel cap dir que l’enquesta mostra
la falta d’educació de tot el món?
Us propose que imagineu altres titulars per a aquesta notícia i també
altres móns possibles:
El IES 2 de Requena retira una encuesta sobre sexo realizada por los
alumnos de 4º El AMPA protesta porque la encuesta es sexista y está pla-
gada de tópicos
El IES 2 de Requena retira una encuesta sobre sexo realizada por los
alumnos de 4º La encuesta muestra la necesidad de una educación sexual
de calidad
El IES 2 de Requena retira una encuesta sobre sexo realizada por los
alumnos de 4º Los AMPAS y la dirección del centro se comprometen a ga-
rantizar educación afectivo-sexual para el curso siguiente a todo el alum-
nado del centro
Maria Sanchis
20. 20 KE MALVA ESO
S
POR FIN, ACOMPAÑADOS
iete millones de años de evolución, no han conseguido erradicar
uno de los miedos que nos caracteriza como especie: el miedo a
estar solos. Ansiamos encontrar pareja, amigos, grupos con los
mismos intereses. Nos masificamos en comunión con miles de personas, en
mítines, manifestaciones, campos de fútbol o playas donde no cabe una
aguja. O salimos al espacio en busca de no se qué compañía. Todo ello por no
mirar y reparar en esa miríada de pequeñas motas negras que se mueven a
nuestros pies y que pisoteamos sin mucho miramiento.
Tal es el aluvión de compañeros en este viaje
que los biólogos ya no hablamos de evolución sino
de coevolución. Las propias células sabemos que
son el resultado de esta colaboración entre espe-
cies que, hace bastantes cientos de millones de
años, agotadas las posibilidades de seguir evolu-
cionando “optaron” por el camino de la cooperación
para hacerse más complejas (teoría endosim-
bionte). Incluso los genes que forman nuestro
ADN y que dan la información de cómo construirnos y continuar viviendo, sa-
bemos ahora que son el resultado de millones de uniones, roturas, sumas y
restas, entre material genético que pasa de unas especies a otras.
Ningún médico en su sano juicio, recetaría la muerte de los miles de mi-
llones de bacterias que nos acompañan en la piel, la boca o los intestinos:
sabe que aunque provoquen granos, caries, caspa, diarreas y otros proble-
mas, sin ellas no seríamos más que comida para otros muchos que esperan su
oportunidad: nos protegen, aunque a cambio exigen su cuota vital.
Pues no, no es suficiente, seguimos sintiéndonos solos y lo argumenta-
mos contundentemente: Si, si, eso está muy bien, pero todos los demás son
irracionales, Yo soy el único ser racional, el único que es consciente de su
propia existencia.
Bueno, pues tampoco. Hemos perdido la exclusividad en aquellas fun-
ciones “superiores” en las que basamos nuestra racionalidad: cada día des-
cubrimos nuevos secretos del lenguaje de los animales y comprobamos
asombrados, como ballenas, delfines, elefantes, chimpancés, bonobos, gori-
21. KE MALVA ESO 21
las, orangutanes y un largo etc., comparten con nosotros un rico bagaje de
“palabras” e incluso “reglas gramaticales” que mínimamente comenzamos a
descubrir y que además, utilizan con el mismo sentido biológico que nos-
otros, es decir, enseñar a los demás la cultura y la historia de sus antepa-
sados para mejorar sus posibilidades de supervivencia. Incluso reconocen su
propia identidad frente a los espejos.
Está de moda investigar CUATRO PRIMOS MUY CERCANOS EN
a la especie humana en su fa- PELIGRO DE EXTINCIÓN
ceta animal y fascinados,
descubrimos que no sólo nos CHIMPANCÉ: Ahora sólo quedan unos
parecemos en que tenemos 150.000, antes había millones por el cen-
intestinos, riñones o corazón tro de África. Comparte con nosotros
sino que también nuestro más del 99% de su ADN
comportamiento, siempre tan BONOBO: Sólo quedan unos 15.000 en el
“racional”, está basado en la Congo. Se les considera especie dife-
presencia de substancias rente al chimpancé desde 1929. Es la es-
propias (hormonas) e influido pecie más parecida a la humana y de las
y condicionado por mensaje- pocas si no la única que mantiene relacio-
ros procedentes de los nes sexuales cara a cara y no sólo con un
“otros”, como olores (fero- objetivo reproductivo. Compartimos más
monas) o gestos y mensajes del 99% del ADN
visuales que cambian o modi- GORILA: Es el más grande y también
fican nuestras emociones, vive en la zona central de África. Quedan
siempre difíciles, si no impo- unos 100.000 individuos. Comparte con
sibles de controlar. Pero nosotros el 97,7% del ADN.
tampoco faltan sabios que ORANGUTÁN: Vive en las selvas de Su-
están al otro lado e investi- matra y Borneo. Quedan unos 35.000. Su
gan la “humanidad” de esos ADN se parece al nuestro en un 96,4%
elefantes que despliegan
ritos y homenajes funerarios
en los lugares que murieron hijos o compañeros hace más de diez años o
esos chimpancé y delfines que desarrollan capacidad gramatical al utilizar
palabras en un ordenador, o esos “monos” tan “humanos” que nos hablan en
el lenguaje de los signos y que guerrean y matan a sus congéneres para con-
seguir las hembras que faltan en sus clanes.
Se dice que las personas somos incapaces de apreciar el valor de las
cosas hasta que las hemos perdido y es ahora, casi extinguidos estos “com-
22. 22 KE MALVA ESO
pañeros de viaje”, cuando nos damos cuenta de lo solos que estaríamos sin
ellos.
Quizás no sea tarde. El proyecto “Gran Simio” intenta que los países
introduzcan en su legislación una cierta “dignidad humana” para estos gran-
des monos (sólo chimpancés, bonobos, gorilas y orangutanes), reconocién-
doles algunos derechos reservados hasta ahora a nosotros mismos: a la vida,
a la dignidad, a no ser torturados, etc. ¿O será al revés?, después de tanta
masacre y explotación somos nosotros los que buscamos esa dignidad per-
dida. Sería muy poco, es cierto, pero un pequeño paso en la buena dirección.
Si, como dice el refrán “es de bien nacidos ser agradecidos”, ésta es una de
las últimas oportunidades que nos quedan para agradecerles su magnífica
herencia: cualquier “luego”, será demasiado tarde.
Para saber más: http://www.proyectogransimio.org
Ángel Garmendia García
23. KE MALVA ESO 23
T
APRENDER CHINO
enemos un Conseller d’Educació que se preocupa un montón por
nuestro nivel lingüístico. La última de sus propuestas después del
fiasco de Ciudadanía ha sido prometer que en cursos venideros
introducirá el chino mandarín en nuestras aulas. Nosotros para hacer más
liviana dicha introducción os adelantamos un pequeño vocabulario para que
vayáis haciendo boca y también de japonés, al fin y al cabo son lenguas her-
manas. No nos deis las gracias y que os aproveche.
Cómo se dice en chino:
- Bomba atómica: Ni cakita queda
- Diarrea: Kagasagua
- Espejo: Ahí toy yo
- Casa pobre: Chin lu chin agua y chin ga
- Sencillo: Chimple
- Calzoncillo: Ah huang tahue vhos
- Frágil: Chiche kae che lompe
- Se acabó: Chimpún
- Embarazada: Ta hinchá
- Escándalo sexual: Clin ton
- 99: Kachi chien
- Zapato sucio: Tachuchia tuchankla
- Huérfano: Chin chupale chinchumale
- Viuda: Chin chumacho
- Minifalda: Kachi chele ve
- Hombre muy alto: Chin fin
- Náufrago: chin chu lancha
- Hombre delgado: Fla ku ching
- Borrachera: Kolokón
- Guarro: Chinchampú
- Jugador malo: Notoko Nibola
- Pobre: Chin na
- Casi me cago: Kaka kachi chale
- Robo de cartera: Me Lan Kitao
- Hombre viejo: Ta oxidao
- Mal olor de axila: Tu So Bako Kanta
- Corrupción: Chan chu io
24. 24 KE MALVA ESO
- Despeinada: Chin chu peine.
- Señorita: Nota usá.
- Señora: Ta usá.
- Trapecista: YoKasimescoño
- Se fue: No ta.
- Muerto: Ta tieso.
- Adiós: Me fui
- Rock and roll: Huan Tu Tli
- Quedarse embarazada: ¿Otlo?
- Café amargo: Chin Achukar
- He comido mucho: Min chao
25. KE MALVA ESO 25
Como se dice en japonés:
- Pedo: Tukulito Sakallama
- Buen buceador: Tokofondo.
- Pañuelo: Saka Moko
- Accidente: Popoko Memato
- Gordo: Komomucho.
- Bomba atomica: Nikaka keda.
- Político honrado: Nikito nipongo.
- Diarrea: Kagao toito
- Homosexual: Malika kesuno.
- Hospital: Otikuro otimato.
- Cirujano: Yosuturo tukoko.
- Electricista: Yokito fokito.
- Bicicleta: Kasimoto.
- Papel higiénico: Kita Kakita.
- Borracho: Yositomo wiskisito
- Estreñido: Nokago
- Adivinador: Komosabe.
- Al contado: Taka taka.
- Anciana: Tuteta takaida.
- Bebé: Toi toito kagaito.
- Envidia: Kuloveo kulokiero.
- Fin: Saka bo.
- Ladrón: Cho rizo.
- Laxante: Saka lakaka.
- Subcampeón: Kasi gano.
- Tengo sed: Kiro masawa
- Estupendo: Ke Wai
- Político honrado: Nikito Nipongo
- Guapo: Kimono Kistoy
- Limpiabotas: Mao Betun
- Autobús: Tu nalga tesuda.
- Comer jamón: Atakito
- Guarro: Yono Melavo
- Como mucho chocolate: Yoshi komo kakaito.
- Método para hipnotizar el tiempo que haga falta a un niño a la vez
que alguna gente gana dinero a montones por dibujar bichos raros,
ponerles nombres raros y hacerles hacer cosas raras: Pokemon
El tigre de la sèquia de Vera
26. 26 KE MALVA ESO
SOMOS IGUALES?
(Demostración de que la lengua española no es machista en absoluto)
ZORRO: Espadachín Justiciero.
ZORRA: Puta.
PERRO: Mejor amigo del hombre.
PERRA: Puta.
AVENTURERO: Osado, valiente, arriesgado, hombre de mundo.
AVENTURERA: Puta.
AMBICIOSO: Visionario, enérgico, con metas.
AMBICIOSA: Puta
CUALQUIER: Fulano, Mengano, Zutano.
CUALQUIERA: Puta
REGALADO: Adjetivo; participio del verbo regalar.
REGALADA: Puta
BICHO: Insecto; animal.
BICHA: Puta
CALLEJERO: De la calle, urbano.
CALLEJERA: Puta
HOMBREZUELO: Hombrecillo, varón, mínimo, pequeñito
MUJERZUELA: Puta
HOMBRE PÚBLICO: Personaje prominente.
MUJER PÚBLICA: Puta
GOLFO: Masa de agua marina parcialmente rodeada de tierra
GOLFA: Puta
LOBO: Mamífero depredador rapaz y feroz. Hombre experimentado y
agresivo.
LOBA: Puta
LIGERO: Hombre débil y/o sencillo
LIGERA: Puta
ADÚLTERO: Infiel
ADÚLTERA: Puta
El tigre de la sèquia de Vera
27. KE MALVA ESO 27
E
EXCURSIÓN AL MONTGÓ
l Macizo del Montgó es un parque natural situado en el noreste de
la provincia de Alicante, Comunidad Valenciana, con 753 metros
de altitud. Para la excursión ya íbamos prácticamente informa-
dos porque nuestra profesora de Biología, Teresa Baztán, nos pidió que hi-
ciéramos un trabajo en el que hubiera información sobre este parque y sus
características. Una de las cosas que más me sorprendió antes de ir a la ex-
cursión fue que decían que si el día era muy claro y subíamos al pico, podrí-
amos llegar a ver Ibiza.
A la excursión al Parque Natural del Macizo del Montgó fuimos todos
los cuartos, más específicamente aquellos alumnos que dábamos como asig-
natura Biología y Educación Física. Salimos en autobús desde nuestro insti-
tuto sobre las 9:15. Tardamos en llegar sobre una hora y pico, ya que además
estuvimos buscando un lugar para almorzar y otras cosas. Cuando llegamos,
nos presentaron a los monitores y nos separaron en grupos. Cada vez que pa-
rábamos cuando íbamos de camino a un lado u otro, nuestro monitor nos ex-
plicaba cómo se llamaba la flor delante de la cual nos habíamos parado y
cuales eran sus orígenes, características, etc. Me impresionó un lugar al que
INSTITUT
fuimos porque vi una vela y pregunté que había pasado. Resulta que no hacía
mucho tiempo atrás, una persona que no estaba muy bien de la cabeza, se
suicidó desde aquella montaña.
Después del camino que recorrimos
por toda la flora del Montgó fuimos a
unas rocas a comer. Y después tuvimos
tiempo libre para hacer lo que quisiéra-
mos siempre que estuviésemos de vuelta
a las 4 de la tarde, que era la hora fi-
jada para coger el autobús de vuelta al
instituto. Visitamos unas rocas que habían al lado de la costa y que parecían
como cuevas. Aquello, sinceramente pareció ser lo que más nos sorprendió
de aquella excursión porque fuimos a todas las “cuevas” que vimos. Esta
parte, en mi opinión, creo que fue, además, la más divertida de la excursión.
También me lo pasé muy bien de vuelta en el autobús porque nos pusi-
mos a pintarle la cara a la gente que se dormía y fue muy gracioso, la ver-
dad, ver como la gente se despertaba y, como veían lo que estábamos
28. 28 KE MALVA ESO
haciendo, se empezaban a preguntar entre ellos si llevaban la cara pintada
o algo. Llegamos sobre las 6, más o menos. Se me hizo menos pesada la vuelta
que la ida.
En general, la excursión fue bonita y son de las que se aprenden, y me
quedo con eso. Para que os hagáis idea de cómo era el paraje que visitamos
os dejo aquí abajo una foto para que la disfrutéis.
Luis Belenguer Bermejo
UNOS DÍAS EN AULA DE LA NATURALEZA
”SEIDIA” – BENASSAL-
Del 9 al 11 de marzo
Algunos de los Objetivos propuestos:
Realización de actividades en el Medio Natural
Disfrutar de la Naturaleza y valorar la importancia del Medio Natural
Reconocer utilidades del agua y valorar su importancia
Realizar actividades en grupo para mejorar la convivencia entre el
alumnado
Potenciar la autonomía en el desarrollo personal
29. C
KE MALVA ESO 29
on un grupo de alumnos y alumnas de 1º estuvimos tres días en
el Aula de Natura Seidia, en Benassal. Los objetivos anterior-
mente mencionados se cumplieron sin problemas, pero además
hemos de resaltar que esta actividad nos dio la posibilidad de conocer a
los chicos y chicas del grupo de una manera más cercana. Agradecemos
muchísimo el comportamiento, así como la participación en las actividades
educativas y lúdicas. Ha sido un grupo participativo y divertido., donde la
convivencia ha sido el aspecto fundamental de la estancia.
Ha sido un placer .Lo hemos pasado realmente bien con vosotros
Pilar Soto y Adela Gascón
L
EN LAS DIVERTIDAS VELADAS NOCTURNAS
a verdad es que nos
mimaron mucho, las
cocineras nos hacían
unas comidas buenísimas y
unas meriendas que nos cha-
pábamos los dedos; los moni-
tores eran muy simpáticos y
explicaban las actividades
muy bien. La verdad, para que
vamos a engañaros, ¡el año que
viene volveremos!
Una de las cosas que más
nos gustó fue la velada del
Terror y la noche de discoteca.
Axel, Christian y Raquel
Micaela, Camelia, Tania
¡Todo estuvo genial, fue lo mejor!
José Ramos
30. 30 KE MALVA ESO
E
APICULTURA
n Benassal el primer día nos explicaron las horas que teníamos li-
bres y las que teníamos actividad y/o excursión. Luego fuimos a
las habitaciones, arreglamos algunas cosas y nos enseñaron una
canción que debíamos entonar antes de cada comida: nyam nyam, bon pro-
31. KE MALVA ESO 31
fit, nyam nyam bon profit, moltes gràcies igualment.
Se hicieron dos grupos, uno de ellos se fue con un monitor y Pilar y el
otro con Adela y otro monitor.
La excursión que más nos gustó fue Apicultura –menos a Tamara y Sara
que son alérgicas-. Al finalizar la actividad nos dieron a probar la miel.
Lina, Ela, Pablo y Luis 1º C
¡Me gustó todo! ¡Simplemente perfecto! Noemi, Jenni
32. 32 KE MALVA ESO
E
CHARLES ROBERT DARWIN
ste año es el ciento cincuenta
aniversario del libro más incen-
diario de la historia de la cien-
cia, y el bicentenario del nacimiento del
inglés que lo escribió. Charles Darwin no
inventó la idea de la evolución. Lo que
aportó en el origen de las especies fue una
poderosa teoría sobre como podía produ-
cirse la evolución por mecanismos pura-
mente naturales, lo que dio a los
científicos libertad para explorar la glo-
riosa complejidad de la vida, en lugar de
aceptarla como un misterio impenetrable.
Darwin postuló que todas las especies de seres vivos han evolucionado
con el tiempo a partir de un antepasado común mediante un proceso deno-
minado selección natural. La evolución fue aceptada como un hecho por la co-
munidad científica y por buena parte del público en vida de Darwin, mientras
que su teoría de la evolución mediante selección natural no fue considerada
como la explicación primaria del proceso evolutivo hasta los años 1930, y
actualmente constituye la base de la síntesis evolutiva moderna. Con sus
modificaciones, los descubrimientos científicos de Darwin aún siguen siendo
el acta fundacional de la biología como ciencia, puesto que constituyen una
explicación lógica que unifica las observaciones sobre la diversidad de la
vida.
Charles Robert Darwin (12 de febrero de 1809 – 19 de abril de 1882)
nació en Shrewsbury en el seno de una familia acomodada. En 1825, entró
en la universidad de Edinburgh a estudiar medicina, pero las clases le re-
sultaban tremendamente aburridas e insoportables y la cirugía insufrible, y
finalmente abandonó estos estudios. Su falta de atención a los estudios de
medicina disgustó a su padre, quien lo envió a la Universidad de Cambridge
para obtener un grado en letras como primer paso para ordenarse como pas-
tor anglicano. En esa época conoció al naturista John Stevens Henslow quién
le ayudó a ser un observador meticuloso y cuidadoso de los fenómenos na-
turales y a ser un coleccionista de especímenes.
33. KE MALVA ESO 33
Después de graduarse en Cambridge en 1831, a los 22 años fue invitado
a bordo del barco inglés de investigación HMS Beagle al mando del capitán
Fitz Roy defensor furibundo de la creación, por la expresa recomendación
de Henslow, como un naturalista sin pago en una expedición científica alre-
dedor del mundo. El verdadero objetivo de la expedición era cartografiar
la punta sur de Sudamérica: la Patagonia y la Tierra del Fuego, fijar las cos-
tas de Chile, Perú y algunas islas del Pacífico.
Las pistas que recogió a lo largo de su viaje en el “Beagle” fueron clave
para la teoría que se formó lentamente en su cabeza. La afirmación de que
la diversidad de la vida surgió gracias a un proceso hereditario con modifi-
caciones en el que participamos todos, seres humanos incluidos, mediante el
mecanismo de la selección natural (los mejores sobreviven y se reproducen,
y los peores... pasan a la historia), fue el resultado de una reflexión de dos
décadas y no tomó forma hasta 1859, cuando Darwin publicó “El origen de
las especies”. En aquella travesía en la que circunnavegó el globo encontró
restos fósiles en la Pampa argentina. La relación entre lo muerto y lo vivo
en un mismo continente empezó a obsesionarle; la idea de que las especies
antiguas han dado lugar a las actuales, más pequeñas y adaptadas, habría
horrorizado a los defensores de la idea ortodoxa del creacionismo.
El viaje del Beagle duró casi cinco años. El joven Darwin dedicó la mayor
parte de su tiempo a investigaciones geológicas en tierra firme y a recopi-
lar ejemplares, mientras el Beagle realizaba su misión científica. Darwin
34. 34 KE MALVA ESO
tomó notas escrupulosamente
durante todo el viaje, y enviaba
regularmente sus hallazgos a
Cambridge, junto con una larga
correspondencia para su familia
que se convertiría en el diario de
su viaje. Tenía nociones de geo-
logía, entomología y disección de
invertebrados marinos, aunque
se sabía inexperto en otras dis-
ciplinas científicas; de modo que
reunió hábilmente gran número de especimenes para que los especialistas en
la materia pudieran llevar a cabo una evaluación exhaustiva. La mayoría de
sus notas zoológicas tratan sobre invertebrados marinos, comenzando por
una notable colección de plancton que reunió en una temporada con viento
en calma.
Es importante no sobrevalorar la capacidad de Darwin para identificar
sus hallazgos, y menos aún para interpretarlos. La mayoría de sus fósiles
eran especies que no resultaban familiares ni para los expertos, y él no era
ningún experto. No era un especialista en anatomía comparada, como el gran
Cuvier, ni tampoco un experto en mamíferos, y el término “paleontólogo” ni
siquiera había empezado a usarse. Darwin confió la descripción e identifi-
cación de sus fósiles a un joven y brillante anatomista de Londres llamado
Richard Owen, destinado a convertirse en un autoridad en mamíferos ex-
tinguidos.
Entre los hitos de su viaje se encuentra el reconocimiento de la gran di-
versidad de especies en la zona tropical de Brasil y Argentina y el descu-
brimiento de diversos fósiles, algunos de ellos de grandes mamíferos, que
le hizo preguntarse por las causas de extinción de estas especies. En una ex-
cursión a Perú, le sorprendió enormemente encontrar depósitos marinos a
más de 2000 metros de altura sobre el nivel del mar.
En su estancia de cinco semanas en las Islas Galápagos Darwin halló los
famosos pinzones, que afianzaron su teoría. Propuso que esas aves descen-
dían de un antepasado común que había volado del continente muchas gene-
raciones atrás. Cada especie era el resultado de las condiciones naturales
35. KE MALVA ESO 35
de las islas (clima, vegetación, competencia por los recursos). Así, sus picos
evolucionaron y se adaptaron a las fuentes de alimento de cada territorio.
En las Galápagos, también observó tortugas gigantes que al igual que
los pinzones concluyó que entroncaban con un antepasado común. El capara-
zón de las tortugas demostraba las diferentes condiciones naturales que
presentaba una isla con respecto a sus vecinas.
Darwin regresó a Inglaterra el 2
de octubre de 1836 con la salud dete-
riorada. Al poco tiempo empezó a for-
mular sus teorías, pero no las publicó
hasta 20 años más tarde, y lo hizo en-
tonces ante la aparición de un compe-
tidor, Alfred Russell Wallace, este le
envió un manuscrito que contenía una
breve pero explícita exposición de una
teoría de la evolución por selección natural, que coincidía exactamente con
sus propios puntos de vista. Este hecho le obligó a escribir en poco tiempo
una exposición concisa, con la intención de que esa versión breve y apresu-
rada fuera solo una sinopsis de teoría y de los datos que la respaldaban. Lo
llamó “Mi libro abominable”, ya que tras décadas de reflexión y aplaza-
mientos, el proceso de escritura fue precipitado y penoso.
En Noviembre de 1859 apareció el libro “Sobre el origen de las espe-
cies por medio de la selección natural”, cuyos 1.250 primeros ejemplares se
vendieron ese mismo día y fue un éxito de ventas.
En 1871, se publicó su obra sobre el Origen del hombre donde vincula
al linaje humano con ancestros primates, con la consiguiente indignación de
ciertos sectores y la caricaturización de su imagen
A finales de 1881 comenzó a padecer graves problemas cardíacos y fa-
lleció a consecuencia de un ataque al corazón el 19 de abril de 1882.
Josep Cueca y Cristian Pérez
36. 36 KE MALVA ESO
U
MI INTERCAMBIO
n intercambio es un evento que organiza el centro para que ten-
gas la oportunidad de ir a casa de una persona fuera de España,
y luego esa persona podrá ir a tu casa de la misma manera. Pero
hay gente que cuando escucha esta palabra directamente “pasa” del tema
porque piensa: eso es una pérdida de tiempo, no me entenderé con la per-
sona que venga, estás que me voy yo una semana a casa de alguien que no co-
nozco, o simplemente no le apetece.
A nadie se le ocurre pensar que esa es una buena oportunidad para:
mejorar tu inglés (porque la mejor forma de aprenderlo es practicarlo), co-
nocer otra cultura, país, comidas, bebidas, costumbres, etc. hacer nuevos
amigos y la razón mas importante, ABRIR TU MENTE.
En mi caso, hacer intercambio ha sido una experiencia que no olvidaré
jamás por las cosas que aprendí y el nivel de culturización que me propor-
cionó.
37. KE MALVA ESO 37
Mi primer intercambio fue en Holanda. Tuve mucha suerte porque no
quedaban plazas y en el último momento un alumno no pudo ir y me metieron
como pudieron. Al llegar al aeropuerto para partir, mi barriga parecía un
concierto de rock and roll (era normal puesto que nunca había hecho algo pa-
recido) y en esos momentos fue cuando pensé, ¿por qué leches (por no decir
otra palabra) me metí en este rollo? Después de 4 horas amargas, llegas a
tu destino y el concierto intestinal va subiendo el volumen. He de reconocer
que el peor momento es cuando ves por primera vez a tus “host” (la gente
que te hospeda) y es ahí cuando te quedas en blanco y se te olvida hablar el
poco inglés que sabes. Te miran de arriba abajo como si te hicieran un aná-
lisis, y tú mirando para abajo como avergonzado por no ser como querían.
Pero una vez pasado ese mal trago (a lo mejor me he pasado un poco) se con-
virtió en el mejor viaje de mi vida puesto que todas las noches íbamos: o a
una discoteca llamada Nox, que era la repera, (especialmente si te gusta el
electro) y donde probé por primera y última vez el “boswondeling”. Para
quien se haya quedado un poco como diciendo qué me estas contando, os diré
que ese es el nombre de una bebida alcohólica que solo la hacen allí. Tam-
bién íbamos a un bar de por ahí, o a la bolera (donde por cierto hice la mayor
puntuación), otras veces nos llevaban a un barco a cenar donde servían creps
y la mezcla (y tu lógicamente te ponías la mezcla en el crep). Estaba muy
guapo cuando quedábamos todos juntos, es decir, checos, polacos, alema-
nes, británicos, españoles y algún país más que no me acuerdo. Lo peor era
el día siguiente, que te despertabas súper pronto para ir al instituto a dar
clases para aprender el idioma de los países citados antes, o algo típico de
ellos. Bueno como no quiero extenderme más sobre mi estancia en Holanda
solo decir que las chavalas (venga va y chavales) estaban más buenas/os!
Ah bueno, se me olvidaba una cosa.
Si vais a Ámsterdam, visitar el barrio
rojo. Está todo lleno de tiendas de ma-
rihuana y escaparates de prostitutas. Y
otra cosa, aunque los españoles éramos
los que peor hablábamos inglés, todos
dijeron que éramos los más divertidos,
ahí es nada.
Cuando ellos vienen aquí es mejor, porque es a él/ella a quien le hacen
el análisis y se nota que están muy nerviosos. Pero claro solo es el primer día
porque cuando nos fuimos de fiesta con ellos por primera vez, ¡Dios! ¡¿Cómo
38. 38 KE MALVA ESO
pueden ponerse tan ciegos?! Fue probar la sangría y ya desmadre. Había una
china que de amarilla paso a roja, pero roja como un “tomeito”. Y luego antes
de irnos robamos (sin querer) unos licores que nos sirvieron y con la fiesta
a otra parte. Me encantaría seguir hablando de las fiestas pero resulta que
esa noche me pillaron “un pelín tocadete” y me castigaron todas las noches,
una lata. Pero eso no le impidió a Oliber que era mi holandés irse por ahí con
los demás. ¡Llevaba la fiesta en la sangre el tio!. Me acuerdo que en la noche
del chino, cuando llegamos a casa (y antes que me pillaran mis padres) me
dijo que era la primera vez que estaba borracho ¡y era el día más feliz de
su vida, el muy loco! Los siguientes días estuvieron bien. Jugar en la playa,
saltarse clases, ir al monte, etc. Oliber, pese a lo de antes, era muy buena
persona. Me regaló galletas holandesas y un cómic del pato Donald en ho-
landés (esto último lo tiré cuando se fue). Y si tenéis curiosidad en saber
cómo nos entendíamos os diré que en mi vida he hablando inglés tan bien, y
entenderlo igual. Había unas chicas de 3º que yo pensaba “éstas van a tener
un problema al hablar con ellos”, porque yo voy a una academia entonces es
normal que hable y entienda todo, pero unas chavalas de 3º que no iban a nin-
guna academia ni nada ya me dirás tú. Oye pues no me preguntes cómo pero
se entendían a la perfección, así que no te preocupes si crees que tienes un
problema en ese aspecto. Bueno, y para terminar ya solo decir que espero
que la próxima vez que te pregunten sobre ir a cualquier sitio de intercam-
bio, antes de decir que no piensa que lo que aprendes allí no lo olvidarás en
tu vida.
Carlos Pérez Vacas
39. KE MALVA ESO 39
C
EL RETORNO...AL INSTITUTO
uando empezó el curso me parecía imposible estar de nuevo en mi
instituto y con mis compañeros y profesores. Una enfermedad me
apartó por muchos meses de lo que era mi vida hasta ese mo-
mento. Nunca pensé, ni mis padres tampoco, que me iba a ocurrir lo que re-
almente pasó.
Después de una operación, me quedaron secuelas que me impedían hacer
las cosas que hacía antes, como andar, escribir...incluso al principio hablar.
Gracias a los médicos y fisioterapeutas, y por qué no decirlo a mi voluntad,
poco a poco (frase mágica para los que como yo estamos en rehabilitación de
daño cerebral) he ido recuperándome.
Estuve recibiendo clases en mi casa durante un curso, segundo de ESO,
con unas profesoras estupendas que me trataban muy bien. Mis profesores
de casa y los del instituto, siempre estuvieron interesados por mi estado y
mis estudios (sobre todo Domingo Ayora, que venía a mi casa todas las se-
manas y me explicaba las cosas que me encantan de la Mitología, psicolo-
gía...; así como Felipe el “diré”, que también se preocupó mucho porque
pudiera seguir estudiando).
Gracias a todo esto pude volver en el mes de septiembre a mi instituto,
y aunque al principio me costó un poco, ahora estoy muy contento de cómo
van las cosas. Tengo buenos compañeros y profesores, también los conser-
jes, señoras de la limpieza, administración, etc. Se han portado estupenda-
mente conmigo. Sólo espero recuperarme del todo y poder ir andando como
antes.
Josep Henares
41. KE MALVA ESO KE MALVA ESO 41
D
VIAJE FIN DE CURSO MALLORCA 2009
iversión. Esa es la palabra que define nuestro viaje a Palma.
Fiesta de noche y muchas risas de día; vestidos de noche y biki-
nis de día; fiesta de noche y fatiga de día. Pero no adelantemos
acontecimientos y empecemos desde el principio.
Nuestro viaje em-
pezó mucho antes de
coger el barco. En clase
ya mirábamos al hori-
zonte prediciendo nues-
tra juerga mallorquina
mientras dábamos
clase. Cuando sonó el
timbre de nuestra úl-
tima lección, la alegría
inundó nuestros corazo-
nes y salimos lo más rá-
pido posible del centro
para olvidarnos de él
por un tiempo, ¡estába-
mos en vacaciones y
había que aprovecharlas! Al día siguiente ya zarpaba el barco. Nos reuni-
mos todos en astilleros viendo amarrado el navío en el cual íbamos a pasar
una noche entera, sin dormir, por supuesto. Cuando embarcamos nos despe-
dimos de nuestros familiares y nos distribuimos por camarotes y enseguida
fuimos a ver alejarse Valencia en el horizonte. Esa noche fue estupenda por
varias razones: la piscina a las 2 de la mañana, ping-pong a las 5, charlas de
nuestros planes en la isla y sobre todo, aguantar despiertos. Llegamos a las
7 pero las habitaciones nos las dieron a las 12 por lo que nos dio tiempo a ver
tiendas y conocer la isla. Una vez nos establecimos cada uno en su habita-
ción, fuimos a dar una vuelta y descubrimos sitios a los que podríamos ir por
la noche y dónde compraríamos comprar nuestra consumición para la noche.
Esta se acercaba pero las risas no cesaban. Estábamos cansados pero no
podíamos dormir pensando en ella. Cuando por fin llegó, fuimos a una playa
desierta donde lo pasamos bien y nos reímos mucho. Al día siguiente, las
gafas de sol estaban de moda. No veías a nadie mostrando sus ojos después
de la noche pasada. Menos mal que ese día no había ninguna excursión a nin-
42. 42 KE MALVA ESO
gún sitio porque sino más de uno se hubiese perdido. Estuvimos todo el día
en la piscina y el sol hizo de las suyas con nuestras pieles. El color gamba
también se puso de moda y con ello las cremas, picores, pellizcos... Todos
tostados hasta la médula. Esa noche no fue del todo especial, más bien nor-
mal. Jugamos a las cartas y enredamos un poco por el hotel. Había que estar
preparados y sanos para el día siguiente, que tocaba Manacor. Nos levanta-
mos pronto (9 o 10 am.) y después de desayunar (que ya hablaremos de la co-
mida) subimos al autobús. Visitamos la fábrica de perlas Majórica, donde
compramos algunas para las otras perlitas que nos esperaban en casa. De ahí
fuimos a Porto Cristo, un lugar con unas aguas cristalinas y playas reco-
mendadas por muchos expertos. Antes de ir a las cuevas del Drach nos pe-
gamos un remojón, por supuesto. Las
cuevas eran preciosas. Estalactitas por
aquí, estalagmitas por allá. Incluso se
había filtrado el agua de la superficie
creando un pequeño lago subterráneo
que cruzamos con barca. Recuerdo que
durante la travesía casi nos vuelca la
barca por culpa de una señora un poco
fondona. Por la tarde, regresamos al
hotel, nos dimos un chapuzón en la pis-
cina y a las habitaciones para mirar qué
hacíamos. Al final quedamos en ir otra vez a la playa desierta del primer
día. Lo único relevante fue que un compañero perdió el móvil y estuvimos
como una hora buscándolo (Al llegar al hotel, lo encontramos en su cuarto).
El día siguiente era libre y mientras unos decidieron quedarse durmiendo en
sus camas, otros se fueron a visitar Palma. Visitamos el castillo y las tien-
das de la zona y volvimos a la hora de comer. Algunos se quejaban de la co-
mida que servían en el buffet y reclamaron al hotel. Bueno, se armó una
buena pero al final nosotros nos callamos y ya se apañarían. Nos pasamos el
día en la piscina y en la playa. También hubo otros que se quedaron en su
cuarto jugando a la play. Cuando cayó la noche no teníamos plan. Salimos
para ver qué surgía cuando, como pasa en todos los grupos, empezaron las
riñas. Esto provocó la separación del grupo en dos, unos seguimos con la
fiesta mientras el otro se fue al hotel. El grupo que se fue de fiesta, den-
tro de donde me incluyo, recorrimos 4 o 5 kilómetros de costa en busca de
algún pub donde nos estuviera permitida la entrada. Lo encontramos en el
barrio alemán, famoso en la isla por eso precisamente, todos eran alemanes.
Entramos en un local que tenía buena pinta y la verdad, no defraudó. Aparte
43. KE MALVA ESO KE MALVA ESO 43
de alemanes, cerveza y canciones alemanas no había nada más. Ni hizo falta
para que pasáramos una de las mejores noches de nuestra estancia allí. Lo
peor, claro está, fue la vuelta. No íbamos en buenas condiciones para andar
grandes distancias, pero al final llegamos, muy tarde eso sí. A la mañana si-
guiente, pese al cansancio acumulado, estábamos muy contentos pues ese
día nos tocaba la última excursión y eso quería decir que se acabaron los
madrugones. Pero por otra parte, también estábamos tristes porque Ma-
llorca estaba llegando a su fin. Ese día tocaba Valldemossa, pueblo de Cho-
pin en su residencia La Cartuja. Fue muy interesante aquél museo puesto
que nos contaron la biografía de uno de los compositores y pianistas más
importante de la historia. De allí fuimos a Sóller, un pueblo muy bonito y
agradable escondido entre la montaña. Tras la parada en este pueblo, re-
gresamos a nuestro querido hotel. Esa tarde la aprovechamos, unos para
comprar las tradicionales ensaimadas mallorquinas y hacer nuestras com-
pras, otros compraron ya la bebida para esa noche. Lo divertido de comprar
la bebida es intentar que los profesores que nos acompañaban no la vieran.
Esa noche volvimos a nuestra solitaria playa para variar. No fue una noche
del todo para recordar pues un amigo, sin querer, le rompió a otro el móvil
y esto provocó la riña de estos dos amigos. El que lo rompió lo pasó mal esa
noche pero al final todo se arregló. A la mañana siguiente, los “profes”, nos
hicieron levantarnos pronto para desayunar, ya que habíamos pagado por
ello. Nuestro último día allí fue rutinario. Piscina, play, compras de última
hora… Cuando fuimos a comprar, compramos mucha sangría porque era nues-
tra última noche y la quisimos pasar contentillos para celebrarlo (los pro-
fesores lo supieron entender). Más tarde, estábamos todos listos para
irnos, incluso Miquel y Adela, que también se apuntaron. Al principio pensá-
bamos que no íbamos a disfrutar igual teniendo a los profes al lado. Pero
estábamos súper-equivocados puesto que nos lo pasamos mejor, si cabe. En
esa noche fuimos primero al pub más lleno del planeta. No te podías mover
por ningún sitio y encima era light. Tuvimos que dejar la sangría fuera por-
que no nos dejaban entrarla. Pero nos los pasamos muy bien pese a todo.
Cuando decidimos movernos lo hicimos a otro pub, pero esta vez, menos lleno
y donde lo pasamos mejor, COCORICO. Disfrutábamos tanto que era hasta
contagioso y al final el dj nos invitó a una ronda a todos. Salimos muy con-
tentos y felices de aquél pub, en el cual el IES Isabel de Villena causó sen-
sación. Volvimos en taxi, ya que no se iba repetir lo de la noche de los
alemanes. Al llegar, sentimos mucha pena. La juerga se había acabado. Nos
fuimos a dormir poco después de llegar y enseguida ya había amanecido. Al
despertarnos, hicimos las maletas y fuimos al hall del hotel, donde habíamos
44. 44 KE MALVA ESO
quedado con el autobús para que nos llevara al puerto. Una vez en nuestro
camarote, dejamos las maletas y nos dispersamos por el barco. Unos fueron
a la cafetería, otros a dar vueltas, otros a la piscina y otros por cubierta.
Bueno, fueron casi 7 horas de travesía por lo que no voy a poner todo lo que
hicimos. Cuando ya veíamos Valencia, Mallorca nos dio nostalgia. Recordamos
los momentos vividos allí y no nos apetecía separarnos como grupo. Sí es
verdad que echábamos de menos a nuestras familias y seres queridos, pero
lo habíamos pasado tan bien. Nuestro viaje terminó en el puerto con la úl-
tima de las fotos. Recuerdo la imagen de irnos separando todos, los duros
instantes en los que ves irse a gente con la que has compartido tantos días
y tantos momentos. Sin duda fue un viaje irrepetible.
Carlos Pérez Vacas
47. KE MALVA ESO 47
T
EL CHICO DEL TREN DE LAS 7:45
odos los días le veía y todos los días me fijaba en él. Era inevi-
table que lo hiciera, la verdad. Siempre seguíamos la misma ru-
tina, aunque no me molestaba. En realidad, agradecía seguirla. A
las 7:45 llegaba yo, ahogada, bamboleándome por el peso de los libros en la
mochila, a la estación de tren. Él ya había subido para entonces, me veía co-
rrer con una sonrisa a lo Gioconda en su cara –se me pegaban las sábanas,
para variar– hacia el tren y me agarraba del tirante derecho de la mochila,
metiéndome en el vagón número 3 del cercanías justo antes de que se ce-
rraran las puertas a mis espaldas. Después íbamos a los dos únicos asientos
que quedaban libres y me dejaba pasar, sentándome yo en el más cercano a
la ventana y él, en el más cercano al pasillo, junto a mí. Se que no le soñé.
creació LITERÀRIA
Estaba hecho en blanco y negro, lo juro, como si lo hubieran sacado de
una foto antigua. He de reconocer que para alguien como yo, que anhela ser
escritora, era un personaje de lo más interesante: no más de veinte años,
alto y espigado, me sacaba una cabeza –quizás ayudara el hecho de que yo
también soy bastante bajita-. Muy guapo, siempre de traje negro con camisa
blanca y corbata roja, resaltando por ser el único elemento a color de toda
la figura. De piel pálida y pelo azabache que le llegaba prácticamente a la ro-
dilla, liso como una tacha; con los ojos del mismo color, siempre tras unas ga-
fitas ovaladas que llevaba a media asta (aunque nunca vi que se le cayeran).
Él estaba hecho en blanco y negro, estaba convencida. Quizás por eso siem-
pre me extrañó que nadie reparara en su figura, que para mí destacaba
entre el resto de gente del tren. Tenía un algo, no se el qué, que hacia que
me sintiera capaz de reconocerlo y diferenciarlo aunque estuviera entre
una multitud. A pesar de ello, nunca le vi caminar por las calles. Quizás no
viviera en el mismo pueblo donde vivo yo desde hace un par de años.
No hablábamos, nunca he oído su voz. Como mucho, cuando yo leía, él
ojeaba el escrito que tenía delante. No criticaba mi ortografía (o mi cali-
grafía) ni mis errores de cálculo, solo los señalaba. Ideé con él un sistema
para, al menos, poder comunicarnos sin que tuviera que hablarme, aunque
solo sirviera para mis deberes: si él me señalaba una palabra, yo se la lee-
ría por si era la caligrafía y él no la entendía. Si la volvía a señalar, era que
la entendía y que había cometido alguna falta de ortografía. Si fueran nú-
meros lo que miráramos pasaría lo mismo, si señalaba un número se lo diría
por si era por cómo lo había escrito, y si señalaba la operación entera, era
48. 48 KE MALVA ESO
por que estaba mal hecha. Él colaboraba en eso, pero aunque a veces se lo
pregunté, jamás me dijo donde estaba el error de cálculo o de escritura.
Empecé a sospechar que era mudo, pues su cara no mostraba jamás des-
precio, hastío o algún signo de desagrado hacia mí, siempre su faz fue se-
rena o incluso, a veces, alegre.
Aquel día era como todos los demás días de invierno. Habíamos subido
ambos miles de veces al tren, aunque lloviera o hubiera sol, hiciera frio o
calor. Y aquel día llovía. Corrí hacia el vagón 3 como de costumbre, buscán-
dole suplicante con la mirada, pero él no estaba allí. Perdí el tren por su au-
sencia, de eso estoy segura. Ya no llegaría a tiempo a clase, pues el siguiente
tren hacia allá no saldría hasta dentro de una hora. ¿Qué podía haber pa-
sado? Me pregunté. Él nunca había enfermado, no al menos en estos dos
años, mientras nos encontrábamos en el tren. Yo sí, pero él nunca me dijo
nada. Miré a mí alrededor mientras caminaba hacia el techado que cubría la
mitad del andén. El andén estaba vacío, allí solo estaba… él, bajo un para-
guas, tan negro como la mayoría de su indumentaria, mirando ausente la es-
tructura de metal alejarse entre un estrépito oxidado con una cara
impasible, como si viera más allá de lo que vería una persona normal, pero yo
ya me había percatado, hacia mas de un año, de que aquel no era un chico
normal, que nunca lo fue y que jamás lo sería.
Corrí a preguntarle por que no había subido aquella vez al tren, dejando
mi mochila junto a uno de los pilares del tejadillo. Él siguió sin decirme nada,
solo me miró con expresión sabia y una media sonrisa asomando por su cara.
Mi imagen empapada, disgustada y confusa se reflejó en sus gafas, perla-
das de gotitas de lluvia, y en sus pupilas, negras como dos pozos sin fondo
y que parecían llenos de una sabiduría insondable, mezclada con una pro-
funda tristeza formando un marco extraño. Me pareció que estaba a punto
de llorar cuando compartió conmigo el paraguas, cruzando su brazo izquierdo
por delante de su pecho para cubrirnos a ambos y empujándome suavemente
con la mano derecha por la espalda a la altura de los riñones. Fuimos hasta
mi mochila y, por si acaso seguía nuestro viaje, la cogí. Me siguió condu-
ciendo hasta un coche, negro también (eso me lo esperaba, lo admito) y con
los cristales tintados.
Algo reacia a hacerlo, subí, no se si por voluntad o por que me sentí
obligada, al asiento del copiloto. Si lo pensaba bien, por un lado ¡no le cono-
cía de nada! ¡Era una estupidez subirme a aquel coche! Pero por otro lado,
49. KE MALVA ESO 49
él me había salvado el pellejo de lunes a viernes durante un par de cursos.
Aún no tengo claro si estaba en mis cabales al hacerlo. Él subió al asiento del
piloto y se puso el cinturón. No arrancó hasta que yo no até cabos y me lo
puse también. Siguió sin decir nada, fue su GPS el que habló:
- Indique una dirección.
El me miró con una sonrisa cómplice, como si en el fondo, todo esto es-
tuviese ya planeado y él ya hubiese previsto que el azar le haría ser el que
se comunicase conmigo y tomara la iniciativa en aquel mensaje. Yo hasta en-
tonces no me había percatado de que el cacharrito estuviera ahí, en el sal-
picadero, junto al volante. Le indiqué la dirección de mi casa y él condujo
bajo las órdenes de su maquinita a través de las calles mojadas. ¡Tampoco
es que el pueblo donde me había mudado durante estos dos años fuera tan
grande! Lo que si tenía era subidas y bajadas, al estar en la ladera de una
montaña. Por suerte la estación estaba abajo, era por eso que yo ya llegaba
con la carrera cogida de tanto ir cuesta abajo.
Todo parecía estar en silencio, como si a la gente le entrara la melan-
colía por sufrir aquella mañana tan deprimente. Las tiendas que, supuse, ya
deberían estar abiertas, aún estaban cerradas. La poca gente que había es-
taba reunida en pequeños grupitos de tres o cuatro personas a lo sumo, bajo
los portales de los patios. Nunca me había fijado en lo bonito que es mi pue-
blo hasta aquel momento. Sus calles, sus barrios… todo me transmitía una
sensación de antigüedad y solemnidad, y supongo que aún lo hace, aunque no
llueva. Creo que fue en aquel momento cuando decidí darle una oportunidad
a aquel lugar. Aunque echara de menos la ciudad, empezaba a entender por
que mi madre había escogido aquel sitio, que parecía ampararla y cobijarla
del fantasma del recuerdo de la muerte de mi padre. Al fin llegamos.
Mi madre estaba en el patio de casa, llorando como una magdalena.
Cuando me vio salir de aquel coche corrió a abrazarme y a besarme como si
eso fuera lo último que fuera a hacer en su vida. Yo estaba perpleja y,
cuando encima me contaron lo ocurrido, a aquella sensación se le sumó la
confusión ante todo lo acontecido con el chico: al parecer el tren había des-
carrilado a unos 800 m de la estación de tren, volcando. Aún no se sabía
cuantos muertos había. Era por eso que la gente murmuraba y parecía tan
triste, ya que estaban emitiendo la noticia en directo en aquel momento en
un inciso del telediario en la programación de la mañana. Mi madre temblaba
50. 50 KE MALVA ESO
como una hoja y lloraba mientras me contaba que no se atrevía a marcar mi
número de teléfono por si yo no contestaba o no daba señal de comunicación.
¡Que suerte tuve en verdad al no subir aquella mañana al tren! Cuando
me giré, blanca como la tiza, para agradecerle al “chico del tren del las 7:45”
aquella maravillosa casualidad, él ya se había ido. No estoy muy segura de si
aquello fue o no una casualidad o algún díscolo dios jugó a los dados aquella
mañana y a mi me tocó en suerte la supervivencia. No le volví a ver, ni en mi
pueblo, ni en el andén, pero se que no lo soñé, que él estuvo ahí durante años
y que aquella tarde me salvó la vida.
Cuando lo conté, nadie me creyó.
Escribiendo estas líneas, dudo de que ni siquiera tú que ahora lees este
relato, hallado quizás entre papeles olvidados en algún cajón o en algún re-
gistro de historias paranormales sorprendentes, me creas.
Éphira
POEMA PARA LA PAZ.
La humanidad busca poder
y hacemos cualquier cosa para no perder
la mayoría escoge el mal sendero
y cae en aquel sucio agujero
Cuando percibes que no puedes escapar
tus sueños desaparecen sin más
Empiezas a reflexionar y dudas tu existencia
deseas que alguien te tenga clemencia
Pero vuelves a dudar, miras tu sucio pasado
percibes que has causado guerra y destrucción
percibes las hermosas vidas que quitaste
y te arrepientes de tu error
Parece que toda ilusión esta perdida y tú
dignidad escondida
en ese momento anhelas recuperar las vidas que desterraste
51. KE MALVA ESO 51
anhelas hallar el camino de la prosperidad
Mas ya no hay vuelta atrás
si enrealidad quieres cambiar
tú corazón has de limpiar
tú vida a Dios entregar
y nueva criatura serás.
Claudilene Saldivar Pereira (Kalil) 3º C.
N
UN PASEO POR EL CINE.
o hay nada en el mundo que me moleste más que un grupo de
personas hablando en una sala de cine mientras intento ver
una película. ¡Mientras intento disfrutar de una película por la
que he pagado casi 6 euros en taquilla! Puede que por eso (y por los casi 6
euros) disfrute más viendo películas en mi casa, descargándomelas (ilegal-
mente) desde este portátil. Sé que la industria del cine está en crisis, o
eso dicen en la gala de los Goya todos los años, pero no existen salas que
proyecten películas clásicas, de las buenas, de las que me gustan a mí.
Gracias a Canal + y Ares (y Telefónica que es la que me proporciona la
línea de internet), he visto películas que, en la actualidad, son difíciles de
conseguir. Gracias a Ares, disfruté viendo a Gregory Peck y Audrey Hep-
burn de “Vacaciones en Roma”; a los grandes Cary Grant, James Stewart
y Katherine Hepburn en “Historias de Filadelfia”; a Humphrey Bogart en
“Halcón Maltés”; la “Chinatown” de Polansky o “La naranja mecánica” del cé-
52. 52 KE MALVA ESO
lebre director Stanley Kubrick. Pero bueno, no tengo en mente hacer pu-
blicidad gratuita al programa de descargas que tengo, así que, sigo con el ar-
tículo…
A finales del siglo XIX, los hermanos Lumière fueron quienes proyec-
taron, por primera vez, una película. Así que, les debemos a ellos el arte del
cine. También se lo debemos (Y MUCHO), tanto por su aportación a esta in-
dustria como por habernos hecho reír, a Charles Chaplin. Por supuesto, re-
saltaré sus “Tiempos Modernos” y “El gran dictador” que me cautivaron. No
podría seguir con el artículo sin nombrar a Alfred Hitchcock y su cine de
suspense. De las que he podido ver, calificaría de obra de arte a: “Sospecha”
y “Con la muerte en los talones”, protagonizadas por mi querido Cary Grant;
“Los pájaros”, “Psicosis” (el asesinato de Marion no se nos olvidará nunca) y,
por supuesto, “La ventana indiscreta”, en la que aparecen James Stewart y
Grace Kelly.
En el cine clásico predominaron las películas de gangsters, sobre todo
en los años 30 y 40. “Casablanca”, protagonizada por Humphrey Bogart (el
rey del film noir) e Ingrid Bergman, no solo es el mejor ejemplo del cine
negro, si no que, también, nos dejó infinidad de citas famosas que pasaran
a la historia, como por ejemplo: <Tócala otra vez, Sam>, <Lois, creo que este
es el principio de una gran amistad> o, la frase por excelencia, <Siempre nos
quedará París>. En esta época, hicieron muchas comedias románticas, me en-
cantaron “La fiera de mi niña” con Cary Grant y Katherine Hepburn; “Sa-
brina” protagonizada por Humphrey Bogart y Audrey Hepburn, que la vimos
con Cary Grant en “Charada” (¿se nota que me gustan?) y en, una de mis fa-
voritas (y no solo por la canción), “Desayuno con diamantes” junto a George
Peppard (uno de los protagonistas de la serie “El equipo A”). Esta época tam-
bién nos dejó a una joven promesa, que se quedará en eso por los siglos de
los siglos, me refiero a James Dean, que protagonizó “Gigante” con Eliza-
beth Taylor. Una de las mejores actrices de todos los tiempos, o al menos
así lo creo, es Bette Davis. La vi por primera vez en “¿Qué fue de Baby
Jane?”. Me gustó tanto, que no tardé nada en ir a buscar películas de ella.
Cuando vi “Eva al desnudo” y “Jezabel” se me cayeron los mitos de algunas
actrices actuales (Julia Roberts o Gwyneth Paltrow). Un gran actor de los
50 (en adelante) fue Marlon Brando. Resaltaré: “Salvaje”, porque fue la pri-
mera película que vi de él y me conquistó con su personaje de motero; “La
ley del silencio”, por la que se llevó un merecidísimo Oscar y “Apocalypse